My person... Capítulo 2

Siwon POV

Mi corazón ansioso
Nunca ha estado tan loco así
Pero… ahora, creo que lo esta
Solían decir que conocería a alguien
La persona de mi destino…
La persona para mí.

- ¿Te gusta?

- Sí, me gusta. – le contesté a Leeteuk sin medir mis palabras, pues en ése momento me encontraba embobado mirando bailar a Heechul con algunos amigos, ya que salimos de fiesta por el fin de semana.

Sé muy bien que gracias a Leeteuk Hyung, estoy dentro de su círculo de amigos. De otra forma no creo que me hablara. Sí, para mí un saludo de su parte es hablar. Patético, ¿no?.

Si tan sólo me recordara, si tan sólo se diera la oportunidad de mirar más allá. Lo he observado tanto y me he dado cuenta que, pareciera que ni lo intenta. No desea ver profundizar en nada de lo que ya tiene establecido. Sus amigos, sus citas… y yo no estoy en ninguna de ésas categorías.

No me da la oportunidad de conocerlo, pero no desisto. Fue maravilloso volver a encontrarlo, sé que en el fondo es ésa persona que cautivó mi corazón.

- Te gusta y se te nota mucho. – eso me saco de mi embobamiento, fue cuando me di cuenta de la respuesta que le había dado hace unos momentos, haciéndome subir la vergüenza hasta mi rostro.

- Bueno, a quién no le gusta.

Le compuse tratando de liberarme de lo que dije mientras le señalaba las personas alrededor, éstos no perdían de vista los movimientos de Heechul al bailar; estaban tan embobados como yo o quizás un poco más.

- Lo ves…

- Mmmm… – Leeteuk bebió un poco de su piña colada -. Yo te voy ayudar Siwon, hablaré con Heechul el lunes después del almuerzo.

- ¡¡¡Qué!!!... pero yo… no…

Fue lo único que pude decirle, ya que su novio vino por él y se lo llevó a la pista entre risas y besos.

Yo me quedé en la mesa con algunos de nuestros amigos, que como yo no estaban emparejados aún. Y con la loca idea que a Leeteuk se le había metido en la cabeza rondando mi mente, me volví a la tarea de observar bailar a Heechul.

Heechul asistió a la velada esta vez sin pareja, pero se veía que poco le importaba pues estaba bailando con todos sus amigos y no hacía falta uno que otro desconocido que lo invitaba a bailar, a veces aceptaba y otras no; como esta vez que sólo se divertía con nuestros amigos.

Además últimamente no era raro que llegara sólo a estas reuniones, ya que Hangeng siempre llegaba algo tarde para quedarse con Heechul el resto de la velada. Y al tener amigos en común, todos ellos coincidían en que es un buen amigo al cual todos apreciaban. Por eso su hermoso exterior coincidía con su interior.

* * * * *

Hoy era el día en que Leeteuk, mi consejero de carrera y amigo, hablaría con Heechul. Aunque yo no le pedí que lo hiciera, esta situación me tuvo nervioso y ansioso.

Toda la mañana estuve pensando en lo que me dijo que haría sin poderme concentrar hasta que terminaron las clases. En todas las clases no pude hablar con Leeteuk y a la hora del almuerzo comí tan rápido, pues no quería estar en ése lugar cuando hablara con Heechul; que no tuve oportunidad de hablar con Hyung.

Pero a la hora de la salida no me libré, Leeteuk Hyung aprovechó que yo venía distraído pensando que no lo vería hasta el otro día, que me tomó del brazo para que no saliera del salón. Esperó a que éste quedara vacío, volteó un par de sillas para quedar de frente y se sentó solemnemente.

Me dio algo de temor su seria mirada, así que sólo atiné a sentarme frente a él, por mi mente pasó que lo que había hecho le causó problemas con Heechul. Pero después suspiró y relajó su semblante, pareciendo ahora algo avergonzado.

- Vamos a tener una salida este jueves y tienes que venir, Siwon. – habló de corrido y sin respirar, mi curiosidad preguntaba quiénes irían.

- ¿Iremos todos como siempre?

- No, sólo iremos dos parejas. – por dentro yo estaba bastante animado por lo que significaba.

- ¿De verdad? ¿Heechul acepto salir conmigo?

- Te conseguí una cita con nuestro Donghae, Kangin y yo los acompañaremos. –Leeteuk se sonrojó y comenzó a disculparse -. sé que te dije que te ayudaría con Heechul, pero él ya tiene algo con Hangeng, según él va en serio… cosa que yo ignoraba. – susurró ésto último, pero lo escuche -. Lo siento, Siwon.

