En cuanto el jefe Rain lo presentó y desde el momento que se hizo consiente del interés de éste por él, supo que tenía que aprovechar la situación; sacarle provecho al interés de Choi por su persona.
Lo que Heechul aun no sabía era… ¿hasta dónde podía llegar?
Era obvio el desagrado que le producía ser perseguido por la cabeza de uno de los más grandes grupos de mafia internacional. Pero Heechul no se lamentaba haber aceptado aquel trabajo, si con eso le llevaba hasta la persona que deseaba encontrar; y que para esos momentos esperaba que estuviera con vida.
Heechul sonrió al sentir de nuevo la mirada de Choi, debía dejar sus tristes pensamientos para otra ocasión. Por ahora debía fingir que disfrutaba la fiesta en su honor y ¿por qué no? Divertirse un poco a costas de Choi Siwon.
Bien dicen que los animales de caza son atractivos para no poder resistírseles. Pero él también sabía jugar ese juego de la seducción, nunca le había fallado. Heechul tenía su larga lista de experiencia en cuanto a insinuaciones, conquistas y seducción..
Al verlo ahí tan seguro de sí mismo en la mesa más alejada del lugar, que se encontraba en un balcón situado estratégicamente. El cual le daba la privacidad de ser visto, pero desde ahí se podían ver las demás mesas de los invitados.
Con una sonrisa en los labios, se fue acercando a la mesa donde se encontraba Choi Siwon ya sin el antifaz, con pasos lentos, sofisticados y acompasados. Pidiendo permiso con la mirada para subir los escalones, a lo que Siwon asintió solamente concediéndole el permiso de acercarse.
- Debo disculparme si fui un poco insolente cuando nos presentaron. – dijo Heechul al llegar, tratando de crear un acercamiento desinteresado.
- No tiene importancia. – afirmó Siwon recalcándolo con un gesto de su mano –. por favor siéntese.
Heechul tomó asiento a su lado, lo suficientemente cerca como para que pudiera oler su carísima colonia y ver su rostro. Ese rostro que ahora sus recuerdos le decían haberlo visto antes, pero su mente le aclaraba que solo se encontraba frente a ese pez gordo, del cual hacia mucho que estaba tras el.
Es verdad, muchas veces lo vio en fotos, debido a sus investigaciones. Una persona como Choi Siwon, no podría estar de otra forma en sus recuerdos.
El resto de la mesa estaba vacía. Ni siquiera se veía por ahí alguno de los amigos que lo habían estado acompañando durante toda la noche.
- Estaba deseando estar a solas con usted. – dijo Siwon con toda la formalidad que pudo ser capaz. - ¿Ha disfrutado su bienvenida?
Mientras hablaba, Siwon parecía analizarlo. Para Heechul, aquel hombre de profundos ojos, complexión perfecta y vestido con aquel carísimo traje que permitía apreciar su figura sentado a su lado, era bastante guapo aunque tuviera una actitud perturbadora y arrogante.
- Sí, gracias a usted por esto. Seguramente fue difícil organizarlo en tan pocos días.
- Si yo lo hubiera conocido antes, me habría dado cuenta cuan especial es usted y me habría esmerado más en este recibimiento, por supuesto.
Heechul reía por dentro, en verdad dijo lo que escucho. ¡Oh por favor! Choi deseaba, ¿impresionarlo? Seguramente la forma en que lo dijo y la persona quien lo decía habría causado interés en algún otro, pero Heechul no era impresionable con ese tipo de tratos; estaba más que acostumbrado.
Pero lo dejó continuar.
- Ha venido muchísima gente. – señaló Heechul.
- La mitad de ellos no los conozco, pero a menudo tengo que lidiar con esto, así que trató de pasarlo bien.
- La verdad es que yo no sé por qué hicieron todo esto, porque tomarse la molestia como si fuera algo importante. – por primera vez en la noche Heechul dejo salir de su boca algo real que le intrigaba.
- Como lo dije en mi discurso, usted es lo que esperábamos. – Siwon lo miró de arriba abajo con la intención de ponerlo nervioso. Desgraciadamente, los rasgos finos de Heechul poseídos de gran belleza tuvieron el mismo efecto en él. – Y hasta ahora yo lo he visto muy divertido hablando con los invitados, parece acostumbrado a este tipo de tratos.
