ENTRE LA IMAGINACIÓN Y LA REALIDAD _ Parte 33


Las grabaciones se sienten diferentes cuando la mayoría del cast se involucraba, justo como las escenas que debían de hacerse en la locación que hacía de la mansión de los Theerapanyakul, aunque el área más bulliciosa sin dudar era la sala de los guardaespaldas. Los chicos suelen tener demasiada energía.

Justo como Nodt repasando sus diálogos antes de su escena.

— Contamos con una línea telefónica central para asuntos urgentes. Puedes usar la vía central. – tanto Apo como Peter lo miraban divertidos repetir sus diálogos algo exagerados, que ya estaban más que aprendidos.

Bajo la atenta mirada de Peter que a lo lejos lo cuidaba, aunque no todos podían notarlo, pues este no se relacionaba mucho con Nodt cuando estaban en los sets de grabación, más cuando era necesario, se pegaba al menor como su sombra. Tal como había sucedido cuando se sentía mal.

Peter aún recordaba la primera vez que hablaron en uno de los primeros talleres donde todos los guardaespaldas estaban citados. Nodt se apareció temprano tal como él, cosa que a Peter le pareció extraño, pues los jóvenes no suelen ser puntuales y mucho menos llegar horas antes.

— Estoy nervioso. – comenzó a explicarse Nodt — Me levanté temprano y como ya no pude dormir, aquí estoy. No pensé que hubiera nadie más. No quiero molestar P'. – se veía tan preocupado en realidad, Nodt no se parecía a ningún otro que hubiera conocido Peter y tampoco podía recordar ninguna otra ocasión en la que hubiera deseado tanto poder tocar a alguien, tratar de tranquilizarlo y hacerle saber que todo estaría bien. Así que se dejó llevar y lo hizo, solo por Nodt.

Desde ese día Peter ha estado perdiendo la cabeza, sin saber muy bien cómo lidiar con sentimientos así, ya que nunca había pasado con un chico tan joven, había intentado alejarse, pero... el chico se convirtió en alguien especial para él no lo podía negar, y tampoco quería hacerlo ya.

Y Nodt aceptaba sus sentimientos, Peter se daba cuenta por como actuaba a su alrededor y por cómo recibía sus atenciones, de esta forma funcionaban por ahora.

Nodt se había recuperado de su dolor de cabeza, el descanso y cuidado de Peter le ayudaron mucho. Su energía regresó algo desbordada, listo para lo que seguía y esperaba grabar sin contratiempos, y mientras tanto jugueteaba con la cámara que se encontraba grabando los detrás de cámaras de la serie.

— Esto no es la calle, no traigas tus malos hábitos aquí Porsche, ¿entiendes? – Nodt continuaba diciendo sus diálogos a través de esta cámara.

Definitivamente se encontraba muy enérgico, cuando Tong se lo volvió a encontrar, Nodt seguía enfrascado en el repaso de sus diálogos, un consejo que había recibido de Peter el día que lo conoció.

"Repasa tus diálogos en voz alta, donde sea y cuando sea, te ayudará a pronunciarlos bien y a la entonación que debes dar", eso le había dicho.

— Gracias, esta no es tu casa. – ya que se encontraban en el set de los guardaespaldas, Nodt se encontraba improvisando ante la cámara — No vengas a ver la serie aquí.

— Entonces, ¿Quién soy yo? – dijo Tong entre sorprendido y divertido hacia la cámara.

Tong no supo cómo actuar, ya que Peter continuaba alrededor y no quería tener ningún problema con él, además se estaba divirtiendo al igual que nong Nodt.

A lo lejos, Job que no se perdió la escena, terminó acercándose a Tong, defendiéndolo de Nodt.

— Hola, senior. – Job llegó directamente a abrazar a Tong con delicadeza.

— Aquí vienen los minions, el secuaz.

— ¿Qué diablos estás hablando? – continuó Job defendiéndolo de Nodt.

— Lo siento. – Nodt dejó de jugar al notar a Job más interesado en Tong que en otra cosa, pues Job no dejaba de abrazar a Tong, con su brazo rodeando los hombros del mayor, que lo hacía ver pequeño a su lado.

— Hoy mi jefe está muy lindo.

Algo sonrojado, Tong hizo una señal con sus dedos de forma linda para Job y Nodt, que no dejaban de mirarlo haciéndolo el centro de atención. Y es que Job decía la verdad, Tong había elegido un traje negro que ceñía bien su cuerpo y le sentaba como si fuera una segunda piel.

Afortunadamente, el llamado hacia los actores que hacían de guardaespaldas sucedió, Job y Nodt tuvieron que irse, y también la cámara que grababa los detrás de cámaras, ya que Tong seguía sonrojado por las bromas de Job.

— No sé qué le pasa a este chico. – iba quejándose Tong por los pasillos del set, pues ya no le quedaba nada que hacer ahí. Mejor se iría a casa antes que alguna otra cosa rara le sucediera.

