Tres
años atrás…
Jong Hyun POV
Dios, ¿Por
qué me duele tanto la cabeza? ¿Por qué la luz brilla tanto? No puedo abrir mis
ojos y cuando intento moverme, mi cuerpo duele. Y muero por algo para beber, mi
boca reseca pide a gritos algo de líquido.
Cuando
intento girar en la cama para librarme del intenso rayo de luz que me ciega,
golpeo con un cuerpo a mi lado y eso me hace saltar un poco sobre la cama,
sintiendo como mí cadera se parte al moverme tan bruscamente.
Por el
susto, mis ojos se abren y hasta comienzan acostumbrarse a la claridad. Eso sí,
mi cabeza no deja de martillar. Ni siquiera estoy en mi cuarto de la
universidad. No, este cuarto no es mío, y es entonces cuando me doy cuenta que
estoy desnudo.
Jalo la
sabana que se encuentra a mi lado para cubrirme y en el proceso descubro el
cuerpo desnudo de alguien más que se encuentra durmiendo plácidamente boca
abajo. Estamos desnudos en la misma cama.
Comienzo a
entrar en pánico, “¿Qué fue lo que hice?”
Me siento sobre la cama con mucho cuidado, en primera por el dolor en la parte baja de mi cuerpo y en segunda, porque no quiero despertar a quien quiera que este durmiendo a mi lado.
“Oh, ya sé quién es” Muerdo mi labio inferior al
recordarlo.
Me inclino
un poco hasta ver su apacible rostro dormido, y es cuando las imágenes del día
anterior comienzan a invadir mi mente una tras otra hasta llenarme de alegría,
vergüenza y angustia. Mi mente está echa un caos y si la evidencia que escurre
entre mis piernas es lo que creo que es, hicimos más que charlar aquí.
Dios mío,
yo aún tengo novio, como puedo considerarme un joven decente, íntegro. Con que
cara voy a mirar a los dos.
Sin
embargo no puedo dejar de sentirme feliz de haber estado con esta persona, que
anoche hiciéramos clic de esta manera y que por tanto tiempo yo… No, no, no
Jong Hyun, primero arregla todo este lío antes de disfrutar y saltar como bobo
enamorado por esta persona.
Sí,
necesito hacerlo.
Trato de
levantarme de la cama con mucho cuidado, tanto como mi cuerpo me deja y mis
piernas responden. Comienzo a recoger mi ropa de donde la dejamos regada. El
cuarto está hecho un caos, pero mucho no puedo hacer por ello, necesito salir
de aquí antes de que despierte y se dé cuenta que sigo aquí.
Corro
hacia el baño a darme una rápida ducha, muy rápida. Paso frente al espejo y
enseguida regreso a mirarme, no puedo creer lo que veo. Mis ojos se abren
ampliamente al ver mi piel llena de moratones rojos, en mi cuello, pecho,
espalda, lugares que fueron explorados por su boca, clara muestra de la noche
apasionada.
Me sonrojo
al ver un moretón en mi trasero. Cubro mi rostro con la ropa entre mis manos, preocupado
y feliz, porque estas marcas no se van a quitar pronto pero no me importa
demasiado la verdad, puedo cubrirlas bien con ropa.
A parte de
eso no me veo diferente, aunque por dentro, miles de mariposas revolotean al
mismo tiempo llenándome de emociones.
Logro
ponerme la ropa y zapatos después de ducharme, también recojo mi celular listo
para irme, sin embargo antes de hacerlo, regreso mis pasos para darle un beso a
la persona que está causando todas esas mariposas.
Me acerco
lentamente, observando su rostro hasta llegar a su lado, sintiendo como mi
corazón se acelera al notar como su cuerpo también muestra marcas. Acerco mi
mano hacia él para acariciar su mejilla con las puntas de mis dedos, tan
cálido, siguiendo el camino por el contorno de su mandíbula hasta llegar a sus
labios.
“Tan suaves” Llevo mi mano a mis labios también,
pensando en todas esas veces que nos besamos esta noche.
Y sin
pensármelo dos veces, acerco mi rostro a él hasta tocar sus labios, queriendo
probarlos una vez más esperando no despertarlo. Un beso que no pude reprimir
pero que recordaría siempre.
