Lost Heart... Capítulo 21


Al salir Siwon de la ducha, Heechul ya se encontraba con todas las cosas que necesitaría para limpiar la herida de la nariz, la de su ceja y el golpe en su mejilla, las heridas permanecían abiertas pero ya no sangraban. Lentamente, Heechul dirigió su mirada atenta hacia Siwon, este estaba en todo su esplendor con un pantalón de pijama negro satinado que cubría sus musculosas piernas y su estrecha cadera.

Sin nada arriba, dejaba al descubierto su trabajado abdomen, sus anchos hombros y cada uno de esos músculos que se marcaban en sus brazos. Y sobre su costado, lucía un rojizo golpe. La piel de Siwon no era perfecta, eso pudo notar Heechul, pues lucia algunas cicatrices; seguro que habría tenido algunos enfrentamientos que peleo solo.

Como el de anoche quizás. Heechul tuvo que tragar saliva para poder hablar.

- Siéntate aquí. – señalo al pie de la cama.

Siwon se movía hacia él con elegancia, como un animal al acecho y ni que decir de su mirada, esa ya la conocía muy bien Heechul.

- ¿Qué debo hacer? -  preguntó Siwon mientras Heechul acortaba la distancia entre ellos con algodón y agua oxigenada en mano.

- Solo… solo estate quieto mientras te curo. – cuidadosamente comenzó su labor -. Cierra tus ojos. – dijo para limpiar la herida de su ceja.

Obedeció de inmediato, pero no pudo evitar llevar sus manos a la estrecha cintura que tenía frente a él. Heechul saboreo sus labios y su corazón dio un brinco al sentir su toque.

- Si haces eso, ya no podré resistir. -  dijo Siwon, sosteniendo el rostro de Heechul entre sus manos y sus labios rozándose unos segundos después.

En su interior, agradecía que Siwon rompiera con el ambiente extraño que se había generado momentos atrás. Sus manos lo atrajeron a su cuerpo, dejándolo ahorcajadas sobre sus piernas. Aunque Heechul quería continuar con el beso, aún quedaban heridas por atender, por lo que se separó rápidamente lastimando la nariz de Siwon.

- ¡Auch! – se quejó.

- Lo siento… - la escena se le hacía tremendamente conocida a Heechul -. Y decías que no dolían tanto. Tienes suerte que no hayan destrozado tu bella nariz. – se burlaba Heechul.

- Hum, nada que un poco de dinero y otra cirugía no arregle.

Soltó las palabras buscando de nuevo sus labios. Heechul sintió como su corazón se detenía por unos segundos, el simple roce de los labios de Siwon le estremecía y sin embargo, no era por eso que le había ocurrido. Su cuerpo se encontraba más tenso que al principio y su cabeza sólo pensaba en lo que recién le había dicho.

- ¿Cómo? – pregunto separándose de Siwon -. Estas insinuando que ya pasaste por una.

- Hace algunos años, me di cuenta que mi nariz no era perfecta. – mientras hablaba, Siwon lo abrazaba acercándolo más a su cuerpo.

Las piernas de Heechul quedaron sobre la cama, a cada lado del cuerpo de Siwon. Trataba de permanecer calmado a todo lo que escuchaba, pero no podía. La nariz de Andrew no era perfecta y eso le molestaba, no importaba cuanto le insistía Heechul que le gustaba de esa forma.

Escuchar que Siwon pensaba lo mismo de la suya, que se hubiera operado por esa causa, lo cambiaba todo.

- Vanidoso. – dijo Heechul lo más normal que pudo su voz -. ¿algún otro cambio que deba saber? – Siwon parecía sopesar entre decirle o no, lo que sea que tuviera que decirle.

- Usaba lentes. – dijo dirigiendo la vista a sus ojos.

- No te he visto usarlos.

- Aun los uso de vez en cuando, cuando estoy solo y deseo leer. La operación no me dejo del todo bien, mi problema en los ojos era algo complicado.

- Oh dios… - la expresión salió de sus labios casi como un gemido.

Asustado, Heechul se separó de él y camino lejos de la cama.

- ¿Qué sucede Heechul?

Siwon notó como la mirada de le cambiaba en un segundo, sus ojos reflejaban más que misterio y se preguntó qué cosas pasaban por su cabeza, porque esto no era normal, no estaba bien su reacción. Tomó el cuello de Heechul y volvió acercar su rostro al suyo, acercando también su cuerpo. Temía que si lo dejaba alejarse, le perdiera.

Y Siwon ya no estaba seguro si sobreviviría sin él.

