My Rain and You... Capítulo 20

Pero él… solamente esta persona…

Por favor permite nuestro amor.

Confession

Leeteuk que se había acercado a ellos al ver el rumbo de la conversación, no habían reparado en su persona al expresar sus deseos de llevarse a Heechul del país. Sabía que era lo mejor pero, como confiar en ellos.

—    Como puedo confiarte a una de las personas que más quiero.

—   Porque lo amo, porque no volveré a cometer la estupidez de separarme de Heechul. – Siwon se acercó a Heechul, tomo su mano y beso su frente—. Porque siempre que lo dejo él sufre y yo quiero que sea muy feliz, puedo hacerlo feliz.

—   Lo amas… — Leeteuk sonrió dulcemente—. Necesitaba que tú lo dijeras, porque Heechul no sabe cuánto lo amas, pero si se cuánto te ama. Si tu prometes hacerlo feliz, yo estoy de acuerdo.

—   Gracias. – Siwon sabía cuán importante era la aceptación de la persona en quien más confiaba Heechul—. Salgamos de aquí, necesita descansar pues el medicamento es algo fuerte. – les pidió Siwon señalándoles la puerta para salir al pasillo.

—   Estarán más cómodos en la cafetería. – sugirió Changmin—. A esta hora no hay muchas personas así que nadie les molestara.

—   Te quedarías con… -Changmin no dejo terminar a Siwon.

—    No te preocupes Siwon, me quedare a su lado y si llega a despertar les avisare en seguida.

Así salieron juntos para dirigirse a una cafetería que se encontraba a un lado de la pequeña clínica. Siwon tenía mucho que aclararles a su cuñado y a Leeteuk, por fin conocerían la verdad de lo sucedido.

Entraron a la pequeña cafetería notaron que el lugar no era muy grande pero el tamaño resultaba acogedor y ameno donde las personas bien podrían pasar un buen tiempo a la salida del trabajo o bien, quienes tuvieran que pasar el día en esa clínica y tomarse un descanso. Claro que el cambio después de haber estado en una sala de hospital si era drástico a la vista.

La cafetería eran solo cuatro paredes con dos grandes ventanales al frente, al fondo la barra de postres, fruta, batidos y el lugar donde se resguardaban las dos meseras.

Dentro solo había cinco mesas de madera cubiertas por manteles blancos con sus respectivas sillas, un enorme basurero justo al costado de la puerta y lo más destacable era el hermoso ramo de flores dentro de un pequeño, redondo y curioso florero que parecía de porcelana japonesa sobre cada mesa.

El servicio era lento, amable pero lento y la camarera parecía un poco cansada o aburrida de lo poco que hacía. Habían pedido solo café, Leeteuk un capuchino, Jay un americano y Siwon un latte, esperaron a que se los trajeran para después observar como la mesera regresaba a la cocina dejándolos solos.

Después de probar su café Jay fue el primero que hablo.

—   Siwon, ¿Qué fue lo que sucedió en ese accidente? Cuando se llevaron a Heechul y tú lo seguiste, no supimos más pues Shindong regreso con nosotros avisando donde estaban.

—   De Yunho, Junsu y Yoochun no supimos nada tampoco, así que no teníamos a nadie más que supiera de ustedes. – Leeteuk trataba de ordenar sus ideas.

—   Cuando por fin Kangin y Jungmo pudieron ir tras su ayuda, lo único que encontraron fue ese espantoso accidente, el auto calcinado y sus pertenencias dentro. – continuo Jay.

—   Después las muestras de ADN dieron positivas reconociéndolos, por eso fue que los dimos por muertos. Si no hubiéramos tenido la certeza de esas pruebas, no hubiéramos parado hasta encontrarlos. – Leeteuk estaba muy emocional por los recuerdos de creerlos muertos—. Pero con esas pruebas contundentes no tuvimos más dudas.

—   Siento mucho que haya tenido que ser así, pero no encontramos otra manera para poner a salvo a Heechul.

—   ¿De quiénes? – la pregunta de Leeteuk era dirigida más para sí mismo que para Siwon.

—   De su propia familia... de la tuya Siwon. – respondió Jay, adivinando los pensamientos que ensombrecieron el semblante de Siwon—. Lo que no termino de entender, la razón que Min Ho tenía para secuestrar a Heechul.

—   Cierto, yo jamás escuche que Heechul lo conociera o hubiera tenido contacto con ese Han. ¿Cómo se aparecieron los Han en la boda? – Pregunto Leeteuk.

