Eres Mi Valentín... Parte 2

- Es como cuando voy a esos paseos por el parque con Yesung. - Kyuhyun supuso que podría tomar el turno para hablar -. Ya sabes lo mucho que le gustan. – una sonrisa boba se dibujó en el rostro de Kyuhyun al recordar el momento.

“No soy muy afecto a ir a los parques. Siempre está lleno de personas y de niños, ruidos extraños. Pero como Yesung dice, su parte favorita es la de tomarnos las manos mientras caminamos y comer ese helado que tanto le gusta a mi lado. Es peor que un niño, pero con algunas ventajas.

- Kyuhyun, tienes helado en la cara. – lo sentí limpiar el helado con su dedo de una forma encantadoramente tierna. Como si tratara de no lastimarme ni con el simple toque. Cosa que me hizo enrojecer.
- ¡Ese era mi helado! – grite para sacarme un poco el bochorno que sentía.
- Pues ahora es mío. – terminó comiéndose el helado que me había quitado con su dedo, sonriéndome.
- ¡Por eso tú tienes el tuyo, Yesung! – sí, continúe con esa discusión infantil.
- Ambos son míos, porque tú me perteneces, ¡los helados y tú son míos! – su lógica era aplastante. Pero lo más desconcertante, fue el beso posesivo que recibí después con sabor a chocolate, importándole poco que estuviéramos en un parque público.
- ¿Te atreviste? – me puse de mil colores mientras miraba hacia todos lados que no nos hubieran visto.
- De todos modos me correspondiste. – me sonrió.
- ¡Todos nos vieron! – le reclame.
- A veces eres tan tierno Kyu. – me abrazó y besó mi frente, de esa manera amorosa que solo él sabe hacer.

Esa forma en la que me demuestra que soy más importante que todo lo demás. Me hace sentir protegido y poniéndome siempre como su prioridad, me ama y lo amo de la misma forma o más intensamente.”

Kyuhyun terminó de contarles a los demás, entendiendo muy bien el porqué, siendo Yesung tan tierno y considerado con él, es quien le daba a Kyuhyun y no al revés. Quizás su regalo de San Valentín incluiría un bote de ese helado que tanto le gusta y una gran imaginación para usarlo, claro que el ser un poco menos paranoico cuando demuestran su amor en público no estaría tan mal tampoco.

Henry no quiso guardarse lo que pensaba.

- Ahora entiendo porque eres el pasivo. – dijo Henry cruzándose de brazos.
- No, no entiendes. – una sonrisa tenebrosa se dibujó en el rostro de Kyuhyun, de esas sonrisas que utilizaba cuando iba a soltar algo que seguramente les dejaría algún trauma -. Porque no has visto lo que carga dentro de sus pantalones entre sus piernas. Una sola noche con él te dejaría insensible y sin poder sentarte por días.
- Dios, sabía que no debía escuchar. – Kangin llevó sus manos al rostro.
- ¿Qué? Hay que aceptar que está bien querer utilizar el mejor pene, sino es un desperdicio y entre nosotros, Yesung lo tiene. – termino de decir con orgullo Kyuhyun.
- Y que lo goces no tiene nada que ver. – esta vez fue Donghae quien los hizo reír.
- Tú que tienes para contar Donghae. – más que una pregunta, fue como una petición hecha por Siwon.
- Con Hyukjae debes tener las manos llenas, ¿no es así? – Henry le preguntó.
- No más que tú mi querido Hamster. – y de nuevo las risas se soltaron.

Viéndolo todo de nuevo con la cabeza fría, podían captar muchos detalles que en el momento dejaron ir. Para cuando se hubieron callado, Donghae comenzó a contarles, uno de tantos momentos que había compartido con Hyukjae, su pareja y mejor amigo.

- Es como si Hyukjae y yo nos entendiéramos sin palabras, que siempre supiera lo que estoy pensando o necesitando.
- Creo que eso es por todos esos años de amistad que han tenido. – dijo Kangin.
- Sí, supongo que es por eso. Aunque hay veces que realmente me sorprendo.

“Recuerdo muy bien el día que nos mudamos a nuestro nuevo departamento. Este estaba patas arriba, las habitaciones llenas de cajas y solamente la estancia la teníamos más o menos ordenada, aunque carecíamos de muebles pues no los traerían hasta dentro de dos días.

Era imposible terminar todo en un día, al final por cierto, nos llevamos más de una semana en ordenar todo y que quedara a nuestro gusto. El chiste es que ese día de mudanza, fue realmente muy cansado, pero yo me lo había imaginado de otra forma. Pensé que al ser el primer día haríamos el amor como locos, sin embargo pude ver el cansancio en Hyukjae, quien hizo un poco más que yo, porque había logrado improvisar un lecho en medio del caos.

