Crazy Green Dream... Capítulo 03 Final

Heechul fue dado de alta dos días después de su segundo ingreso al hospital. Al final solo había sufrido de una indigestión, nada provocado por el golpe en su cabeza como temían, y por supuesto, no estaba embarazado.

De esto se dieron cuenta gracias a una prueba de sangre para comprobar embarazo que a insistencia de Lee Donghae le habían realizado y con los resultados negativos, la locura del bebé alien terminaba.

¿O no?

—   Fue una indigestión la que sufrió hyung. – un Yesung muy aliviado dijo.

—   Yo quería un bebe. – se lamentaba Donghae.

—   Pececito, los aliens no existen. – Hyukjae rodeo en un abrazo a Donghae — Ahora entiendo que debemos dejar de ver esas películas.

Al ser dado de alta, Heechul regresó a casa con receta médica y reposo. La borrachera y el golpe, había provocado todos sus síntomas, y la indigestión causado deshidratación. Casi, casi le dijeron que por eso andaba alucinando.

Pero decir que Heechul regresó a casa, no quiere decir que haya regresado a su casa.

—   ¿Por qué?

—   Porque quiero cuidar de ti, Heechul. – fue la simple respuesta de Siwon a la pregunta de Heechul, ya que estaría alojado en su casa hasta pasar la convalecencia de su estancia en el hospital.

—   Si es por eso, bien podrías haberme dejado ir con alguno de los chicos, ellos estarían más cómodos de cuidarme. – y como Heechul hiciera por levantarse de la cama, Siwon se acercó y se le sentó en la cama.

—   No me refería a eso.

—   ¿Entonces?

—   Podría cuidar de ti hasta que recuperes la salud en cualquier lugar, sin embargo, me refería a nuestra relación. – Siwon no pudo dejar de tocar la blanca piel de sus mejillas, pues Heechul a pesar de las ojeras y estar recién salido del hospital, se veía hermoso — Eres alguien difícil de olvidar o ignorar.

Y a pesar de todo el tiempo que pasaron alejados Heechul estaba de acuerdo con Siwon, sus sentimientos no los podía ignorar.

Hablaron entonces de ellos, su sentir y como es que todo este tiempo no pudieron olvidarse el uno al otro. En cómo le hizo a Siwon sentir que Heechul no comprendiera que necesitaba tiempo más no espacio.

—   Fue el momento que más te necesitaba cerca. – le confesó Siwon.

Heechul comprendió que decir “Lo Siento” no era suficiente, tampoco les devolvía el tiempo perdido, más poco importaba si al mirarse a los ojos todo volvía a caer en su lugar.

Esa noche no durmieron abrazados, pues necesitaban dormir uno frente al otro. Cada tanto Siwon despertaba para comprobar que Heechul no se hubiera ido y estuviera bien, después de todo estaba convaleciente. Y Heechul, se mantuvo despierto mirando a Siwon hasta que el sueño lo alcanzó, ya que deseaba asegurarse que Siwon estaba ahí, con él, como antes.

Después de esa noche todo fue mejor entre ellos, recuperando el tiempo perdido, charlando de todo y perdonándose de a poco. En su convalecencia, Heechul estuvo recibiendo la visita de sus más cercanos amigos, que se alegraron de verlo de nuevo al lado de Siwon.

—   Esos dos se aman. – aseguró Hyukjae sin vacilar — Era cuestión de tiempo que volvieran a estar juntos.

—   Bien dicen que del odio al amor, hay un paso. Y de regreso mucho menos espacio. – la frase de Yesung hizo asentir a todos.

Poco a poco la salud de Heechul fue mejor, el chichón de su cabeza desapareciendo y pronto, pudo volver a comer de todo. El alcohol siguió descartado en su dieta y el sexo, al menos lo estaría un tiempo más, pues Heechul, aun temía que se cumpliera la promesa del Santa Claus verde y volviera por él para dejarlo embarazado de nuevo, y como todo estaba ligado al alcohol pues…

—   Sigues con eso que fuiste secuestrado por aliens, ¿no es así? – Siwon estaba un poco cortado por la abstinencia. – Fue solo un sueño.

