Long Time No See You... Epílogo




Mientras tanto en la habitación del EunHae…

Donghae golosamente tenía atrapado el miembro de Hyukjae entre sus labios pasando su lengua desde la base hasta la punta, para después hundirlo en su boca realizando fuertes succiones. Sus manos comenzaron a masajearle la entre pierna hasta llegar a sus testículos, los cuales apretó entre sus manos sacándole leves quejidos.

Por su lado Hyukjae se dedicaba solo a gemir, trataba de ahogarlos pero era imposible con esas sensaciones que Donghae le hacía sentir. Sentía que todo su auto control se iba al a la basura, mordió su labio disfrutando de cada caricia brindada.

- ¡Aah... aaah! Donghae ya… - trato de alejarlo pero…

La respiración de Hyukjae comenzaba a agitarse, sus manos se aferraban a la sabana, algunos espasmos que le prevenían del clímax se apoderaban de su cuerpo. Finalmente apretó los ojos liberando su esencia dentro de la cavidad de Donghae.

- Waaaaa… lo siento fishy. – dijo casi gritando Hyukjae

Estaba avergonzado a más no poder por no haber resistido más a las caricias del menor. Se sentó de golpe en la cama buscando alguna excusa para justificarse por haber terminado tan rápido, cuando unos fuertes sonidos del cuarto del KyuMin llegaron a sus oídos encontrando la excusa perfecta.

- Es que con tanto ruido no me concentro. – se quejó Hyukjae.

- Estas diciendo que esto no es suficiente para ti Hyuk. – Donghae termino haciendo un puchero. – Te estas vengando por haberme dormido con Heechul hyung y Siwon ssi.

- No, y no dormiste con ellos, dormiste entre ellos obligado por Heechul hyung. Recuerda. – agrego Hyukjae, molesto al recordar la escena.

- Creo que mejor dejamos esto para otro día. – Donghae ya se levantaba de la cama.

- ¡Ah, no! Esto se termina ahorita mismo. – dijo Hyukjae jalando a Donghae de regreso a la cama.

- Pero tú dijiste que no podías concentrarte con esos gritos. – volvieron a escuchar los gemidos del KyuMin.

- Por eso es hora de que te haga gritar a ti, de esa manera si me concentro. – Hyukjae sonrió pícaramente. Atrayendo a Donghae a su lado plantándole un sonado beso en la mejilla.

- ¡Oh! – atino a decir Donghae, para después dejarse llevar por las caricias de su monito.


Y en la habitación del SiChul…

El vaivén entre los dos cuerpos se hizo más frenético, rápido y salvaje. Siwon profundizo las embestidas oprimiendo intensamente ese punto mágico, su pecho se frotaba con la espalda de Heechul dándole más placer a sus cuerpos.

Como respuesta ante las repetidas embestidas el cuerpo de Heechul se arqueo contra él terminando en la cama; unas últimas estocadas le hicieron terminar también a Siwon. El mayor sonrió satisfecho al sentir como el cuerpo del menor se dejaba caer sobre su espalda.

Sus respiraciones se fueron acompasando poco a poco, mientras Siwon besaba las pequeñas gotas de sudor que perlaban la espalda de Heechul, subiendo por su columna hasta su nuca; para después buscar su boca en un intenso beso.

Cuando se separaron, quedaron uno frente al otro, la mitad de sus cuerpos habían sido cubiertos con una suave sabana que Siwon levantó. El menor mostraba una sonrisa de un tonto enamorado al observar a Heechul frente a él, despeinado, sonrojado, con los labios a punto de estallarle y tan tranquilo como no lo había estado nunca estas últimas semanas.

Lo había extrañado mucho, pero esto compensaba con creces toda esa ausencia y todo lo que tuvo que hacer para que el mayor lo perdonara. Por amor, por su princesa, por ese egocéntrico ser… por Kim Heechul haría lo que fuera necesario.

- ¿Qué tanto me miras? – pregunto algo adormilado Heechul, pero con una hermosa sonrisa, la cual logro que a Siwon se le cortara la respiración por varios segundos.

- Ahora entiendo porque dices que eres perfecto. – respondió Siwon algo cortado mientras pasaba uno de sus dedos por el puente de la nariz del mayor.

- ¿Hasta ahora lo entiendes Simba? – Siwon abrió los ojos enormemente, ¿por qué sus palabras no funcionaban o se entendían como él deseaba? – Hahahaha. – escucho de pronto como Heechul ahogaba su risa en la almohada.

- ¿De qué te ríes?

- Eres tan mono e inocente a veces Simba… - respondió sonriente Heechul. – No tienes que hacer, ni decir nada para ganar mi amor, mi corazón ya es tuyo. – al decir esto, Heechul se volteaba liberando su mano para tocar el rostro del menor. - Sé que no te lo digo mucho y que estos últimos tiempos hemos estado separados, pero te amo. Como no podría amarte si hasta en las cosas más locas me apoyas sin preguntar.