—   El propio Heechul incito a Hangeng. – dijo Siwon para sorpresa de los presentes—. Lo que no sabía era que se presentaría también su peor pesadilla.

—   Te refieres a Min Ho. – agrego Jay.

—   Nadie sabe lo que voy a decirles, es un secreto que ha sido guardado por Heechul por mucho tiempo, pero que en parte tiene que ver por qué conoce a Min Ho y porque este se obsesiono con él.

Siwon se tomó un respiro, no era el quien tuviera que contar ese secreto pero, sin duda era algo importante que tenían que saber para entender todo.

—   En el tiempo en que los Kim se separaron de los Choi, en una de las tantas fiestas Heechul fue separado de sus guardaespaldas a engaños y fue abusado por varios chicos, Min Ho planeo todo. – Siwon tomo su café y bebió, deseaba que su calidez desatara el nudo que sentía en su garganta.

En el rostro de Leeteuk se posó una mueca que mostraba el dolor y a la vez el entendimiento que le causaba aquella revelación. Siempre se preguntó porque su tierno y bello cuñado cambio tan de repente en tan poco tiempo a aquel oscuro ser que pareció convertirse después de eso, ahí estaba su respuesta.

—   Por eso Heechul no se defendió… ¡ah! de saberlo habría sido de mejor ayuda para él. – menciono Leeteuk, al recordar esas noches que paso al lado de Heechul cuando se despertaba por las muchas pesadillas que sufría.

—   Min Ho volvió para terminar lo que comenzó ese día. Además de que deseaba la fortuna de los Kim.

Siwon dejo su café, se recargo en la silla y comenzó a jugar con sus dedos mientras los miraba fijamente, sus pensamientos comenzaron a retroceder al día del accidente. Recordando cada detalle, cada acción, cada grito, era como revivir todo ese dolor otra vez….

«Gracias a Shindong y a Yunho que se deshicieron de los autos que escoltaban al de Min Ho, Siwon por fin podía darle alcance al auto. Trato de emparejarse por el lado del copiloto para quedar fuera de la vista del hombre que venía manejando y con la esperanza de que Heechul se encontrara de ese lado.

Acerco lo más que pudo la moto al auto y fue cuando lo vio, con su frente recargada en la ventana vio a un Heechul perdido en sus pensamientos mientras gruesas lagrimas caían de su rostro. Siwon se alarmo al verlo pues pensó que tal vez Min Ho le habría hecho algo lastimándolo de nuevo, su desesperación fue tanta que al acercarse al auto una de sus manos golpeo la ventana donde la cabeza de Heechul descansaba.

No tuvo reacción, tan ensimismado iba que Heechul no reacciono al golpe. Siwon sabía que tenía que despertarlo de aquel trance y mientras nadie se lo impidiera lo haría, volvió a arremeter contra la ventana usando la pistola que traía para que el golpe fuera más fuerte.

Heechul escucho el golpe seco en su ventana y también lo sintió, esto último fue lo que lo saco de sus pensamientos, volteo hacía afuera de la ventana encontrándose con un Siwon que gritaba su nombre desesperado. Desafortunadamente Min Ho también lo había escuchado poniéndolo alerta.

—   Siwon… - susurró Heechul mientras su mano acariciaba el cristal que los separaba. – Estás vivo.

—   ¡Maldición! – se escuchó de los labios de Min Ho, al percatarse que el Choi les seguía los pasos muy de cerca.

Estaba muy cerca de Heechul, casi recargado en el asomándose por la ventana viendo lo que Siwon intentaba hacer. Heechul comenzó a sentirlo muy cerca aprisionándolo contra la puerta, pero no se movía pues no quería perder aquel contacto visual con Siwon.

—   Jefe yo puedo deshacerme de ese. – le sugirió el hombre que venía manejando.

—   Tú acelera que yo me encargo personalmente del Choi. – Min Ho sonrió con malicia.

Cada vez que estaba cerca del auto, este aceleraba y Siwon tenía que alcanzarlo de nuevo. Afortunadamente Heechul ya lo había visto y salido de su trance, Siwon noto que se encontraba asustado pero también preocupado por él.

A sus espaldas escucho como Min Ho cortaba cartucho, esto alerto a Heechul volteando inmediatamente hacía su captor.

—   Por fin me desharé de ese estorbo, nadie podrá impedirme llevarte conmigo, entiendes princesa. – Min Ho hablaba fríamente, pero su mirada lasciva hacía Heechul no cambiaba.

—   ¿Qué vas hacer? – pregunto Heechul al ver como Min Ho se acercaba a su ventana, pasando incluso por encima de él.