Y no era mentira, también Heechul había sido víctima en su pasado de este tipo de tratos pomposos; esperaba que ocultando su pasado esto terminaría, pero no era así.
- Gracias, pero no he venido a Londres para divertirme. – contestó Heechul, algo incómodo.
Después de lo que Heechul tenía pensado hacer con el anfitrión de aquella fiesta, estaba seguro que la mitad de aquellos invitados terminarían odiándole.
No supo en qué momento se había movido, ya que cuando se dio cuenta, tenía demasiado cerca a Siwon; y toda su persona le estaba pareciendo demasiado abrumadora. Él se sentía abrumado, con todos sus recuerdos y lo que despertaba esta persona.
Sin duda este hombre era… distinto, pensó Heechul. Tan solo charlando, irradiaba un aura tensa y peligrosa que debería alejarlo, pero que contrariamente actuaba sobe él como un imán.
- ¿Desea beber algo de vino? Ha sido un obsequio de uno de mis amigos, traído especialmente de Sudamérica. – le preguntó Siwon, penetrándolo con su mirada evaluadora.
- Si, por favor. – contesto Heechul desviando la vista, tratando de recomponerse y ajustar de nuevo su objetivo. Estaba ahí por una sola razón.
Siwon no le quitaba la vista de encima mientras servía dos copas de vino, y después le dio una a él. Al agarrar la copa sus dedos se tocaron de nuevo, pero de diferente forma, como una suave caricia que le dio a Heechul una sensación de cosquilleo, parecida a una descarga eléctrica recorriéndole todo su cuerpo; que le hizo retirar rápidamente su mano.
- Espero que sea de su agrado. – dijo Siwon.
Y a pesar que su tono era suave, sus ojos revelaban que se había dado cuenta de lo que acababa de suceder. Lo que su toque había causado en Heechul.
- Estaba preguntándome si estaría libre mañana por la noche para reunirse conmigo. – continuo Siwon –. me gustaría discutir algunos asuntos con usted, y por supuesto contar con su compañía para cenar.
Sí, el lo había provocado pero, eso no decía que tenia que aceptar su propuesta. Esa invitación era como una advertencia para dejar el juego o una sugerencia para animarse a comprobarlo, se estaba metiendo en terreno desconocido y no le gustaba.
Heechul dejó su copa cuidadosamente sobre la mesa, decidido a seguir con lo previsto y no dejarse distraer por la imponente personalidad aquel hombre.
- No creo que eso sea posible, mañana seguramente estaré muy ocupado. – respondió Heechul –. No suelo salir al menos que sea algo importante; y considerando que a usted recién lo conozco, ¿por qué debería aceptar su invitación?
- Pero no me esta rechazando del todo, ¿cierto?
- Cierto. – dijo Heechul sin el más mínimo rastro de interés. – si esos asuntos a discutir son importantes, podría tener una oportunidad. – respondió mirándolo directamente a los ojos.
Si Siwon era como sospechaba, alguien que no desistía ni aceptaba un no por respuesta. Heechul supo que insistiría y entonces, solo entonces vería si le convenía. Siwon pareció pensar la respuesta dada por Heechul, aun no podía creer que hubiera alguien que jugara así con su interés.; esa era una nueva experiencia para él y le gustaba.
- Entonces, ¿estará libre para cenar conmigo el próximo fin de semana? – insistió Siwon –. o es que su pareja no le dejaría ir a una cita conmigo. – Siwon dijo esto señalando a Donghae que se encontraba unas mesas abajo charlando con uno de sus socios, Eunhyuk.
- No, él no es mi pareja. – respondió Heechul con el ceño fruncido, ya que al instante comprobó que había cometido un error.
- Bien, eso me da oportunidad con usted. Si no tiene otro pretexto para rechazarme, pasare por usted el sábado por la noche a las 7:00.
- No he dicho que aceptara. – respondió Heechul bruscamente.
- Y yo le he dicho que me gustaría discutir algunos asuntos con usted. Cenar no nos vendría nada mal, después de todo tiene que comer ¿cierto? – Siwon se levantó lentamente de su lugar acercándose peligrosamente a él. – Lo que suceda después de eso lo dejaremos al momento.