- Es solo que me he dado cuenta, de lo cerca que estuve… Siwon, lo siento te puse en peligro, no te hice caso en cuanto a Jo Kwon… yo… lo siento. – parecía alterado.

Era él, era Andrew… la persona que tanto ha buscado, y estuvo casi por perderlo. Había estado a punto de perdérselo por su culpa, exponiéndose de esa forma con Kwon. Heechul se sentía muy culpable.

- No fue tu culpa.

- Si lo fue, no tenías por qué rescatarme y lo hiciste... por mi culpa te lastimaron… - Heechul parecía tan abatido y Siwon no sabía porque.

- No, son solo rasguños y no hubiera dejado que te llevaran lejos de mí. – dijo aquello tan suave, que casi no le reconocía la voz -. No soportaría que nadie te alejara de mi lado ya.

Heechul reconoció a Andrew, detrás de esas palabras. Y con eso se abría una esperanza de que, al igual que él, Siwon no lo hubiera olvidado del todo. Si ya le protegía, lo quería a su lado, podría quizás comenzarlo a amar. No como Cassey, él ya no podría ser como esa persona del pasado, esperaba que pudiera amarlo como Heechul.

Y tal vez solo así, Siwon le perdonaría su abandono, el haberlo orillado a que se convirtiera en lo que era y perdonarse a sí mismo, por no reconocerlo… por casi olvidarlo.

Andrew fue su primer amor, pero Siwon se había vuelto su vida ahora. Entonces, decidió que tenía que salvarlo y ayudarlo de su cruel destino, olvidando todo en lo que había creído, solo por Siwon. El detective no podía más en contra de lo que sentía por él.

Con eso en mente, se dejó llevar.

Fue depositado por Siwon en la cama, encaramándose encima de su cuerpo, apresándolo contra el colchón. Con sus manos, Heechul recorrió su rostro y sus heridas, como reconociéndolo, mirándolo de nueva forma. Y Siwon no se resistió, sus ojos parecían revivir momentos que Heechul sospechaba, pero aun no era tiempo de decirle nada.

- Siwon… bésame. – exigió Heechul.

Aquella personalidad, la parte que había dejado en un rincón, comenzó a salir a flote. Recordó lo mucho que le gustaba juguetear a Siwon, lo mucho que le gustaba y sin embargo ahora era tan diferente. Tal vez no podría ser el mismo Cassey que conoció años atrás, pero si un mejorado Heechul solo para Siwon.

- Si eso es lo que quieres… - dijo Siwon casi como un gruñido.

Fue al encuentro de la boca de Heechul, este se sonrió ante su reacción y acercó sus labios a los de Siwon, sentía como su cuerpo emanaba calor y algo más que deseo, sonrojándose debajo de aquel magro cuerpo. Ahora comprendía, como es que nunca lo repudió, como se encendía sin siquiera conocerlo. Su cuerpo si había reconocido algo de Andrew en Siwon, aunque su mente no.

Con sutileza, Siwon introdujo su lengua dentro de su boca, y luego de unos segundos, ambas lenguas jugaban dentro de sus bocas, volviendo aquel beso casi salvaje. Haciendo que pequeños gemidos escaparan de la boca de Heechul, aunque Siwon no se quedaba atrás tampoco.

Sus cuerpos comenzaban a subir de temperatura. Heechul rodeo su cuello entre sus brazos y con cuidado, mordió el labio inferior de Siwon. Un sonoro gemido salió de su boca sin tapujos debido al mordisco, le estaba gustando juguetear con él. Pues ahora era Heechul quien controlaba el ritmo del beso.

Sintió como Siwon acariciaba su labio inferior con su lengua y sus manos aprisionaron aún más la cintura de Heechul. Sus lenguas y besos parecían ansiosos, bailando aquella danza sincronizada en sus bocas. Heechul no perdió más tiempo llevando sus manos a la espalda de Siwon, arañando suavemente a todo lo largo de su piel.

Siwon se separó del beso para comenzar a besa la mandíbula de Heechul, recorriéndola por completo y después comenzar a bajar por su cuello, dirigiendo sus manos hacia debajo de aquella camiseta sin mangas que empezaba a estorbar. Ansiaba el contacto con la piel de Heechul.

Comenzó a besar, lamer y morder el cuello de Heechul sacándole pequeños suspiros, la mano de Siwon comenzaba adentrarse a los pantalones de Heechul, las caricias en su plano estomago quemaban. Gimió cuando sintió como la mano de Siwon acariciaba su hombría por debajo de la ropa.

