SWING: Enredos de Oficina... Intro

Título del minific: “SWING: Enredos de Oficina”
Autora: Lunis HeeChan
Capítulos: 4
Parejas: Varias
Tipo: Yaoi, Songfic
Género:  AU, Comico, Fluff
Clasificación: +18
Advertencias: Enredos…. Hahaha solo el lemon.

Comentario de la autora: Un día mi hermana me dijo, ya viste el vídeo de OV7 – Tenemos un secreto, yo no sabía de qué trataba así que me dispuse a ver y en cuanto lo hice, esta idea se me ocurrió. El vídeo está muy divertido y muestra los enredos, amoríos que tienen en su trabajo, pero en ese momento no me atreví a escribirlo. Entonces vino Swing y todas las piezas encajaron, encontré mi inspiración, este es el resultado. Espero que les guste.

Bsos *3*


Heechul POV
Director General

Lo bueno de ser tu propio jefe, es que puedes llegar un poco más tarde cuando el día lo amerita, mucho más si es que la noche anterior tuviste que quedarte a trabajar horas extra por culpa de una reunión imprevista en la sala de juntas de la dirección. Otra de las ventajas, es que puedes manejar un descapotable deportivo a toda marcha sin sortear el tráfico que hay por las mañanas cuando todos entran a trabajar.

Sí, mi vida es grandiosa, ser el Director General de la empresa que pertenecía a mis padres y antes de ellos a mis abuelos, es una de las más competitivas y mejor posicionada en el mercado.

“Swing Company”

Llegó a la compañía y ni siquiera tengo que estacionarme, dejo el auto al frente y alguien más vendrá a llevárselo. Bajo del auto y me arreglo mi traje Armani, no es que me guste mucho vestir de esta forma, soy de lo más informal y estrafalario. Pero como Director General, es lo mínimo que puedo llevar puesto, la imagen lo es todo decía mi abuelo. Con la vieja escuela encima, el abuelo no iba a su empresa sin que sus zapatos estuvieran bien lustrados y su traje impecable, lo mismo exigía a sus empleados. Incluso esta en las políticas de la empresa. Si el no faltaba a ninguna, tampoco lo permitiría de alguno de sus empleados, algo inflexible.

Pero mi padre me enseño, que después de todo, esas políticas sirven para que todos trabajen en armonía y hasta ahora ha funcionado.

- Buenos días. – saludo a los recepcionistas.

El camino hacia mi oficina es muy largo, por eso es que aprovecho para saludar a mis empleados, al menos los que me encuentro de camino. Aunque hoy es algo raro, mi asistente Park Jungsoo, siempre es quien me encuentra en el camino para decirme con que comenzamos el día en la agenda.

- Raro… muy raro. – me digo -. Buenos días.- saludo a las personas que acaban de salir del elevador antes de subirme.

Voy hacia el último piso, donde se encuentran los gerentes de la compañía, asesores y personal de confianza, pero suelo parar un piso antes, donde se encuentra la oficina con más movimiento para checar con mis propios ojos que todo este andando bien.

Encuentro escucho el timbre del elevador que me indica que hemos llegado, las puertas se abren y lo primero que mis ojos ven, es a mis empleados discutiendo, todos contra todos en medio de un caos.

¿Qué pasa aquí? ¿Y Jungsoo?

Me encuentro con el Gerente de Relaciones Públicas discutiendo con uno de los Administradores, que resulta ser mi hermano y no sé qué rayos hace arriba de una silla discutiendo con el otro. El Gerente de Recursos Humanos está siendo golpeado por uno de los Asesores Financieros y este a su vez, está siendo detenido por Donghae, un secretario que labora en la administración.

Intentando tranquilizarlos se encuentra el chico de las copias, en realidad hace de todo un poco, como es nuevo y no tiene mucha experiencia lo he puesto a prueba, no es que lo vaya a dejar así toda la vida. Y el secretario del Asesor de Investigación de Mercados trata de levantar a mi Asesor de Ventas, empujándolo de los hombros detrás del sillón donde se encuentra sentado, lo está tocando y esto me hace enfurecer.

- ¡¿Qué rayos sucede aquí?! – digo con voz autoritaria y suficientemente alta para que todos volteen a verme e incluso aquel que dormía despierte.

"Swing" ha sido como mi segundo hogar desde que tengo memoria, mi abuelo creo este imperio y mi padre me entrenó a mí para poder hacerme cargo del mismo. Por eso no puedo dejar que una discusión entre mis empleados trascienda y haga estragos en mi segundo hogar. Por eso para entender mejor lo que está sucediendo hablaré con todos ellos en la sala de juntas.

La realidad es que jamás cruzo por mi mente que el resultado de esta charla, afectaran directamente una de las políticas que mi abuelo tanto proclamó: “Queda estrictamente prohibido iniciar, fomentar y mantener cualquier relación amorosa entre los empleados de esta empresa”.


Continuara...

Comentarios