Heechul POV
No supe
nada del viaje. Exactamente no sé cuánto tiempo pasó porque me quede dormido,
solo sé que momentos después Gunhee me llama para que despierte, ya que hemos
llegado a nuestro destino.
En cuanto
abro mis ojos, una inmensa casa blanca se encuentra frente del auto, y como
sospechaba, muy cerca del mar. Lo extraño en esto es que hay gente entrando y
saliendo de ella, hay mucho movimiento, como si en el lugar hubiera una fiesta.
– ¿Qué? ¿Una fiesta? – no sé porque
presiento que he sido embaucado.
Me
despabilo un poco antes de bajar. Sin bolso ni nada con lo que arreglar mi
cabello, hago lo que puedo con mis manos para que los signos de sueño
desaparezcan de mi cara, al igual que con mis cabellos. Afortunadamente mi ropa
no está tan mal en para esta ocasión.
– Si tan solo me hubiera traído mi
chaqueta. – me lamento al cerrar la puerta del auto.
– El aire de la costa está un poco frío
el día de hoy. – me dice Gunhee.
– Aja. – le digo molesto.
– Adentro Jungmo seguro que te presta
algo.
– Tu sabias y no me dijiste, ¿Por qué me
engañaste?
Pero antes
que pueda responder, Jungmo sale alcanzarnos jalando de la mano a un hombre que
creo reconocer como Jay. Vaya sorpresa, verlos juntos no es buena cosa, tenían
casi seis meses sin verse.
Jungmo y
Jay han estado saliendo algunos años, y durante toda la relación, han terminado
más veces que lo que yo he besado chicos. Bueno, no es para tanto, pero si
llevan record. Y lo peor es que todas esas veces Jungmo siempre queda muy mal.
Solo espero que esta vez no sea así.
– Entonces, para esto me trajiste. – le
digo a Gunhee señalando a Jungmo y Jay para después cruzar mis brazos.
– No, espera, no es lo que tú piensas. –
se apresura Jungmo a decir cuando por fin llega a mi lado.
– Espera, luego me explicas. Necesito tu
celular, ahora. – le apuro, no estoy de humor.
– Pero… – Jungmo no dice nada más porque
Gunhee lo apura a que me dé su celular.
Ni
siquiera le doy las gracias, tomo el celular y me alejo de todos ellos, necesito
hablar con Siwon, ahora.
– Solo espero que no sea muy tarde, no
lo quiero preocupar.
Marco
rápidamente el número pero este me da tono de ocupado. Lo intento de nuevo con
el mismo resultado, ni siquiera entra a operadora y es cuando me doy cuenta que
el celular da tono errático.
– ¿Qué diablos? – para este momento mi
antiguo yo está saliendo a relucir. Estoy realmente enfadado –. ¿Qué no hay
buena señal aquí? – le grito a Jungmo preguntando.
– Es lo que te iba a decir. Las llamadas
no salen, aunque puedes mandar mensaje, estos tardan un poco pero salen. – me
explica un poco avergonzado.
– O puedes usar el teléfono de la casa. –
dice Jay.
– ¿Y por qué no me dijiste antes?
– Calma, manda el mensaje y después
adentro le llamas. – Gunhee trata de calmarme.
– Oh, no puedo llamarle. – de pronto
recuerdo que iba a estar muy ocupado, ¿Y si interrumpo algo?
– Manda el mensaje entonces, seguro que
le llega.
– Bien.
Rápidamente
tecleo el mensaje para Siwon, donde le explico que estoy bien y que tuve que
salir rápidamente olvidándome el celular, y brevemente le digo como me trajeron
a engaños pero que no tardaré en regresar a casa. O eso esperaba. Realmente
deseaba ir a casa ya, estoy seguro de haber hecho más de una hora de viaje y el
tiempo que he perdido discutiendo con Gunhee, se ha hecho tarde de pronto.
Le doy
enviar al mensaje sin mucho éxito, este sigue en la bandeja y no se va. Espero
un poco más con el celular en la mano, buscando algo de buena señal para que se
vaya pero es imposible, se queda en la bandeja.