- Pero a mí no me lo parece. – al parecer de nuevo mis pensamientos salieron en voz alta -. digo no se les ve juntos como una pareja… los he visto en fiestas y alguna que otra reunión.

- Yo también me di cuenta de eso, por eso creí poder ayudarte.

Leeteuk lo decía muy convencido, pero no le creía, siendo el mejor amigo de Heechul tenía que saber todo; algo no me estaba diciendo, pero ya no me importaba

- Pero ya vimos que no es así. – Leeteuk hablaba a modo de disculpa -. con lo raro que es Heechul le creo capaz de tener una relación así… extraña para muchos.

- Supongo que sí.

No me quedaba otra que aceptar lo que Leeteuk me decía, pero en el fondo estaba decepcionado por el resultado.

Para ninguno de nuestros amigos era desconocido que Hangeng no es alguien en quien se pueda confiar, su lista de conquistas lo delata. Sólo con Heechul parecía comportarse diferente, pero eso no les quitaba la preocupación de que terminara jugando con él.

Por eso todos teníamos la esperanza que no fuera nada serio, sobre todo porque esto que se decía de Hangeng, Heechul lo sabía. Mis pensamientos se despejaron un poco y otra duda apareció.

- Y… ¿por qué Donghae?

- Donghae… - Leeteuk pareció pensarse un poco la respuesta -. te voy a ser sincero, él me lo pidió.

- ¿Quién?

- Heechul me pidió que le hiciera una cita contigo, y así me ayudaría a mí con la tarea de buscarte pareja.

- Eso te dijo. – me molestó mucho que Heechul pensara que no pudiera conseguir pareja por mí mismo. Si me deje ayudar por Hyung, es porque tenía la esperanza que eso me ayudara a acercarme un poco más a él.

- La verdad es que Donghae es una linda persona. – continuó hablando Leeteuk de Donghae para tratar de convencerme -. Es buen amigo de Heechul y su protegido, incluso me dijo que no a cualquiera le sugeriría a su preciado Donghae.

- Qué honor. – dije irónico.

- ¿Estás enojado Siwon? – tomó mis manos tratando de animarme -. Enójate conmigo, lo merezco.

- … - negué con la cabeza pues no deseaba pronunciar palabra.

- Dale una oportunidad a Donghae, ¿en verdad te gusta mucho Heechul?

No sabía a qué venia ésa pregunta, pensé que ya habíamos dejado claro aquel punto.

- ¿Y eso qué tiene que ver ahora? él ya tiene pareja.

- Bueno, es que si Heechul ve lo bueno que resultas con Donghae. – insinuó, a lo que yo me giré a verlo extrañado -. Debes demostrarle a Heechul lo que se perdió. Es mi amigo, pero… necesita que alguien le haga ver lo mal que está.

Tenía sentido, Heechul no se dio la oportunidad de conocerme mejor y si andar con Donghae abría la oportunidad a que me conociera. Pero eso sería jugar con Donghae y yo no soy ése tipo de persona.

Heechul es todo lo que yo soñaba. No había podido acercarme tanto como yo quisiera a él, pero no perdía la esperanza que algún día lo hiciera. Con esto que Hyung me decía, mis esperanzas disminuían un poco.

¿Años de soñar estar a su lado terminarían de esta forma? Quizás no me creía lo suficiente para él. Sentí como algo se encendió en mi interior. ¿Cómo podía despreciar así mis sentimientos? No sé si fue por revancha, por demostrarle a Heechul lo equivocado que estaba, decidí aceptar salir con Donghae.

¿Qué más daba conocerlo? Al menos yo sí le daría una oportunidad, una real.

- ¿A qué hora paso por Donghae? – vi la cara de sorpresa de Leeteuk.

- Nos veremos en la entrada del centro comercial, mañana a las cuatro.

- Entonces mañana nos divertiremos mucho. – eso esperaba -. dijiste que seriamos dos parejas, tú irás con…

- Kangin.

Y antes que pudiera preguntar otra cosa, tomó su bolso y salió del salón, supongo que no quiso que me arrepintiera de mi decisión.

- En verdad espero no haberme equivocado. – murmuré antes de dejar caer mi cabeza sobre la mesa.