Al principio lo comprendía porque Heechul no estaba bien, sin embargo seguía negándose por la idea loca de quedar embarazado de él, su bebé, y no quería uno.

—   Fue una pesadilla y parecía muy real. – Heechul se estremecía al recordar.

—   Realmente tienes que terminar con eso ahora.

—   Tú no me crees. – dijo Heechul en forma de reproche, sentándose en el sofá un poco alejado de Siwon.

—   Claro que te creo. – de eso Heechul no estaba muy seguro, y se lo hizo saber con la mirada.

Para ese momento, Siwon ya estaba preocupado, pues Heechul llevaba muchos días con la misma cantaleta. Y según los doctores, el golpe en su cabeza no había dejado secuelas.

Siwon llegó acomodarse en el mismo sofá, jalando a Heechul hacía si, abrazándolo al momento que lo tuvo cerca. Comenzó a pasar su mano sobre su espalda en una suave caricia.

—   Te creo Hee, pero no por eso vas a dejar que una pesadilla te siga atemorizando.

—   ¿Cómo puedo dejar de sentir esté miedo? – pregunto Heechul acurrucado en el pecho de Siwon, estaba sintiéndose muy bien ser apapachado.

Y es que desde que estuvo convaleciente, Heechul se acostumbró a los buenos tratos, a ser cuidado y mimado. No solo Siwon lo hacía, sus compañeros lo trataban de la misma forma y esperaba que siguieran así.

—   Podrías ir a la iglesia conmigo.- aquello hizo a Heechul separarse rápidamente.

—   Otra vez con eso. - fue como un balde de agua fría — Tú estarías muy feliz si aceptara alguna vez.

—   Siempre he querido llevarte aunque se una vez. – Siwon volvió a jalarlo otra vez — Realmente he tratado.

—   Sí, has tratado con eso.

—   Y sabes que nunca te llevaría a la fuerza.

—   Amen.

—   Aunque nunca es tarde ni un mal día para ir a la iglesia. – insistió Siwon sutilmente, a lo que Heechul rodo sus ojos.

—   ¡Dah! Dije amen, ¿Por qué no te detienes?

—   Si tú te detienes con toda esa historia de los aliens, yo no vuelvo a insistir con eso.

Si algo había aprendido Siwon en todo este tiempo junto a Heechul era a negociar. El mayor era bueno en eso, entonces había aprendido del mejor.

Heechul parecía pensárselo hasta que finalmente, accedió.

—   Está bien. Dejaré de creer que puedo ser raptado por aliens, abducido y violado para un bebé gracias a ellos.

—   Y vas a dejar de tener miedo a tener sexo. – agregó Siwon.

—   Voy a dejar de tener miedo a… - Heechul fue interrumpido.

—   Siempre podría intentar dejarte embarazado, con muchos intentos y sesiones largas no dudo que lo vaya a lograr. De esa forma los aliens no podrían volver a raptarte. – para ser una loca idea Siwon lo dijo con mucha seriedad — Si ya tienes un  bebé dentro, ellos no podrían meter otro, ¿no crees?

—   ¡Ya entendí! No digas tonterías. Me ha quedado claro el punto.

—   Bien porque, no voy a dejar de intentarlo. Solo para asegurarme que solo haya dentro de ti algo mío.  – al terminar de decir esto, Siwon levantó a Heechul como costal sobre su hombro para llevarlo a la cama.

—   ¡Estás loco! ¡Bájame!

—   Es hora del primer intento del día. – dijo Siwon entre risas y nalgueo a Heechul.

Con Santa verde o sin Santa verde, Siwon se aprovecharía de la idea para tener a su pareja en la cama todo el tiempo posible y recuperar el tiempo que estuvo alejado de su delicioso y amado cuerpo.

Heechul fue dejado en la cama sin cuidado riendo todavía por lo impetuoso del momento, pues la prisa corría en Siwon que ya lo había dejado sin pantalones en el proceso y se encontraba bajando su ropa interior, sin preocuparse de nada más.

Con un desnudo Heechul de la cintura para abajo y colocado en cuatro patas, Siwon se dispuso a dilatarlo, introdujo rápidamente dos de sus dedos ensalivados, proporcionándole un placer desenfrenado a Heechul que sentía como esos dedos se abrían paso en su interior, ya que todo este tiempo no había sido tocado por Siwon ni por nadie. Pero no podía dejar de reír y eso no le facilitaba el trabajo a Siwon.

