Llegando a
Seúl lo primero que hago es buscar a Siwon. Me había dicho que no lo contactara
mientras estuviera de viaje, pero ya no lo estaba, así que podía llamarle,
molestarlo o lo que sea que quisiera. Necesitaba hablar con él.
— También necesito hablar contigo. – recibo
por respuesta de su parte.
Eso no
sonaba bien. No sonaba nada bien.
Mucho
menos después de todo el relajo que tuve que pasar en el aeropuerto, el mal
rato que casi me hizo pasar el guardaespaldas de YoonA. ¡Mira que desconocerme
a mí! Ni loco sería fan de YoonA, como para no déjame acercar y eso que íbamos
en el mismo vuelo de regreso con ella.
Mi celular
vuelve a sonar.
— Dios, y ahora que. – respondo la
llamada, esta vez es Leeteuk —. Acabo de llegar Jungsoo, ¿qué es tan
importante?
— Siwon tuvo problemas. – dice
apresuradamente.
— ¿Problemas? ¿Qué le pasó?
— No
va a funcionar, cuelga… a Siwon tampoco le va a gustar - escucho otra voz que
no es de Jungsoo.
— No, no te preocupes, - comienza a
decir— ya no pasó nada.
— ¿Qué? ¡Jungsoo!
— Fue falsa alarma. – a lo lejos escucho
que alguien le cuchicheaba algo otra vez, ¡Como si no los escuchará!
— Los estoy, ¡escuchando!
— ¿Llegaste bien? Vuelve a salvo a tu
departamento y ven a visitarnos pronto, todo está bien.
— ¡Jungsoo! ¡Ash! – me cuelga.
Me apresuro
a tomar un auto y salir rumbo al departamento de Siwon, necesito asegurarme que
está bien. Además como quiera quedamos en vernos para hablar, porque no iba a
estar tranquilo hasta ver con mis propios ojos que estaba bien.
— Voy a necesitar unas vacaciones
después de estas salidas, me reciben con cada susto. – me quejo sin sentirlo
mucho al subir al auto.
*******
— ¡Siwon! ¿Estás bien? – es lo primero
que le pregunto al verlo abrir la puerta de su departamento. Enseguida comienzo
a pasar mis manos por su cómoda ropa y duro cuerpo, intentando asegurarme que se
encuentra bien, sin golpes o heridas. A decir verdad, echándole una sola
mirada, me di cuenta que estaba bien, pero debía estar seguro—. Jungsoo dijo
que estabas en problemas. – le digo intentando explicar mi apuro.
— ¿Problemas? – Siwon se me queda
mirando extrañado.
— No es nada, al parecer todo está bien.
Al menos tú estás bien. – y comienzo a jalar aire, mi respiración se encontraba
agitada, no me había dado cuenta lo cansado que fue venir corriendo casi todo
el camino después de tomar el elevador.
— Todo está bien. Por favor entra. –
Siwon me pide aún algo dudoso. Seguro estará pensando que había perdido la
cordura o algo con el viaje.
Intento respirar
profundamente para terminar de tranquilizar mi agitada respiración. Mi corazón
palpita apresurado desde que me dijeron que Siwon estaba en problemas, y me doy
cuenta entonces que no había sido por la carrera, el solo pensar que Siwon
estuviera pasándola mal me alteró completamente.
Nos
sentamos en el mismo sillón en silencio. Parecemos otra vez adolescentes sin
saber que decir. Nuestros ánimos no son los mejores puedo sentirlo, Siwon
estaba igual que yo, nervioso, confundido y todavía un poco preocupado, lo veo
en sus ojos. Además Siwon también se veía cansado, seguro por la apretada
agenda que está teniendo por estos días y los ensayos.
— Te ves cansado.
— ¿Cómo te fue en el viaje?
Los dos
hablamos al mismo tiempo, cosa que nos hizo reír y quitar un poco de la tensión
que en un principio sentimos. Me animé entonces acercarme a Siwon y sentarme a
su lado, al menos no se levantó de su lugar.