El calor entre ellos comenzaba a ser insoportable, por lo que Heechul comenzó a sacar su camiseta por encima de su cabeza, para después ser ayudado por Siwon hasta quitársela; dejando su torso desnudo. Y luego volvió a besar a Siwon con pasión, atrayéndolo del cuello hacia su cuerpo, haciéndolo que recostara todo lo largo de su musculoso cuerpo encima del suyo.

Heechul gimió al sentir el peso de su cuerpo sobre el suyo, además la sensación de piel contra piel, sus pechos se rozaban. No hacían falta las palabras, pues sus bocas se encontraban ocupadas en algo mejor que eso, saboreándose mutuamente.

Una de sus tetillas fue atrapada por la mano de Siwon, no pudo hacer nada más que arquear su espalda contra él y gemir fuertemente ante la caricia. Lo que hizo sonreír a Siwon maliciosamente por lo que le causaba, y de nuevo su diestra mano acarició su tetilla mientras mordía su clavícula.

- Si… Siwon… te quiero dentro. – gimió Heechul.

- ¿Me quieres dentro? – la mano que acariciaba momentos antes su hombría, se apartó para ocuparse del estorboso pijama, el cual en segundos termino en el piso.

Y después se ocupó de los suyos, quedando ambos completamente desnudos. Heechul se removía en la cama al sentir su miembro liberado y después al sentir como la mano de Siwon se colaba entre sus piernas.

- Si… así… - dijo Heechul casi con desesperación.

Sintió su cuerpo tensarse al sentir que uno de los dedos de Siwon llenaba su entrada y comenzaba a tantear su próstata. Siwon busco sus labios y lo beso una vez más, un beso más sensible, sus caricias más tiernas. Su cuerpo se arqueo contra Siwon en respuesta, sus manos aferrándose a los anchos hombros que cubrían y sus ojos, los ojos de Heechul descubrieron su alma.

Podía verlo, ahora que se atrevía a mirar sus ojos en aquel acto, podía ver algo de Andrew en los ojos de Siwon. ¿Cómo pudo ser tan ciego? ¿Cómo pudo no reconocerlo? Y sin embargo ahí estaba, más claro que el agua… fue solo por un momento, pero por ese momento supo que no todo estaba perdido.

Cuando Siwon introdujo otro dedo dentro de Heechul, este gimió pero no era suficiente, necesitaba más… necesitaba todo. Siwon sintió su necesidad e introdujo un tercer dedo, poco a poco era dilatado con movimientos que amenazaban con hacerlo terminar cada que rozaba su próstata.

Pero no era suficiente, no para todo lo que Heechul estaba sintiendo.

- Siwon… yo… mas…

- Ssshhh… lo sé, yo también lo necesito.

Sus dedos liberaron la entrada de Heechul y gimió al sentir su perdida. La cual fue compensada con la entrada del miembro de Siwon a su estreches, sus paredes temblaban arropándolo de necesidad.

No supo en que momento había cerrado sus ojos, cuando los abrió, busco hambriento los labios de Siwon. Se sentía completo, como si todas las piezas sueltas encajaran en un perfecto rompecabezas.

* * * * *

Eran casi las tres de la mañana y Sungmin daba vueltas en la sala de estar del departamento de Kyuhyun. Habían peleado por una tontería, o eso pensaba él. Sungmin recordaba haberle dicho a Kyuhyun que regresaría a Min Cake en cuanto pudiera y además, había sido Kyu quien había oído la conversación a escondidas.

La puerta sonó, y cuando abrió, pudo ver a un muy ebrio pastelero, siendo cargado por Yesung.

- ¿Qué haces con él?

- Se puede decir que lo cuido mejor que tú, Sungmin. – Yesung no estaba muy contento con él, y menos cuando se había negado rotundamente a dejar ir a Kyu. Pero Sungmin también le había dicho que se alejara de él.

- Déjalo aquí… yo lo meto. – Yesung ayudo a Sungmin a sostener el peso del menor y luego se fue cerrando la puerta principal.

Sungmin lo arrastro por el pasillo hasta llegar a la habitación, donde lo tumbo, le quito los zapatos y lo arropo. Mañana tendrían muchas cosas de que hablar, pero por ahora lo dejaría dormir.

Se tiró en el sofá de la estancia, no tenía ganas de dormir con él. Pensó mucho durante un buen rato. Recordando como lo había conocido. Aquel viaje a Paris, muchos pasteles y algunas escapadas.