Al fondo se escuchaba un nuevo tema de estilo jazz, haciendo el ambiente más propicio para las parejas que se encontraban en la velada. Siwon se acercó un poco más cautivado por aquellos grandes ojos. Heechul sintió el calor de aquel cuerpo que se le acercaba, aspirando el aroma de su colonia.
Durante unos instantes, un destello de lógica despertó a su conciencia, advirtiéndole que se estaba metiendo en problemas. Pero no pudo resistirse a la atracción que sintió cuando Siwon lo rodeó con sus brazos y en ese momento, contra toda lógica, Heechul se dejó llevar por aquellos labios que se posaban en los suyos.
Lo prohibido… Peligroso pensaba al mirar aquellos ojos.
Un beso suave al principio, luego más apasionado. La lengua de Siwon exploró el interior de su boca de una forma nueva y desconocida, muy diferente a todo lo que había experimentado. No era un beso preparado ni apresurado, más bien estaba siendo un beso de descubrimiento; lento y al mismo tiempo provocador.
Momentos después, una vocecita en su interior le dijo que eso no podía estar sucediendo. Estaba besándose con Choi Siwon, alguien que apenas conocía y que además, era su principal sospechoso del caso de tráfico que investigaba. Cortando el beso y alejándose de sus brazos, Heechul se puso de pie.
Siwon se echó para atrás en su asiento y lo miro, con las cejas arqueadas por la sorpresa.
- ¿Hay algún problema, darling? – le preguntó con los ojos llenos de deseo.
Heechul se sintió irritado por la forma en que lo había nombrado y la actitud que Siwon había adoptado, ¿quien se creía?. Pero lo que más le molestó fue la sugerencia de lo que pudiera ocurrir entre ellos dos.
- Usted no tiene porque llamarme de esa forma. – Heechul dejo salir parte de su furia –. y no, no cenaría con alguien como usted Choi Siwon.
- Alguien como yo. – repitió Siwon -. ¿puedo preguntarle qué quiere decir exactamente con eso? – pregunto un contrariado Siwon, su ceño se frunció por un momento al encontrarle sentido a sus palabras. Esto le daba la razón al pensar que ese nuevo policía sabía algo más de lo que se decía.
- Puede preguntarlo, pero no obtendrá ninguna respuesta. – ahora era Heechul quien sonreía maliciosamente relamiendo sus labios.
Todo a su tiempo Choi Siwon, todo a su tiempo… susurraba Heechul al alejarse. Estaba disfrutando jugar con el carácter de aquel hombre, pero supo que ya era suficiente de burla. Heechul se alejó caminando lentamente disfrutando que al final, el juego se hubiera inclinado hacia él.
***
Bajo las escaleras recomponiendo su semblante, no podía dejar que las demás personas presentes se dieran cuenta de lo que acababa de suceder y mucho menos darle la satisfacción a Choi de dejarle ver sus emociones causadas por ese beso. Mostrar enfado seria como demostrar que le importaba.
Agradecía que el lugar en el que habían estado no estuviera a la vista de los demás, sino hubieran dado una gran nota de la cual hablar. Mientras se alejaba rodeando el salón para evitar a los invitados, buscando a Donghae para poder salir del lugar; a su paso una voz lo hizo detenerse.
- Aun no puedo creerlo. – dijo Leeteuk cerrándole el camino –. el dinero puede llegar a nublar el sentido común, ¿no es verdad?. No pretendo ofenderte, pero supongo que estarás de acuerdo conmigo.
Heechul frunció el ceño al notar el tono acusatorio de sus palabras y enseguida comprendió que su encuentro con Choi había tenido un testigo. Sabía muy bien que no le caía bien a Leeteuk desde que el jefe Rain los presento, comprendía perfectamente que este ocuparía lo que vio en su contra.
- Por la forma en que se trataron allá arriba, me dio la sensación de que son viejos conocidos. – no pudo evitar notar la ironía empleada al decir la palabra “viejos conocidos”.
Sabia que debía andar con cautela, cometiendo actos impulsivamente, había traicionado sus propios principios.