— Estoy bien no te preocupes. Necesito
dormir un poco más y estaré como nuevo, ¿y tú?
— Hablemos de mi viaje después, por
ahora, que quieres hablar conmigo. – corté su conversación.
— Tú también dijiste lo mismo. – oh,
cierto.
— Es sobre nosotros, ¿verdad? – Siwon
parecía un poco contrariado, así que continúe. Tome una de sus manos entre las
mías estrechándola con fuerza. — Sí, hablaremos sobre nosotros. Mira, yo sé que
no he estado bien pero, eso va a cambiar.
Volví
acomodarme sobre el sillón, necesitaba poder mirarlo, ver sus reacciones.
Porque de esa manera las palabras que llegara a decir, podría observar si Siwon
entendía o cambiar mis argumentos. Necesitaba convencerlo de conservar nuestra
relación.
— No he sido el mismo, pero también
nuestra relación ha cambiado, apenas podemos vernos, por mi impedimento –
señalé mi pierna — no hemos podido pasar tanto tiempo juntos como antes cuando
podía participar en las actividades del grupo. Y luego casi ni hablamos,
mientras yo tengo la agenda ocupada aquí en Seúl, tú viajas. No te estoy
echando la culpa tampoco.
— Espera Heechul… - Siwon me miraba confundido y atemorizado, una
cosa mala de quien era tu novio.
— Siwon, ¡Ni siquiera hemos tenido sexo
en semanas!
— ¡No!... ¡Sí! Pero eso no es
importante.
— Eso no es lo que quería escuchar. –
resople, comenzaba a sentirme frustrado. — Esto es peor de lo que pensaba. –
termino por levantarme del sillón y comienzo a caminar de un lado a otro ante
la atenta mirada de Siwon, que continuaba ahora relativamente tranquilo y eso
me hizo sentir más inseguro.
Eche mis
cabellos hacia atrás, intentando encontrar las palabras que pudieran salvar mi
relación con la única persona que me ha hecho sentir lo que es amar sin
límites. Porque para el amor no importan las diferencias, ni siquiera de sexo y
yo amaba a Siwon, en mis planes no estaba perderlo.
Haría todo
lo que estuviera en mis manos para recuperarlo. Volví a sentarme a su lado,
tome su rostro con ambas manos y mire sus ojos.
— Hemos tenido problemas pero podemos
solucionarlo. Soy algo difícil y últimamente… entiendo cómo te sientes - comencé a confundirme, no encontraba las
palabras de lo que quería decirle—, todo
eso va a cambiar, voy a ser diferente.
— Pero no quiero que seas diferente
Heechul.
— ¡Y yo no quiero que nuestra relación
termine! – exclamé con desesperación.
Tuve que
levantarme de nuevo. Esta conversación no estaba yendo nada bien. Estaba seguro
que Siwon me iba a dejar. Hasta que
sentí sus brazos rodear mi cintura y detener mi caminata. Ni siquiera di cuenta
que había comenzado a caminar hacia su habitación.
Nos
detuvimos justo antes de llegar a su puerta.
— Tuviste que dejarme ir a China para
verme con Hankyung cuando no te gusta, para darme cuenta… - me giro entre sus
brazos quedando frente a Siwon, mis manos agarradas de su ropa. Intento
sacudirlo pero si apenas y lo muevo, quisiera golpearlo para hacerle
reaccionar, sin embargo la violencia no nos lleva a nada.
«Te
vas como si nada… como si no estuviera sucediendo nada en nuestras vidas. A la
primer oportunidad que tienes viajas a su encuentro, a dejarte consolar por
alguien más»
Recuerdo
sus últimas palabras…
— Nada pasó, te lo juro. Él se va a
casar, ama inmensamente a su prometida casi tanto como te amo yo a ti, no
podemos engañar a las personas que amamos.
