Twoshot: El tipo del deportivo rojo II... Capítulo 1

Título del oneshot: “El tipo del deportivo rojo II”
Parejas: SiChul
Tipo: Yaoi
Género: AU, cómico, romance y un poco de angst
Clasificación: NC-17
Advertencias: Lemon, Lemon y mas Lemon
Comentario del Autora: Continuación del oneshot “El tipo del deportivo rojo”.
Descripción: Cuando creíste que la mala suerte te había abandonado, surge una maldición. Tu mente pervertida imagino todo lo que podría hacer sobre en  ese deportivo rojo, junto al chico que lo maneja, que ahora resulta ser tu novio.
¿Un auto puede estar en tú contra?
Una vez pasa, dos veces es coincidencia, tres veces ya te hace sospechar y una cuarta vez te hace estar absolutamente seguro que… ese maldito deportivo rojo esta en tu contra. Aunque pasaran muchas cosas, gracias a estos accidentes terminas obteniendo algo más maravilloso que jamás hubieras imaginado.

Fic inspirado en una tarde de ociosidad...

Heechul iba algo distraído pensando en la vida, filosofando sobre la capa de ozono, la paz mundial… a quien quiero engañar, sin duda iba pensando en el tipo del deportivo rojo.

- Ya perdí la cuenta de cuantas veces lo hemos intentado. – y de su boca salía un leve suspiro mientras caminaba por las instalaciones de la SME - ¿Porque aún no lo hemos hecho? – se preguntaba Heechul.

Llevaban más de siete meses saliendo, no entendía cómo era posible que en tan poco tiempo se acostumbrara tanto a Siwon, se entendieran tan bien y sobre todo se enamoraran tan profundamente.

Heechul siempre había sido un chico desconfiado, al menos en cosas del amor. No es que tuviera mucha experiencia, más bien era del tipo virgen. Sí, a su edad el seguía siendo virgen, pretendientes tuvo muchos; novios… novios solo uno o dos que se puedan contar. Mucha culpa del desastre de su vida amorosa la tuvo un pequeño de diez años.

Simon siempre fue muy cortes con Heechul, muy apegado a él, siempre le compartía su lonche y le gustaba hacer la tarea juntos. Heechul lo consideraba buen amigo y se alegraba de tenerlo a su lado, pues el chico era muy divertido, popular y bueno en los deportes.

Una tarde en casa de Simon mientras hacían su tarea, este se acercó mucho a Heechul, con sus rostros muy juntos, Simon formulo la pregunta: ¿quieres ser mi novia? ¿Novia? ¡¿Novia?! Esto fue muy duro para Heechul, pues supuso que su amigo todo este tiempo lo había creído una chica. Obviamente este le grito que era un chico y que siempre lo seria, supo que estaba en lo cierto cuando observo que Simon abría muy grandes sus ojos y su boca se abrió inmensamente.

Para Heechul fue más doloroso, porque ese niño le gustaba; desde entonces mostraba ciertas preferencias y ciertos gustos para con los chicos. Después de esto Simon no volvió a acercársele y todos los equivocados que creían que era una niña, supieron que Heechul era un niño. Muchos años se acercaron a él de manera equivocada.

Que a un niño de diez años le digan que parece una niña puede ser traumatizante. Heechul siempre fue de rasgos finos, cuerpo menudo, tez pálida, un hermoso cabello negro como la noche, ojos grandes y una boca carnosa que era la envidia de muchas chicas, y también su tentación.

A lo largo de los años llego a tener una que otra relación, pero su desconfianza no le ayudaba a que su corazón se enamorara. Por eso es que en un principio, la actitud sospechosa que mantenía Siwon le ponía nervioso, además que este le perseguía sin duda.

Aun se reía por la boba manera en que se conocieron, creyendo que Siwon era un viejo verde, pero resulto que no era eso y si un guapo chico que lo espiaba desde hace mucho; conocía todo sobre él. En un principio se sintió en desventaja porque no sabía mucho de Siwon, pero con el paso del tiempo fue lo fue conociendo y termino enamorado.

Ya había salido de las instalaciones de la SME, quería seguir caminando por lo que decidió tomar la siguiente entrada al metro, a unas seis cuadras después. Deseaba caminar para liberar así su mal humor, la falta de sexo lo tenía mal.

- Tantos meses de abstinencia no estoy acostumbrado. – suspiro antes de ponerse a caminar rumbo a la otra entrada al metro.

Nada entre ellos había sucedido aún, siempre se quedaban a medias y no es que Siwon no lo deseara, porque sus besos, sus manos recorriéndolo, esos gemidos que escapaban de su boca con las caricias sobre la ropa, le demostraban lo mucho que lo deseaba. Tanto o  más que él mismo.

