ENTRE LA IMAGINACIÓN Y LA REALIDAD _ Parte 22



Los dos días de grabaciones habían terminado. Jeff no estaba cansado físicamente, sin embargo, ver llorar a Code no se sintió nada bien. Su corazón había dado un vuelco al ver que su pequeño no podía calmarse, sabiendo que esas lágrimas eran en parte por su culpa.

Jeff podía parecer tranquilo, pero no lo estaba. Quizás su corazón estuviera más tranquilo porque ahora mismo, su pequeño descansaba sobre sus piernas en un sueño tranquilo, que esperaba fuera reparador. Code lloró mucho y las emociones usadas en la escena entre el KimChay lo dejaron agotado.

Al llegar al edificio de B O C, se instalaron en una de las oficinas para poder descansar. Jeff pudo ver que desde que salieron de la locación Code se notaba agotado. En el camino no durmió nada, se estaba haciendo el fuerte, pero Jeff que se la vivía atentó a su pequeño no lo iba a dejar pasar, iba hacerlo descansar.

Encontró un sofá enorme y cómodo en un lugar apartado, poco le importó que la oficina perteneciera a alguien. Se instaló en uno de los lados del enorme sofá, jalando consigo a Code para que se sentara a su lado, así pasó poco tiempo antes de que Code cayera rendido al sueño.

Su pequeño había quedado tendido sobre el sofá mientras su cabeza descansaba sobre sus piernas. De esa forma Jeff podía observar su hermoso rostro mientras dormía.

— Nunca fue mi intención lastimarte con mis indecisiones. – dijo Jeff acariciando suavemente los cabellos de Code — Dios, esto está mal, pero ya no puedo alejarme, no quiero alejarme de ti nunca más. Al menos que tú me lo pidas.

— Y ¿Por qué te lo pediría? – escuchó a Code murmurar, sorprendiendo a Jeff.

— Pensé que estabas dormido.

— Me siento cansado, pero no puedo dormir. – dijo Code algo somnoliento — Tampoco me dejan dormir tus pensamientos en voz alta P'.

— Lo siento. – se disculpó algo avergonzado Jeff.

— P', si es mi decisión alejarte de mí, debes prepararte para estar mucho tiempo a mi lado. – Ojalá fuera tan fácil, pensó Jeff.

Había muchas cosas en contra de lo que pasaba entre ellos y si se llegaba a saber de su relación, todo sería peor. Obviamente asumiría su responsabilidad, solo esperaba que Code soportara lo que se vendría encima con esta situación.

— Solo debes dejar de pensar p'Jeff. – esto último lo dijo bostezando.

— Y tú debes dormir, todavía es temprano, descansa un poco y después te llevaré a casa. – aún era temprano, no tendría que llevar a Code hasta antes de las 10.

— ¿Me llevarás?

— Lo haré, ahora duerme. – dijo Jeff reanudando las caricias sobre su cabello.

— No quiero. Quiero estar despierto para estar con P'. – esto hizo sonreír a Jeff. Code tomó la mano libre de Jeff y la llevó hacia su pecho entre sus brazos.

— Vamos, cierra tus ojos. – dijo Jeff a lo que Code obedeció.

De la boca de Jeff comenzó a salir una canción, unas letras que se habían formado en su cabeza hacía poco, de las que estaba seguro su pequeño era el responsable. La canción todavía no tenía forma ni estaba terminada, pero le nacía cantársela a quien la inspiraba.


Yak ja song took pleng hai ter nan dai fang

"Quiero enviarte mi playlist del día"

Yak ja chae hai ter dai an bpen kohkwam

"Quiero compartírtelo para que lo leas como mensaje"

Took took kwam ruseuk lae took took reuangrao ti chan

"Quiero que sepas cómo me siento"


— ¿Estas cantando? – preguntó Code encantado, volteando su cabeza hacia arriba para mirar a Jeff.

— Sí. ¿Te gusta?

— P'Jeff, me gusta.

— Entonces cierra tus ojos y escucha, seguiré cantando para ti hasta que duermas.

Code hizo caso, cerró sus ojos, acomodó su cabeza de nuevo en una posición cómoda sobre las piernas de Jeff, esperando escuchar su dulce voz y esa canción que no había escuchado antes. Porque si algo sabía bien Code de Jeff, eran todas sus canciones publicadas, ya que al ser su fan es lo primero que debía saber.

La letra era como ninguna otra e incluso, algunas partes no tenían sentido o coherencia, como si su P' la estuviera inventando en el camino. Sin embargo, las letras se escuchaban lindas a su oído y la voz de Jeff era dulce, melodiosa y solo para él. Su propio concierto privado del talentoso Jeff Satur.