Para ese momento Choi estaba considerando invertir en Min Cake, y necesitaba un patissier estelar para ese proyecto. Encontró a Kyuhyun, pero no sabía que era hasta mucho después de sus aventuras nocturnas. Cuando pudo, lo llevo a Londres. Kyuhyun no tenía nada más que sus pasteles, y él le ofrecía una vida. Kyuhyun ni siquiera lo pensó.

Él sabía a lo que se atenía contando con la protección de Choi. Él le dejo claro que si invertía en Min Cake, había ciertas condiciones. Sungmin acepto, pues estaba al borde del fracaso, y contando con su nuevo pastelero, Min Cake resurgió. El pacto desde el primer momento incluía cláusulas de protección para Kyuhyun, a lo que Siwon no se negó. Luego todo siguió su curso tranquilamente hasta el episodio en que lo tuvo que mandar a México. Y ahora todo se desmoronaba

* * * * *

Habían sido hacia pocas horas que se había dado cuenta que Heechul no estaba. Menos aun cuando descubrió que quien lo tenía era JoKwon, y menos tiempo aun de que lo había arrancado de ese lugar y habían ido a parar a su departamento.

Heechul parecía diferente esa noche. Usualmente en el sexo, era él quien tenía la iniciativa y hacia la mayoría de las cosas, que si bien Heechul disfrutaba, tenía el suficiente orgullo para mentir acerca de eso. Pero esta noche sus ojos brillaban y lo veía directamente a los ojos mientras se unían. Sentía los dedos finos de Heechul viajar a través de su rostro, como grabándoselo en las manos.

Había habido un momento, en que la increíble similitud del instante con uno de sus recuerdos del pasado le había confundido la mente, pero inmediatamente algo se encargó de gritarle que Cassey estaba muerto y que solo tenía  a Heechul en sus brazos.

Había curado sus heridas, y había hecho preguntas un tanto raras ¿Por qué estaba interesado en sus operaciones? Pero contesto con franqueza. Si quería construir una relación con Kim, tenía que ser franco. No por ello le diría todo, pero se abriría un poco más a él.

Heechul se removió bajo el para volverlo a la realidad

- Siwon… bésame. – exigió.

Siwon se desconcertó un poco. Si bien era cierto que las últimas veces que habían tenido sexo, el detective había cooperado mucho más que las veces anteriores, la orden lo tomo por sorpresa, dado que no esperaba esa faceta.

- Si eso es lo que quieres… - una sonrisita se escapó de sus labios antes de juntarlos con los de Heechul.

Solo una vez había sido realmente violento con Heechul, aquella vez en Rusia, y eso era porque estaba muy enojado al enterarse que buscaba a alguien, y no solo era enojo con Heechul, si no también frustración con el mismo, pues aunque no lo había aceptado, ya estaba prestándole demasiada atención al detective, y se sentía enojado pues en aquel momento estaba traicionando a Casey, pero sin él, ahora podría rehacer su vida. Juntar su camino con el de Heechul. Pero a ese futuro se interponía el hecho que Heechul también buscaba a alguien.

Beso un poco más a Heechul, intentando con sus besos que olvidara a quien sea que buscara. Heechul gimió en el beso, calentando más el cuerpo de Siwon, si es que se podía.

Heechul besaba y mordía a Siwon, haciendo que soltara gemidos de satisfacción. Poco a poco la tela entre sus cuerpos se volvió estorbosa, haciendo que Siwon se deshiciera de ella para poder acariciar el delgado cuerpo a su gusto y satisfacción. Heechul también deseaba más piel, por lo que lo hizo recostarse a lo largo de su cuerpo.

Podía sentir en su boca el sabor de Heechul, ese sabor que lo estaba enloqueciendo. Quería más, más de él, más de sus besos, los quería por una eternidad y los quería ahora. Heechul se apropió del ritmo del beso, haciéndolo más intenso y juguetón, mordiendo sus labios a placer y con ganas. Siwon no se quería quedar atrás y mordió un poco también, delineo con su lengua sus labios finos, intentando memorizar cada centímetro. Siwon pudo sentir las manos de Heechul pasearse por su espalda, y poco después como enterraba las uñas para afianzarse a él ansioso y arrastrarlas por todo su largo, posiblemente dejando marcas. En venganza por los rasguños, Siwon se apropió de su cuello, marcándolo, chupando lo necesario para sacarle gemidos.

Heechul fue quien se empezó a desvestir, y por reflejo Siwon arranco la camiseta que llevaba. Heechul se dejó ir de espaldas con los brazos enroscados alrededor de su cuello, haciendo que tuviera que apoyar los brazos al lado de la cabeza de este para no caer por completo encima de él.