Desde ése día, Donghae se volvió más cercano a mí, lo cual hizo que toda la situación fuera más fácil, comenzando a saber más el uno del otro. Pensé que sería algo incómodo por cómo se dieron las cosas, pero no.

Donghae resultó ser un chico muy alegre y aunque tenía actitudes algo aniñadas, tenía un carácter muy decidido y extrovertido. Fue maravilloso descubrirlo, porque me ayudó a abrirme con él y también con los demás chicos del grupo.

Una cosa llevó a otra, cuando me di cuenta llegué a querer a Donghae y nos hicimos novios. Nunca pensé que él sería el primero en felicitarnos.

Sí, Heechul, el Hyung de mi actual novio. No me molestó tanto como pensé que sería. Aunque frente a Heechul no podía disimular que mi interés fuera más fuerte hacia él que hacia mi novio. Lo que me negaba a sentir, los sentimientos que reprimía ante Heechul, siempre terminaban saliendo al exterior.

Además de la felicitación de su boca recibí la advertencia de hacer feliz a su dongsaeng o me las vería con él.

- Ni lo digas. – le respondí abrazando a mi novio -. Quiero mucho a Donghae, es un gran chico. Debería agradecerte el que sugirieras a Leeteuk que nos presentara

Y no tuvo más que decir, pues no pensó que yo sabía esa información. Donghae me abrazó feliz para después besarme, pensando que su Hyung estaba convencido que era lo mejor para él y eso lo hacía muy feliz.

Todo marchó bien en los siguientes meses entre Donghae y yo. Lo quería. Sin poder pasar de él más de un día y a él le pasaba lo mismo. Se convirtió en mi primer noviazgo y mi primera vez. Aunque para él no lo era, eso a mí no me importó. No me importaría fuera quien fuera, el valor lo tiene su interior.

Además en esa área yo era un inexperto… Donghae gustoso acepto ser mi maestro.

___Flashback___

Llegamos a la habitación del hotel que conseguimos después de una de esas salidas con nuestros amigos, no sabía muy bien qué hacíamos ahí, pero Hae insistió. Estaba nervioso, pero Donghae… él estaba ansioso.

Donghae prácticamente me lanzó a la cama y se me tiró encima. Los besos empezaron en cuanto su rostro estuvo lo suficientemente cerca al mío. Con su lengua comenzó acariciar mis labios de manera lenta, como saboreándolos. Yo trataba de seguirlo y profundizar el beso, pero sin lograrlo, nos habíamos besado muchas veces; pero nada se comparaba con ese beso casi devorador de mi Hae.

Al terminar el beso, Donghae levantó su rostro dejando a merced de mis labios su cuello, bajé sin despegar mis labios de su cuello succionándolo con ansias, seguramente eso le dejaría marca. En un movimiento que no puedo describir, Donghae giró sobre sí mismo y me hizo quedar encima de él.

- Hoy es el día. – dijo sorprendiéndome.

- ¿Cómo?

- Deseo hacerlo contigo, hoy aprenderás hacerlo conmigo. – y al decir esto, mordió tímidamente su labio inferior en un gesto por demás tierno.

Tomé su rostro con las dos manos sosteniéndome con mis codos y le miré a los ojos, asentí y lo besé de nuevo.

Pude sentir cómo sus manos comenzaban a desabrochar mi camisa para después tocar la piel de mi pecho con sus manos. Yo me deje hacer mientras seguía con el beso, concentrándome en las sensaciones que sus caricias me provocaban, pero pronto dejé de sentirlo.

Hae me miraba desde abajo con sus hermosos ojos, sus manos se dirigieron a su camisa donde desabrochó dos de los botones.

- Continúa Siwon. – me pidió, pues deseaba que yo asumiera el papel del dominante.

Comprendí que deseaba que lo hiciera, así que comencé a desvestirlo. Sin mirarlo a los ojos, tan sólo contemplando la piel que se me iba revelando bajo la ropa, cuando terminé de desabrochar su camisa. Siguiendo sus indicaciones, me deshice de sus pantalones y de la ropa interior.

Recorrí su cuerpo con la mirada, Donghae era dueño de un cuerpo estupendo. Y a pesar de su actitud muchas veces aniñada, en esos momentos me excitaba, el deseo que despertaba en mí... me desconcertaba.

Quizás siendo mi primera vez, fuera normal sentirme de esta forma. Pero el calor que comenzaba a sentir con tal visión me invadió por completo, avergonzándome un poco.

