Sus Dos Regalos.... Parte Dos

Barcode caminaba en la oscuridad tratando de no caer, tocaba su turno para ir a felicitar a Ta, así que iba caminando cuidadosamente, pero no fue suficiente porque terminó chocando con Ta, enviando a los dos hacia atrás hasta caer sentados sobre el sofá.

De alguna manera Barcode terminó sentado en las piernas de Ta, quien sostenía a Barcode con una mano en su espalda, donde pudo sentir una cinta pegada, la misma que había dejado Jeff sin despegar.

— ¡Ah, phi! – se asustó Barcode cuando Ta jaló la cinta pegada a su ropa, de esa forma su playera fue levantada un poco hacia arriba dejando su piel expuesta.

El pequeño Code no dudó en cubrirse rápidamente con sus manos y Ta, al escuchar la voz de Barcode, no dudó en tomar la barbilla del menor hasta girarlo hacia él y besarlo. Un pequeño roce de labios que Ta llevaba mucho tiempo queriendo hacer, pues le gustaba su pequeño Nong. Un beso dulce que le pareció muy corto, pero no podía esperar más, tampoco deseaba asustar a Barcode.

Aunque no fue suficiente, porque Barcode se levantó de sus piernas y huyó despavorido de ahí, dejando a Ta de pie un poco preocupado por el estado de su nong.

Ya faltaban pocos, entre ellos Jeff, que se fue acercando con cuidado a donde suponía estaba Ta. Sin embargo, no fue lo suficientemente cuidadoso, porque terminó tirando algo que resonó en el suelo.

En un intento por salvar lo que sea que se haya caído que seguramente sería muy caro, Jeff se agachó sin contar con que Ta que estaba cerca, también se agachaba por ello. Sus cabezas chocaron en un golpe, cuando Jeff intentó levantarse, su cuerpo dio vuelta ya que Ta perdió el equilibrio sosteniéndose de él. Jeff dio un mal paso lo que hizo que Ta se desequilibrara, ya que Jeff resbaló cayendo hacia atrás. El cuerpo de Ta estaba contra el suyo, juntos y demasiado cerca.

Después de la caída, los dos estaban en el suelo, Jeff debajo de Ta, quien como pudo, sostuvo la cabeza de Jeff para que no se golpeara, aunque el impulso los hizo que terminaran golpeando otra parte de sus cuerpos y también sus bocas, se estaban besando accidentalmente.

Obviamente Ta no sabía a quién estaba besando, pero Jeff sí y a pesar de eso no lo detuvo. El olor, Ta estaba seguro de quién se trataba esa aroma tan peculiar y en su interior gruñó de satisfacción.

Ta se separó un poco dejando la boca de Jeff por un momento, solo para volver a besarlo. Jeff no podía estar más sorprendido viéndose a sí mismo correspondiendo el beso de Ta y después de unos segundos, volverse a separar.

Justo a tiempo, antes de que la luz volviera, Ta se sentó en el suelo al lado de Jeff, que aún se encontraba recostado en el suelo después de la caída y el beso. La luz volvió así que Ta pudo ver claramente a quien había besado y lo que vio le gustó, pues Jeff se encontraba con los ojos desconcertados, agitado, su cabello hecho un lío y los labios hinchados por los besos dados.

— ¿Cómo terminaron ahí? – Apo preguntó, ya que al regresar la luz, Mile y él también regresaron al departamento.

— Me caí. – dijo Ta levantándose rápidamente del suelo al ver que Jeff también intentaba levantarse.

Al estar de pie, Ta le ofreció la mano a Jeff, este dudando por un momento terminó aceptándola para ayudarse. Cuando por fin estuvo de pie, Jeff no quiso levantar sospechas de lo que sucedió ahí mismo en la oscuridad, así que trató de actuar lo más relajado posible y abrazó a Ta.

— Esto no se va a quedar así. – dijo Jeff susurrando para que solamente Ta pudiera escucharlo y enseguida, Jeff se alejó rápidamente sin dejar que Ta respondiera.