Como Heechul intentara levantarse, la mano pesada de Min Ho recargada en su pecho lo hizo echarse hacia atrás quedando pegado a su respaldo. Con horror vio lo que intentaba, como Min Ho apuntaba su pistola hacía Siwon que al venir en la moto y con la visión limitada no iba a poder defenderse de las balas de Min Ho, esto asusto a Heechul por lo que pudiera pasarle a Siwon.

Entonces se armó de valor pensando que algo tenía que hacer para ayudarlo, no pensaba perderlo realmente por una bala como había sucedido momentos antes en el hotel. Sus manos fueron a parar a la pistola de Min Ho y con todas sus fuerzas lo empujó hacía el otro lado del auto, quedando encima de Min Ho. Quien al ser tomado por sorpresa no se dio cuenta cuando ya tenía a Heechul encima forcejeando con él por el control de la pistola.

Un estallido de bala y un estruendo provocado por la rotura del cristal de la puerta donde momentos antes Heechul venía recargado, alertó a Siwon que algo no muy bueno pasaba dentro del auto, se acercó más descubriendo con horror como Heechul se encontraba encima de Min Ho tratando de quitarle a este el arma que traía en sus manos.

Como el piloto se diera cuenta de la situación, trato de mandar muy lejos a Siwon echándole el auto encima. Afortunadamente Siwon era muy diestro conduciendo la moto y se libró de un golpe seguro. Después sus pensamientos se concentraron en Heechul, no lo pensó mucho pues cuando se dio cuenta ya se encontraba trepado en la ventana del auto con una pierna dentro, sus manos sosteniéndose forzadamente del techo y del filo de la puerta.

Siwon se encontraba de medio cuerpo para arriba fuera del auto intentando meterse a la velocidad que este iba, sus esfuerzos se redoblaron cuando se dio cuenta que otro auto se única a la persecución y al no reconocer a ninguno de los que iban dentro concluyo que se trataba de otro vehículo con hombres de Min Ho.

Se encontraban en zona de los Han de eso estaba seguro Siwon que por más que intentaba entrar al auto, su musculoso cuerpo no cedía ante la pequeña ventana y para empeorar su situación, del otro vehículo comenzaron a dispararle para hacerlo caer del auto o matarlo que era lo más lógico sucediera primero.

Dentro del auto sucedía algo parecido a lo que Siwon vivía fuera, Heechul con la pistola entre sus manos no pretendía soltarla y Min Ho sintiéndose más fuerte que Heechul lo estaba obligando a bajar de su cuerpo, momentos antes de la pistola Min Ho había dejado escapar una bala dándole a la ventanilla librando a Heechul por escasos centímetros.

—   Sera mejor que sueltes el arma Princesa, no quiero dañarte. – Y era verdad, Min Ho no deseaba herirlo porque a pesar de todo, lo deseaba y eso era más fuerte que todo.

—   No lo hare, no dejare que dañes a Siwon. – Heechul hablo con seguridad.

—   El Choi no merece ni tus lagrimas ni tú sangre Princesa. – Susurro muy cerca del oído de Heechul—. Mejor se bueno y déjame hacer lo que es mejor para ti y para mí. Ese Choi es el mismo que te entrego a su padre, deberías odiarlo. – Heechul no supo que decir—. Déjame hacer esto por ti, sé que deseas tanto como yo deshacerte de ese Choi.

Era verdad, todo lo que Min Ho decía era verdad, pero también era cierto que el amor que le tenía a Siwon era más fuerte que todo los rencores que pudieran existir. Heechul no los sentía, contrariamente todo el amor que se suscitó en un día y los recuerdos de esa infancia juntos eran más fuertes; creía ciegamente en el amor que ambos se tenían.

—   Sobre mi tienes que pasar antes de intentar algo contra Siwon. – bufo Heechul enojado.

Se escucharon estallidos fuera del auto, eso hizo a Heechul voltear hacia atrás viendo a un Siwon colgado de la ventanilla.

—   ¡Siwon!… - grito Heechul, desconcentrándolo un poco, lo que aprovecho Min Ho para echar a Heechul hacía atrás y apuntar su arma contra Siwon.

Pero Heechul que no había soltado el arma y sin medir el peligro, se interpuso entre el arma y Siwon, enfrascándose de nuevo en una pelea contra Min Ho por el control del arma. Las manos de ambos bajaron peligrosamente hasta sus estómagos, en los rostros tanto de Heechul como de Min Ho se notaba la fuerza empleada por desviar el arma cuando otro disparo salió de ella.