Cause baby it's, baby it's you

"Porque cariño, cariño, eres tú"

Babe it's you

"Cariño, eres tú"

Kon ti chan nan yom hai took took yang

"Siempre te dejo ser cualquier cosa"


Code sonrió para sus adentros satisfecho con todo lo sucedido en el día. Había llorado sí, y mucho este día, pero también había sido muy feliz, pues Jeff por fin había abierto su corazón para él. Code por fin pudo saber lo que guardaba su corazón, sus temores y porque lo había alejado tantas veces de su lado.

*

"No pienses que no eres suficiente para mí. Cada vez que te miro, no importa como haya amanecido, verte me hace feliz, no sé en qué momento se dio, no lo planee. Y si te has preguntado si tengo miedo, la respuesta es sí. Tengo miedo. Miedo de perderte, miedo de lastimarte, miedo a que lo que digan los demás te afecte y no pueda protegerte de eso. Había decidido guardar mis sentimientos pero no puedo... ¡maldita sea! ... Me gustas Code. Lo siento. "Quiero que sepas cómo me siento"

*

Entonces entendió un poco más a su P', de que tuviera miedo sobre su relación. Jeff lo miraba pidiendo ser perdonado y Code no podía perdonarlo porque nada era su culpa, porque al ser mucho menor que Jeff, este no se había atrevido a hablarle con la verdad y de eso no podía culparlo, ya que su edad los condicionaba mucho.

Sin embargo, el saberlo le dio la oportunidad de demostrar a Jeff todo el amor que sentía por él y así lo hizo Code, no solo sus acciones decían cuánto lo amaba, su mirada también.

No supo en qué momento Jeff se acercó tanto, que sus rostros quedaron tan juntos. Code intentó no demostrar indecisión a pesar de su poca experiencia y controlar su nerviosismo al notar como su P' le miraba los labios. No quería terminar arruinando el momento y lo necesitaba tanto, porque sería la confirmación de sus sentimientos hacia él.

Las palabras sobraron y de pronto los labios de su p'Jeff estuvieron sobre los suyos, un roce de labios que a Code le pareció increíble la sensación de su primer beso, y estaba seguro que en su vida olvidaría ese momento.

De pronto un suspiro salió de su boca antes de caer en un dulce sueño.


Mae bpen dai piang kae ngao tao nan

"Y yo, una sombra"

Baby it's you, baby it's you

"Cariño, eres tú, cariño, eres tú"

Lae ta teung wan ti ter dtong gan krai, kae mong long ma dtrong ni chan ro

"Tu felicidad es lo que importa, no mi tristeza"


Jeff sonrió al ver a Code profundamente dormido con una bella sonrisa en su boca, la misma que había besado unas horas antes. Pudo sentir los labios de su pequeño temblar bajo el tierno roce de sus labios y estaba seguro que ese era su primer beso, cosa que Code le confirmó después con entusiasmo.

"Me alegra que mi primer beso haya sido contigo p'Jeff "... Y está sola frase, trajo de nuevo pensamientos turbios a Jeff. ¿Acaso estaba tomando demasiado de su pequeño?

Recordando el viaje en auto de regreso a B O C, el cual les dio la oportunidad de charlar un poco más en privado, ya que los dos venían solos en el coche de Jeff. Code confesó que él también se sentía un poco culpable de sus sentimientos.

"Siento ser el causante de tus preocupaciones p'Jeff, por mi edad, sé que solo puedo traerte más problemas que felicidad".

Jeff trató de alejar esos pensamientos de su cabeza, no quería que su pequeño pensara en nada que no fuera su felicidad por el momento, Code merecía pura felicidad. La misma que había traído a la vida de Jeff. Siendo el mayor, ya pensaría Jeff que hacer para no meterse en problemas o hacer que su relación se fuera por un hoyo.

Lo único que tenía seguro es que no deseaba volver a meter la pata como antes, aunque conociendo su temperamento, Jeff no estaba muy seguro. Más si se volvía posesivo de su pequeño como Tong le había asegurado que se estaba volviendo.

Al observar a Code dormir, tan bello y tranquilo, Jeff sabía que toda la energía que emanaba cuando estaba despierto le daría uno que otro dolor de cabeza. En realidad, ese es uno de sus encantos y por lo que ese niño lo tenía como bobo. Con un poco más de edad, Code lo tendría enredado en su dedo sin escapatoria como se lo aseguraba él mismo.