Pero las cosas que sucedían en esos momentos, justo cuando por fin Heechul pensaba que tendrían intimidad, algo sucedía. Sobre todo en ese deportivo rojo…

- ¡Maldito deportivo rojo! Algo tiene en mi contra. – Heechul se quejaba – mucha de la culpa la tiene ese mugroso auto.

Y era verdad, algo sucedía con ese auto, tanto que Heechul creía que estaba maldito, se lo hizo saber a Siwon y este solo se rio de su loca idea. Pero no eran normales las cosas que les habían pasado en él.

Se había imaginado tantas cosas para hacer sobre ese auto, muchas de sus fantasías eran sobre eso, pero nada resultaba bien.

La primera vez que lo intentaron sucedió unos días después de hacerse novios, una despedida llena de besos los llevaron más allá de eso, se encontraban sobre el deportivo rojo justo frente la casa de Heechul. Fueron al cine y durante la película, ¿Cuál película? Cierto, no vieron la dichosa película, así que desde esos momentos se traían ganas. Esta vez fue Siwon quien comenzó todo…

___Flashback___

Se encontraban dentro del deportivo rojo entre el asiento del piloto y el copiloto, tratando de mantener la charla que comenzaron entre beso y beso, ¿Cómo es que llegando a este punto nunca se podían dejar ir?.

- La película… - se interrumpía Heechul por los besos proporcionados por Siwon – fue muy aburrida.

- Si… mmmm… la próxima vez… - Siwon continuaba degustando su boca con avidez – la próxima vez dejare que tú elijas.

Siwon se separo del beso para observar a Heechul, observo sus ojos y en su mirada notaba el mismo deseo que el sentía en esos momentos; después sus ojos pasaron a su boca, esa boca que lo tentaba roja como una fresa.

Volvieron a unir sus labios en un desesperado beso. Siwon introdujo su lengua con curiosidad en esa boca que lo tentaba, a lo que Heechul le respondió jugando con la suya en una caricia lascivia. El beso se torno en uno intenso y pasional, por un momento Heechul sintió que no podía ni respirar, moverse y mucho menos articular alguna palabra.

La boca de Siwon lo mordía deseosa, lo saboreaba hasta lo más profundo y disfrutaba de ese beso como nunca antes. Pronto la falta total de aire, fue la culpable de que se separaran juntando sus frentes. Ambos jadeaban, mirándose a los ojos aun muy de cerca.

Heechul con una mirada deseosa que contrastaba con lo rojizo de sus mejillas y lo agitado de su respiración. Siwon sonriendo seguro de lo que deseaba hacer a continuación. Se acercó bajando al cuello de Heechul con un poco más de de lentitud, tomándose su tiempo de saborearlo, pasando su húmeda lengua por la pálida y suave piel de este.


Heechul iba algo distraído pensando en la vida, filosofando sobre la capa de ozono, la paz mundial… a quien quiero engañar, sin duda iba pensando en el tipo del deportivo rojo.

- Ya perdí la cuenta de cuantas veces lo hemos intentado. – y de su boca salía un leve suspiro mientras caminaba por las instalaciones de la SME - ¿Porque aún no lo hemos hecho? – se preguntaba Heechul.

Llevaban más de siete meses saliendo, no entendía cómo era posible que en tan poco tiempo se acostumbrara tanto a Siwon, se entendieran tan bien y sobre todo se enamoraran tan profundamente.

Heechul siempre había sido un chico desconfiado, al menos en cosas del amor. No es que tuviera mucha experiencia, más bien era del tipo virgen. Sí, a su edad el seguía siendo virgen, pretendientes tuvo muchos; novios… novios solo uno o dos que se puedan contar. Mucha culpa del desastre de su vida amorosa la tuvo un pequeño de diez años.

Simon siempre fue muy cortes con Heechul, muy apegado a él, siempre le compartía su lonche y le gustaba hacer la tarea juntos. Heechul lo consideraba buen amigo y se alegraba de tenerlo a su lado, pues el chico era muy divertido, popular y bueno en los deportes.

Una tarde en casa de Simon mientras hacían su tarea, este se acercó mucho a Heechul, con sus rostros muy juntos, Simon formulo la pregunta: ¿quieres ser mi novia? ¿Novia? ¡¿Novia?! Esto fue muy duro para Heechul, pues supuso que su amigo todo este tiempo lo había creído una chica. Obviamente este le grito que era un chico y que siempre lo seria, supo que estaba en lo cierto cuando observo que Simon abría muy grandes sus ojos y su boca se abrió inmensamente.

