La mañana
había llegado, y en la habitación del hotel Heechul y Siwon se encontraban, las
mañanas entre ellos no eran exactamente perfectas, pero siempre eran buenas,
encantadoras.
La
felicidad entre ambos era obvia, pero además estaba una situación, la cual
Siwon debía tratar cada vez de que estaban juntos. Bien se había dado cuenta
ya.
— Estas de mal humor – mencionó Siwon
tras un momento de silencio. No estaba molesto, al contrario, aquella actitud
por parte de Heechul le gustaba, y sabía cómo manejarlo.
— Me duele el trasero – decía Heechul de
manera enfurruñada mientras comía.
Ambos se
encontraban comiendo en la habitación, con sus batas de baño puestas. Siwon
miraba entretenido a Heechul quien evadía su mirada.
— Tomaré nota de esto. – dijo el menor,
antes de tomar otro bocado con una pequeña sonrisa ladina escapando de sus
labios, gesto que no pasó desapercibido por el otro.
— ¿Qué? ¿De mi trasero? – preguntó sin
dudar Heechul de manera directa, aunque no muy seguro de saber la respuesta.
— Siempre te pones de mal humor el día
después del sexo. – ese tipo de cosas eran las que Siwon disfrutaba recordar,
junto con la pasión vivida con Heechul al hacer el amor y todas esas zonas que
aprendió a tocar en el cuerpo de Heechul, hasta hacerlo gritar.
— ¡Solo me duele el trasero…! – Heechul
gritó al decir aquello, dando una palmada con fuerza en la mesa, pero al darse
cuenta de su exagerada reacción bajo la voz y cruzo los brazos – No estoy de
mal humor.
Siwon se
levantó de su silla sin pensarlo dos veces y lo abrazo por la espalda, besando
la mejilla de Heechul, para después acomodar su rostro en el hombro de éste y
sonreír un poco. Esas actitudes de Heechul siempre le habían gustado, le
encantaban, le parecían adorables viniendo del hombre que tan enamorado lo
tenía.
— Dicen que, si lo haces otra vez, al
otro día, deja de doler. – sugirió Siwon, solamente imaginando la expresión el
rostro del mayor, sonrió de pensarlo.
Los
colores se subieron al rostro de Heechul, pues bien que recordaba haber
escuchado lo mismo de la boca de Donghae, cuando le confesó lo que había pasado
entre él y Siwon la primera vez, bajo la manta. Sin embargo, una cosa era
escuchárselo a Donghae como consejo de amigos, y otra, escucharlo de la boca de
Siwon como una invitación indecorosa, en la cual se sentía bastante interesado,
pero no lo demostraría tan fácilmente.
— Ya lo había escuchado antes. – dijo
Heechul sin inmutarse, aprovechando que el Siwon no podía verlo a la cara.
Siwon
dirigió su mirada Heechul esta vez con curiosidad, sorprendido, algo en su
cerebro entendió aquello como una señal de alarma y sin más se colocó delante
de Heechul, mirándolo directamente a los ojos, una mirada que Heechul reconocía
bastante bien.
Siwon
estaba celoso
Buen
momento para elegir ponerse celoso, pensaba Heechul, él ya se estaba dando
cuenta de esa parte de Siwon. Su chico era bastante tranquilo hasta que algún
indicio que pudiera ponerle celoso apareciera.
Aquello,
aunque sonora mal, no le molestaba a Heechul, al contrario, le gustaba sentir
que Siwon lo reclamara como suyo, sin embargo, si como su hyung siempre fue
posesivo con él, ahora que estaban juntos, Heechul ni siquiera se atrevía a
pensar.
— Fue Donghae. – es lo único que dijo
Heechul, con su tono tranquilo, dándole a entender a Siwon que ya sabía hacía
donde iban sus ideas y que no era lo que él estaba pensando.
El
semblante de Siwon se suavizó, casi al punto de suspirar de tranquilidad,
Heechul contuvo una risa burlona.
— ¿Quieres probar si es verdad? – le
preguntó Siwon de manera coqueta, incitadora, con toda la intención de provocar
a Heechul, entonces tomó el rostro ajeno de manera suave desde la barbilla
hasta el pómulo, sin apartar sus ojos de los suyos.
Los
latidos de ambos corazones se sincronizaron, la emoción y el encanto de aquel
momento, combinado con la coquetería y provocación los tenía al filo de sus
sentimientos, era un momento para atesorar, como cada momento que pasaban
juntos, el mundo dejaba de importar cuando se miraban a los ojos.
Heechul
pensó su propuesta por un par de segundos, quizás era verdad lo que decía
Donghae, tal vez debería comprobarlo.
— Mi desayuno. – señaló Heechul,
queriendo restarle importancia a la situación, que él sabía cómo terminaría
aquello.
— La tina tiene hidromasaje y agua
tibia, eso también ayudaría. – Siwon comentó aquello en un intento de que el
ambiente entre los dos no se apagara, y Heechul no evadiera lo que ambos
querían, y si debía chantajearlo, lo haría.
