Twoshot: El tipo del deportivo rojo II... Capítulo 2




___Continuación de flashback___

Heechul poso uno de sus largos dedos en sus labios silenciándolo para después comenzar acariciar su contorno con dulzura mientras acercaba más su rostro y finalmente sustituir su dedo por el suave toque de sus labios. Se envolvieron en un beso dulce y apasionado como tantas otras veces.

Con sus manos en el cuello de Siwon enredo los dedos entre su sedoso cabello. En tanto Siwon aceptando lo que su novio le pedía en esos momentos, dejo el celular a un lado del sillón y con sus manos liberadas recorrió suavemente su espalda, para terminar posando sus manos sobre sus nalgas atrayéndolo más hacia él.

Exploraron sus bocas con pasión desbordaba, muchos besos fueron terminados solo por la falta de oxígeno, esperando lo justo para recobrar el aliento y volver a comenzar otro beso más. Los labios de Siwon abandonaron el beso para dirigirse hasta el cuello de Heechul, donde deposito suaves besos y pequeños mordiscos de vez en cuando.

- ¡Aaah!... Siwon… - Heechul no podía evitar gemir.

Las manos de Siwon subieron las caderas de Heechul y siguieron subiendo por los costados de este, levantando a su paso la playera que lo cubría; hasta que termino sacándola por la cabeza. Heechul arqueo su espalda al sentir la lengua juguetona recorrer el contorno de uno de sus pezones, succionando y mordiendo, dejándolo erecto con aquellos toques.

Automáticamente las manos de Heechul tomaron el rostro de su novio atrayéndolo hacia él, pues deseaba probar aquellos labios que tanto placer le estaban dando. Las manos de Heechul tampoco se quedaron quietas, se dirigieron hasta los botones de la camisa de Siwon para deshacerse de la molesta prenda que le impedía sentir su piel.

Cuando por fin la abrió completamente, recorrió con sus dedos el amplio pecho de Siwon, y enseguida volvieron a reclamar sus labios, devorándose en otro beso. Ambos tenían sus manos ocupadas acariciando la piel expuesta, hasta que Siwon dejo de moverse.

- Están avanzando… mmmm… - susurro Siwon en el beso, al ver que lentamente los autos comenzaban a moverse.

- No avanzaremos mucho… mmm… concéntrate en el camino, mientras yo… - Heechul tuvo que dejar de besarlo pues sus pulmones reclamaban oxígeno para hablar -. Mientras yo continúo con esto…

Heechul separo más sus muslos, acomodándose sobre las piernas de Siwon para no estorbarle la visión. Siwon arranco el auto, para comenzar avanzar lentamente al par de los demás autos, lo que estaban haciendo era muy excitante. En tanto Heechul continuaba con las caricias sobre la ancha espalda de su novio y besaba el lóbulo de su oreja, queriendo sentir su cuerpo lo más cerca posible.

- Te amo Siwon… - le susurro Heechul al oído.

- Yo también te amo Heechul… - Esas palabras dichas con tanta dulzura por su novio, siempre lograban hacerlo sonreír.

Sabiendo lo que sus palabras habían causado, Heechul se sonrió contra la piel del cuello de Siwon, se separó buscando sus ojos y de nuevo sus labios se juntaron. Sus lenguas invadían sus bocas, incitándose a continuar el juego que habían comenzado.

Pero poco les duró el juego, pues pronto sintieron como el auto golpeaba con el auto de enfrente que se había detenido. Haciendo que la inercia los llevara hacia adelante, lo que hizo que el volante se encajara en la espalda de Heechul lastimándolo. Hasta ahí termino su viaje y el fin de semana de fantasía.

___Fin de flashback___

Esa vez la policía se involucró, les confiscaron el auto y Heechul fue a parar al hospital pues no podía moverse. Lo más vergonzoso fue que lo sacaron del auto con el torso desnudo, nadie se pudo explicar porque el joven iba de esa manera dentro del auto… pero se lo imaginaban.