Los gemidos no paraban de salir de la boca de Heechul, aunque estos quedaran amortiguados por sus besos. Siwon bajo la mano por su pecho, intentando memorizarlo, y al sentir el gemido ahogado contra su garganta y su cuerpo arquearse por la sensación comenzó a morder su cuello.

- Siwon, te quiero dentro. – sus gemidos nunca habían sonado tan necesitados.

- ¿Me quieres dentro? – beso un poco más su cuello mientras terminaba de quitar el pantalón que aún conservaba. Heechul tomo el elástico de sus pantalones, como ordenando que se los quitara de una vez, orden que no desobedeció y después comenzó a prepararlo.

- Si… así. – Heechul se oía perfecto esa noche.

Todo el cuerpo de Siwon parecía programado para no hacer otra cosa que complacer al policía. La voz del más bajo parecía ahogada y a sus oídos era provocadora y sensual. Siwon se encargó de dilatarlo lo más posible, que la intrusión no fuera incomoda, y el cuerpo retorciéndose de Heechul le pedía más, de una vez.

- Siwon… yo… mas… - había logrado balbucear en medio de la oscuridad del cuarto, moviendo más fuerte las caderas y golpeando su miembro contra el ajeno.

- Shh… lo sé, yo también lo necesito… - Siwon saco sus dedos del orificio apretado y comenzó a entrar despacio, sintiendo el cuerpo debajo de él tensarse.

Los ojos de Heechul no le habían apartado la mirada durante demasiado tiempo, y cada vez era más intensa, mientras que el sudor comenzaba a aparecer en forma de perlas en su frente.

Siwon se quedó completamente quiero cuando estuvo dentro, esperando a que Heechul se acostumbrara. Esta noche quería tratarlo con cuidado, darle las gracias sin palabras por el consuelo brindado aquella vez. Kim movió sus caderas, en busca de más contacto, desesperado por sentirse lleno y el no espero más para comenzar a darle lo que quería.

La habitación pronto se llenó de gemidos ahogados, de ese sonido húmedo que producen dos lenguas al juntarse, al buscarse y seducirse, del friccionar de dos cuerpos uniéndose y de muchísimo calor. Las gotas en la frente de ambos hacían que los cabellos se pegaran contra ellos. Pese a la intensidad del momento, Heechul no apartaba sus ojos de los de Choi, y él tampoco le quitaba la mirada, ensimismado en sus orbes oscuros.

Sus cuerpos se mecían al mismo compas y sus gemidos estaban en el mismo tono. En  cuanto Siwon dio de lleno con su próstata, el policía grito como si le estuvieran matando, enterrando las uñas en la piel expuesta de los hombros de su amante.

Cuando sus cuerpos comenzaban a llegar al límite, y sus respiraciones no eran más que jadeos desesperados por aire, cuando sus cuerpos parecían tan calientes que se prenderían en llamas e incendiarían la habitación, el cosquilleo en el bajo vientre de Siwon le advirtió que estaba próximo al orgasmo, así como la voz de Heechul en el oído.

- Yo… me voy… más fuerte, por favor. – Siwon estaba embobado con el detective en sus manos. Nunca creyó verlo tan rendido a sus pasiones como esa noche lo estaba haciendo. Suplicando sin pena alguna, dejando de lado su orgullo para disfrutar tanto como quisiera.

- Aahhh… – de su boca no pudieron escapar las palabras, y lo único que salió fue un ruido a medio camino de suspiro y gemido. Arrecio sus embestidas y masturbo el miembro de Heechul a su antojo para llevarlo directamente al clímax.

Siwon sintió todo su cuerpo tensarse, al mismo tiempo que sentía las uñas del otro enterrarse más fuerte y sus labios rozándole el cuello mientras sus dientes se clavaban con fuerza. Sintió el líquido caliente entre los dos y como el mismo se vaciaba llenándolo.

La habitación estaba oscura, y por la ventana se apreciaban las nubes sobre la ciudad, y de vez en cuando un relámpago cruzaba el cielo.

Siwon no se despegó del otro, y no se molestó tampoco en quitarse de encima de él. Se dedicó a verlo mientras los dos acompasaban sus respiraciones y poco a poco quito el cabello de Heechul de su frente sudorosa. Beso sus ojos y su nariz, bajo lentamente hasta llegar a sus labios, los que probó con calma y melancolía. Deseando el mundo entero para ellos y al mismo tiempo nada.

