Mmmm… Oneshot


Título del Oneshot: "Mmmm..."
Autor(a): Lunis HeeChan
Parejas: SangJi (SangxJiAn), UngTae (UngjaexTaeho), DongUp (DongjunxJeUp)
Grupos: IMFACT y ZE:A
Tipo: Yaoi, AU
Género: Slash, Fluff, Comedia.
Clasificación: PG
Advertencias: Vomitaran arcoíris (?)
Comentario de la autora:
En serio que me encanta el sonido que emite Taeho cada que come algo delicioso y a mi parecer, a Ungjae también le gusta, porque tiende a alimentarlo el mismo, aunque Taeho no quiera. Como lo hizo en esa cita que tuvieron ambos. JiAn y Sang se me hacen un par de locos que se entienden mutuamente, pero también son tiernos y se procuran el uno al otro.
Es el primer shot que escribo de IMFACT. Espero que en el futuro escriba muchos más y vaya definiendo mejor las personalidades de todos, así que sean buenas conmigo.

Disfruten…


Lee Sang POV

Observo a mi amigo terminar de acomodar las colchonetas y pelotas que utilizaron en el entrenamiento de hoy los del grupo de gimnasia. Aún le falta pulir los espejos, limpiar los pisos y pasar a entregar la llave a JeUp, para el próximo entrenamiento.

¡Dios! ¡Ungjae ni siquiera pertenece a este grupo!

En nuestra escuela existen los grupos extracurriculares, que por lo general, elegimos de acuerdo a lo que nos gusta hacer. Por ejemplo, yo elegí danza, el presidente del club es un chico muy lindo, aunque no fue por eso que me inscribí ya que me gusta bailar; y mi amigo Ungjae está en el grupo de música. Los grupos deportivos tienen entrenamiento dos veces por semana y los grupos de artes, como lo son música, teatro, pintura y todos esos, son tres veces por semana.

Y mi amigo se lo pasa aquí limpiando dos veces por semana. Se supone que cada presidente del club se hace responsable de que todo lo que utilicen y el salón quede en orden y limpio. Obviamente el presidente no lo hace solo, siempre debe ser acompañado por un compañero más para hacer las labores, elegir siempre a uno diferente por entrenamiento es lo justo. Sin embargo las veces que he venido aquí a visitarlo, siempre está solo haciendo todo.

Frunzo el ceño al pensar que JeUp este abusando de mi amigo o sea un chantajeador, porque solo así me explico que Ungjae esté haciendo esto por él.

– ¿Por qué no lo hace JeUp? –pregunto con mis brazos cruzados.
– ¿Y por qué no me ayudas? –me responde con otra pregunta mi amigo mientras deja de hacer lo que estaba haciendo.
– No es mi deber. –bufo– Pero si el de JeUp.

Se queda en silencio un momento, le da los últimos toques al espejo y comienza a guardar las cosas de limpieza en el pequeño guardarropa que tienen. Lo observo recoger sus cosas y las llaves, para después comenzar a salir del salón.

– ¡Hey, espérame!

La verdad es que no siempre lo vengo a buscar. El presidente del club de danza, JiAn, y yo, nos hemos hecho cercanos. Creo que mi técnica de acoso por fin dio frutos, o quizás se hartó de que lo no le quitara los ojos de encima en la lejanía. Lo mejor de todo es que me he dado cuenta que también le gusto.

JiAn es un chico hermoso, muy hablador, pero cuando no está rodeado de gente es muy callado y ensimismado. Parece decir muchas cosas, todo, cuando en realidad las cosas importantes se las guarda para sí mismo. No así en lo que concierne al club. Cuando se trata de dejar al club en alto, es bastante exigente y profesional en lo que hace. Admiro su forma de ser.

Observarlo tantas horas me ha hecho saber esto y como su futuro novio, procuro estar con él cuando lo necesita y apoyarle, hacer lo que sea necesario para hacerme notar por JiAn y que se dé cuenta que soy el chico perfecto para él.

En cambio Ungjae, que se supone le gusta el chico del piano de su salón de música, no está haciendo algo como esto por él.