Hae al ver mi vacilación, se abrazó a mi cuello tomando mis labios nuevamente, sumergiéndome más y más en el deseo. Cuando separó sus labios de los míos, suavemente, con sus manos empujó mi cabeza hasta su pecho. Al sentir aquel acto, comprendí lo que deseaba.

De modo que comencé a repartir suaves besos por su pecho, bajando lentamente pues las manos de Hae me seguían guiando. Y aunque mis caricias eran vacilantes, también eran excitantes; pues vi cómo Hae tuvo que agarrarse a la sábana cuando llegué a su entrepierna.

- Siwon… - escuché mi nombre en un suspiro de su boca -. ven aquí Siwon. – Hae me ordenó y abrió sus piernas para que yo me acomodara entre ellas.

Realmente no sabía qué es lo que pasaba por su mente, en ningún momento me compenetré con él esa primera vez. Yo estaba muy nervioso por no saber qué hacer y Hae estaba muy ansioso como para detenerse a mirarme, para tratar de establecer un lazo más allá de la pasión y el deseo que ambos sentíamos.

Pronto vi cómo se irguió sentándose en la cama y como sus manos fueron abriendo la cremallera de mi pantalón, para después sacar mi miembro escondido entre mi ropa interior. No estaba del todo erguido, pero eso no fue impedimento, pues Hae se encargó de despertarlo completamente con sus manos y su boca de manera experta.

En ese momento no me interesaba pensar, Donghae valía mucho más la pena que ponerme a pensar de dónde provenía tal experiencia.

La sensación de sentir su boca fue una locura, mis piernas flaquearon a pesar que estaba hincado sobre la cama. Su lengua recorrió toda mi extensión mientras sus manos apretaban mis nalgas para sumergirme más en su boca. Fue un corto momento que se hizo eterno para mí, pues si hubiera seguido habría terminado en su boca sin más remedio.

Nuevamente lo vi recostarse en la cama, acomodando sus caderas muy cerca de mí. De nuevo su voz se dejó escuchar.

- Siwon… hazlo… - escuché lo que me pidió, pero me quedé inmóvil pensando qué hacer.

Al sentir que titubeaba, Donghae se apoyó sobre sus codos y tomó con su mano mi miembro dirigiéndolo a su entrada. Cuando sintió que estuvo listo, colocó sus manos en mis caderas, tiró de ellas ligeramente instándome a que lo penetrara. Me avergonzaba un poco la situación, pero al no saber y no querer lastimarlo, me dejé guiar.

Pronto sentí que sus manos se alejaron para volver a recostarse. Tras otro momento de vacilación de mi parte, comencé empujar, penetrándolo lentamente. Cuando estuve totalmente dentro, Donghae tiró de mí hacia él para darme un beso, logrando que la nueva posición lo penetrara con mayor profundidad. Comencé a moverme, a entrar y salir de su cuerpo

Todo era nuevo para mí, excitante y me encontraba maravillado al sentir la presión del cuerpo de Donghae contra mí, el sentirme su dueño… fue increíble.

___Fin de flashback___

Mi noviazgo con Hae logró acercarme más a Heechul. Que a pesar del mal comienzo, después de eso comenzamos a llevarnos mejor. Hubo veces en que nos quedábamos solos o al final en las reuniones platicando horas y horas. Incluso más que eso, la última vez que nos reunimos Donghae y yo con nuestro grupo de amigos, Heechul y yo terminamos bailando.

Ese día, todos llegaron emparejados menos Heechul. Hasta su hermanito Sungmin llegó acompañado por alguien a quien no conocíamos.

Heechul es muy atractivo, no sólo en su exterior. Lo poco que hemos podido conversar y otro tanto que le he escuchado charlar con sus amigos, descubrí que es una persona muy valiosa, inteligente, divertida y aunque siempre está alegre, sus ojos no saben mentir.

Sé que los ojos de Heechul siempre dirán la verdad, así se le vea sonriendo, la tristeza de sus ojos no la puede disimular. ¿Que causará esa tristeza? Es la misma pregunta que me ronda desde ese día… desde unos años atrás. Esos mismos ojos tristes que deseo ver brillar.

Llegué a pensar algunas veces que era algo tímido, pues al quedarnos solos el solía quedarse callado, demasiado ensimismado. Yo provocaba la plática entre nosotros mencionando cualquier cosa, de ahí la plática se volvía entretenida. Me gusta su forma de pensar, ver que en esa cabecita hay pensamientos profundos y de interés.