—   Hee debes calmarte para que te dilate bien, - y por las ganas de Siwon, no tenían mucho tiempo — No quiero hacerte daño.

Con algo de esfuerzo, Heechul intento dejar de reír y relajarse para facilitarle el trabajo a Siwon, además que ya comenzaba a sentir el placer de la acción y su cuerpo pedía algo más que aquellos dedos. ¿Cómo pedir que vaya más rápido sin dejar de concentrarse en lo que sentía? 

Heechul comenzó a suspirar, gemir y a mover sus caderas cuando ya tres dedos se encontraban en su interior. En ese momento Siwon sabía que estaba listo. Agarrando sus caderas enfiló su miembro hacia su dilatada entrada suplicante por ser llenada, y así lo hizo, estremeciendo por el acto a Heechul.

Pronto ambos estuvieron jadeando, gimiendo y sus cuerpos sudorosos mientras las embestidas se volvían más rápidas, frenéticas y potentes, estaba claro que no tardarían mucho después de la abstinencia.

A punto de terminar, Siwon se abrazó al sexy y tibio cuerpo debajo suyo, profundizando las embestidas, repartiendo besos provocadores por la espalda sudorosa de Heechul que lo estremecían, y que seguramente se convertirían en marcas sobre su piel resultado de su apasionante noche.

Durante unos minutos más, Siwon mantuvo el vaivén, susurrando palabras a Heechul en su oído mientras este balbuceaba su nombre o lo gemía, arrasado por las sensaciones que lo embargaban, que fue suficiente para hacerlo terminar.

Heechul termino esparciendo su semen sobre las sabanas, su cuerpo se tensaba y su cabeza caiga sobre la almohada, intentando jalar aire a sus pulmones sobre las olas del placer. Ante esto, Siwon forzó su agarre sobre las caderas de Heechul y aumento sus movimientos, con una última embestida, penetro profundamente en Heechul esparciendo su semen en el interior.

Siwon se sentía muy afortunado.

*****

Meses después.

Había sido una noche muy movida para ambos. Siwon y Heechul yacían cansados dormidos, uno al lado del otro abrazados. Perdieron la cuenta de cuantas veces lo hicieron, pero a juzgar por sus rodillas entumidas, Siwon supo que habían sido demasiadas y cada una muy placentera.

Entonces se dispuso a dormir cuando de pronto, un rayo de luz iluminó el cuarto. Siwon pensaba que para ser un relámpago estaba tardando demasiado además, ni tormenta había afuera. ¿Qué era?

Por un momento la luz lo cegó. Poco a poco sus ojos se acostumbraron a la claridad. Un poco asustado por la silueta que se asomaba, intentó despertar a Heechul pero esté continuaba dormido ajeno a todo y ante la insistencia de Siwon, no reaccionaba.

—   Él no puede escucharte, está siendo preparado. – le dijo la cosa verde que parecía Santa Claus.

—   ¿Preparado? ¿Para qué?

—   Para tener a tú bebé, solo faltas tú. – el Santa verde se acercó a la cama e intentó jalar de su sabana. Obviamente Siwon no iba a dejar que se la quitara, ¡estaba completamente desnudo! Y cansado, pero no iba a correr y dejar a Heechul con la cosa verde.

Entonces, todo lo contado por Heechul acerca de su encuentro con el Santa Claus verde y los enanos verdes abusaron de su cuerpo mientras estuvo amarrado a una fría plancha vinieron a la cabeza de Siwon, sus ojos evidenciando el terror. Siwon no entendía como Heechul recordaba esa cosa sin tener miedo, se veía horrorosa y demasiado verde a pesar del traje rojo.

De pronto la sabana subió hasta su barbilla, en un intento desesperado por cubrirse inultamente, ya que esa barrera no iba a ser un gran impedimento.

Pasó saliva entonces, tragándose su miedo.

—   ¡No! ¡No vamos a ser sus conejillos de indias! – y con su cuerpo, intento proteger a Heechul.