– Ese mensaje se ira, te lo puedo
asegurar. – Jungmo me dice en cuanto siento sus manos cerrarse sobre el celular
–. Necesito explicarte.
– Sí, y una muy buena explicación. – le
digo sin darle el celular.
– Bien. – Jungmo limpia sus manos algo nervioso,
antes de tomar la mano de Jay de nuevo –. Jay y yo nos volvimos a encontrar la
semana pasada por casualidad, hablamos y nos dimos cuenta que todavía sentimos
algo por el otro. No había podido contarte porque no hemos podido contactar
contigo y mucho menos quedar en algún lugar.
– Y regresaron para terminar después,
¿Cuánto tiempo piensan durar esta vez? – sé que estoy siendo duro, pero mi
amigo es un idiota que se cree todo cuando se trata de Jay.
– Me llevó a conocer a sus padres. –
Jungmo se apresura a decir emocionado –. Esta vez vamos en serio, Heechul,
estas en nuestra fiesta de compromiso. – ¡Oh! No había notado sus vestimentas y
por eso todo el movimiento en la casa.
– No es una treta tuya para convencer a
mi amigo de nuevo, ¿eh? – le pregunto Jay
apuñalando su pecho con mi dedo.
– Yo lo amo. – me dice en cuanto dejo de
apuñalar su pecho, mirando embelesado a mi amigo –. Y me di cuenta que no puedo
vivir sin él. Sé que le he hecho mal en el pasado y también que nos alejamos
mucho tiempo, pero eso me sirvió para darme cuenta que es el amor de mi vida. –
Jay acuna el rostro de mi amigo en sus manos –. Y por eso es que quiero
despertar con él todos los días, tenerlo a mi lado y que mejor que tenerlo
seguro, por eso le he pedido que se case conmigo.
– Jay, tonto, no digas esas cosas. –
Jungmo golpea sin fuerza en el pecho de Jay, lo que Jay aprovecha para jalarlo
a su pecho en un abrazo.
– Ni creas que se me ha olvidado que
puedes atrapar a cualquier chico en esos clubs. – Jay comienza a tontear, no le
está reclamando realmente y Jungmo le sigue la corriente.
– ¿A cualquiera?
– Los mejorcitos del lugar. – veo a Jay
besar rápidamente a Jungmo –. Por eso tengo que asegúrame que este casado
conmigo y pronto, no quiero que alguien más se lleve esta hermosura.
– Y porque me amas. – agrega Jungmo.
– Lo hago.
– Se acabaron las andas para otro. –
Gunhee suspira mirando al par tontear –. ¿Cuándo dejare de ser la madrina?
– Pronto, pronto. – lo consuela Jungmo
con ligeras palmaditas en su hombro.
No puedo
decir nada por el momento. Esos dos realmente se aman y han arreglado las cosas
para bien. Todo esto es muy lindo, lo acepto. Y también se dé la felicidad que
debe estar sintiendo Jungmo. Que siendo tal como yo en el pasado, encontrar el
amor y asentarte debe ser lo más extraordinario que le haya pasado.
En
nuestras vidas cometimos muchos errores, yo estuve a punto de dejar pasar a
Siwon y Jungmo, la inmadurez de Jay lo hizo sufrir, sin embargo todo ha
cambiado para los dos. Por fin podemos ser felices, yo junto a Siwon y Jungmo
con su fiesta de compromiso.
Por un
lado me siento feliz que estén juntos y vayan a celebrar su amor con una boda,
y que yo sea tan importante para Jungmo que me haya traído a su fiesta de
compromiso, pero por otro lado, me siento traicionado, me trajeron engañado y
sigo preocupado por no haberle avisado a Siwon.
Dios, y
ahora tengo hambre, recuerdo no haber comido nada desde el almuerzo. Mi estómago
comienza hacer ruidos extraños.