Sabía que era loco pensarlo, pero con todo lo que paso anteriormente, le comprobaba a Heechul que el deportivo rojo tenía algo en su contra; sobre todo porque al maldito auto solo le costó un rayoncito de pintura. Estaba completamente seguro que el maldito deportivo rojo no deseaba verlo con Siwon… era algo tonto, pero así lo creía.

Una semana interno, fue suficiente para que Siwon no lo volviera a intentar más sobre el deportivo rojo. Esta vez le prometió a Heechul que todo eso se acabaría, que encontraría un lugar donde ambos pudieran compartir su amor y que no lo tocaría hasta que pudiera lograrlo. Pues hacer el amor con Heechul sería su recompensa por haber logrado su promesa.

Hace más de un mes que sucedió esto último, seis semanas que no lo había tocado, porque Siwon estaba seguro que un beso de Heechul desataría toda la pasión contenida por este tiempo. A esas alturas, Heechul ya sospechaba que su novio no deseaba tocarlo más, porque era de mala suerte y sin embargo estaba seguro que no era él, si no ese mugroso deportivo rojo.

Afortunadamente en el ámbito laboral, a ambos les estaba yendo muy bien. Heechul también había conseguido un pequeño papel en un dorama y asistió a pruebas para participar como MC en programas en vivo. Aunque no sabía el resultado de estas últimas, su desempeño en ellas le afirmaban que le iría muy bien; ya sentía suyo ese trabajo.

No eran tan buenos sus trabajos como los de Siwon, pero comenzaría a ganar más dinero y si se desempeñaba bien en estos primeros trabajos; seguramente se haría más conocido. Por lo que las próximas semanas Heechul no tendría mucho tiempo para pasarlo con Siwon y eso también lo tenía mal, de por sí ya se sentía abandonado.

- Si me volviera famoso y ganara un poco más, podría ayudar a Siwon a conseguir ese lugar para los dos. – Heechul se encontraba llegando a la entrada del metro que tenía que tomar -. Así no tendría que irme a vivir con Eunhyuk.

Pues aunque Siwon venia de una familia adinerada, no quería pedirle nada a sus padres pues intentaba independizarse completamente de ellos. Por lo que todo lo que consiguiera de ahora en más, seria por su propio esfuerzo y trabajo.

Con sus nuevos trabajos, Heechul tendría que asistir a sus llamados muy temprano y a veces saldría muy tarde. El ir y venir desde la casa de sus padres no era lo más conveniente, se encontraba muy lejos y eso podía causarle problemas con sus horarios. Lo único que le quedaba era compartir casa con su amigo como se lo había ofrecido anteriormente.

No era secreto para su novio, ya que Heechul le contaba todo y como ahora tendría que cambiarse de casa, con mayor razón Siwon tendría que estar enterado. Al principio la idea que fuera a vivir con su amigo no le gusto, después conoció a Eunhyuk y a su novio Donghae, entonces la idea le pareció menos descabellada. Finalmente cuando se supo que el tiempo no les daría para verse tanto como hasta ahora, termino por no gustarle nada.

Desde ese día Siwon andaba muy raro, distante y Heechul estaba seguro que le escondía algo. Últimamente lo sorprendió hablando en secreto por su celular y cuando lo veía llegar, Siwon colgaba rápidamente la llamada para prestarle atención a él. Aunque se veía como una galantería, a Heechul eso le daba mala espina.

- Todo se está saliendo de mis manos. – Heechul golpeo su cabeza con una de sus manos.

Justo en el cruce para llegar al metro que tomaría, se detuvo en el semáforo porque no estaba a su favor. Vio como un deportivo rojo pasaba lentamente frente a él, estaba seguro que era el mismo deportivo rojo que tantos problemas y dolores de cabeza le daba, obviamente al ver al amor de su vida dentro supo que estaba en lo correcto.