— ¿Y JJ? – preguntó Mile sin notar nada de lo sucedido entre esos dos.

Como si supiera de la rara atmósfera, JJ ya venía con el pastel en las manos y a Us siguiendo sus pasos con el encendedor en la mano.

— Vamos a cantar a Ta. – sugirió Perth.

Todos se juntaron a su alrededor, excepto Barcode y Jeff, quienes se quedaron a una distancia prudente, ambos intentando ocultar sus sonrojados rostros. Jeff se encontraba desconcertado por lo que acababa de hacer, el primer beso había sido un accidente, pero ¿y el segundo?

Por su parte Barcode sentía un conflicto con sus emociones. Él ya sentía algo por su P'Jeff y no niega que Ta es guapo y en varias ocasiones ha hecho dudar a su corazón. ¿Acaso está mal por querer tenerlos a los dos?

La fiesta se llevó a cabo según lo planeado. El pequeño inconveniente con la luz y lo ocurrido durante el juego, no afectó ni hizo bajar los ánimos para el festejo hacía el cumpleañero.

El alcohol no pudo faltar y teniendo en cuenta que al día siguiente ninguno tenía algo realmente importante por hacer, ya que era sábado. Se dedicaron a dejarse llevar y disfrutar del momento entre todos.

Jeff no era un fanático de la bebida, pero la situación con Ta lo tenía algo tocado. Por ello no supo en qué momento las dos cervezas se convirtieron en diez. No estaba borracho, pero sí algo mareado y con un poco más de soltura en sus acciones.

Alzando la mirada para observar a su alrededor, se topó con varias escenas. Mile y Apo platicaban en el balcón, aunque realmente solo era Apo hablando, sus manos se agitaban en el aire mientras Mile se dedicaba a escucharlo con una leve sonrisa.

Pong y Tong de igual forma platicaban en la esquina de uno de los sofás. Pong miraba al mayo con amor, Tong captaba esa mirada, pero fingía no ser 100% consciente de ello.

Us y JJ bailaban en la improvisada pista. Ambos se sonreían enfrascados en su propio mundo.

Bible mensajeaba en su celular con una leve sonrisa en su rostro, ya que Build se tuvo que ir antes de que todo el lío con la luz ocurriera.

Ping y Perth jugaban en la pequeña consola que el chico fanático del anime había llevado para mostrar su nueva adquisición.

Los únicos que faltaban eran Job, Bas, Code y Ta.

Pensando en buscarlos, Jeff tomó impulso y se levantó de su asiento. Llegó a marearse por su rápido movimiento, pero enseguida logró mantenerse recto en su sitio. Revisó primero la cocina, pero no había nadie ahí, así que siguió por el pasillo hacía las habitaciones.

Un ruido sordo, le hizo saltar. Preocupado, camino hacía el lugar del ruido, que no era más que el baño. Estaba por empujar la puerta cuando un quejido se oyó por lo alto, seguido a ello un fuerte resoplido y luego el sonido de los besos.

Asqueado se alejó. Esos seguramente eran Bas y Job.

Jeff continuó su camino evitando pensar en lo que esos dos estarían haciendo, para seguir en su búsqueda de Code y Ta.

— Barcode... – La voz de Ta se escuchó casi al final del pasillo.

— Yo... no lo sé Phi. – Code se escuchaba nervioso.

— Solo piénsalo, ¿sí?

Jeff terminó de acercarse justo en el momento que Code decidió irse de ahí. Ambos chocaron en la puerta del pasillo.

— ¿Sucede algo? – logro preguntar algo confundido.

Barcode solo le miro antes de negar con fuerza y salir prácticamente corriendo de ahí.

— ¿Por qué estaban ustedes dos aquí? – Jeff tenía curiosidad. ¿De qué estarían hablando sus nongs?

— Nada.