– Por favor Heechul, no podías faltar a
mi fiesta de compromiso, deberías ser feliz por mí. – Bien, a mi amigo, la
felicidad le había nublado la razón.
– Tú… Mira Jungmo, no puedo sentirme muy
feliz, cuando me trajeron hasta acá con engaños. – comencé a soltar con todo lo
enojado que estaba –. Gunhee no me dijo casi nada, pensé lo peor y por eso
accedí. ¡Me engañaron! Y ahora, ¿quieres que me sienta feliz?
– Heechul…
– ¡No! Si me hubieras dicho esto unos
días antes, tal vez Siwon se hubiera hecho tiempo y habríamos venido juntos,
entiende, no es la forma. – comenzaba a sentirme agitado y algunos puntos de
colores aparecieron a la vista, me estaba mareando. Llevo una mano a mi frente
y cierro los ojos tratando de controlarlo.
– Deja de hacer berrinche Hee, adentro
tomamos el teléfono y le avisamos a Siwon. – escucho como Gunhee dice tomándome
del brazo.
– Es que no entiendes, porque estas
solo, Gunhee. – en este punto no me importaba ser cruel, la molestia comenzaba
a ser doble, el engaño y el malestar del mareo, se me había olvidado el hambre –.
Siwon debe estar preocupado porque no sabe dónde estoy. Jungmo me debe
entender, ¿Qué sentirías sí Jay desapareciera de la misma forma que han hecho
conmigo? ¡Ah! Olvidaba que tú ya estás acostumbrado. – ya sé que me estoy
pasando, es algo que siento que
no puedo controlar, es como… Maldición, ahora quiero llorar –. Por eso tenía
una cita con el medico a la que debí ir porque… Dios, me estoy sintiendo mal.
Para este
momento mi cabeza latía y sentía mi cuerpo pesado, un momento antes de que todo
comenzara a desvanecerse, unos brazos me sostuvieron y no supe más.
Alguien
sobaba mis pies, primero uno y luego el otro, se sentía tan bien que solo logre
suspirar. Las manos eran diestras, sabían dónde presionar, así que pronto me
escuche emitiendo sonidos satisfactorios. Mis manos fueron a dar hacia los
lados de la cama sosteniendo las sabanas. Porque me encontraba en una cama,
estaba seguro de eso ya que era demasiado cómodo y ni hablar de las almohadas.
La cama se
movió un poco debajo. Pronto esas manos comenzaron a subir por mi tobillo hasta
alcanzar mi pantorrilla. Seguía masajeando pero ahora había algo más, se estaba
sintiendo como una caricia, que me hizo sentir extraño, diferente a todo lo que
me ha hecho Siwon.
Cuando la
cama vuelve a moverse por segunda vez debajo de mí, me alarme. Abro mis ojos
inmediatamente, para darme cuenta que un extraño encima de mí que me miraba
extasiado y curioso, sosteniendo su peso con una mano mientras que con la otra
hacia malabares con una copa. En lugar de darme miedo, sentí asco y quise
sacármelo de encima.
– Oye, eres muy lindo y esos sonidos que
haces, me gustaría escuchar más. – por su voz, sé que está muy pasado de copas.
Hago lo
primero que se me ocurre, le encajo una de mis rodillas entre sus piernas,
haciendo que el líquido de su copa caiga en la cama y un poco sobre mi ropa. Ya
imposibilitado, lo agarro de los hombros y lo hago rodar hasta que cae de la
cama. El muy idiota se duele en el piso maldiciendo mientras yo me siento sobre
la cama.
– ¡Te lo tienes bien merecido! ¿Qué te
crees? – comienzo a gritar.
– Estabas ahí acostado…
– ¿Y eso te da derecho a manosearme?
¡Idiota!
De momento
comencé a reír sin podérmelo creer. Esta forma de despertar, desorientado o
siendo despertado por un extraño, en el pasado no era para nada raro. En esos
tiempos quizás hasta hubiera aceptado las caricias del extraño y habría pasado
algo de tiempo en la cama con él. Lo cual me daba risa porque esta vez ni
siquiera había bebido alcohol ni deseaba la compañía de alguien más.