Se puede decir que Ungjae canta horrible. Si lo aceptaron en el club de música, es porque le gusta componer y es bueno en lo que hace. Además toca algunos instrumentos y se ha encargado de la música de los dos últimos recitales, lo último que ha hecho es componer la pieza que utilizara el chico piano. Mi amigo también es un prodigio a su manera.

Taeho es un chico prodigio en la música, canta como un ángel y toca varios instrumentos pero su especialidad es el piano, en el que se está preparando para su próximo solo en el recital. El canto se lo deja a JeUp que también canta. Creo que es el único inscrito en dos clubs, nada raro en JeUp.

– Como que tú y yo hemos tenido casi el mismo pensamiento a la hora de elegir clubs. ¿No Ungjae? –le pregunto a mi amigo mientras vamos por el pasillo hacia fuera de la escuela.
– No sé tú, pero yo si quiero aprender. –hago caso omiso a su comentario.
– Mi JiAn es hermoso… Taeho es… No lo he tratado mucho, pero me han dicho que ese chico es a veces bastante difícil de entender. –Ungjae se detiene a medio pasillo, casi me hace chocar con él.
– Ahí está su encanto, –Ungjae tiene una gran sonrisa cuando lo dice–, Hacerse cercano a él y conocer su verdadero yo, ha sido toda una proeza muy satisfactoria.
– ¡Estás loco! –choco su hombro y comenzamos a reír para continuar caminando–. Pero aun no me has dicho porque haces el trabajo de JeUp. ¡Somos amigos! Si te está molestando voy a golpearlo.
– Es cinta negra, no podrías. –pone su mano derecha sobre mi hombro burlándose de mí–. Eso y que su novio, Dongjun, nunca nos perdonaría que le tocáramos un pelo. –me estremezco al escuchar ese nombre.
– ¿Entonces?
– Nada de lo que piensas Sang. Resulta que JeUp es muy bueno cocinando, hace unos lunchs deliciosos y es ahí donde negociamos. Dos lunchs a la semana por dos días de limpieza, es un buen trato para mí. –Ungjae se encoge de hombros.
– ¿Y qué ganas con eso? Claro, además de comer delicioso como dices.
– Pues resulta que a Taeho también le gusta, le gusta mucho comer delicioso. –lo escucho suspirar.
– ¡Aah! Mi amigo, eres un genio. Mira que conquistar al chico piano por el estómago. –rodeo sus hombros con mi brazo–. ¡Pillín!
– Tú no entiendes Sang, es más que eso. –Ungjae sacude su cabeza–. Necesitarías verlo para entenderlo.
– El chico piano es lindo, ¿eh? –veo sonreír a mi amigo–. ¿Cuándo te traerá un lunch JeUp?

La charla continuo hasta que tuvimos que separarnos para ir a nuestras casas. Afortunadamente somos vecinos.



* * * * *

– ¡Sang! ¡Por aquí! –Ungjae me grita a lo lejos en medio del gran jardín de la escuela. Justo debajo de un gran árbol donde hay mesas dispuestas para comer, leer o realizar trabajos escolares.
– ¿Vamos a ir para allá? –JiAn pregunta.
– Tú nada más disfruta, yo cuidaré de ti. –le digo tratando de sonar lo más serio posible, cosa que lo hace reír.

Fui interceptado por él a medio pasillo. JiAn salto a mi espalda, enredó sus brazos alrededor de mi cuello y rio divertido al verme sorprendido. Y aunque lo llevo a cuestas, creo que salí ganando, ya que no lo he dejado bajar. Sentir su cuerpo pegado al mío está siendo una agradable experiencia.

Camino hasta donde Ungjae me ha llamado. Puedo ver que tiene algunas viandas sobre la mesa y también que se encuentra acompañado por Taeho, el chico piano. Será la primera vez que JiAn conviva con Ungjae y por mi parte, sería la primera vez que estaré cerca de Taeho. Espero que JiAn no se sienta incomodo por esto.

Llegando a la mesa, dejo bajarse a JiAn para qué tomara asiento a un lado de Taeho y yo hago lo mismo al lado de Ungjae. Después de las presentaciones, resulto que tanto JiAn como Taeho, ya se conocían.