Con alivio Siwon observo como el vehículo donde venía Yunho les dio alcance justo antes de que ambos autos cruzaran la línea del ferrocarril que a lo lejos se escuchaba su silbato, ocupándose del otro auto que amenazaba con matarlo. Otro fuerte disparo venido dentro el auto hizo reaccionar a Siwon, que no tuvo otra salida que entrar forzadamente lastimándose uno de sus brazos.

Lo que vio dentro fue a Heechul y Min Ho yacían tirados en el asiento trasero del auto, con cuidado Siwon levanto a Heechul hasta recargarlo en su pecho. Lo primero que noto es que había sangre, pero Min Ho no se veía dolido y tampoco podía verle herida alguna. Entonces Siwon bajo su vista hacía Heechul viendo con horror que estaba herido y la sangre pertenecía a él.

Rápidamente Siwon con su mano intento cubrir la herida de Heechul que no dejaba de sangrar. Heechul aún estaba consciente y se quejaba de dolor, pero extrañamente su mirada era dirigida a Min Ho, lo miraba fríamente.

—   Te dije que no podrías, nunca podrías porque eres nadie Min Ho, nunca fuiste alguien porque siempre necesitaste de otros para lograr tus deseos.

Comenzó a gritarle Heechul, Siwon lo sostenía pues mientras hablaba pequeños temblores sacudían su cuerpo.

—   Hasta para tenerme a mi tuviste que recurrir aquellos chicos. – se burló de Min Ho—. Aunque te valieras de mi o de otros siempre terminarías siendo nadie.

—   Tú… calla, termina de morirte de una vez. – grito Min Ho.

Contrariamente a lo que sentía al comienzo de reencontrarse con Min Ho, Heechul ya no le temía. Había encontrado la fuerza dentro de él, anteponiendo sus miedos para salvar al amor de su vida y todo eso lo estaba logrando por Siwon. Él era su motor, ahora podía dejar atrás todas esas noches de pesadillas, traumas y de sufrir en soledad.

—   Duele escuchar la verdad Min Ho. – siguió Heechul—. Al menos yo moriría feliz sabiendo que una persona aquí en la tierra me ama con toda su fuerza, su corazón y me recordaría por siempre de la manera más hermosa. Y tu Min Ho, ¿podrías decir lo mismo? – Siwon sintió como el cuerpo de Heechul se hacía más pesado entre sus manos.

—   Tú fuiste mío primero. –alego Min Ho—. Te deseaba y te habría hecho muy feliz si este no hubiera interferido. Siempre pensé en regresar por ti, me cautivaste desde la primera vez que te vi… -fue interrumpido por Heechul.

—   Por mí o mi dinero, como puedes decirme eso ahora si me violaste y no solo tú, dejaste que todos tus amigos pusieran sus manos sobre mí. – Heechul seguía muy alterado.

—   Nada de eso, en ese momento yo no lo necesitaba. Mi padre aún vivía, ¿que no lo recuerdas?

—   Lo único que recuerdo es a ese ser cobarde que tomo todo de mi e hizo mi vida miserable por mucho tiempo. – la voz de Heechul se apagó un poco—. Incluso ahora me estás haciendo un favor Min Ho, siempre pensé que mi padre me había vendido a ustedes como mercancía.

—   Si ese hubiera sido el caso, con gusto mi padre te habría comprado para mí. Pero tú padre nunca valoro lo que tenía en ti, fue tan fácil hacernos de tu persona. – Min Ho se reía recordando el momento.

—   En eso estoy de acuerdo, mi padre fue un idiota al creer que estaba rodeado de personas de confianza; ahora sé que peco de confiado. – Heechul sentía ganas de llorar, pero en estos momentos no podía flaquear delante de Min Ho.

—   Heechul por favor, tranquilízate amor. – le pidió Siwon, pero era su revancha y no podía dejar de sacar todo esos sentimientos dentro de sí. Tenía la pistola entre sus manos, finalmente Heechul se había quedado con ella.

—   Toma la pistola Siwon, mátalo. – le pidió—. Quiero verlo morir antes de hacerlo yo, quiero que muera sabiendo que si se va, ni siquiera yo lo recordaría con temor. Porque todos tus sucios recuerdos, tus marcas, -dijo Heechul señalando a Min Ho—, fueron borradas con amor, por el amor de Siwon. Ya no me haces más daño, te he superado.

El hombre que iba conduciendo se distrajo pues pensaba ayudar a Min Ho, grave error el que cometió  porque pronto se escuchó un ruido estruendoso, después vieron como el otro auto donde venían los hombres de Min Ho golpeo su auto haciéndolos girar sin control, el chofer salió despedido por la puerta del auto antes que este se detuviera justo en las vías del tren.