Heechul acariciaba su rostro con calma, viéndolo a los ojos, con expresión de fascinación. Aparto el cabello de sus ojos y por fin se recostaron uno al lado del otro. El detective con un poco de cautela alargo el brazo para rodearlo, y Siwon no tardo más de un par de segundos en tenerlo entre sus brazos, arropado.

Heechul paseaba sus largos y delgados dedos por el pecho de Siwon, contorneando las cicatrices que tenía.

- ¿De dónde es esta? – pregunto mientras tocaba la pequeña protuberancia en una de las costillas.

- Uhm… hace cinco años, en Rusia. Hubo muchas balas, y fuego y al final una explosión. – Siwon se rio de la cara de terror que tenía Heechul.

En este momento la vida que poseía valía realmente muy poco. No le importaba demasiado, y si hubiera muerto en aquel entonces, podría haberse ahorrado la pena de encarar la realidad que le suponía Cassey muerto, aunque eso también le arrebataría la posibilidad de conocer a Heechul.

- Vaya. – Heechul había recompuesto un poco el rostro, y siguió paseando los dedos por el pecho desnudo de Siwon -. ¿Y esta? – señalo una marca larga y que pasaba encima de la clavícula.

- Esta es de… Seúl. Fui a hacer unos encargos para Kibum, y hubo problemas. – Heechul mordió su labio y decidió seguir guiando sus falanges en diferentes direcciones, hasta que se detuvo sobre su abdomen.

- Esta se ve profunda… - el corte era pequeño, pero era más pronunciado que los demás, un poco más abultado y algo más rosado que el resto de piel.

- Eso fue un corte feo… Hace tres años aquí, en Londres. Escape por poco del detective Park. Tu compañero… pero fui herido por una navaja… habían tres bandos esa ves. Nosotros, ellos y los policías. Fue un verdadero caos.

Heechul oía las historias con cuidado, Siwon no estaba seguro si debía decirle todas esas cosas, pero como solo eran cortas historias acerca de sus cicatrices, decidió que estaba bien. No afectaba en nada decirle la verdad acerca de eso.

El detective se subió a horcajadas a Siwon, con una pierna a cada lado de su cuerpo, con las sabanas finas separando sus cuerpos.

- Esta es de esta noche… supongo que fueron los guardias. – dijo mientras delineaba las heridas recientes, con cuidado para no tocarlas demasiado y no herirlo más -. ¿Por qué la operaste la primera vez? – le dijo al llegar a los cortes abiertos de la nariz.

- La primera vez que conocí a Ryeowook, no nos llevamos bien, al poco tiempo nos enzarzamos en una pelea de verdad, era todo o nada. Desde entonces estamos juntos. Ha sido completamente leal todo este tiempo. No hay nada que no pueda hacer, incluso los trabajos sucios… el punto es que en esa pelea, el me rompió la nariz, y yo un par de huesos. Hacía ya unos años que me había quitado los lentes, y no me había dado oportunidad de corregir mi nariz, pero la fractura fue una gran excusa.

Heechul aún estaba sobre su estómago. Sentado, como meditando las palabras, viéndolo fijamente a los ojos y eso hacía que el corazón de Siwon quisiera salirse. Justo ahora se daba cuenta que no necesitaba estar poseyéndolo para ser feliz, podía serlo teniéndolo así, en completa confianza y comodidad, en paz.

Se arrojó de nuevo a la cama y se metió bajo las cobijas abrazado al pecho de Siwon.

- Heechul… ¿a quién buscas? Quiero decir… si está en mis posibilidades, lo encontrare para ti. Te daré lo que quieras, lo que te haga feliz. Todo lo que necesites, todo lo tendrás. – Siwon sintió su corazón desvanecerse en esa frase, pero no podía estar con Heechul si este quería a alguien más.

Era realmente sincero en eso, no quería dejarlo, pero con su trabajo, posiblemente estaría en peligro más veces que esta noche, y si podía ponerlo en manos de quien lo protegiera, rompería su corazón antes que la fractura fuera más grande, antes que Heechul sanara por completo sus heridas y luego lo dejara a un lado.

- Lo que sabes es un error… esa persona… - Heechul apretó su cintura en el abrazo, y murmuro algo que Siwon no pudo entender por qué la voz fue amortiguada cuando enterró el rostro en su pecho.

*

- Ya lo encontré… - murmuro Heechul con voz ahogada, seguro que Siwon no lo habría escuchado.

Aun no era el momento de decirle que él era la persona que buscaba, primero tenía que arreglar muchas cosas y sobre todo, sopesar las consecuencias de que fueran quienes eran. Y si de algo estaba seguro es que Siwon sospecharía que estuviera a su lado sin tener su “trato” como motivo entre ellos.