"En unos meses más cumpliré dieciocho años. Tal vez esto no será suficiente P', pero al menos ya no será tan problemático para ti manejar nuestra diferencia de edad ante los demás y yo podré estar a tu alrededor."

Sin embargo, Jeff estaba seguro que entre más edad tuviera su pequeño, menos tiempo pasaría juntos. Porque Barcode necesitaba brillar, mostrar al mundo el talento que poseía y encantar a todos con su personalidad. Y para eso, Jeff lo alentaría y apoyaría en todo, con su experiencia le guiaría para que nada le fuera difícil lograr.

Le daría a Code todo el apoyo que en el pasado a él no le dieron, cuando recién comenzaba su sueño, sus padres fueron los únicos que estuvieron ahí para él.

Y después de esa larga charla ahí estaban, con el bello rostro de su pequeño descansando en sus piernas. En realidad, Jeff no llevó a Code a casa porque deseaba estar un poco más con él y también, darle tiempo para que se calmara lo suficiente. Estaba seguro que Code haría lo que se habían propuesto para cuidar su amor, esto, hasta que él tuviera la suficiente edad y estuviera seguro de que deseaba continuar.

Lo mejor por el momento estaba en disfrutar el presente, lo que estaban viviendo, de eso Jeff estaba seguro.


Baby baby

"Cariño, cariño"

Wang wa ter ja daiyin bang na

"Espero que escuches esto"

Ti chan koi grasip kang huu

"Escucha lo que digo"

Bok wa han mong ma sak ti yak hai ter dai ru wa mi kon kon neung ti kae ter yu dtrong ni

"Mis rodillas se debilitan, mi corazón late solo por ti"

Dtae ying payayam ter ying mai sonjai

"Pero cuanto más lo intento, más se agota mi esperanza"


Jeff continuó cantando las últimas letras que salieron de su mente y corazón, observando al pequeño receptor dormir plácidamente, sin darse cuenta que alguien los observaba desde la puerta de la oficina. No fue consciente Jeff de esto, hasta que escucho pasos adentrándose y parar muy cerca del sofá donde estaban.

— Hola p'Mile.

— Hola Jeff. – saludo Mile. — Esa ha sido una canción muy linda.

— Aún no es una canción, son solo algunas letras que tengo en mente. – le aseguró Jeff volviendo su atención a las caricias sobre el cabello de Code.

— Pues me gustaría escuchar esas letras convertidas en canción alguna vez, son muy bellas, además que tienes una buena fuente de inspiración. – dijo Mile señalando a Code, a lo que Jeff solo pudo sonreír.

— Lo intentaré P'. – en ese momento Code se removió un poco en su posición.

— ¿Día difícil, eh?

— Un poco sí. Más para él. – dijo Jeff señalando a Code. — Lo dejaré descansar un poco más y después lo llevaré a casa.

— Muy bien. Y sobre lo otro, piénsalo bien, sería una muy buena canción. Quisiera escucharla completa alguna vez.

Y con esas palabras, Mile salió de la oficina dejándolos solos, estaba seguro que Jeff estaría agradecido de que lo hiciera y no volviera interrumpir, a riesgo de despertar a Barcode.

Lo que Mile vio le dio más o menos una idea de lo que pasaba, sin embargo, lo que le confirmó todo, fueron aquellas letras que Jeff le cantaba al más pequeño del cast. Se había quedado un poco al pie de la puerta escuchando las últimas letras de lo que parecía una canción muy bella. Jeff tenía talento.

Mile siguió en busca de alguna otra oficina que pudiera ocupar, necesitaba encargarse de estudiar su guión para las próximas escenas que tenía que grabar, las cuales no serían con Apo, sino con los actores mayores del cast. Debía ser perfecto para no hacerle perder el tiempo a sus mayores.

Continuó caminando por los pasillos cuando de pronto escuchó un golpe detrás de una puerta, se trataba de otra de las oficinas de ese piso que quizás podría ocupar si la persona dentro se lo permitía. Mile intento abrir la puerta, pero no pudo entrar porque la puerta se encontraba asegurada.

— Disculpa, ¿puedes abrir? - y nadie respondía al llamado de Mile.

Siguió tocando y tratando de abrir por un rato más hasta que se dio por vencido. Quien estuviera adentro al parecer no deseaba abrirle. O tal vez, no era nadie y el ruido hubiera provenido de otro lugar. De cualquier forma, Mile no se iba a quedar averiguarlo, mejor iría a buscar a Apo para que le ayudará a estudiar su guión, quién mejor que él para ayudarle y de paso, estaría un tiempo con su amor.


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希 HeeChan

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