—   Eso lo veremos. – y con esa amenaza, el Santa Claus verde se fue acercando lentamente, hasta que Siwon no soportó más y grito con terror.

—   ¡No! ¡NOOOOOOOOOOOO!

Siwon manoteaba mientras gritaba, por nada del mundo dejaría ser llevado, abducido o violado por esas cosas y mucho menos dejaría que lo hicieran con Heechul, ya que ahora el leve abrazo se había convertido en un férreo agarre.

—   Suéltame… - escucho un susurro — ¡Suéltame, me haces daño! ¡SIWON! – estaba seguro que esa era la voz de Heechul y después, un golpe lo saco de su sueño o pesadilla. — Me sacas el aire, ¡Siwon!

—   ¡Heechul! – Siwon se sentó sobre la cama.

—   Solo a ti se te ocurre abrazarme mientras tienes una pesadilla. ¡Me estabas asfixiando! – y otro golpe surtió su pecho. Heechul terminó alejándose un poco de él.

—   ¿Ya se fue? – preguntó Siwon aún desconcertado.

—   ¿Quién?

—   El Santa Claus verde. Estuvo a-aquí

—   Siwon… - algo dentro de Heechul saltó y no fue precisamente en su estómago, su cerebro trabajaba al mil. — Muy bien, fue solo una pesadilla, aquí no ha pasado nada. Ven aquí. – Siwon vio como Heechul palmeo en la cama cerca de él, a lo que Siwon hizo caso sin poner resistencia. — Fue solo una pesadilla. Un mal sueño y no realidad, yo estuve todo el tiempo aquí a tu lado y no pasó nada ¿entiendes? – Siwon asintió.

—   Si te creo. – y como Siwon jalara la cama para acomodarse, Heechul se adelantó para detenerlo.

—   Creo que dormirás mejor si tomas un vaso de leche caliente.

—   ¿Seguro?

—   Sí. Al menos eso es lo que le dan a los niños para dormir.

—   Está bien.

Heechul vio como Siwon se levantó de la cama desnudo y se mordió los labios al ver esos perfectos globos que formaban su trasero, así como su perfecta espalda. Y entonces sonrió maliciosamente.

—   Ya que vas a la cocina, podrías traerme un poco de jugo de arándano que siempre me has ofrecido beber y nunca he querido – Siwon se giró rápidamente con los ojos muy abiertos. — Tengo sed.

—   Bien, puedo hacer eso.

—   Gracias. Y podrías traer un poco de lo que sobro de la cena en un emparedado. Me ha dado hambre. – Siwon se detuvo en seco en el umbral de la puerta sin girarse.

Con la sonrisa instalada en su cara, Heechul se volvía a meter bajo las sabanas.

—   Sabes, sería mejor si tuviera un poco de esa pizza grasienta con mucho queso que tanto te gusta comer con las manos, se me ha antojado. En este momento, hasta sería capaz de lamer tus dedos si lo haces. – y ahí sí que Siwon tuvo escalofríos en todo su cuerpo.

Lentamente, Siwon se giró hacia la cama y un muy hermoso Heechul desnudo bajo sus sabanas, palmeaba su estómago mientras lo miraba.

—   No sé de dónde han salido estos antojos nocturnos. – con los ojos muy abiertos, Siwon corrió rápidamente a ponerse algo de ropa para salir corriendo por esa pizza y tal vez un doctor o un exorcista, lo que encontrara primero.

Con todas sus fuerzas, Heechul contuvo la risa mientras Siwon se vestía y buscaba sus llaves por la alfombra, pues en su apuro las dejo caer dos veces.

Sabía que estaba siendo muy malo, sin embargo Siwon también lo había sido cuando sucedieron sus pesadillas y le estaba resultando muy gracioso hacerle creer que si sucedió. Seguramente pronto le diría que solo estaba bromeando, quizás cuando volviera o después de comer la pizza, mejor después de navidad, o quizás hasta después de su cumpleaños.

Y aunque ahora estaba riendo por sus pensamientos, estaba seguro que Siwon lo llevaría al doctor inmediatamente. Podría ser algo tonto y asustadizo, pero siempre ante pondría la seguridad de Heechul por sobre todas las cosas. Después de todo lo amaba.

FIN