- Gracias… - dejo salir de sus labios mientras se abrazaba más a su cuerpo, si pudiera estaría así por siempre y que lo demás se fuera por el caño.

Lo que había comenzado como un chantaje, como algo obligado y dispuesto a ofrecer por encontrar a Andrew, lo había llevado directamente a él, a Siwon su primer y único amor. Aunque ahora era diferente, su corazón seguía perteneciéndole, pues ya Siwon había ocupado un lugar primordial en el suyo.

Porque Heechul estaba seguro que su corazón ya lo sospechaba, no es que el aceptara tan fácil un trato como el ofrecido por Siwon para ayudarle a encontrar a Andrew. Demasiado fácil confiar en él, incluso esa primera vez que sus miradas se cruzaron, su corazón dio un vuelco y no pudo parar hasta estar de frente a Siwon como sucedió en la fiesta de bienvenida.

Nunca sintió interés por nadie como aquel día por Siwon y a lo que lo llevo, a dejarse besar por él minutos después de conocerse; algo de eso le habría dicho a Heechul que Siwon era diferente. Todo ese tiempo de haber mantenido su corazón intocable para Andrew, que Siwon hubiera derrumbado sus barreras tan fácil.

Pero era tan difícil de creer que Andrew se convirtiera en alguien como Siwon, con su trato altanero y frio, un mafioso buscado por muchos incluso por él. Y lo peor, las experiencias que Siwon le hizo pasar en la camas, es algo que con Andrew nunca habría experimentado, ya que siempre fue todo amor con Heechul en la cama.

Hoy que habían hecho el amor, encontró en sus ojos aquella persona que tanto Siwon se empeñaba en esconder a los demás, le mostro a Heechul aquel ser tierno que podía ser, tal como cuando era Andrew. Hicieron el amor y sus almas conectaron, Heechul supo sentirlo y esperaba, rogaba porque Siwon también lo hubiera sentido.

Por eso no lo dejo de ver, quería mirarlo al tenerlo en su interior, grabarse esas nuevas facciones en su rostro, sus gestos al llegar al éxtasis. Todo era tan nuevo y a la vez un sentimiento conocido se extendía en su interior. Que estaba seguro que no amaba más a Andrew, quien ahora ocupaba su corazón por completo era Siwon, esa nueva persona que el aceptaba con todos sus errores, porque Heechul no estaba exento de los mismos.

Heechul se acurruco más en sus brazos, con la cabeza descansando en su pecho escuchando el latir de su corazón mientras Siwon le abrazaba, se estaba permitiendo muchas cosas que quizás lo desconcertaría; pero no le importaba ya que esta noche deseaba sentirse amado por Siwon.

Suspiro profundamente recordando lo contado por Siwon, ¿cuántas veces ha estado a punto de perderlo?

Escucharle hablar a Siwon de sus cicatrices, Heechul se estremece con esos relatos, preocupado y dolido por no haberle podido ahorrar todo ese sufrimiento. Que Siwon se haya envuelto en la mafia en parte era su culpa.

Se reprochaba el no haberse dado cuenta la similitud entre ambos, que sus investigaciones no hubieran sido correctas y lo peor, que su corazón se hubiera dejado engañar por el exterior de Siwon. Pero es que era tan diferente al antiguo Andrew, si Heechul estaba seguro que jamás le habría creído capaz de eso, ni siquiera de broma.

Por eso es que ahora se empeñaba en conocer todo de Siwon, sospechaba que había mucho más cosas buenas por descubrirle, aunque Heechul no se engañaba, tenía muy presente que también habría muchas malas por salir a flote.

- Siwon, ¿por qué todo lo que investigue, - preguntaba recargando su barbilla en el pecho de Siwon para poder verle el rostro -, resulto que no tenías conexión con algún viaje a Rusia? En el pasado no hay nada que te conecte a ese país, con Kibum y que estuviste ahí.

- Uhm… nuestro detective estrella no lo es tanto. – Siwon se burló un poco para desviar la atención del momento, pues aunque quisiera explicarle a Heechul sus motivos, no podría hacerlo sin involucrar su pasado y en su pasado estaba Cassey -. fue simple estrategia para el nuevo nivel de vida que llevaría. Un hombre limpio sin ese tipo de salidas sospechosas, es más confiable que cualquiera. Me ayude de muchos para mantener limpio mi nombre ante cualquier investigación; cómo has podido ver, funciona bien.