- Lo somos. – se defendió Heechul –. debes saber que tuve que estar en contacto con él y otras personas antes de aceptar ser trasladado a Londres.
- Parecen ser mucho más cercanos que eso.
- No me agradó en ese entonces y sigue sin agradarme ahora. Pero como tú bien sabrás, a veces debemos lidiar con este tipo de personas por nuestro trabajo.
- ¿Y?
- ¿Qué quieres decir con eso? Si sabes algo más, ¿Por qué no me preguntas directamente?
- Choi suele gustarle a todos por igual, hombres y mujeres. Todos terminan engatusados por su irremediable encanto. – con sus brazos cruzados, Leeteuk dio una vuelta alrededor de Heechul –. pero no sé si tú lo sepas, en el problema que te estás metiendo.
- ¿A qué te refieres Leeteuk?
- Me refiero a que Choi Siwon es muy dado a cumplir sus caprichos. Y su actitud allá arriba no fue de sólo conocidos. – Leeteuk se acercó más a Heechul –. vi cómo te miraba, cuando te besó. Incluso las miradas que intercambiaron durante la cena.
- Yo sólo estaba…
- Provocándolo. – le interrumpió Leeteuk –. y al hacerlo aumentaste su interés en ti. No debiste hacerlo, podría volverse peligroso para ti.
- ¿Peligroso? ¿En qué sentido?
- Él siempre obtiene lo que desea, y si tú has entrado en esa categoría de sus deseos; no parará hasta conseguirte. – Leeteuk comenzó a negar con su cabeza -. Eres policía, debiste haber evitado algo así; exponerte de esa forma en un caso como este.
- Lo único que me interesa de Choi Siwon es lo que me puede aportar para el caso, eso es todo. – como hiciera un gesto por irse, Leeteuk lo detuvo sosteniendo su brazo.
- Trata de ser cauteloso y no tomar mis advertencias en saco roto. Después de todo, estamos en el mismo bando.
Vio cómo Leeteuk se alejaba de él con paso apresurado. Era la primera vez que le escuchaba decir que lo consideraba de su propio equipo, algo que le dejo saber de la gravedad de lo que acaba de suceder con Choi Siwon. Debía ser más cuidadoso con ese hombre.
Heechul se informó sobre los negocios y las personas con las que se relacionaba Choi Siwon, estaba tan cerca de dar con las pruebas para hundirlo. Pero aun ignoraba hasta donde podía llegar la reputación de Siwon como amante y casanova. Y eso era algo sobre lo que Leeteuk le estaba advirtiendo.
***
Después de eso no pudo estar más tiempo en la fiesta, y aunque era en su honor; salió lo más pronto que pudo zafarse de su deber de invitado de honor.
- ¿Estas seguro de lo que estas haciendo? – preguntó Donghae sin quitar la vista del camino pues venia conduciendo.
- He estado en situaciones peores, créeme. Trata de no preocuparte por esto y querer causar un alboroto. – Heechul lo mencionaba, porque sabia que el menor saldría a contárselo a su padre si sentía que estaba exponiéndose.
- Yo… yo no hago eso. – se defendió el menor con su carita avergonzada y algo lastimado por sus palabras.
- Es cierto. Lo siento. – se disculpó Heechul con un suspiro –. de hecho para ser tan distraído, siempre estás cuidando de mí más que de ti mismo. – Heechul dejó caer su cabeza en el hombro de Donghae -, Eres una gran persona y sin ti, creo que perdería mi lado humano.
- Gracias. – la cara del menor volvió a cambiar, pero ésta vez una sonrisa adornaba su hermoso rostro –. Entonces, comencemos con el espectáculo.
- Desde luego, ha llegado la hora de enfrentar a Choi Siwon con la verdad. – y de utilizarlo para encontrar a Andrew, pensó también. Pues era algo que aun guardaba para sí mismo.
- Los buenos siempre terminan aprendiendo a los malos. Esperemos que esta vez sea de esa forma.
- Esperemos…
Susurró Heechul, esperando que todo terminara pronto. Ignorando que sólo era el comienzo de algo para lo que su experiencia como detective lo había preparado.
C o n t i n u a r a . . .
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