Pero Siwon no iba solo, llevaba a una chica de piel lechosa y cabellos negros sentada a su lado sonriéndole. Todo eso vio Heechul con tan solo verlo pasar…

- ¡¿Quién es esa tipa?! – exclamo Heechul al verlos pasar frente a él.

Rápidamente detuvo un taxi, se subió en el y ordeno al taxista a seguir el deportivo rojo.

Para su sorpresa el auto entro en el estacionamiento de un edificio, a pocas cuadras de donde estaba antes y lo más sorprendente, era que estaba a poca distancia de su trabajo en la SME. Le pago al taxista bajando del auto y se digirió hacia ese estacionamiento, sigilosamente llego hasta la puerta, dándose cuenta que el vigilante no estaba para su suerte.

Al parecer para las cosas malas que le pasaban siempre tenía buena suerte. Avanzo escondiéndose entre los coches que en ese momento se encontraban estacionados, hasta quedar cerca del deportivo rojo.

Vio como Siwon bajo del auto dando la vuelta para ayudar a bajar a la tipa, esta se sostuvo de su mano y de nuevo le sonrió a su novio, pero ¿Cómo se atrevía? Y ¿Cómo se atrevía Siwon a tocarla? Avanzaron hasta lo que parecía ser un elevador, la tipa iba hablando hasta por los codos, Siwon se reía de lo que le decía y la tipa cada que podía tocaba a su novio con pasando sus manos por donde fuera.

Y el colmo fue cuando por fin el elevador se abrió, la tipa rodeo por detrás con sus brazos a Siwon en un abrazo donde ella apoyaba su rostro en la espalda de este, desapareciendo de su vista cuando el elevador cerró sus puertas. Heechul sintió que una cubeta de agua fría le caía encima, no podía creerlo y eso que lo estaba viendo con sus propios ojos.


Heechul corrió hasta el dándose cuenta que contaba con clave de acceso, la cual no tenía. No podía hacer nada, más que esperar que salieran y volver a comprobarlo con sus propios ojos. Regreso a donde estaba el deportivo rojo que en la siguiente hora seria su única compañía. Porque estaba seguro que Siwon no podría tardar menos si se proponía hacer lo que pensaba, ponerle los cuernos con esa tipa. Se recargo en el auto teniendo a la vista el elevador, dejándose caer sentado sobre su suéter.

- Esto no puede estar pasándome. – se lamentaba Heechul sentado en el frio suelo -. Siwon no puede engañarme de esta manera.

Doblo sus rodillas escondiendo su rostro entre ellas y se dispuso a llorar un poco, lo necesitaba porque su corazón se lo pedía a gritos. Lo que paso los últimos meses, el alejamiento de Siwon y ahora esto, todo le dolía y le estaba desgastando no poderse desahogar como debía. Y sin embargo no lo podía creer, tenía que verlo nuevamente con sus ojos.

- ¡Heechul! – escucho que gritaban su nombre a lo lejos.

Lentamente levanto su rostro, las lágrimas de sus ojos no lo dejaban distinguir muy bien por lo que se llevó una mano a estos y se limpió lentamente. Entonces fue cuando lo vio, Siwon estaba fuera del elevador viéndolo extrañamente. ¿Había pasado ya una hora? Se preguntó Heechul.

Vio su reloj, no pasaron siquiera diez minutos, ¿entonces que hacia Siwon aquí? Seguramente algo debió olvidar dentro del auto.

Heechul recordó entonces que había entrado con esa tipa, observo a Siwon y este no traía puesto el saco ni la corbata con la que entro al edificio. Eso fue suficiente para que Heechul se enojara, tomara su mochila y su suéter, levantándose rápidamente del piso. Una vez de pie, le lanzo una mirada llena de reproche a su futuro ex novio.

Siwon no podía creer que Heechul estuviera ahí, lo que más le sorprendió es encontrarlo llorando y no saber porque lloraba; pero después de ver esa mirada de reproche, enojo y decepción que vio en sus ojos, supo que nada bueno debía estarse imaginando.