— Voy arreglar todo para que por fin
estemos juntos. – susurro antes de depositar otro beso, esta vez en su mejilla.
— Te quiero.
Lo veo
removerse, señal que tengo que salir de ahí corriendo y lo hago, hasta cerrar
la puerta de su habitación detrás de mí.
Baekho POV
— Sí, ¿en dónde quieres que nos veamos?
– vengo charlando con Jong Hyun, mi mejor amigo por celular.
Caminó
rápido a través del campus, mirando de un lado a otro y hacia atrás, buscando
cualquier sospecha de que este siguiéndome. Sé que es imposible que me siga a esta
hora de la mañana, pero por si las dudas, es mejor ser precavido con ese
chiquillo.
¿Cómo
puede colarse alguien así de fácil si no es de esta universidad? Aún no
entiendo cómo.
— Baekho,
me estas escuchando. –
escucho del otro lado del celular.
— Sí, lo hago, dime Bugi. – es como le
digo de cariño. Hay una historia muy graciosa detrás de esto.
— Podemos
vernos en una hora.
— ¿Para el almuerzo?
— ¿Tan
tarde es? – lo escucho
decir sorprendido. — No había visto la
hora.
— Pues en donde has estado toda la
mañana.
— Tengo
algo que contarte y necesito algo de líquido, estoy muriendo de sed. – sonrió al pensar que seguramente
estuvo bebiendo. Ah Jong Hyun, vas a querer morir. Esto no es típico de un
jovencito como él.
— Te veo en una hora entonces, en el
lugar de siempre.
— Bien,
voy a mi cuarto a cambiarme de ropa y te alcanzo. - Jong Hyun me cuelga antes de que
pueda preguntar algo sobre eso último que me ha dicho.
¿No durmió
en su cuarto? No es típico de él, ni siquiera con su novio se ha quedado a
dormir en su cuarto. Claro, después de la advertencia que le di a su novio, sin
que Jong Hyun se enterara. Por eso se me hace raro.
Jong Hyun
y yo nos conocimos mientras estudiamos la primaria, desde entonces nos hicimos
amigos, gracias a una actividad que solicitaron en nuestra escuela. El día de ir
disfrazados de nuestro súper héroe y hacer una reseña, todos los grados y
salones debíamos hacerlo sin excepción. Jong Hyun estaba en segundo y yo en
cuarto año, en esa escuela.
Por
supuesto, todos querían ir de Batman, Spiderman, de beisbolistas o futbolistas
famosos, pero no Jong Hyunie, él quería disfrazarse de Onibugi. Entonces unos
chicos mayores comenzaron a decirle que ese súper héroe ni si quiera lo era,
que tampoco podía ser un héroe normal; los niños pueden ser crueles sin
pensarlo a esa edad.
Jong
Hyunie estaba al punto del llanto y entonces no pude quedarme quieto, el niño
era tan lindo e indefenso en ese momento, siendo yo uno de los niños más
grandes de la escuela me metí a defenderlo logrando apartar a esos chicos.
Ese día
Jong Hyunie lloró y lloró mientras trataba de consolarlo, hasta le prometí que
vendría disfrazado de Pikachu junto a él si dejaba de llorar. Solo así se
calló. A veces pienso que me tendió una trampa, porque a partir de eso Bugi ya
no se separó de mí y siempre logra convencerme de lo que se le ocurra.
No puedo
negar que lo quiero, lo quiero mucho, más ahora que se ha convertido en un
hermoso jovencito. Cuidar de él ahora es más difícil que antes pero sigo
haciéndolo, porque él a veces es tan inocente y confiado.
Si tan
solo no lo hubiera perdido de vista por culpa de cierta persona, ahora mismo
sabría qué sucedió y porque no durmió en su cuarto del campus.
A veces me
pregunto porque ese chiquillo de nombre Minki, es tan insistente, cuando tantas
veces le he dicho que no. Más siendo un chiquillo malcriado, caprichoso y
consentido, además de acosador porque insiste en perseguirme a la hora que
desea.