En medio de la charla, comenzamos a distribuir las viandas de comida junto con los palillos para comer. Rollitos, carne guisada, verduras saleadas, una ensalada con pasta, arroz frito y blanco, y algo de fruta también. Suficiente comida para los cuatro.

– Todo se ve delicioso. –la emoción en el comentario de JiAn, me dice que hice bien en invitarlo a venir.

Ya hemos comido juntos, más siempre a parte de Ungjae, ya que tenemos nuestros propios asuntos a pesar de ser amigos. Eso nos funciona bien.

– Vamos, come. –JiAn me da su primer bocado con sus manos directo a mi boca.

No puedo dejar de ocultar una sonrisa boba, tanto como no puedo dejar de verlo. Lo mejor es la sonrisa de JiAn, me provoca, lo sé. Creo que de hoy no pasa que sea mi novio.

Nos quedamos en nuestro mundo por un momento, hasta que…

– Mmmm… –un sonido satisfactorio me hace girar la cabeza. Ungjae le ha dado de comer a Taeho en la boca con sus palillos. La cara del rubio se sonrosa mientras sus ojos se iluminan al probar el bocado.

El rubio parece disfrutar mucho el bocado emitiendo soniditos. Ungjae con sus palillos en la boca, sonríe sin dejar de ver a Taeho, al verlo masticar feliz lo que le ha dado.

Taeho es tan…

– Adorable... –estoy seguro que he dejado caer la comida de mis palillos.
– Mmmm… –Ungjae no pierde el tiempo y mete otro bocado a la boca del rubio, y de nuevo al terminar, los mismos palillos van a parar a su boca. De pronto siento una mano sobre la mía.
– Si, ese efecto causa. –es JiAn que está riéndose de mi reacción–. Taeho es una cosita dulce comiendo, pero es la primera vez que lo escucho emitiendo esos sonidos.
– ¡Dan ganas de apachurrarlo! –le digo casi estremeciéndome.

El rubio tiene una actitud tierna al aceptar todo lo que Ungjae pone en su boca sin negarse y emitir esos sonidos de satisfacción, adorable y feliz de comer algo tan delicioso. Ungjae no mentía cuando dijo que JeUp es muy buen cocinero.

– Ahora entiendes porque lo hago. –Ungjae me susurra. Más que una pregunta, es una afirmación. Asiento con la cabeza. – Taeho solo hace esos soniditos cuando come algo hecho por JeUp, ya lo comprobé, por eso no puedo dejar de limpiar por él.
– Ya lo veo. –y lo entiendo, porque yo mismo estoy pasando un buen momento con JiAn por esto. Ser alimentado por las manos el objeto de mi acoso desde que entre al curso, es algo que no había pasado y pienso volver a repetirlo–. ¿Cuándo será el próximo día de limpieza? –le pregunto.
– La próxima semana, porque está ya tuvieron los dos días de entrenamiento. –un poco decepcionado de tener que esperar tanto, pero seguro de lo que voy a hacer.
– Lo he decidido, voy ayudarte. –Ungjae se ríe mientras palmea mi hombro, divertido por la situación en la que ambos nos metemos por nuestras obsesiones, Taeho y mi JiAn.
– Mmmmm…

No lo resisto. Me levanto de la banca y apresurado, camino hacia el otro lado de la mesa, solo para envolver en un abrazo a ese rubio encantador ante las risas de JiAn y del propio Taeho, pues Ungjae no es muy feliz por esto. Si el rubio no deja de hacerse el tierno con eso, no creo que resista mucho en volver a hacerlo y seguro que recibiré un buen golpe de mi amigo. Al menos a JiAn, mi futuro novio, le parece divertido.

Fin

Comentarios

  1. Que ternura de niños son tan inocentes que provocan achucharlos.

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  2. Se nota que son los bebes... todo lindo. Y leuendo y riendome, ese Ungjaae no es un bobo jajajaja.
    Was cute :-)

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    1. No se preocupe comadre, van a ir aumentando de intensidad, ya lo verá.

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  3. HOLA!! ES MUY LINDO TAN TIERNO Y TAN INOCENTE ME GUSTO GRACIAS POR COMPARTIRLO BYE

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