- Heechul… - grito de nuevo Siwon, al ver que intentaba irse, corrió tras él.

Quería irse y desaparecer, no deseaba recibir explicaciones y mucho menos que Siwon lo tocara. Al ver que corría hacia él, Heechul giro sobre sus pies y se dispuso hacer lo mismo, cuando iba rodeando al deportivo rojo justo por el frente en su loca carrera; el suéter que llevaba en la mano se atoro en la defensa del auto deteniendo su huida y haciéndolo caer de frente golpeándose la cabeza… Heechul quedo tirado frente al deportivo rojo inconsciente.


***


Despertó en un amplio y extraño cuarto blanco tendido sobre una cama que no era la suya, del susto se sentó rápidamente en la cama, doliéndole terriblemente la cabeza. Heechul se llevó una mano a su frente y sintió el gran chichón que tenía, no sabía cómo llego hasta ahí, donde estaba y porque lo trajeron hasta allí.

Seguramente pronto sus preguntas serian despejadas pues Siwon venia entrando al extraño cuarto blanco, sentándose a su lado mientras le examinaba cuidadosamente la frente y pasaba sus manos por sus brazos, sobre la ropa.

- ¿Cómo te sientes amor? – pregunto Siwon.

- Como si me hubiera tomado una tonelada de botellas de soju. – respondió de broma Heechul, aunque después se arrepintió pues hasta reírse dolía.

- Me diste un buen susto al ver que no despertabas, el doctor estuvo aquí y te reviso. – en el rostro de Siwon se veían los signos de preocupación del mal rato -. Él nos dijo que solo era el chichón que te hiciste en la cabeza, que por lo demás estabas bien. Te dejo medicamento para que no duela tanto como ahora…

Pero se vio interrumpido por la mirada inquisidora que le lanzaba Heechul.

- ¿Nos? – Heechul recordó porque se accidento de esa manera - ¡¿NOS?! Fue tu culpa que me accidentara, así que merecido te tienes la preocupación. Al menos les interrumpí el encuentro.

Como viera Siwon que hacia el intento de levantarse para irse, iba a detenerle. Pero no fue necesario ya que Heechul volvió a caer sentado en la cama porque la cabeza le dolía.

- Será mejor que tomes el medicamento o no dejaras de sentir que la cabeza te va a estallar.

Siwon saco la pequeña pastilla de la caja y tomo el vaso de agua que desde antes tenía listo, sabía que su novio se levantaría con el terrible dolor de cabeza. Se la dio a Heechul que se la tomo sin protestar, se veía que si estaba muy adolorido.

- Vamos amor, recuéstate un poco. – Siwon ayudaba a Heechul a recostarse.

Pero como recordara que esa era la cama donde Siwon y la tipa esa se iban a revolcar, se volvió a sentar.

- En esta cama ¡no! – protesto Heechul –. No quiero.

- Deja de comportarte de esa manera, te dolerá más la cabeza. – Siwon volvió a sentarse a su lado, rodeo el frágil cuerpo de su novio y lo abrazo –. Por favor Heechul, déjame cuidarte, sé que fue mi culpa.

El cálido abrazo y las palabras dichas por Siwon le parecieron sinceros a Heechul, además estaba aceptando su culpa. Por lo que estaba a punto de ceder, de no ser porque la tipa se apareció en la recamara con una bolsa de hielo en las manos.

- ¡Siwon-shi! – le habló informalmente –. El doctor dijo que con la bolsa de hielo desaparecería pronto el chichón y dolería menos. – al decir esto la chica le sonreía a Heechul, quería parecer amable quizás.

- Ahora sí, quiero irme. – de nuevo Heechul deseaba desaparecer de ese lugar corriendo como en su primer intento.

- No te iras solo, yo te llevare. – Siwon tomo la bolsa de hielo que le diera la chica -. En cuanto te sientas mejor nos iremos.

- Puedo irme solo. – Heechul no deseaba estar ni un segundo más en ese lugar.