Para Heechul fue más doloroso, porque ese niño le gustaba; desde entonces mostraba ciertas preferencias y ciertos gustos para con los chicos. Después de esto Simon no volvió a acercársele y todos los equivocados que creían que era una niña, supieron que Heechul era un niño. Muchos años se acercaron a él de manera equivocada.

Que a un niño de diez años le digan que parece una niña puede ser traumatizante. Heechul siempre fue de rasgos finos, cuerpo menudo, tez pálida, un hermoso cabello negro como la noche, ojos grandes y una boca carnosa que era la envidia de muchas chicas, y también su tentación.

A lo largo de los años llego a tener una que otra relación, pero su desconfianza no le ayudaba a que su corazón se enamorara. Por eso es que en un principio, la actitud sospechosa que mantenía Siwon le ponía nervioso, además que este le perseguía sin duda.

Aun se reía por la boba manera en que se conocieron, creyendo que Siwon era un viejo verde, pero resulto que no era eso y si un guapo chico que lo espiaba desde hace mucho; conocía todo sobre él. En un principio se sintió en desventaja porque no sabía mucho de Siwon, pero con el paso del tiempo fue lo fue conociendo y termino enamorado.

Ya había salido de las instalaciones de la SME, quería seguir caminando por lo que decidió tomar la siguiente entrada al metro, a unas seis cuadras después. Deseaba caminar para liberar así su mal humor, la falta de sexo lo tenía mal.

- Tantos meses de abstinencia no estoy acostumbrado. – suspiro antes de ponerse a caminar rumbo a la otra entrada al metro.

Nada entre ellos había sucedido aún, siempre se quedaban a medias y no es que Siwon no lo deseara, porque sus besos, sus manos recorriéndolo, esos gemidos que escapaban de su boca con las caricias sobre la ropa, le demostraban lo mucho que lo deseaba. Tanto o  más que él mismo.

Pero las cosas que sucedían en esos momentos, justo cuando por fin Heechul pensaba que tendrían intimidad, algo sucedía. Sobre todo en ese deportivo rojo…

- ¡Maldito deportivo rojo! Algo tiene en mi contra. – Heechul se quejaba – mucha de la culpa la tiene ese mugroso auto.

Y era verdad, algo sucedía con ese auto, tanto que Heechul creía que estaba maldito, se lo hizo saber a Siwon y este solo se rio de su loca idea. Pero no eran normales las cosas que les habían pasado en él.

Se había imaginado tantas cosas para hacer sobre ese auto, muchas de sus fantasías eran sobre eso, pero nada resultaba bien.

La primera vez que lo intentaron sucedió unos días después de hacerse novios, una despedida llena de besos los llevaron más allá de eso, se encontraban sobre el deportivo rojo justo frente la casa de Heechul. Fueron al cine y durante la película, ¿Cuál película? Cierto, no vieron la dichosa película, así que desde esos momentos se traían ganas. Esta vez fue Siwon quien comenzó todo…

___Flashback___

Se encontraban dentro del deportivo rojo entre el asiento del piloto y el copiloto, tratando de mantener la charla que comenzaron entre beso y beso, ¿Cómo es que llegando a este punto nunca se podían dejar ir?.

- La película… - se interrumpía Heechul por los besos proporcionados por Siwon – fue muy aburrida.

- Si… mmmm… la próxima vez… - Siwon continuaba degustando su boca con avidez – la próxima vez dejare que tú elijas.

Siwon se separo del beso para observar a Heechul, observo sus ojos y en su mirada notaba el mismo deseo que el sentía en esos momentos; después sus ojos pasaron a su boca, esa boca que lo tentaba roja como una fresa.

Volvieron a unir sus labios en un desesperado beso. Siwon introdujo su lengua con curiosidad en esa boca que lo tentaba, a lo que Heechul le respondió jugando con la suya en una caricia lascivia. El beso se torno en uno intenso y pasional, por un momento Heechul sintió que no podía ni respirar, moverse y mucho menos articular alguna palabra.

La boca de Siwon lo mordía deseosa, lo saboreaba hasta lo más profundo y disfrutaba de ese beso como nunca antes. Pronto la falta total de aire, fue la culpable de que se separaran juntando sus frentes. Ambos jadeaban, mirándose a los ojos aun muy de cerca.

Heechul con una mirada deseosa que contrastaba con lo rojizo de sus mejillas y lo agitado de su respiración. Siwon sonriendo seguro de lo que deseaba hacer a continuación. Se acercó bajando al cuello de Heechul con un poco más de de lentitud, tomándose su tiempo de saborearlo, pasando su húmeda lengua por la pálida y suave piel de este.