— Ay por Dios, creo que ya voy
entendiendo como fue que comenzó todo esto. ¡Eres ninfómano Simba! – Heechul
soltó la acusación un toque de drama
Siwon se
limitó a soltar una pequeña risa, Heechul no se le iba a escapar por nada del
mundo, aunque era cierto que, si se trababa de aquella suave y lechosa piel,
las palabras de Heechul cobraban sentido.
— Solo contigo, Rella. – apuntó a decir
Siwon, acercándose un poco más a él,
Ding, ding, ding, aquella respuesta había sido la
correcta, solo que Heechul no iba a dejarlo ganar tan pronto, quería jugar un
poco más con su ansioso amante.
— Como a ti no te duele. – reclamó
cruzándose de brazos, dirigiendo su mirada en lejos de la de Siwon, haciéndose
el ofendido, aunque claro, sólo estaba jugando para provocarlo más.
— Pero dejara de doler, lo prometo. –
aseguró Siwon acercándose más aun, sin dejar de sonreír.
— Si fuera tu trasero… - susurró Heechul
a modo de reclamo, pero rápidamente volvió a controlarse — ¿Cuántas veces lo
hicimos? – preguntó, esta vez mirando al más alto.
— No te escuché quejarte anoche, Rella.
– respondió Siwon, acentuando su mirada coqueta y retadora, queriendo provocar,
aún más de ser posible, a Heechul.
— Se va a enfriar mi comida. – Heechul
tomó los cubiertos y se giró hacia la comida, como si nada de la conversación
anterior hubiera ocurrido.
— Podemos pedir más. – insistió Siwon,
intentando que Heechul se le terminaran las excusas. — Puedo pedir que traigan
de esa comida que tanto te gusta.
Los ojos
de Heechul se interesaron ante esa proposición y Siwon supo que ya no tenía que
decir nada más. Lo había logrado.
— Anda, prepara la tina. – fue todo lo
que dijo Heechul con un tono divertido pero derrotado, sin mirar al menor.
Siwon se
fue sin más rumbo al baño, feliz de haber convencido a Heechul y emocionado,
cuando vio que el mayor se levantó de su silla, intentando pasar desapercibido,
y agarró a correr hacia la puerta de la habitación, aun en bata. ¿Realmente
Heechul creía que no se daría cuenta?
Entre
risas provocadas por las ideas de Heechul, Siwon le dio alcance atrapándolo a
medio camino, bloqueando su intento de escape. Lejos de molestarlo aquello a
Siwon, le gustaba, le provocaba ternura, Heechul podía ser como un niño
pequeño, tenía su lado juguetón e inocente.
— ¿No que te dolía hasta para caminar? –
preguntó Siwon enarcando una ceja, mirándolo directo a los ojos.
Heechul
pasó saliva con dificultad. ¡Oh sí! Había sido atrapado.
Comenzaron
a forcejear un poco entre las risas de Heechul y las acusaciones de Siwon, era
un tierno juego entre ambos, de esos momentos sencillos y bonitos que ambos
disfrutaban y después terminaban recordando con gusto.
Entre
cosquillas y algunas carcajadas, Siwon logró poner a Heechul sobre su espalda y
llevarlo de esa forma hasta el baño, y aunque Heechul alegaba que lo soltara
Siwon no iba a dejar que se le escapara, no cuando había comprobado que Heechul
estaba tan bien, como para repetir en el baño.
Al final,
Heechul también terminó muy interesado en la vista que le mostraba Siwon al
cargarlo de aquella forma, su trasero respingado se podía ver muy bien.
******
— Tenemos que hablar. – su voz era
inconfundible, se trataba de su padre.
Esa había
sido la única frase que su padre le dio por teléfono y que tenía a Siwon de
camino a su oficina, a la cual no tardó en llegar.
Al entrar,
ahí estaba su padre esperando por él a que llegara. Las veces que Siwon lo
había visitado en aquel lugar, solía encontrar a su padre sentado leyendo un
libro o a veces algún informe que lo mantenía concentrado hasta que Siwon lo
saludaba. No fue así esta vez, pues su padre estuvo atento a él desde su
llegada.
¿Tan
importante es lo que tenía que decir?
Cuando su
padre se sentó en la sala que ocupaba una parte de aquella oficina, le indicó a
Siwon que hiciera lo mismo, sentándose en otro sofá algo apartado de su padre.
Ambos
estuvieron un tiempo en silencio, Siwon pareciendo turbado por el serio
ambiente y el señor Choi, no quitaba su mirada sobre él. Siwon lo que realmente
estaba esperando es a que el señor Choi le explicara porque lo había llamado o
le hiciera alguna pregunta que comenzara todo.
Aunque
Siwon ya tenía una idea del tema que tratarían, llevaba semanas recibiendo los
mismos mensajes y llamadas que últimamente Siwon ignoraba.
«¿Qué hijo en su sano juicio haría
algo así?» Había
leído Siwon en uno de los mensajes y casi sintió desprecio por su padre, cosa
que también estaba hiriendo su corazón.
Sin
embargo, Siwon no estaba preparado para lo siguiente que pasó, pues una
bofetada resonó en la habitación y después un grito.
— ¡Haz estado ignorándome!