Al menos ese día no dormimos en el suelo como pensé que lo haríamos. Nos metimos a la improvisada cama dispuestos a dormir o eso pensaba.

- Donghae, tengo mucho frio… - la sala era bastante amplia, pues estaba conectada al comedor y cocina. Era más bien como un gran espacio abierto y nosotros solo teníamos una muy ligera sabana encima, pues en esos momentos no supimos donde habían quedado nuestros cobertores.
- ¿Por qué te quitaste la ropa?
- Sabes que no puedo dormir con mucha ropa encima.
- Pero está haciendo bastante frio aquí. – lo abrace y pegue más a mi cuerpo, cubriéndonos a ambos mejor con la sabana.
- Gracias Donghae. Te amo. – me dijo en un ronroneo mientras besaba mis labios. Yo le correspondí y le di otro beso mucho más largo.

Me apoderé nuevamente de sus labios algo más pasional. Hyukjae no hizo nada más que abrir su boca y dejarme besar. Mordí con fuerza su labio y en ese instante metí mi lengua en su cavidad explorando salvajemente en esta. Me separe de él todavía algo agitado por el beso y al ver a Hyukjae mordiéndose ligeramente el labio inferior y mirándome con deseo, supe que esto no paraba ahí.

- Donghae yo… Sigo teniendo un poco de frío. – mientras decía esto mordía su labio inferior -. Realmente pensé que se me estaba pasando durante el beso, pero volvió.
- Creo que lo que tú necesitas amor, es otro tipo de calor más duradero. – me coloque entre sus piernas y comencé a besar su cuello.

Hyukjae enseguida comenzó a gemir, estaba seguro que lo deseaba tanto como yo. Y por dios, que no supe cuando lo hizo, pero se encontraba totalmente estirado y preparado para esto. Se sentó sobre mi pene y bueno… El resto de la noche fue...increíble.”

Donghae estaba seguro que pasar este San Valentín en el departamento que ahora consideraban su hogar era lo mejor, pero eso no le quitaba la idea que debía hacer algo más. Sorprender a su pareja. Lo cual tendría que buscar la ayuda de Siwon, porque planear un viaje de último momento y con tan pocos días de anticipación, eran especialidad de su amigo.

- ¿Nos estas contando o nos estas presumiendo? – Kangin comenzó a quejarse.
- Oye, yo no tengo la culpa de que este recuerdo se me haya venido a la cabeza. Aunque pensándolo bien… - Donghae trato de meditar un poco lo que iba a decir -. Creo que la mayoría de las veces son como esas.
- Lo que nos dice que son un par de pervertidos que solo piensan en eso y sus mentes ya están sincronizadas para darse duro en cualquier rincón que los acomode. Por eso Hyukjae siempre está preparado. – ante la explicación de Henry, todos se quedaron asombrados.
- ¡Vaya! Me has quitado las palabras de la boca. – dijo Kyuhyun chocando su mano con la de Henry.

Para este momento ya habían perdido la cuenta de cuando alcohol llevaban. Sin embargo todavía estaban dentro de sus sentidos, contando que gracias a estas reuniones, habían adquirido una buena resistencia al mismo.

Los platos fueron retirados, las botellas vacías cambiadas por nuevas y las copas rellenas de vino. El alboroto que la charla estaba causando, solo era callado por más bebida u otra experiencia contada.

- Pues Mimi y yo iremos con sus amigos a festejar en un bello restaurante. – Henry hablaba distraído moviendo la botella en su mano sobre la mesa -. No tuve idea de que hacer, así que le dije que haríamos ese día lo que él quisiera.
- Y encontró la forma de castigarte. – de nuevo Kyuhyun, con sus comentarios ingeniosos, pero esta vez sí que tenía un punto.
- ¿De verdad? – Kyuhyun e incluso Donghae asintieron -. Lo estaba pensando pero no lo creía capaz.
- Que más señal quieres para darte cuenta que él está sino molesto, al menos decepcionado que su primer festejo de San Valentín, te lo tomes a la ligera. – Siwon agregó.
- Bien, entiendo pero, no es por eso, es solo que lo que estoy sintiendo por Mimi me supera. Es tan perfecto. – y se hundió en sus recuerdos antes de comenzar a contarles a sus amigos.

“La otra noche estábamos viendo una película de esas horribles de terror. Ustedes saben que no soy muy afecto a esos, sin embargo Zhou Mi estuvo hablando de ella desde que la anunciaron que cuando supo que podría tenerla para verla en casa, no paro de recordarme el día como si se tratara de una cita. Y por esto, termine viéndola junto con él, en la sala de su casa.

La mayor parte del inicio de la película lo soporte, las partes un poco feas las omitía observando a Mimi, que se veía muy tranquilo mirándola, comiendo palomitas y tomando refresco. ¡Como si estuviera viendo My Little Ponny! Y cuando me hacía mirar a la pantalla, me la pasaba temblando levemente abrazando mis rodillas.