- He dicho que nos iremos juntos. – las palabras de Siwon no tenían expresión alguna –. Pero antes…

Tomo la mano de la chica y la acerco a la cama, ante la confusa mirada de Heechul.

- Déjame presentarte a Choi Si Yue, mi hermana. Si Yue, él es mi novio Heechul.

- Mucho gusto. – la chica se acercó con la mano extendida y dentro de su sorpresa, Heechul respondió el saludo como autómata –. Siwon-shi me ha hablado mucho de ti Heechul-shi. – al ver que este no pronunciaba palabra alguna.

- Si Yue es mi hermana mayor.

- Pero tú dijiste… ¡aah! – se sentía confundido, Heechul se llevó una mano a su cabeza para acomodar sus ideas -. Tú siempre me hablaste de tu hyung.

- Soy su hyung. – afirmo la chica riéndose. ¿acaso se burlaban de él? Pensaba Heechul.

- Heechul mi amor, Si Yue me lleva cinco años, tú no sabes lo que es pelear con tu hermana teniendo yo cinco años y ella diez, o en mi adolescencia cuando llegaba tarde teniendo yo quince y ella veinte. Si Yue siendo cinta negra siempre me sometía. – ya se imaginaba Heechul viendo sometido a Siwon por una llave que le hiciera su hermana.

- Siempre fui mejor en los deportes que él. – Si Yue le sacudió el cabello a Siwon -. Como siempre estuvimos solos, yo tuve que ser como el hermano mayor de Siwon para protegerlo, jugar con él y enseñarle a ser un buen hombre.

Ahora lo entendía todo, tenía frente a él a la persona más importante para Siwon, claro después de él. Porque ahora comprendía que si lo había presentado como su novio ante ella, Siwon lo estaba colocando en el lugar más importante en su vida. Heechul definitivamente la había regado pensando mal de su novio y su cuñada.

- Y lo hiciste muy bien nonna. – le alago Heechul, ya que era verdad Siwon era el mejor hombre que pudo encontrar.

- Lo sé, porque no se equivocó a la hora de escoger con el corazón. – su cuñada era un amor, ahora Heechul se sentía peor que gusano -. Aunque debo decir que también eres muy guapo, mucho más lindo que yo y no me digas nonna, me haces sentir vieja.

- Hyung, pero si te ves más joven que yo. – sonriendo le afirmo Siwon.

Y no era mentira, la hermana de Siwon parecía su gemela. Solo que con largas y torneadas piernas y cabello largo más claro que el de Siwon. Por lo demás era igualita solo que con rasgos más finos y afeminados.

- Yo quiero que me disculpen por mi comportamiento de hace unos momentos. – se disculpó Heechul avergonzado.

- No es toda tu culpa amor, debí haberte dicho todo desde el principio. – se lamentó Siwon.

- Vamos déjense de culpar, Siwon-shi tu querías darle una sorpresa a tu novio y el, bueno… - Si Yue se llevó un dedo a su boca tratando de pensar que justificación dar -. Bueno, él estaba siendo cabezota por no querer perder a su novio.

Con esta explicación todos rieron de buena gana, por fin se sentían cómodos con la situación y podían reírse de lo ocurrido.

- Bien, ahora me voy para que Siwon-shi te explique todo. – tomo el rostro de Heechul y le dio un beso en la mejilla -. Y tu hermanito, explícale cual es mi condición sobre el regalo, ¡ok!.

Y al terminar de decir esto, Su Yue salió del cuarto y se fue, dejando solo a Siwon con Heechul.

- En verdad lo siento amor, yo no pensé… - Heechul se vio interrumpido por los labios de Siwon exigiéndole que le correspondieran.

Así estuvieron largo rato, disfrutándose en cada beso, con la sola compañía del otro. Había pasado mucho tiempo desde que Siwon lo besara de esa forma, la maldita abstinencia a la que tuvieron que someterse. Cuando por fin estuvieron saciadas sus bocas se separaron, entonces Siwon comenzó a explicarle a Heechul.