Jeff miró a Ta. El chico se mostraba tranquilo, tenía una pose totalmente relajada y en su rostro apareció esa linda sonrisa que le hacía parecer un gatito. Era tan adorable, tan guapo, tan...

— ¿Necesitas algo, Phi? – la sonrisa de Ta aumento.

— ¿Por qué me besaste? – muy bien, demasiado brusco. Pero realmente necesitaba una respuesta.

— ¿Te gustó?

— No fue eso lo que pregunte. – Jeff frunció su ceño.

— Bien... Quería hacerlo.

— ¿Por qué?

— ¿Por qué no?

Con cada palabra dicha, la distancia entre ambos fue acortada.

— Podrías responderme tú, Phi. – Ta le sonrió demasiado cerca de su rostro. — ¿Te gustó el beso?

Jeff le miró por unos segundos. Uno, dos... Al tercero ya estaba devorando su boca. Ta seguía el ritmo impuesto por el mayor, eso se sentía taaaan bien.

— ¿De qué hablabas con Code? – murmuró Jeff alejándose solo unos centímetros del menor.

— Lo besé. - confesó Ta.

— Quiero mucho a Code. – a Jeff no le gustó mucho lo dicho por Ta, pero quién era él si ya había caído por sus besos.

— Lo sé phi, - suspiro Ta — quiero a Code y a ti también.

— Nos quieres. – sonrió Jeff tontamente.

— Quiero tener lo que ustedes tienen, con ambos.

— Barcode es mío. – Jeff seguía tonteando.

— También soy tuyo, ¿Recuerdas?

— Bien. – dijo Jeff al recordar sus besos.

Quizás era el alcohol el que le permitió aceptar tan rápido a Jeff o quizás era porque en verdad le interesaba tener a Ta y a Code para él.

— Code debería estar con nosotros, ambos podríamos cuidarlo y quererlo. Sé que le gusto. – dijo Ta convencido de lo que decía.

"¿Y a quién podría no gustarle?" Pensó Jeff.

— Vamos a tener que ir lento con él.

Y al decir esto, ambos sintieron como si de un pacto entre los dos se tratara, que sellaron con otro beso corto antes de salir de ahí.

— Déjamelo a mí. – Ta escuchó decir a Jeff antes de alejarse.

De regreso en la fiesta, Barcode se las había arreglado para beber un poco de alcohol, el chico ya estaba un poco mareado y con los sucesos, el alcohol solamente parecía traer más presentes sus enredadas ideas.

Quería a su P'Jeff, era quien hacía su corazón latir y ahora también deseaba a Ta, lo había besado y se le hacía tan guapo. Uno despertaba su admiración y el otro le hacía querer cometer locuras, los dos juntos parecían ser el paquete completo. Sin negar que también su P'Jeff le parecía guapísimo y era a quien ya le había entregado su corazón. Jeff era muy dulce con Barcode como lo demostraban sus besos. Porque ya se había besado con Jeff antes y por eso le caía un poco mal el beso con Ta y lo que le había propuesto, porque se sentía como un engaño hacia su phi.

Barcode terminó sentado en el sofá más grande observando como todos iban desapareciendo, buscando algo más de intimidad mientras él, se lamentaba estar solo, borracho, con un lío en su cabeza y corazón.

Su P'Jeff apareció en ese momento, tan lindo y sonriente ante él.

— ¿Estás mareado? – le preguntó, a lo que Barcode solo asintió. — Ven aquí.

Jeff se sentó a su lado en el sofá e hizo que Barcode recostara en el mismo con su cabeza en sus piernas. En seguida Jeff comenzó a pasar suavemente su mano sobre la espalda de Barcode. Se sentía tan bien estando ahí, siendo cuidado y mimado por su P'Jeff, que pronto sus ojos comenzaron a cerrarse.

Justo estaba a punto de olvidar todo lo sucedido en el país de los sueños, cuando el movimiento al otro lado del sillón y una voz conocida le hicieron abrir los ojos. Se trataba de Ta, quién se sentó al lado de Jeff. Casi enseguida, Barcode pudo ver como Jeff pasaba su brazo por los hombros de Ta y en un abrazo, lo atrajo hacia sí.