Estaba por irse, cuando una mano cubrió su boca y otra lo tomó de la cintura, arrastrándolo a un lugar solitario. Sin embargo, Tong no se asustó, ya que él conocía esas manos y ese agarre lo suficientemente bien. Así que cuando estuvieron en un lugar seguro y su boca fue liberada, una pícara sonrisa apareció en el rostro de Tong.

— Job tiene razón, hoy estás muy lindo. – susurro la persona en su oído.

— ¿Escuchaste? ¿Cómo es que estas aquí si no tienes llamado hoy?

— Tengo que cuidarte. – Tong no resistió más y se giró en sus brazos, quedando de frente a la persona que le gustaba, rodeándolo con sus brazos.

— ¿En serio? Pierdes tu tiempo, - dijo Tong golpeado el pecho del otro con su puño — Y Job también, los halagos en público me avergüenzan, lo sabes.

— ¿Y tú sabes lo guapo que eres? – murmuró la otra persona mientras Tong ponía sus brazos sobre él alrededor de su cuello, quedando frente a su boca no dudó en posar suaves besos sobre sus labios.

Y es que había de halagos a halagos, más si salían de la boca de su persona especial en la intimidad del momento, justo como en estos momentos.

— No me gusta que estemos tanto tiempo separados mientras grabamos. – continuó diciéndole a Tong mientras cerraba sus ojos al sentir el delicioso contacto de los labios de Tong con los suyos.

Durante los últimos dos días no se habían visto para nada, pues solo Tong tenía llamados a grabar, dejando a la otra persona solo en su departamento extrañándolo horrores.

Y aquí estaban, escondidos en una habitación desconocida, fue entonces que Tong se dio cuenta del estuche de lo que parecía una guitarra estaba en el suelo con el nombre de la persona que tenía entre sus brazos.

— Sabes qué es lo mejor. – dijo Tong acariciando su cabello, y al ver como el otro lo miraba con tristeza, llevó una mano a su mejilla — Ya estaremos juntos en cuanto mis llamados terminen y mientras tanto, nos veremos en el set.

Tong solo pudo escuchar un gran suspiro de su persona especial.

— ¿Cómo puedo pasar mis días sin tocarte? – Tong lo escuchó murmurar y después sintió como le rodeaba la cintura con sus brazos — Es una tortura estar en el set.

— Nosotros... estaremos juntos.

— Pero no puedo tocarte.

Tong suspiro pues él también lo extrañaba y estaba siendo tan duro, aunque tampoco podía prometer mucho sobre su situación en público, había otra forma de compensarle.

— Estamos juntos ahora... haré lo que sea para compensarte y darte fuerzas para resistir un poco más.

— Quiero hacerte el amor. – la otra persona susurro contra su boca, antes de mordisquear su labio inferior.

La sonrisa de Tong invadió el espacio, esos jugueteos y lo infantil que podía ser, así como lo necesitado y amoroso que era con él, es lo que lo tenía loco de amor por su persona especial. Esos momentos junto a él no los cambiaría por nada.

— Entonces, salgamos de aquí. – fue la loca sugerencia que dio Tong, misma que no fue desaprovechada.

La mano de Tong fue tomada por la fuerte mano de su persona especial y comenzaron alejarse del lugar por la salida trasera del edificio, cuidando que nadie los viera o reconociera. Su felicidad era demasiada en esos momentos como para dejarse atrapar por un escándalo.

*************

El día se estaba haciendo largo para Apo y para Mile, se les notaba algo agotados, pero frente a las cámaras al grabar como todos unos profesionales, daban su mejor cara y esfuerzo. Ya habían grabado la escena del salón de tiroteo junto a Us y JJ, y en estos momentos iban a grabar la escena donde Porsche inicia un pequeño incendio.

Mientras el staff se encargaba del set y los aspersores de agua que apagarían el incendio, los encargados del vestuario ayudaban a Apo y a Mile a caracterizarse. Apo como Porsche vistiendo el típico traje de camisa blanca con chaleco negro que le hacía lucir muy bien. En cambio, Mile solamente vestía una camisa blanca arremangada, y aunque ambos vestían la misma ropa que la escena que grabaron anteriormente, la diferencia era que ahora iban a estar empapados.

Apo no pudo dejar de observar a Mile cuando llegaba al set. ¿A quién se le había ocurrido hacerle ver tan sexy? Habían mojado a Mile completamente, tanto, que la camisa blanca que vestía se transparentaba y se pegaba a cada músculo de Mile. No ocultaba nada. Tampoco es que Apo quisiera ocultar algo de ese maravilloso cuerpo pues le encantaba, pero de que lo viera él a que todos lo vieran era otra cosa.

— Estás todo empapado. – Apo le señaló a Mile en cuanto estuvo a su lado, intentando acomodar la empapada prenda en los lugares correctos para que Mile se viera lo mejor posible y ocultar los pezones de su novio — ¿Desde hace cuánto que estás empapado?

— Algo. – respondió Mile intentando restarle importancia.