Siwon le conto lo preocupado que estaba por él, ya que tendría que mudarse más cerca de su trabajo y eso lo llevaría al departamento de su amigo. Entonces al enterarse que su hermana estaría de visita, se propuso a presentarlo como su novio. Ya que siendo la única persona que le importaba en su familia, la opinión de Si Yue era muy importante.

Cuando los dos hermanos se encontraron Siwon le platico a Si Yue el tiempo que tendría que pasar lejos de Heechul al no poderle dar el lugar que le prometió. Esta recordó que tenía un departamento en el centro de la ciudad que ya no ocupaba y se encontraba vacío. Pues cuando venía de visita siempre llegaba a casa, para hacerle compañía a Siwon.

- Y así fue que hyung nos ha dado este departamento como regalo. – termino de contarle Siwon.

- Pero esto es mucho Siwonie. – Heechul no ignoraba que el departamento se encontraba en una de las mejores zonas céntricas de la ciudad -. Por ahora con nuestros sueldos, jamás conseguiríamos un departamento como este. – haciendo referencia sobre lo de comprar y vivir solo de sus sueldos.

- Este es un regalo amor, hyung quiere que comience mi nueva vida a tu lado, además… - Siwon sentado en la cama se recarga en el respaldo de esta, toma a Heechul de la cintura y lo arrastra hacia él abrazándolo muy cerca de su cuerpo -. Si hasta ahora no he salido de casa era solo por ti, al no tenerte más viviendo a un lado no me interesa estar en casa. Yo voy a donde tú vas.

- Y yo me quedo donde tu estés Siwon. – ya para este momento Heechul olvido el mal rato y el golpe que se llevó.

- Además hyung ha puesto una condición.

- Una condición, ¿Cuál es? – pregunto curioso Heechul.

- Que le guardemos un cuarto en nuestro nuevo hogar, pues cuando venga de visita no piensa hospedarse en un hotel.

Heechul sonrió por la ocurrencia de su cuñada, porque era más que obvio que no la dejarían hospedarse en un hotel si en ese departamento se veía que tenían espacio de sobra.

- ¿Cuándo podemos mudarnos? – Heechul volteo sonriente, para mirar el rostro de su novio. La idea de tener un espacio para ellos dos y llamarlo hogar le hizo sentir completo.

- En cuanto tú lo dispongas. – sus labios se juntaron en un tierno y cortó beso -. Y tendrás que dedicarte a decorarlo, me dirás que deseas que compre.

- ¿En verdad quieres que yo lo decore? – feliz por lo que acababa de escuchar, Heechul se sentó sobre sus rodillas quedando de frente a Siwon.

- Me gusto lo que hiciste con mis oficinas, por ahora el departamento está algo vacío y muero por verlo como un verdadero hogar. – esto último término por derretir de amor a Heechul.

Entre sus manos tomo el rostro de Siwon y lo beso, fue un beso lleno de amor, de necesidad. Siwon también lo sentía así, lo extraño demasiado y ahora desquitaba su deseo. Siwon llevó sus manos hacia las caderas de Heechul arrastrándolo hacia él, este solo abrió sus piernas y se acomodó encima de las piernas de su novio.

No despegaron sus labios en ningún momento. Las manos de Siwon cobran vida sobre el cuerpo de su novio, sus manos empiezan a recorrer caminos que ya conoce, levantando la playera de Heechul dejando al descubierto su torso rozando su piel, haciéndole sentir mil cosas ya conocidas a Heechul pero a la vez completamente nuevas.

Los besos se vuelven lentos en este punto, disfrutando cada segundo de amor, los labios de Siwon recorren sus mejillas, bajando por su cuello, dejando huellas a su paso. Heechul ahoga pequeños suspiros provocados por las caricias de su novio, hacer el amor con Siwon resulta ser muy placentero y diferente a lo que antes habían pasado.