Ta se encontraba recargado en el mayor descuidadamente, como alguien que sabe será aceptado y cuidado por el otro, en este caso Jeff. Algo no le cuadraba a Barcode y frunció su ceño, ¿Qué estaba sucediendo entre esos dos?

Jeff pareció darse cuenta, él siempre se daba cuenta de lo que pasaba por la mente del menor, Barcode siempre ha sido fácil de leer para él, porque Jeff había aprendido a nunca perder de vista a su pequeño, Barcode siempre ha sido objeto de su atención.

— Ta está con nosotros. – fue la simple explicación que le dio Jeff y con un sonrojo en su rostro, Barcode lo entendió cuando Jeff besó la frente de Ta muy dulcemente.

Después del casto beso entre ellos, Ta bajó su rostro muy cerca del de Barcode y lo besó, obviamente con el permiso de Jeff. Que Jeff le permitiera hacer algo como eso solo significaba una cosa, estaban juntos los tres.

Para Barcode esto fue un alivio, porque al parecer su problema amoroso se había arreglado a su beneficio. Entonces, de nuevo dejó que sus ojos se cerraran disfrutando el beso y dejando que Ta explorara su boca como había querido hacerlo desde el primer beso, En seguida, Ta se separó al ver qué Barcode hacia el esfuerzo por levantarse y lo que vio calentó su corazón y cuerpo de muchas maneras.

Barcode no quería quedarse atrás sellando este pacto entre los tres, así que se levantó un poco del regazo de Jeff, solo para jalar con sus manos su rostro y besarlo rápidamente en sus labios. Después regresó a su lugar en las piernas de Jeff dónde se dispuso a dormir.

En su lugar, Jeff se dispuso hacer lo mismo, acomodó en el sofá recargando su cabeza hacia atrás y cerrando sus ojos dispuesto a dormir ahí mismo porque en su estado no creía poder llegar a ningún lado, además, su cuerpo estaba cálidamente por las dos personas que más deseaba a su lado.

Dando una mirada rápida, Ta se dio cuenta que algunos ya habían caído dormidos en cualquier lugar y otros continuaban desaparecidos. Un leve jalón que sintió en su hombro atrajo su atención hacia Jeff. El mayor lo miraba con los ojos entrecerrados, se veía tan seductor aun estando en ese estado, que Ta se dejó llevar.

Y cuando Jeff lo atrajo hacia su pecho, Ta se acomodó en él disfrutando el abrazo y cuidado del mayor. Una sonrisa se dibujó en el rostro de Ta, cuando una de sus manos fue jalada por otras dos, pues Barcode había tomado su mano para colocarla debajo de su angelical rostro para dormir encima de ella, como si no quisiera que escapara de ellos.

Al cerrar los ojos para dormir al lado de las que serían sus personas especiales de ahora en adelante, Ta aun no podía creer los dos regalos que su cumpleaños le había dado.

Abrió de nuevo los ojos para asegurarse que no fuera solo un sueño y no, no lo era. Tanto Jeff como Barcode estaban durmiendo plácidamente a su lado... Jeff sujetándolo en un abrazo sobre su pecho y Barcode jalando su mano apresándola entre las suyas. Los dos a su manera, le aseguraban que no lo dejarían retirarse tan fácil del pacto que habían hecho los tres esa noche.

FIN

************************************

En serio pensé que sería el final de esta locura pero no jajajajaja, tal vez no sea pronto o tal vez sí. Como sea, esperen por algunos especiales de este trío recién formado y las aventuras en esta peculiar relación de tres. Porque ideas las hay, ganas también y tiempo... es lo que vamos a buscar.

Gracias por leer y haber llegado hasta aquí, ojala me puedan contar si les gustó lo que leyeron. Nos leemos pronto en algún otro coso que escribí.

Saludos

HeeChan