— ¿Hace tiempo? – en la voz de Apo había preocupación, apenas iban a comenzar a grabar, más todas las veces que tenían que repetir la escena para las tomas y ángulos que necesitaban de la misma, les iba a llevar un tiempo estar así.

— Tú también estás empapado, Po. – Mile sonrió para Apo, no deseaba que se preocupara por él.

— Sí, mojaron las mangas de mi camisa y cabello, dentro estoy seco, mira. – dijo Apo tomando la mano de Mile para después meterla debajo de su chaleco, mostrándole que su pecho, espalda y abdomen estaban secos.

— Eso es bueno, al menos sé que no enfermarás. – Mile aprovechó para colar ambas manos, tomando la cintura de Apo debajo de las prendas.

— ¿Qué haces? Nos van a ver. – dijo Apo intentando mantener quietas las manos de Mile que intentaban escalar más arriba de su cintura y tratando de no reír por el cosquilleo que le provocaba.

— Estoy comprobando. – la voz de Mile sonaba baja y gutural, y eso que se estaba conteniendo.

— Cuando hablas así me haces sentir... – dijo Apo apretando sus labios –. Ya te he dicho que te amo, ¿verdad?

— Y yo a ti, te amo mucho.

— Cuando terminemos de grabar quiero que vayamos a mi departamento, te cocinaré algo rico y... – dijo Apo sonriendo.

— ¿Y? – murmuró Mile levantando una ceja. La sonrisa de Apo se hizo más grande.

— Tal vez podamos... - Apo susurró lo demás en el oído de Mile, para que solamente él pudiera escuchar.

Por dentro, Mile sonreía y se moría porque las cosas que Apo le había prometido sucedieran pronto. Necesitaba volverlo a tocar, y besar a su antojo.

— Estaré esperando.

— Entonces, vamos a grabar. – le animó Apo.

Ambos se dirigieron al set, los dos hicieron algunas tomas antes de la grabación real, pues tenían que marcar los ángulos y los lugares donde los actores se iban a ubicar. Esto se alargó un poco y por lo mismo las caracterizaciones de Apo y Mile fueron retocadas con más agua para mantener la apariencia empapada.

La humedad, el tiempo que llevaba mojado y la poca ropa que traía encima, le estaba pasando la factura a Mile que, en la última toma, tuvo que aclarar su garganta para poder decir sus diálogos. A estas alturas Mile estaba completamente mojado hasta los zapatos y su garganta comenzaba a raspar un poco.

Cuando la última toma fue terminada, Mile esperaba poder cambiarse, sin embargo, no le fue posible hacerlo inmediatamente, ya que tenían que hacer una pequeña entrevista para el detrás de cámaras que regalarían a sus fans.

— ¿Cómo estuvo la escena anterior? – les preguntaron a Mile y Apo.

— Realmente refrescante. – Mile fue quien respondió intentando arreglar su cabello mojado que se pegaba a su cara.

La entrevista continuó sin muchos contratiempos, Apo y Mile sonreían mientras contaban sobre la escena que habían grabado, mostrando lo emocionados que estaban por su trabajo e incluso bromeaban entre ellos.

— ... Bueno, todos deben ver esto en la serie para ver cómo termina la historia. – terminó Mile sin contar más detalles para crear expectativas en los seguidores de la serie.

Después de esto los dos se abrazaron mientras la cámara seguía grabando, ya que estos dos no paraban de bromear, Apo sacando la lengua y Mile parando la boca como en un beso para luego separarse.

— Listo chicos, gracias.

Al quedarse completamente solos, Apo fue abrazar nuevamente a Mile apretándolo y pegándolo a su cuerpo, cosa que tomó por sorpresa a Mile.

— ¿Qué sucede?

— Estás temblando. – respondió Apo — Lo siento, no me había dado cuenta.

— No te disculpes Po, estoy bien.

— ¿Cómo vas a estar bien? Si estás todo frío. – dijo Apo, que no parecía querer soltarlo de aquel abrazo.

— Iré a darme un baño con agua tibia y estaré como nuevo, ya verás. – Mile intentó calmar a Apo con sus palabras.

— Entonces ve, te vas a enfermar si sigues aquí. – un poco apresurado, Apo soltó de su abrazo a Mile.

— Mmmmm... te esperaré, me cambiaré de ropa.

— No, ve a casa p'Mile, y haz que alguien del staff te acompañe para lo que necesites. – Apo hablaba rápido, como siempre lo hacía cuando estaba nervioso o preocupado.

— Pero, ¿no iríamos a tú departamento? – Mile preguntó contrariado. Apo negó con su cabeza.

— Ve a tu departamento.

— De acuerdo. – dijo Mile que, sin despedirse, obligó a sus piernas a caminar alejándose del lugar dejando atrás a Apo.

El departamento de Mile era más cercano, por eso Apo le había sugerido ir ahí, porque de esta forma le sería más fácil y rápido alcanzarlo después. Pero como Apo se encontraba realmente preocupado por Mile, se olvidó de decirle ese pequeño detalle.




希 HeeChan

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