Esta vez no era solo sexo, estaba seguro que el amor cubría todas aquellas caricias, todos esos besos, aquella entrega de ambos. Heechul supo entonces que todo lo anterior paso para llegar a este punto… hacer el amor con Siwon de esta manera podía soportarlo toda la vida.

Al poco rato, los dos estaban perdidos en un laberinto de entradas y salidas, de gemidos, jadeos, suspiros, súplicas… el deseo y el amor se había adueñado de sus cuerpos, manejándolos a su antojo. Ya no se contenían, por fin podían amarse sin interrupciones y en un lugar que sería para compartir su amor por siempre.

Se dejaron llevar el uno por el otro. Siwon entraba y salía por completo del cuerpo tendido debajo de él, cada vez con más fuerza y encontrando el punto mágico de Heechul. El momento final se acercaba, junto con la inmensa pasión que llenaba cada parte de ambos cuerpos. Un calor abrumador descendía desde sus adentros, estaban llegando al límite.

Todo era tan maravilloso, salvaje, entregado y lleno de amor. Juntos por fin estaban alcanzando el cielo, haciéndolos gemir sin control, moviéndose como si fueran uno solo. El momento del clímax llego, un intenso grito por parte de los dos anunció que ambos terminaron al mismo tiempo. Heechul sintió cómo el miembro de Siwon se vaciaba en su interior, mientras que él lo hacía entre los dos.

Sus respiraciones agitadas permanecieron mucho tiempo después de todo lo que pasó entre ellos. Siwon se dejó caer sobre su novio, tratando de recuperar el aliento perdido. Heechul solo cerró los ojos, en verdad no podía creer lo que acababa de pasar, por fin se habían unido en la más grande muestra de amor.

De pronto pudo sentir unos brazos que lo rodeaban por la cintura, eran los brazos de Siwon que yacía recostado a su lado aferrándolo a su cuerpo. Al volver a abrir los ojos, Heechul pudo ver la mirada curiosa de Siwon, quién no le apartaba la vista de encima.

- ¿Me amas? – pregunto Siwon con una mirada anhelante.

- Si, te amo, te amo mucho Siwon. – en los ojos de Heechul había un brillo inusual que Siwon adoró de inmediato.

- ¿Quisiera saber si es posible que nuestra relación se haga formalmente? – esta pregunta de Siwon se traducía a una petición, en el fondo esperaba una respuesta de aceptación.

- ¿Dices que quieres una relación seria?

¿Por qué lo había tomado por sorpresa?, si no tenía duda que amaba a Siwon, pues porque nadie nunca le había dicho algo parecido, preocupándose por sus sentimientos. Así que todo esto hacia muy feliz a Heechul, que se tomaba su tiempo para disfrutarlo.

- ¿No quieres? – Siwon lo miro confundido.

- Siempre me hace feliz saber cuánto me amas. – Heechul dejó salir sus verdaderos sentimientos al fin-. Siwonie pregúntame si quiero vivir contigo.

- ¿Te mudarías a vivir conmigo, para vivir una vida juntos y para siempre? – Siwon llevo una de sus manos a la mejilla de Heechul acariciándolo delicadamente.

- ¡Si quiero! – respondió Heechul sonriendo como nunca -. Te amo Siwon.

- Heechul… – y Siwon besó con ternura los rojos labios de Heechul – Yo también te amo. – le sonrió con una picara mirada y enseguida lo abrazó con más fuerza – Ahora que por fin te pude hacer mío sin interrupciones.

- Lo se… - Heechul sonrió sintiendo como si hubieran perdido mucho tiempo –. Supongo que yo me mostré más impaciente que tú. – agrego algo sonrojado.

- Tienes razón, yo lo siento amor por haberme tardado tanto y confundirte con mi sorpresa. – se disculpó Siwon.

- No, nada de eso. Gracias por pensar siempre en mí.

- Yo esperaba decírtelo hace unos días, pero el departamento necesitaba unos arreglos y por eso lo retrase. – Siwon besó a Heechul nuevamente disfrutando de su cercanía y disfrutando del momento con todos los sentidos –. Te amo Heechul, eres mi todo.