— ¿Quién dijo que íbamos a terminar? -
le escucho decir después de mi parloteo.
— Dijiste que teníamos que hablar y
pensé…
— Quería saber cómo te fue en el viaje,
cómo te sientes ahora, sobre todo si estás bien con todo lo que ha pasado.
Quería
abrazarme a su cuerpo en ese momento y lo hice, no podía ser más bueno, ya que
no existía la posibilidad de separarnos. Exhale profundamente su aroma
tranquilizándome por completo, deshaciendo ese nudo nervioso en mi estómago y
llenando mi pecho de calor. Hasta mi respiración volvió a normalizarse, Siwon
es todo lo que necesitaba en mi vida y mi cuerpo también lo sentía de la misma
manera.
— Heechul, fue muy doloroso para mí que
cerraras tus sentimientos, que no me dejaras saber lo que estabas pasando y que
tampoco me dejaras entrar, cuando lo único que deseaba era estar contigo,
ayudarte aligerar el dolor.
— Yo ni siquiera sabía que estabas
sintiéndote de esta forma.
— Porque esta es la primera vez desde lo
sucedido que podemos hablar sobre el tema sin que te cierres.
— Lo sé, y lo siento. – su mano pasando
por mi espalda en una lenta caricia, estaba sintiéndose muy bien. — Fui muy
egoísta, pensaba que mi dolor era diferente, que lo estaba superando a mi
manera y que podía hacerlo yo solo, pero no fue así.
— Siempre has sido así hasta que
terminas por explotar. Entonces vuelves a ser tú mismo, sin embargo esta vez te
tardaste demasiado, estabas ensimismándote mucho y no sabía cómo hacerte
reaccionar o causar esa explosión que te desahogara.
— Así que me dejaste ir.
— ¿Hice bien? – pregunta Siwon algo
dudoso todavía.
— Tú siempre sabes cómo ayudarme. – le
dije y lo besé
Mis labios
estaban sobre los suyos, besándolo con todas las ganas contenidas durante todos
estos días, de haberlo extrañado. Se trataba de un beso lleno de amor, de
comprensión, entendimiento. El sentimiento recorriendo nuestra piel hasta
hacerlo crispar, podía sentirlo mientras lo besaba y casi quise llorar. Tenía a
mi Siwon de regreso.
Cuando
enredó sus brazos sobre mi cintura, Siwon me apretó contra su cuerpo,
haciéndome gemir al sentir su excitación. Cosa que Siwon aprovecho para
profundizar el beso, haciendo danzar nuestras lenguas entrelazadas y casi estuve
a punto de gritar por la sorpresa al ser levantado por sus brazos.
No era
nada sutil ni dulce, Siwon parecía cargar una caja de mudanzas mientras trataba
de continuar el beso, apretando mis muslos. Seguramente me quedarían marcas,
por lo que termino enredando mis piernas alrededor de su cintura mientras
recorre a través del corto tramo hasta llegar a la cama.
Sin
embargo antes de hacer algo en aquella cama, misma que compartimos muchas
veces, todavía quedaba algo por decir. Apoyo mis manos sobre su pecho y lo
aparto, separándome del beso.
Lentamente
mis pies tocan el suelo.
— ¿Qué sucede?
— Recuerdas ese episodio depresivo que
tuve hace cuatro años cuando me enteré que no podría participar más en las
rutinas de baile de Super Junior por la lesión en mi pierna. Fue algo difícil
de asimilar. Hasta lloré en un programa por eso.
— Claro que lo recuerdo. – Siwon dice
pasando sus manos sobre mis hombros en una caricia lenta hacia abajo hasta mis
manos, donde las sostiene enredando nuestros dedos — Ninguno lo sabía.