Siwon se aferró fuertemente al asiento trasero sin moverse resguardando a Heechul entre sus brazos de los fuertes movimientos del auto mientras Min Ho golpeo su cuerpo en el asiento de enfrente golpeándose fuertemente. Cuando el auto se detuvo, Siwon no tuvo tiempo de inspeccionar como se encontraban, simplemente tomo a Heechul entre sus brazos, abrió la puerta sacándolo del coche alejándolo lo más que pudo de este.

Lo deposito suavemente en el pasto lejos del auto, Heechul se encontraba mal herido pero aún estaba consiente. Siwon se quitó la camisa que traía poniéndola en la herida de bala en su estómago juntando las dos manos de Heechul para detener la hemorragia. Tenía que buscar ayuda y rápido, pues Heechul no se encontraba en las mejores condiciones y no sabía cómo esa herida de bala le había afectado.

Pero antes tenía que terminar lo que el mismo Heechul le había pedido dentro del auto, matar a Min Ho, al patán que tanto daño le hizo. Antes de irse, Siwon hizo a un lado el flequillo de Heechul y lo miro a los ojos; este a pesar de sus heridas encontró en su mirada determinación, suplica y amor, sin saber cómo Heechul le hizo saber que estaría bien.

Con arma en mano Siwon regreso al auto, había llegado el momento de deshacerse de la persona que pretendía robarle todo lo que amaba. En el pasado había sido alejado de Heechul, pero esta vez no lo iba a permitir de nuevo y mucho menos por la basura que intentó quitárselo a la mala, quería hacerlo sufrir con sus propias manos.

Mientras caminaba acercándose al auto, recordó las miles de veces que su padre le reprocho el no querer matar, no querer llenarse de sangre sus manos, pero ahora lo entendía. Cuando matar se vuelve una necesidad, cuando esta se vuelve el medio de descargar la furia desatada, al sentir que por culpa de Min Ho casi pierde lo más importante de su vida.

Mirándolo ahí lastimado tratando de salir del auto, arrastrándose sobre el sillón para alcanzar la puerta. Esta vez no sintió lastima, jalar el gatillo fue fácil pues se volvió una extensión de todos esos sentimientos… la primera bala entro en su pierna, los alaridos de Min Ho no lo detuvieron.

Siwon deseaba verlo sufrir por todos estos años de tortura que sufrió Heechul, otra bala resonó dando en el hombro izquierdo de que yacía dolido de la pierna que sangraba incontrolablemente.

Ni el silbato del ferrocarril que sonaba a lo lejos, pudo hacer que Siwon se detuviera. Quería terminarlo, verlo sufrir… pero la voz temblorosa de un Heechul llamándole si le hizo entrar en razón y dejar que Min Ho recibiera su escarmiento en manos del destino.

Cuando regresaba al lugar a donde había dejado a Heechul, tras de Siwon colisionaba el ferrocarril con el auto, provocando un estruendoso ruido y la explosión del mismo, envolviendo el auto en llamas sacándolo del camino de las vías del ferrocarril quedando a un lado del camino. Los gritos haciéndose cada vez menos audibles dentro del auto daban cuenta de que Min Ho desaparecería poco a poco y para siempre de sus vidas.

Siwon regreso rápidamente al lado de Heechul encontrándolo retorciéndose de dolor. Lo vio sangrando pero ahora no solo de la herida en su estómago, la sangre escurría también entre sus piernas.

—   ¿Qué sucede Rella?

—    No… no lo sé, duele mucho. – gemía Heechul, sus manos ya no sostenían su herida, estas estaban más abajo donde se estremecía de dolor.

—   Buscaré ayuda, por favor Rella no dejes de luchar. – le suplicaba Siwon, levantándolo delicadamente entre sus brazos mientras llenaba su rostro de besos para darle fuerzas.

—   Simba te amo, por favor no lo olvides nunca.

—   No me lo digas de esa manera por favor. – Siwon caminaba con Heechul en brazos.

—   No es como si me estuviera despidiendo. – Heechul acarició el rostro preocupado de Siwon, en sus manos había sangre pero eso poco importaba ahora—. Siempre estaremos juntos de alguna u otra forma.

—   Yo prefiero esta forma Rella.

Siwon se abrazó a Heechul, escondiendo su rostro en el cuello de éste cayendo de rodillas en el suelo muy cerca de las vías.»

Continuará…