Siwon se
llevó una mano a la mejilla que había sido duramente castigada mientras su otra
mano la cerraba en un puño, conteniéndose. Después de todo era un hombre, con
defectos e impulsos, pero también era un hijo que amaba a sus padres.
Frenándose
a sí mismo, Siwon estuvo a punto de responder la bofetada al señor Choi con
algo igual de físico, por lo que trato de calmarse y retirarse lo más posible
de su padre levantándose del sofá, y cuando se giró de nuevo hacia el señor
Choi, este lo miraba con fuego en sus ojos.
— ¿Por qué no puedes ver que lo que
estás haciendo con ese chico está mal? Muy mal.
— Padre…
— ¿Por qué? ¿Por qué estas tratando a tú
familia y a su buen nombre? – el señor Choi seguía usando un tono alto para
Siwon.
— Padre, déjame descubrir que es lo que
realmente siento por él.
— ¡Se razonable Siwon! Esto no puede
ser.
— Lo siento. – dijo Siwon resignado a no
poder ser el buen hijo que sus padres merecían, a lastimar a Heechul si hacía
lo contrario. Se sentía tan agobiado, hasta que finalmente llevo las manos a su
rostro.
— Siwon…
En el
fondo, sabía que su padre tenía razón al estar preocupado de esa forma por él,
y saber esto solo lo hizo sentirse más desdichado. Mil ideas se arremolinaban
en su mente, dando vueltas y clamando por su atención.
Siwon
estaba consiente que no era perfecto, más bien era humano y su padre también lo
era… ambos no eran ni siquiera un poco perfectos y que tampoco era el único
defecto que podrían tener. Sin embargo, eran familia y Siwon deseaba que esa
parte de él, la que ahora estaba con Heechul, lo entendiera también.
— ¿Acaso no entiendes lo que siento?
— Eso no es cierto…
— Primero pensaba que no se trataba de
“amor” y que pensé que podría hacerlo sin involucrarme más, porque había metido
a todos en un problema, pero después, me di cuenta de que ya tenía este tipo de
sentimientos por él, que estaban aquí. – dijo Siwon señalando su corazón.
Siwon se
dio cuenta que en ningún momento había mencionado el nombre de Heechul, pero no
por eso lo amaba menos, simplemente creyó prudente no hacerlo para no aumentar
la ira del señor Choi. Hablarle del amor, como si fuera solo eso, amor.
— Yo…- continúo Siwon— Yo no estoy para
nada cerca de ser perfecto. Me he esforzado para serlo y no lo he conseguido,
lo siento.
— Deseo mejores cosas para ti, Siwon.
Alguien que te quiera, una chica linda que puedas tomar con orgullo entre tus
brazos, que no te puedan lastimar cuando camines de la mano con ella…
— Lo sé… - murmuró Siwon — pero, lo amo.
— ¡Eso no puede ser! Lo sabes bien
Siwon. – el señor Choi ya estaba bastante enojado. Se alejó y caminó hacia su
escritorio — El contrato que firmaste con SM para estar junto a esa persona,
está por terminarse y cuando eso suceda, podrás separarte inmediatamente de esa
persona. – ese contrato, inquietaba mucho a Siwon.
Entonces
quizás Siwon no estaba siendo completamente sincero con su padre sobre lo que
estaba sintiendo en esa platica. Siwon quería gritarle, decirle que, por
supuesto eso no era lo que él quería, pero no iba a enfadarlo más de lo que ya
lo había hecho.
— No pienso hacerlo, dejarlo, al menos
no de esa forma. – aclaró Siwon antes de tomar camino hacia la puerta.
— Bien, si eso es lo que quieres hijo,
al final será tu decisión, como todo lo que has hecho con tu vida hasta ahora.
– escucho decir al señor Choi con voz serena.
Y esas
palabras, en lugar de tranquilizar a Siwon, le inquietaron más.
— Nos vemos más tarde, padre. – dijo
Siwon abriendo la puerta, no se detuvo a mirar al señor Choi, no podía hacerlo.
Y aunque
Siwon tal vez tendría que tomar una decisión pronto, cuando la nube oscura que
lo confundía se disipara, antes o después tendría que hacerlo… por Heechul y
él… o por su familia.
Continuará…
Aahh! Choi esta en una situación dificil.
ResponderEliminarAhora entiendo porque voy a sufrir 😭😭💔
La relación de Siwon y HeeChul a llegado más allá y se aman...... Pero su padre con todos sus perjuicios solo va a lastimarlos a ambos...
ResponderEliminaren serio me frustra Siwon siempre quiere hacer todo para no lastimar a los demas para no defraudar a sus padres cuando va hacer algo que lo haga feliz y su indecicion solo lastimara a quien mas quiere , gracias por el cap bye.
ResponderEliminarUmmm la verdad a mi también me inquieta bastante el asunto del contrato, desde mi punto de vista no es relevante, ya que de todos modos ellos han declarado su amor y relación ante el mundo, y son aceptados como tal. Pero me da cosita que en el futuro, especialmente el padre de Siwon, saque a la luz la existencia de dicho contrato y las fans y el publico se sientan engañdos por ellos.
ResponderEliminar