— Pero tú lo intuiste, estuviste conmigo
aunque no estabas activo en el grupo. – como veo que quiere hablar, le hago
callar con un dedo en su boca antes que lo haga — Sufría porque llegue a
sentirme inútil por tener esta lesión que finalmente no era mi culpa. “Yo no
había lastimado mi cuerpo”, y que terminara mi carrera de esta manera me estaba
destruyendo. Después de eso, no sabía cómo iba ganarme la vida, me encontraba
perdido. Hasta que me di cuenta que mi vida no terminaba ahí, ni siquiera como
idol. No es como si hubiera hecho algo malo y quedar expulsado del grupo,
continúe haciendo programas de variedades, y ahí fue donde encontré mi camino.
Entonces pude superarlo.
— Algo parecido me pasó esta vez.
Necesitabas tiempo. – me dice.
— Al parecer tú siempre sabes lo que
necesito.
— Porque te amo Heechul, eres mi pareja
elegida, la persona con la que he pasado tantas cosas a lo largo de estos años.
Un amigo del cual nació el amor. – le siento acariciar mi mejilla— Siempre voy
a estar contigo, aunque no creas necesitarme y pienses que puedes hacerlo solo,
voy a estar a tu lado.
— Y yo, porque tú también me necesitas.
– lo abrazo enredando mis brazos alrededor de su cuello hasta atraerlo a mí —
Lo siento porque no estuve a tú lado. Te amo Siwon. En verdad lo siento.
Nos
miramos a los ojos y pude ver todo el amor que me estaba perdiendo en todo este
tiempo que estuve encerrado en mí mismo, Siwon siempre será una parte
importante de mi vida. Está experiencia me haría confiar más en mi pareja
cuando tuviera una dificultad.
Y aunque
no pudiéramos pasar tanto tiempo juntos como antes, así estuviéramos alejados
semanas, sabía ahora que nada de eso podría cambiar lo que tenemos juntos,
nuestro amor no disminuiría nunca.
Estaba
comprobado.
Vuelvo a
buscar los labios de Siwon, determinado a recuperar el tiempo que habíamos
perdido estando separados, y también para demostrarle de todas las maneras
posibles cuanto le amaba.
Escucho la
respiración de Siwon se acelerarse. Con mis brazos enredados aún en su cuello,
abro mis ojos para poder observarlo durante el beso. Siwon tiene sus ojos
cerrados suavemente, sus largas pestañas haciendo sombras en sus mejillas.
Siwon es tan hermoso, tan joven, todos dicen que es guapo y claro que lo es.
Aunque a
veces es como un niño. También es hermoso porque parece un niño mientras
duerme, con sus cerrados sus pestañas descansando sobre sus mejillas. Hermoso
como cuando su bronceada piel respáldese a la luz del sol y como un chiquillo
me sonríe, todo se ilumina. Hermoso como amanecer cada mañana a su lado y verlo
despertar amodorrado, sonriente, pegado como oso-abrazador a mi cuerpo, es
lindo también.
Nuestras
bocas deseosas vuelven a danzar juntas, sin tener suficiente al parecer,
deseándonos el uno del otro. La traviesa lengua de Siwon invade mi boca y yo la
abro más para él, sintiendo como explora cada rincón hasta hacerme gemir en el
beso. Sabe cómo hacerlo, rudo, fuerte, salvaje, voraz, como un beso entre
hombres debe serlo.
Termino
casi colgado de su cuello, queriéndolo pegar a mi piel y en mala hora recuerdo
que no estamos desnudos. Siwon intenta hacer lo mismo con sus manos en mi cintura,
pegándome más a su cuerpo sin encontrar el alivio que solo la piel sobre piel
da.
Nos
separamos de nuevo intentando respirar normalmente con los labios hinchados por
el beso, ya que ambos notamos el problema de la ropa que se interpone entre
nosotros. Claramente los dos estamos duros, pude sentir a Siwon al estar pegado
a su cuerpo y seguro que él también pudo sentir mi dureza.
— Siwon… - alcanzo a decir en un gruñido,
extrañándolo ya.
— Necesito tocarte mi amor.