- Demasiado diría yo, Rain te tiene mucho aprecio.

- El viejo Rain termina creyendo que todos los que pasan por su comandancia son como su familia, el haría cualquier cosa por alguno de sus colegas o ex colegas, como estoy seguro ahora lo haría por ti.

Heechul se desilusiona un poco porque Siwon no le dice toda la verdad, es obvio que aún no confía del todo en él, lo cual es algo que quiere lograr.

Y todavía estaba lo que Jokwon le hizo saber, que supiera como era Siwon en la intimidad, encendía esa mechita que llevaba muy seguramente a los celos a Heechul. Si bien es cierto que él había cometido muchas locuras y metido con algunos cuando se hundió en las drogas, lo que lo disculpaba porque no sabía lo que hacía.

Sin embargo cuando fue rescatado por HoDong se propuso a no entregarse a nadie más, a no ser que fuera por amor. Y lo había cumplido hasta el día que conoció a Siwon, sin podérsele resistir mucho.

*

El silencio se hizo en la habitación y solo el tic tac del reloj de pared se escuchaba. Siwon comenzó a acariciar el cabello de Heechul con calma, y por algún motivo recordó que así es como hacia dormir a Cassey cuando tenía insomnio.

- Siwon… - llamo el policía rompiendo el silencio de la noche –. Jo Kwon… dijo algo…

- Te he dicho que no creas en Jokwon… - Siwon le recordó mientras acariciaba la espalda.

Heechul volvió a subir a sus caderas, pero ahora bajo las cobijas, juntando sus pechos y enredando los brazos en su cuello.

- Él dijo… – susurro un poco –. que sabe cómo eres en la intimidad… porque se acostó contigo. – la voz de Heechul sonaba ¿celosa? Era casi un reclamo, que le hizo sonreí.

- ¿Quieres la verdad? – sintió a Heechul asentir contra su pecho, respiro profundamente mientras intentaba recordad su época en Rusia -  Quizá fue un par de veces. En ese tiempo era mucho más joven, estaba enojado con el mundo, y una forma de desahogar mi frustración era el sexo. No lo hacía con la gente porque lo quisiera de verdad, si no porque lo necesitaba. Necesitaba liberarme, estaba muy presionado por Kibum y unas de esas veces quien estaba más cerca era Jokwon. Kibum también paso por mi cama. Y Henry y Sungmin, antes que conociera a Kyuhyun.

De alguna manera, quería ser sincero con el chico en sus brazos, decirle mediante sus confesiones en la oscuridad que confiaba en él, que no había nada que temer y que lo protegería.

- Pero entonces… no era así, ¿verdad? – Siwon supo a qué se refería.

Estaba simplemente sentado disfrutando de su compañía, y era un momento aún más íntimo que simplemente tener sexo. Siwon no pudo evitar reírse un poco ante la pregunta. Era más que obvia la respuesta, después de todo.

- No. Quizá como la primera vez que estuvimos juntos, aunque podría decir que era más parecido a Rusia. – Siwon recargo la cabeza en la pared al lado de la cama.

- Uhm…  - Heechul se estaba quedando dormido, y acomodo su posición para que no se despertara.

- ¿Algo más que quieras saber? – le estaba dando la oportunidad de interrogarlo, aunque posiblemente se encontraba más dormido que despierto. Su clara voz lo tomo por sorpresa, pues ya lo hacía en el país de los sueños.

- Kwon dijo… que buscas a alguien. – Heechul parecía nervioso con la frase, como si temiera la respuesta.

- Lo tuyo ha sido un error entonces. Y ahora te diré que no busco a nadie. Ya no lo hago… él murió hace varios años. – Heechul lo abrazo aún más fuerte, como si quisiera ser fuerte por él.

- ¿En verdad? ¿Tiene algo que ver con… lo que paso aquella vez? – Heechul se aventuró a preguntar, Siwon supuso que desde que ocurrió aquel incidente en su mansión, habría tenido curiosidad de saber. Pero él se había portado evasivo al respecto, pero como buen policía había podido atar cabos respecto a sus acciones.

- Si tiene que ver, pero no te diré más, porque es una herida abierta Heechul. Lo siento, no quiero recordar, solo quiero seguir adelante. – Siwon abrazo a Heechul que se recostó al fin en la cama, también abrazando a Siwon.

- Lo siento… no…

Las palabras de Heechul fueron inentendibles, pero pensó que ya era hora de dormir. Eran casi las cinco de la mañana y aunque no quisieran, tenían asuntos que atender en el día.

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