– Ya no estoy para este tipo de cosas. –
dije mis pensamientos en voz alta.
– ¿Qué sucedió aquí? – pregunto Jay al encontrarme riendo y al
desconocido en el suelo.
– Jay… – escucho como el idiota del piso
menciona su nombre y con mucho trabajo se levanta hasta llegar al lado de Jay.
– Entonces, es tu amigo, con razón. – me
cruzo de brazos fulminando a ambos con la mirada.
– ¿Qué hiciste, Jung Woo? – veo como Jay
ayuda a su amigo a mantenerse de pie.
– Sabes que, olvídalo. – me corro hasta
la orilla de la cama que como supuse, era enorme y algo alta, mis pies quedaron
colgando en cuanto me siento en la orilla –. Necesito un auto, tengo que
volver. – Jay ya había sacado a su amigo de la habitación.
– Wow, espera, tómalo con calma. –
rápidamente se acerca hasta donde estoy, impidiendo que me baje de la cama –.
Nos diste un susto de muerte cuando te desmayaste y no reaccionabas. Por
fortuna estaba cerca pude impedir que estrellaras tu cabeza con el piso.
– Sí, que afortunado. – le digo
sarcástico, pero al notar verdadera preocupación en su rostro, me arrepiento –.
Como sea, gracias.
– No te preocupes, es lo menos que podía
hacer. – dice Jay al sentarse a mi lado –. No podíamos hacerte reaccionar.
Jungmo lloró todo el tiempo y Gunhee se culpaba de todo, la verdad es que ambos
estaban preocupados. Solo estuvieron tranquilos cuando nos dimos cuenta que
solo estabas durmiendo.
– ¿Durmiendo?
– Sí. Después que te desmayaste y que no
reaccionabas, comenzaste a roncar un poco. – me dice un poco avergonzado.
– ¡Yo no ronco!
– Bueno, pues así nos dimos cuenta que
estabas bien y optamos por dejarte dormir. Después de todo te veías cansado al
llegar aquí, supongo que fue lo mejor, ya que has dormido mucho.
– ¡Mucho! ¿Qué tanto? – me levanto
rápido de la cama hasta llegar a la ventana, solo para darme cuenta que ya es
de noche y que abajo la fiesta de compromiso sigue.
– Es de madrugada, – me dice –, pasan de
las tres de la madrugada.
– Eso… eso es mucho tiempo. Necesito
irme. – casi salgo corriendo de la habitación, pero Jay me lo impide.
– Espera, no puedes irte así y manejar,
¡Te desmayaste! Y ni siquiera sabemos porque. Si algo te pasa, no quiero ver
sufrir a Jungmo por eso, de por sí ya se siente culpable. Aunque ya le dije que
la culpa es mía por la premura de todo… – ruedo los ojos cuando Jay comienza a
divagar.
Lo cual es
gracioso porque es cuando me doy cuenta que realmente ama a mi amigo. Que esté
dispuesto hacer cualquier cosa para evitarle que pase un mal momento y odie
verlo llorar, es porque lo ama. Y eso además de alegrarme causa un profundo
alivio en mí
– Para ya. – le digo golpeando su hombro
–. Me vas ayudar o no.
– Hay un chofer abajo con instrucciones
de llevarte en cuanto despiertes y después que comas algo. De esa forma me
aseguro que llegues con bien y tendré a Jungmo tranquilo.
– Si, si, como digas.
Alguien de
la cocina trajo una bandeja con un poco de todo. Jay me explico que como no
sabe que me podía caer bien después del desmayo, ha pedido que me traigan
pequeñas porciones y aun así es demasiado. Intento comer un poco de fruta pero
me doy cuenta que lo dulce no me cae en estos momentos, así que opto por la
comida, sobre todo la picante. Es deliciosa.