— Oh, yo también, créeme.
Mi cabeza
rebota en la cama el ser botado por Siwon en medio de risas y cosas tontas que
solo puedes hacer cuando estas con la persona que amas. La camisa de Siwon
termina en el piso, entonces un Siwon trepando en la cama y sobre mi aparece en
mi visión. En su camino va dejando besos donde sus manos van descubriendo la
piel y deshaciéndose de la estorbosa ropa.
Primero mi
torso es desnudado y después… Siwon dejando besos sobre mi pecho, mordiscos en
mis tetillas y lamidas por donde quiera que puede. Tampoco me quedo quieto, voy
desabrochando su pantalón para deshacerme de ellos y al poco tiempo mis manos
exploran los músculos de sus nalgas, duras, firmes, bien formadas.
Siwon
sonríe, le encanta. Mis manos siguen su camino hacia abajo hasta bajar sus
pantalones donde Siwon termina por deshacerse de ellos. Entonces regresa
atacando mi boca, mordiendo mis labios y saboreándolos muy hambriento, cosa que
me hace reír.
— ¿De qué te ríes? – le escucho
preguntar intentando no reír también mientras sus manos abren mis pantalones—
¿Y esto? – vuelve a preguntar pero ahora señalando mi ropa interior.
— Esto… - muerdo mi labio para no reír,
la cara de Siwon es un poema— Esto es mi ropa interior nueva que compre en
China.
— ¿Tenía que ser rosa? – insiste en mi
ropa interior.
— Me gusta el rosa, ya lo sabes.
— Pero, ¿tenían que ser tan grandes? –
se ha deshecho de mis pantalones.
— Siwon te pondré esto en perspectiva,
eran estos calzones grandes, rosados y algo ridículos… - ojala mi ropa interior
me perdone porque me encanta, es tan cómoda y suave— o la ropa interior sexy
que tanto te gusta y la cual me tengo que poner para usar esos pantalones
ajustados que usé en la gala, mientras me quedaba en el departamento de
Hankyung.
— ¡¿Te quedaste en el departamento de
Hankyung?!
— Lo hice y lo sabes, puesto que me
dejaste ir allá.
Siwon no
dijo más, y sus diestras manos terminaron por deshacerse de ellos, dejándome
completamente desnudo. Mi pene hinchado salto sobre mi estómago, duro y listo,
casi tanto como el de Siwon estaba.
— Mi turno. – le digo, y le doy la
vuelta para dejarlo recostado sobre a cama.
Termino
agachando sobre su entrepierna, su pene entre mis labios y mis cabellos
cosquilleando su ingle seguramente. Siwon comienza a gemir al ritmo de mi boca
mientras voy acelerando las caricias sobre su erección.
Lo dejo
tan pronto le escucho jadear, no quiero que termine sin que lo pueda sentir
dentro de mí, y a pesar que no me he preparado, es más el deseo de sentirlo
dentro, que pienso intentar meterlo lentamente. Con su pene en mi mano, me subo
ahorcajada sobre Siwon y comienzo el lento descenso. Sus manos intentan
detenerme pero no cedo.
— Heechul… - le escucho gemir y sus manos
apresan mis muslos deteniendo mi descenso.
— Estoy bien… espera…
Siwon está
en el borde resistiendo, puedo sentirlo pues su pene salta y se endurece más.
Creo que fue demasiado darle placer con mi boca después de tanto tiempo de
abstinencia entre los dos.
Basta con
que me mueva un poco sobre su pene cuando el calor comienza a invadir y
arremolinarse en mi estómago, el cual explota cuando también Siwon lo hace.
Cierro mis ojos y muerdo mis labios, al sentir como mi respiración se queda en
un vilo. Estoy quieto pues no puedo moverme más, disfrutando un poco más de las
sensaciones del éxtasis.
— Como había extrañado esto. - abro mis
ojos y observo a Siwon con una expresión de deleite que seguramente tengo yo también.