- Perdóname Siwon por haber pensado que tú y Si Yue, te prometo que no volveré a espiarte.

A pesar de tanta felicidad, a Heechul le seguía preocupando algo y su rostro por un momento se mostró sombrío, a lo que Siwon se dio cuenta de inmediato.

- ¿Qué te pasa ahora?

- Dijiste que la opinión de tus padres no te importaba pero… - Heechul dudo por un momento, pero ante la mirada impaciente de Siwon continuo -. Yo no quiero ser el medio de que discutas con ellos o que por mi culpa ellos te desconozcan.

- Yo podría pensar lo mismo de tus padres. – le sugirió Siwon.

- Te aseguro que mi madre te aceptara encantada… pero no me importa lo que piensen.

- Y tú sabes que a mis padres nunca les he importado. Te he presentado a la única persona que me importa. – contesto sinceramente Siwon -. Ellos no tienen más familia que Si Yue y yo, en el futuro seremos los únicos herederos y puedo asegurarte que si lo supieran no les importaría. Pero por ahora eso no me importa, yo prometo darte todo lo que este en mis manos.

- ¿Seguro que podremos con todo Siwon?

- Te refieres a la casa, los deberes como cocinar, sacar la basura, cuidar de los niños. – Siwon se rio, a lo que Heechul le golpeo con una de sus manos libres.

- Noooo… - reía Heechul mientras lo golpeaba – los niños tendrán niñera… babo obvio que eso no me preocupa.

- Te amo, no lo olvides, así como yo no voy a olvidar que tú me amas. – Siwon miró a Heechul con mucha intensidad, intentando transmitirle su confianza -. No me vas a dejar solo nunca, ¿verdad? Aunque te vuelvas famoso.

- Nunca. Yo solo te tengo a ti y tu a mí, en la vida solo me importas tú – Heechul habló con tranquilidad, confianza y seguridad -. Confiaras en mi tanto como yo confió en ti.

- Así lo hare… - Siwon se removió un poco en la cama -. Y si no funciona, siempre puedo dejar mi trabajo e irme a trabajar a tu lado de guardaespaldas.

- Hahahaha enloqueciste Siwonie. – ambos reían por la ocurrencia.

- No, pero como pronto tendré un novio famoso, deseo darte también el deportivo rojo para que no camines por las calles tu solo. – esta vez la voz de Siwon era firme -. Y no aceptare un no, es por tu seguridad.

Había olvidado ese pequeño detalle, pero lo que no olvido fueron todos los malos momentos que ese deportivo rojo le hizo pasar. Heechul se lo pensó por un momento pasando su mano por el chichón que aún se sentía un poco en su frente.

- Siwonie dos regalos en un día es demasiado para mí, ese auto es tuyo y con él te conocí, deseo que siga siendo de esa manera. – era verdad, él se enamoró por completo del tipo del deportivo rojo, no deseaba que fuera de otra forma -. Por ahora, no lo necesitare aún.

- ¿Sigues pensando que el auto te odia? – pregunto muy divertido Siwon

- Y tú sigues sin creerme. – se quejó Heechul –. Si lo acepto, seguro terminarías encontrándome muerto asfixiado dentro de él por no poder abrirlo, o estampado en el único poste de la colonia o quizás sea el único auto que le caiga un rayo y yo muera por ello. – realmente Heechul podía seguir con todas las muertes absurdas que se le ocurrían, todas por culpa del deportivo rojo.

- Está bien, por ahora tú ganas. – contesto resignado.

- Ese auto te quiere solo a ti Siwonie…

Agrego Heechul mientras se refugiaba en los brazos de Siwon, de alguna manera sentía que todo lo malo que pasaron sobre el auto les llevo hasta este bello momento. Heechul se conformaba con el amor de Siwon y no podía pedir más, eso era suficiente.


F i n .

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