Cuando
termino salgo de la habitación con Jay siguiéndome los pasos. No me pienso
despedir de Jungmo y Gunhee, después de todo le he causado un mal momento a mis
amigos, quizás en otro momento les hable y quedemos en algún lugar. Por ahora
no quiero arruinarle a Jungmo su fiesta por segunda vez. Lo que me recuerda,
quizás deba de llamar a Siwon desde la casa, pero eso sería tener que ir a
donde está el teléfono y perder algo de tiempo. Ya quiero regresar.
Tal y como
Jay dijo, el auto está disponible con todo y chofer. Es un auto grande, al
menos mi viaje de regreso será cómodo.
– Jungmo ya le ha dado tú dirección. –
Jay me dice abriendo la puerta trasera del auto –. ¿En verdad no piensas
despedirte?
– En otro momento. – le digo algo más
tranquilo-. Además, no creo que lo note mucho en cuanto regreses a su lado, ya
me disculpare con él en otro momento. Hemos tenido discusiones peores. Gracias
por todo y disculpa por lo de más temprano, solo estaba protegiendo a mi amigo.
Después de todo yo conozco muy bien la historia entre ustedes dos, tenía que
asegurarme. – termino por decirle.
– No, no te disculpes. – Jay toma mi
mano y me ayuda a entrar al auto –. Siempre voy a estar agradecido que ustedes
hayan estado a su lado cuando yo no estaba.
Nos
despedimos prometiendo que volveríamos a vernos, él con Jungmo y yo con Siwon
antes de su boda, lo que me causo una sonrisa, la primera en todo este lio.
En
el camino de regreso me la pase despierto viendo el camino y deseando llegar a
casa lo más pronto posible, deseando que el bendito mensaje hubiera llegado y
que el malestar que comenzaba solo desapareciera. La verdad es que estaba
comenzando a sentirse mareado por el viaje.
Recordé
entonces que el viaje con Gunhee lo había hecho durmiendo todo el camino y que
también por eso no se me había hecho tan largo, así que ahora se el viaje de
regreso se estaba haciendo eterno e ir atrás no ayudaba mucho.
Dos
veces hice que el chofer detuviera el coche y se hiciera a la orilla para poder
vomitar, mismas veces que lamente haberle hecho caso a Jay de comer antes de
montarme al auto, mi estómago lo estaba pagando y mi aliento pues no me había
hecho ni de una botella de agua. Por eso en cuanto tuvimos una tienda a la
mano, hice que el chofer se detuviera y comprara una botella de agua para mí.
Realmente
necesitaba reprogramar esa cita con el doctor para que de nuevo revisara que
había mal con estómago, esto ya no parecía ser consecuencia de la vez anterior
y tampoco se debía a un resfrío. Lo que me estaba pasando no estaba bien y me
estaba asustando demasiado.
Una
hora después por fin llegamos a mi casa. Mi reloj decía que pasaban de las 4:00
am. Agradecí al chofer por haberme traído, aunque fuera Jay quien se lo haya
ordenado, el señor fue quien me trajo a casa a salvo.
Abrí
la puerta agradeciendo haber traído cuando menos mis llaves conmigo, porque así
pude abrir sin tener que hacer mucho ruido y despertar a los vecinos o a Siwon.
Esperaba llegar a ducharme, lavar mis dientes y echarme a dormir abrazado a
Siwon después del día que había tenido.
Sin
nada en el estómago, me estaba sintiendo adormilado y quizás cansado por el “entretenido”
viaje de regreso. Pero nada de lo que planeaba iba a suceder de esa forma, pues
a pesar de la hora, Siwon me esperaba despierto y por su cara enojada, supe que
no le había llegado mi mensaje.
Lo
que menos deseo es tener una discusión con Siwon sin razón. En su rostro estaba
claro lo que pensaba de mi llegada a estas horas. No, esta vez no había sido mi
culpa, él que debería confiar en mi un poco más porque todo es diferente.
Porque lo amo y estuve preocupado todo este tiempo, al menos el tiempo que no
estuve desmayado.
Aun
así, respiro hondo y me preparo para explicarle como fueron las cosas.
– ¿Estás enojado?