En una de las escenas cruciales termine pegado a su costado.

- Henry, si tienes miedo será mejor no veamos la película.
- Pero si solo es una niña huérfana. No tengo miedo. – quise restarle importancia.
- Ok, recién comienza lo bueno.
- ¡¿QUÉ?! – termine avergonzándome frente a un Mimi que me miraba confundido.
- Si te da miedo no es necesario que la veamos, podemos hacer otra cosa. – esto último pude ver que me lo dijo en un tono bastante seductor, pero con el miedo que tenía no le agarre el modo en ese momento. La verdad es que estaba aterrado.
- ¿Por qué voy a tener miedo de una niñita? – por mucho que deseaba ocultarlo, mi voz temblaba de miedo.

No soy cobarde, pero esas películas de miedo con temas tan reales… seguro que jamás jamás adoptaría una niña, quizás un niño sí.

Mimi se giró hacia donde me encontraba casi hecho un ovillo, enredo sus brazos sobre mis hombros y me dio un suave beso en la mejilla.

- Suficiente de películas. – Mimi se levantó del sillón y fue directo apagar la pantalla -. Creo que me iré a la cama antes que me de sueño. – dijo y me guiño un ojo coqueto.

Justo cuando iba a medio pasillo, dejo caer los pantalones que traía puestos, dejándome ver sus desnudas y largas piernas. ¿Cómo resistirse a eso? El suéter blanco que llevaba caía sexy por su hombro. Salí corriendo de donde estaba tras de Mimi, tropezando con mis pies, estaba entumido de la posición que había tenido y lo perseguí hasta la cama.

Ese día dormí en su casa e hicimos el amor. Lo que para mí fue más divertido que ver esa película tonta de terror.”

Henry se dio cuenta como Zhou Mi ponía sobre sí mismo su bienestar. Eso hizo clic en su cabeza e ideo la forma en sorprenderlo este San Valentín.

- ¡Rayos! Con esa invitación yo tampoco hubiera resistido salir corriendo tras él. – Fue Donghae quien habló primero.
- Modelo y con esas piernas, dudo que pocos se le resistan.
- ¡Kyuhyun! – Siwon llamó su atención -. Te estás dando cuenta que Mimi dejo de lado lo que quería sobre lo que tú necesitabas.
- Si me di cuenta.
- ¿Qué vas hacer?
- Primero, voy a cambiar este reloj. – Henry volvió a sacar esa cajita azul.
- ¡Santa mierda! ¿Le vas a comprar un anillo? – preguntó Kangin asombrado.
- No, esto es algo mucho mejor. Voy a ir a esa joyería y le voy a comprar el más bonito y asombroso llavero que tengan. Después le voy a sacar una copia a las llaves de mi departamento y eso es lo que le voy a regalar. – les explicó Henry -. Le voy a pedir que viva conmigo.
- ¡Vaya Henry! – Siwon se levantó de su lugar y presiono los hombros de Henry en felicitación -. Esperaba con fe el día en que te vería de esta forma, enamorado.
- La única verdad aquí es que Henry es el ganon. Mimi está como quiere.
- Ey Kangin, deja de comerte con los pensamientos a las parejas de tus amigos. Al menos cuando estamos presentes. – inquirió Donghae.
- Claro que no es eso. Es solo que, todos los que estamos aquí somos unos malditos afortunados. – dijo Kangin levantando su cerveza.
- Salud por eso hermano. – Kyuhyun lo secundó.
- Entonces, ¿te metes en el círculo?
- Claro. Sungmin tiene las cualidades de todas sus parejas juntas. – cuando Kangin hablaba de su pareja, no podían negar que el brillo de sus ojos cambiaba -. Que ahora este un poco oxidado con eso de las sorpresas o que hayamos caído en una cómoda costumbre, no quiere decir que Sungmin descuide hasta los detalles más mínimos. Nos seguimos amando a nuestra manera.

“Nadie más podría ser para mí, solo Sungmin. Él es perfecto para mí. Les diré porque, solo una de las muchas razones, y dejando de lado la más obvia, tener que soportarme como dice Kyuhyun.

Sungmin siempre es quien cocina, en primera porque yo soy un desastre en la cocina, segunda es porque le gusta cocinar y deleitarme con sus delicias. No me van a dejarles mentir que en verdad cocina muy bien y la última es porque no quiere morir intoxicado por mi comida. Cuando yo entro a la cocina es porque tengo mucha hambre o porque he comprado comida y voy en busca de los platos para comerla.

No soy tan inútil. Se hacer ramen de acuerdo a las instrucciones y un par de huevos revueltos también lo puedo hacer. Eso y café por las mañanas cuando quiero sorprenderlo son suficientes. Pero más que nada Sungmin lo hace porque no quiere encontrar un día incendiada nuestra casa, aún no terminamos de pagarla, es nuestro bebé.