- ¿Te refieres a lo de Kyuhyun?

- A eso y a muchas cosas más, a la fiesta, tus atenciones… olvidando el fanservice, eres lo mejor que me ha pasado. Jamás había dicho algo como esto y mucho menos a otro hombre. – las palabras fluían de manera fácil ahora, porque a Heechul se le complicaba un poco esto de las confesiones. – Pero no se lo digo a cualquier hombre, te las digo a ti porque eres único, especial, y todo mío. Te amo Siwon y espero que me sigas amando en el futuro aunque me de otro arranque como el que pasó.

- Te amare siempre. – Siwon beso la mano de Heechul y la llevo a su corazón, como una promesa silenciosa.

- Me alegro haberle quitado su habitación a Jungsoo, es la más silenciosa de todas. Con el EunHae reconciliándose y el KyuMin declarándose su amor, habríamos quedado sordos.

- Mira quién habla.

Siwon sonreía, pues a esto Heechul se le había lanzado encima devorándolo a besos. Nuevas caricias no se hicieron esperar, en medio de risas y palabras de amor.


Más tarde ese día…

Sentados en la sala, Kyuhyun y Sungmin se encontraban sentados tomados de la mano, jugueteaban como niños dejando caer el maíz inflado que tenían como botana esa tarde. Heechul caminaba lentamente por el pasillo hacia la sala de estar, estaba completamente adolorido pero muy feliz; esperaba que los demás siguieran durmiendo después de su fiesta de cumpleaños.

Pero al llegar a la sala, lo primero que vio fue a un KyuMin muy empalagoso. Kyuhyun tomaba un maíz inflado y lo colocaba en la boca de Sungmin, después beso sus labios tiernamente mientras el otro sonreía.

- Tks, váyanse a un hotel. – repitió las mismas palabras que el evilmaknae le diera al EunHae.

- Mira quien lo dice. – le recrimino Kyuhyun. – pero si apenas y puedes caminar, pareces viejito.

- No, demasiado ejercicio, no es porque sea mayor. Cualquiera que haga mucho ejercicio terminaría embarado. – se defendió Heechul, que detuvo su camino hacia la cocina. – Y a todo esto, ¿ustedes ya son KyuMin oficial?

- No. – se apresuró a responder el menor.

- ¿No? – pregunto un asombrado Sungmin.

- Oficialmente somos novios hyung. – y una sonrisa se extendió en su rostro.

- ¡Oh! Eso sí es serio. - Heechul sonreía por la felicidad que le mostraban los rostros de sus dongsaeng. – pero recuerden que deben ser discretos y jugar en el lugar indicado, como su cuarto.

- ¿Nos estas corriendo hyung? – preguntaba Sungmin.

- Mira quien lo dice, Siwon y tu hyung no son el ejemplo de discreción. – se burló Kyuhyun.

- Solo digo que vayan hacer sus cursilerías a su cuarto, quiero comer sin vomitar. – Heechul aún se reía pues estaba de broma.

- No al cuarto, no. – dijo un asustado Sungmin.

- Tan pronto ya lo traumaste maknae del mal.

- Yo no. – Kyuhyun se abrazó a Sungmin. – nuestros vecinos son muy escandalosos y no han parado desde hace como tres horas.

- ¿Leeteuk no ha hecho nada? Ese pez mañana no podrá caminar.

- Lo dices por experiencia propia, ¿verdad hyung? – Kyuhyun se divertía sacándole miles de colores al rostro de Heechul.

- Eso me gano por querer ayudar, dejare que Leeteuk se encargue de esos dos. Yo aún tengo que ir con Siwon a ver a mis padres.

- ¡¿Asiiii?! – pregunto al unísono el KyuMin.

- Es normal que Siwon me lleve en sus espaldas. – dijo Heechul con tono autosuficiente.

Vieron como Heechul termino por retirarse, dejándolos solos nuevamente.

- ¿Tú también me llevaras en tu espalda Kyunnie?

- Estoy dispuesto a llevar a mi novio en mi espalda, en mis brazos, donde sea – pronuncio Kyuhyun dejando un beso corto en sus labios.

- Te amo bebe.



Algunas cosas cambian a nuestro alrededor, la vida continua y con ella nuevas cosas que hacer, que enfrentar. Los cambios dan miedo pero la mayoría de las veces suelen ser buenos y ellos siempre nos dejan una enseñanza.

Kyuhyun y Sungmin, Donghae y Eunhyuk, Siwon y Heechul se dieron cuenta que aunque algunas cosas entre ellos cambien, otras muchas nunca cambiaran…

Como su amistad… Siempre juntos apoyándose, juntos aun en la lejanía.

Como demostrar el amor… Siempre con el valor de decir te quiero.

Como el haber encontrado a la persona amada… Siempre con el valor de seguir amando.

Aunque el tiempo pase… y pases tiempo sin verle.

Si el amor es fuerte, es suficiente.


F i n . . .

Comentarios