– Podrías haberme llamado. – me dice
levantándose del sillón para enfrentarme de frente.
– Lo intenté créeme. No fue planeado y
luego pasaron algunas cosas… – de nuevo comencé a sentirme un poco mareado –.
¿Podemos hablar mañana? Te juro que no es lo que piensas. – iba a decirle a
Siwon que me sentía mareado pero no me dejo hacerlo.
– Sí, bueno, al fin que importa un
carajo que no hayas ido a tu cita como lo prometiste o ¿fuiste? Menos importa que
yo haya estado preocupado mientras tú estabas con tus amigos quien sabe a dónde
y haciendo no sé qué…
– Siwon…
– Entonces, ¿tengo razones para estar
enojado? Al parecer no. Tal vez no debería importarme que te hayas ido con tus
amigos, al fin que no es nada nuevo.
– Oye, no es así Siwon.
– ¿No? – Siwon camina unos cuantos pasos
hacia mí, lo suficiente para invadir mi espacio personal hasta tomar mis
hombros con sus manos, sé que está conteniéndose.
Jamás
había visto a Siwon de esta forma, no desde esa vez antes que nos hiciéramos
novios. Ni siquiera cuando hice cosas peores en el pasado donde él tuvo que ir
a buscarme se había puesto así. Siempre fue comprensivo, corriendo ayudarme y
después cuidando de mí aquí en casa. Y ahora que no hice nada, solo pecar de
confiado, se pone de esta forma.
Las
lágrimas comienzan agolparse mis ojos.
– Déjame ir Siwon.
– Quiero escucharte. – me dice tenso.
– Hablemos mañana. Estoy demasiado
cansado para seguir discutiendo. – Siwon retrocede unos pasos, haciéndose a un
lado para dejarme ir–. Gracias.
Pase de
Siwon como si no estuviera ahí. Mi pecho dolía al saber que Siwon todavía tenía
esos pensamientos sobre mí. Quizás todas las emociones del día se arremolinaron
y vieron la salida en cuanto me tuvo de frente, así que no lo culparía.
Viéndome
al espejo, creo que Siwon tiene algo de razón en pensar lo peor. Mi cabello
desaliñado, la ropa que estaba quitándome estaba toda arrugada y además olía a
alcohol por la bebida que el idiota de la cama me tiro encima. No quiero ni
pensar como Siwon se pondría si supiera esto. Y luego mi cara, me veo como si
me hubiera ido de fiesta toda la noche.
El solo
pensar lo que sucedió más las ganas de llorar, hace que el nudo que se había
formado en mi estómago, desde que comenzó la discusión con Siwon, suba por mi
garganta y salga directamente en el escusado, pero no hay nada, todo lo he
votado durante el camino de regreso.
Las
arqueadas secas dejan un dolor en mi estómago y costillas, al menos es lo que
siento cuando me meto a bañar. No me toma mucho tiempo ducharme y ya con pijama
salgo del baño para encontrarme con Siwon dormido dando la espalda a mi lugar.
Me meto en la cama dándole la espalda también.
Sé que
Siwon está cumpliendo su promesa, esa que le hice hacer en la que lo obligo a
dormir conmigo en la misma cama aunque estemos enojados. Siwon si cumple sus
promesas, al menos algunas porque todavía no confía en mí, aunque eso no lo
había prometido y aunque yo lo entienda en estos momentos, no deja de doler.
Continuara...
tonto Siwon, debe confiar, Hee se esfuerza en ser lo que él espera, pero es evidente que no puede.
ResponderEliminarsí, cambio, pero el proceso lleva tiempo, ademas debe confiar en que lo ama y dejar que se explique.
waaa ahora a esperar el siguiente capitulo TwT ¡la curiosidad me va matar!
ok, dejo el drama, pero de verdad estoy muy ansiosa por saber que le paso a Siwon.
excelente!! me he enamordo de esta pareja aun más ya quiero saber que paso con Siwon me carcomen las ansias
ResponderEliminarMuchas gracias :)