Ese día que Sungmin me cocinó, vi que estaba muy cansado y aunque le insistí que compráramos algo para cenar, él dijo que ya traía los ingredientes de lo que deseaba hacer. A pesar que estaba cansado, cocino delicioso mientras yo ponía la mesa.

- Kangin ¿Esta rico? – me pregunto mirándome con sus hermosos ojos cuando comíamos.
- Si lo está. – le respondí sincero y feliz.
- Qué bueno. – parecía aliviado -. Pensé que había olvidado algún ingrediente. – para aceptar esto, seguramente mi Sungmin debía estar muy cansado.

La verdad no sé qué es lo que había cocinado ni como se llamaba pero estaba muy rico. Eran unas piezas de algo relleno, las cuales supuse que eran tres para cada quien, porque ya llevaba dos y me faltaba una. No eran de gran tamaño, eran pasables para una persona normal, pero ustedes saben que mi apetito no es para nada normal.

Así que devore la última que era para mí. Me quede con un poco de hambre y estaban tan deliciosas, pero no quise decirle nada a Sungmin. Él también estaba comiendo muy bien, se notaba que tenía hambre. A pesar de eso Sungmin lo notó. Me sonrió y comenzó a darme de uno de los suyos.

- Kanginie, di “A” – me pidió sonriente. Abrí mi boca para comer lo que me ofrecía y de esa forma, terminamos su comida también.

Quede muy satisfecho. No necesito decir mucho, pienso que Sungmin todo lo sabe, me lee por encima de mis reacciones y ese día dejo de lado su hambre por satisfacer la mía. Y superó su cansancio para hacer la cena para dos.

Después de eso me lo comí de postre sobre la mesa. Los platos terminaron en el piso, pero eso no era realmente importante, sino que agradecí de diferentes formas el que Sungmin fuera de lo más considerado y bueno conmigo.”

- Creo que el del problema siempre he sido yo. – dijo algo derrotado Kangin -. Sungmin siempre da más de sí y yo, creo que he dado todo por sentado.
- Oye a todos nos pasa alguna vez. – Siwon quiso hacerlo sentir mejor.
- A mí no me pasa.
- Donghae no ayudas. – le reclamó Siwon.
- Creo que deberías inscribirte en algunas clases de cocina. – sugirió Henry.
- ¿En serio? ¿creen que sea buena idea? – Kangin miro asentir a todos sus amigos.
- Pienso que sería lindo que a la mañana siguiente de San Valentín, después de toda la acción nocturna, sorprendieras a Sungmin con un desayuno diferente.
- ¿Aprender a cocinar en dos días? – Kangin no estaba muy seguro.
- Claro que no. – Siwon continuó -. Podría recomendarte el chef que me enseñó a mí a cocinar, ¿Por qué crees que Heechul está a mi lado?
- ¿Por tu dinero? – sí, de nuevo Kyuhyun.
- ¡Oye! Heechul ha sufrido orgasmos con lo que le cocino, eso me lo ha dicho con palabras y con esos soniditos sexys que hace con la boca cuando saborea un bocado. – dijo Siwon orgulloso -. Podrías tomar unas clases y bueno, le dirías que por esta fecha especial, te mostrara como cocinar un desayuno sencillo para tu pareja. No te va a decir que no, lo conozco y te va ayudar, siempre y cuando sigas asistiendo para que aprendas a cocinar bien más adelante.
- Dame su teléfono. – Kangin estaba empeñado a darle el mejor San Valentín a Sungmin, aunque era algo mínimo, en el fondo de su corazón, sabía que haría feliz a su pareja.


Continuara...

¡Happy Valentines Day!

Cierto, a que les debo el lemon, ¿verdad?
Si lo quieren pídanlo kekekeke

Bsos *3*



IMPORTANTE: Quiero aclarar que tanto el fic que aún no termino como este, surgió gracias a otro fic de una chica, la cual desafortunadamente no recuerdo el nombre, tengo su correo y charlamos porque le pedí permiso para utilizar partes de su fic, los cuales estarán como recuerdos de los personajes. Aclaro que no es exactamente lo mismo a lo que esta chica escribió, porque los modifique bastante, pero si la idea. Solo esas pequeñas partes no me pertenecen, las van a poder identificar porque están en cursiva y entre comillas.
Y si alguna de ustedes leyó esas partes alguna vez o conoce a la chica, es un fanfic de Hetalia que estaba en fanfiction porque lo han borrado, lo estuve buscando sin ningún resultado. Díganle que Belybsb todavía no cumple su promesa de escribir esa maravillosa idea que le conté por correo, pero que este minific es una pequeña parte de lo que pienso escribir. Gracias por dejarme usar parte de tus ideas.