Termino
por dejarme caer sobre su pecho, los dos terminamos sudorosos y pegajosos pero
no importa. Escuchar y sentir como nuestros acelerados pulsos se van
acompasando, es lo mejor después de haber hecho el amor. Es el momento más
íntimo y mi parte favorita, pues no tengo que decir nada, Siwon lo sabe todo. Y
yo lo sé, al dejarlo acariciarme como un niño pequeño sobre su pecho, es la
mayor muestra de amor que puede haber.
*******
Después de
bañarnos volvimos a la cama y nos acostados mirándonos el uno al otro mientras
nuestras cabezas descansan recostadas sobre las almohadas. Estando así, es
cuando me doy cuenta que de esta forma es mucho más íntimo estando con Siwon. Suspiro
profundamente, acabamos de reconciliarnos con sexo y estamos sobre la cama de
nuevo, sin embargo esto se siente tan diferente de lo que fue estar con
Hankyung, aunque no hay punto de comparación. Hankyung y yo no tuvimos sexo.
Comienzo a
reír por el rumbo que toman mis pensamientos.
— ¿De qué te ríes? – Siwon hace la misma
pregunta por segunda vez.
— Te equivocaste en algo.
— Oh, pero bien que te gustó, no escuche
tus quejas.
— No es eso, tonto, - golpeo su brazo— lo
que dijiste antes de irme.
«Por siempre Hankyung, se va
arrepentir de lo que dejó ir, mi bello gatito, él se pondrá muy feliz al verte
y apuesto que no se te despegará en todo el evento».
Le
recuerdo a Siwon ese momento.
— ¿Qué hizo? – oh sí, está muy
interesado.
— Hankyung si se separó varias veces de mí
durante el evento.
— Ah, sí.
— Para ir al baño por supuesto. –
entonces comienzo a reír mientras veo como Siwon intenta darme la espalda pero de
inmediato voltea y se viene contra mí.
— Por-su-puesto.
Enseguida
soy atacado a besos y cosquillas por Siwon, divertido por lo que está haciendo.
Pronto siento sus labios contra mi cuello haciendo cosquillas ahí también, hasta
que no puedo más y termino rindiéndome.
De nuevo tranquilos,
me recuesto sobre su pecho, un poco agitado aún.
— Hankyung me invitó a su boda en Nueva
Zelanda, incluso se ofreció a pagar el vuelo y lo demás, - comienzo a
explicarle mirando hacia él— pero eso no es lo que me preocupa.
— ¿Crees que voy a dejarte ir? No, al
menos esta vez no iras solo, porque voy contigo. – se le hincha el pecho todo posesivo
dominante, como si eso funcionara conmigo… bueno lo hace, de manera contraria,
me excita verlo así.
— Es obvio que no voy a ir. Es muy lejos
y tengo agenda, debo viajar mañana a Jeju, seguramente ni siquiera podré verte
en dos días. Eso si al regresar, tú estás aquí y no tienes agenda.
— No te preocupes. – lo siento besar mis
labios cortamente — Te alcanzare en Jeju.
— ¿Lo juras?
— Te dije que voy a estar contigo
siempre que me necesites. Estás largas ausencias las solucionaremos en el
camino, poniendo todo de mi parte, es promesa – promete Siwon, pues es quien
viaja más.
Y con esa
promesa de estar a mi lado siempre, también hice la mía. Mi promesa es no
dejarle solo otra vez y abrirme más con lo que este sintiendo, porque he
entendido que no soy tan fuerte cuando estoy sin él.
Porque es
una gran verdad aquella frase que dice: “el amor nos hace más fuertes”.
FIN
Fue tan hermoso ������❤
ResponderEliminarAmbos se complementan tan bien. El ser fuerte solo es dificil, pero no para ellos. Ellos se aman y estando juntos son aun más fuerte de lo que se puede esperar ❤
Fue precioso prima.
Ame la escena de la ropa interior ��������