— Baekho,
te aseguro que vas a ser mi novio, porque tú y yo somos perfectos el uno para
el otro. – eso fue lo
que me dijo la primera vez que lo vi.
Ni
siquiera lo conocía y me salió con eso.
Ni idea de
cómo supo mi nombre.
Minki es
muy hermoso, no lo puedo negar, demasiado para su propio bien. Con su carita
redonda de bebé enmarcada por sus cabellos rubios, esos labios carnosos y
rosados que tiene, sus grandes ojos y lindo cuerpo... ufff no sé porque
recuerdo esas cosas. Creo que por eso creo está acostumbrado a salirse con la
suya.
Conmigo se
va a topar con pared, no voy a caer en sus encantos tan fácilmente por el
simple hecho que no me gusta andar con chiquillos y no tengo tiempo.
A un año
de terminar la universidad, no me puedo dar el lujo de tener distracciones, mi
familia ha puesto tanto empeño para darme estudios, que solo puedo devolverles
todo haciéndolos sentir orgullosos por mí. Terminar la universidad y conseguir
un buen empleo, es mi meta más cercana y en la que estoy enfocado.
Por eso
disfruto de poco tiempo libre y ese poco tiempo lo paso con Jong Hyun, o en
alguna actividad festiva de la escuela,
como pensaba hacerlo anoche.
La fiesta
de despedida de los seniors fue anoche, así que estuvimos festejando desde muy
temprano con todas las actividades organizadas. Se supone que es una
celebración solo para los alumnos de esta universidad, por eso no tengo idea
como Minki logró colarse a la fiesta y no solo eso, ¿Cómo pudo encontrarme?
Lo peor es
que el jovencito malcriado ya estaba un poco bebido cuando me encontró.
— Vamos a divertirnos esta noche. – eso
fue lo que dijo antes de arrastrarme por todo el campus.
Sí, no
puedo negar que fue muy divertido, al comienzo nada más.
Minki es
bastante ocurrente y sabe cómo pasarlo bien, a pesar que estaba preocupado por
Jong Hyun, me hizo reír bastante. Lo deje por un momento para ir a buscar a
Jong Hyun para saber cómo se encontraba.
Encontré a
Jong Hyun junto a Min Hyun, uno de sus amigos, y me dijo que estaría bien. No
estaba muy convencido porque se encontraba bebiendo, pero Min Hyun prometió
cuidar de él, le advertí que más le valía hacerlo. Así que volví por Minki, no
quería que se metiera en problemas o algo peor, pues ya había estado bebiendo.
Fueron un
poco más de diez minutos que perdí de vista a Minki y eso bastó para que se
volviera mi pesadilla. Parecía haberse bebido todo el alcohol de la fiesta,
apenas podía sostenerse cuando lo encontré rodeado de chicos a los cuales les
bailaba muy provocativamente mientras estos le aplaudían, embobados claro.
— La fiesta termino. – les dije en
cuanto me acerqué, no podía dejarlo ahí por muy acosador y todo que fuera, un
jovencito como Minki en ese estado, sería como carne fresca para muchos en esa
fiesta.
— ¡Yo
lo cuido! Es mi vecino. – grito
uno de los chicos levantando la mano.
— Oh, Jihoon, sí. – escuche balbucear a
Minki en mis brazos, pues lo tuve que sostener para que no se tambaleara.
— ¿Sí? No lo creo. – negué con la cabeza
también.
— Oooooh… - un grito general por parte
de los chicos no se hizo esperar.
— Re-gre-sas-te por mí… - balbuceo Minki
en un tono chillón.
— Sí, sí, es hora de irnos. Despídete. –
no sé cómo se me ocurrió decirle eso.
— Chicos, mi novi-o me lleva, que-re-mos
estar solitos. - y en seguida se escucharon reclamos sin sentido.
Dudo mucho
que este consentido supiera el peligro que podría correr en el estado en que se
encuentra, se nota que está acostumbrado a otro tipo de ambiente y no a esto.
Minki es
demasiado trabajo para mí… justo como lo comprobé esa noche.
Continuará…
Quiero más quiero saber que pasa, por que se separaron? Y resulta que no hay cap 2, me dejaras realmente así? Necesito información
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