Hae como les dije antes, es una persona muy hiperactiva y muchas veces no podía seguirle el paso; mientras él andaba por ahí cuando salíamos de fiesta, yo terminaba sentado. A Heechul le pasaba algo parecido, más últimamente que a Hangeng le daba por no llegar a acompañarlo, era entonces cuando a Heechul se le iba la energía y terminaba sentándose.

Pero el punto es que se me dificulta bailar con mi Hae, pues siendo él un experto estudiante de danza hacia pasos que un ser normal como yo en su vida haría. En este punto no había intermedios entre nosotros, no me molestaba. A menudo le dejaba ir a bailar por su cuenta, viendo su carita emocionada; cómo podría privarle de hacer lo que tanto le gusta.

Lo raro fue que con Heechul descubrí que bailar en pareja es acoplarse y hacer que el otro confié en ti siguiendo tus pasos moviendo nuestros cuerpos en un solo ritmo. También descubrí que bailar es una buena oportunidad de compenetrarte con el otro, que dejar a tu cuerpo fluir con la música se convierte en una danza cadenciosa haciendo que nuestros cuerpos se sensibilicen y entren en calor por el roce, el toqueteo entre ambos haciéndolo algo íntimo.

Ese día sin pensarlo, con todos mis sentimientos a flor de piel, me di cuenta que Heechul seguía gustándome y mucho, a mi corazón no lo puedo engañar. Sigue ocupando el primer lugar… si tan sólo él me hubiera dado una oportunidad.

¿Por qué estas dudas reaparecen cuando parecía que por fin mi vida amorosa tenía sentido? Y no sólo eso, el tiempo pasó tan rápido que llegó el fin de semestre. El estudiar medicina es de por sí una carrera exigente. Al llegar el fin de semestre todo se volvía complicado entre exámenes, trabajos, prácticas y uno que otro seminario me dejaba poco tiempo para dedicarle a mi novio.

Al principio pensé que Donghae comprendería que invirtiera más tiempo en mi carrera que él, pues Donghae estudiaba para preparador físico y danza. No se podía comparar el tiempo que él requería para sus estudios, con el tiempo que yo requería para los míos.

Además Donghae era de segundo año y yo estaba en mi penúltimo año, a pesar que me esforzaba por pasar tiempo con él y el poco tiempo que tenía; yo intentaba que fuera de calidad para los dos… no fue suficiente.

Mi noviazgo se fue deteriorando por esto poco a poco, ya que Donghae me exigía más tiempo para estar juntos, para las fiestas, reuniones con nuestros amigos. Mientras yo me presionaba para terminar todo y poder estar con él al grado de sentirme estresado por no dormir lo suficiente, lo que finalmente me llevaba a no disfrutar el tiempo con Donghae.

Llegué a recibir reclamos de su parte cuando por alguno de esos motivos yo llegaba tarde a alguna reunión dejándolo solo y entonces comenzábamos a discutir. Yo no deseaba muchas veces llegar a eso, pero escuchar cómo Donghae me reclamaba exasperado y gritándome me hacía enojar, creo que a cualquiera con sangre en las venas le sucedería.

Parecía no notar mis esfuerzos por estar con él. Muchas de esas discusiones sus amigos fueron testigos, pues a Donghae no le importaba el lugar donde nos encontrábamos para comenzar con la discusión, por más que yo le hacía ver que no era el momento, jamás cedía.

Y otras tantas Heechul nos llegó a ver y escuchar, cuando esto sucedía Donghae salía corriendo a sus brazos buscando refugio y llorando como un niño. Su Hyung se lo llevaba lejos de mí para que no siguiera haciéndolo llorar. Estoy seguro que para Heechul y todos sus amigos yo era el malo en la relación, la persona que terminaba lastimando al menor, ya que era él que lloraba y sufría.

Sólo Leeteuk y Kangin eran testigos de lo mucho que me dolía lo que Hae hacía, ellos siempre terminaban defendiéndome de las falsas acusaciones que los demás hacían contra mí. Finalmente todo terminó por romper mi relación con Donghae días antes del fin de semestre.

Después de todo lo que sucedió entre él y yo, afectó mi amistad con los demás chicos y me alejó enormemente de Heechul. Sufrí mucho y en silencio, pues a pesar de todo vivimos bellos momentos juntos. Donghae fue alguien muy especial en mi vida… en realidad llegué a quererlo mucho.

C o n t i n u a r a . . .