Con esto demostró a todos que Heechul era parte importante en su vida, pues como ya sabía, Siwon no contaba con el apoyo de sus padres ya que estos siempre se concentraban en lo suyo. En el pasado siempre había sido de esa manera, sus padres más concentrados en sus cosas personales que en sus hijos. Su madre en sus fiestas y obras de caridad, su padre en las cuestiones de su compañía y su más grande vicio, los viajes.

Habría sido un niño solitario de no ser por su hyung que era cinco años mayor que Siwon, se preocupaba por él y nunca lo dejo solo. Se imaginan un pequeño niño de cabellos negros, hermosos ojos rasgados, cabellos ondulados suavemente y con necesidad de afecto enfermo en su cama. Cuando enfermaba lo tenía a su lado hasta que se recuperaba, gracias a él su lado humano no se perdió.

Justo antes de ingresar a la universidad, su hyung tuvo problemas con sus padres y se fue de la casa porque se negó a hacer lo que sus padres le imponían. Un matrimonio arreglado, ¿con que derecho? Si nunca se preocuparon por ellos, por eso no vio mal que se fuera de casa. Y a pesar de estar lejos, siempre estuvo cerca de él.

Siwon decidió hacer de su vida lo que deseaba, porque querer hacer lo que sus padres deseaban ¿para complacerlos? ¿Por qué?, a Siwon le importaba más su vida que eso. Entonces en contra de sus padres entro a estudiar psicología, siempre le gusto esta carrera y su personalidad calma le ayudaba mucho.

Y aunque estaba estudiando lo que quería, se sentía solo. Su hyung estaba haciendo su vida muy lejos de él, a menudo veía a las parejas y envidiaba ese lazo, con las novias que tuvo no se le dio.

Entonces un día vio a Heechul por su ventana, venía con sus padres que se mudaban, se le veía enfadado y harto de tener que estar con ellos. Se le veía adorable arrastrando los pies, pero sobre todo le atrajo su vestimenta y la forma que todos esos colores acentuaban su bello rostro. Y aunque tenía finos rasgos, era un chico hermoso.

Algo en Siwon se removió y quiso conocerlo, pero la oportunidad siempre se le iba de las manos, ya que las veces que lo intentaba algo interfería. Entonces comenzó a espiarlo, incluso cambio de cuarto para el que daba a la ventana de Heechul, preguntaba por él y finalmente comenzó a perseguirlo.

Y fue cuando sucedió, en Heechul encontró toda esa comprensión y compañía que necesitaba, siempre escuchaba atentamente lo que Siwon le contaba, festejaba con él sus logros y le animaba en sus momentos de debilidad. Sin duda ambos se complementaban.

Los horarios de trabajo de ambos coincidían, así que eso no fue problema para ellos. Todo marchaba muy bien después del primer mes del trabajo de Siwon, tanto que con su primer cheque sorprendería a Heechul con un fin de semana para los dos en un spa lejos de la ciudad, donde disfrutarían por todo un fin de semana y donde por fin tendría su tan esperado encuentro en la intimidad.

Esta vez parecía que todo marcharía bien, tenían un lugar donde llegar y un fin de semana completo para los dos. Lo que no sabían ambos, era que en el camino, sobre el deportivo rojo; pudiera sucederles algo…

___Flashback___

Ya llevaban dos horas de retraso por culpa de aquella autopista. No sabían que pasaba más adelante pero avanzaban tan lentamente, que por un momento todo el tráfico se detuvo, dejándolos varados en medio de todos los coches. La noche les había agarrado ya, Heechul inquieto se aburría, mientras Siwon pasaba los momentos viendo su reloj o contestando no sé qué en su celular.

Llego un momento en que Heechul se removió en su sillón, no soportaba tanto tiempo sin hacer nada, entonces poso su vista en su novio. Siwon se había quitado el saco poniéndose más cómodo mientras contestaba sus correos desde su iphone, a Heechul se le hizo tan sexy ese lado ejecutivo que se mostraba ante él.

Relamió sus labios imaginando lo que le esperaba esa noche, tan solo llegar al hotel que reservo Siwon. Miro hacia el frente del auto y el tráfico seguía sin moverse, los autos a un lado se encontraban en espera al igual que ellos. ¿Cuánto más tendría que esperar? Él se estaba impacientando, estaba seguro que en la oscuridad y los vidrios polarizados del auto no dejaban ver dentro de este.

Se sonrió por lo que estaba a punto de hacer, se incorporó lentamente sobre su asiento pasando rápidamente una de sus piernas sobre las de Siwon, que lo miro sorprendido pero cuando quiso reaccionar ya tenía a Heechul sentado sobre el con ambas piernas a sus lados, acomodándose sobre Siwon y recargando su espalda sobre el volante del auto.

- ¿Pero que...?. – Siwon no pudo continuar.

C o n t i n u a r a . . .