The space between us… RPG 11


Siwon POV


Tenía que admitir que había pasado un buen rato con Heechul en aquel bar, hablar con él resultó ser agradable, me alegraba ver que había más en ese muchacho que la princesa caprichosa que solía mostrarme, distraerme me había servido, últimamente, a causa de Kyu y los sermones que había recibido por parte de mis amigos me sentía cabizbajo y molesto, ya no estaba seguro de que estaba haciendo, y si a eso le sumábamos que Heechul me había pedido una tregua, me encontraba en un estado nada agradable, me sentía perdido.

Sin embargo salir y distraerme había sido buena idea, tal vez podía llegar al final de todo este cuento sin moretones y dolor gástrico por culpa de los corajes que pasaba con Heechul, al menos ahora sabía que había un ser humano dentro de él.

Aquel pensamiento me dio vueltas por la cabeza durante unos días.

-Parece que has vuelto a la vida Siwon- me dijo mi padre durante el desayuno, yo simplemente me encogí de hombros- Eso me alegra, es un sábado muy hermoso, deberías salir a hacer algo, ¿Por qué no sales a comer con Heechul? Desde el miércoles no lo vez, ¿Cierto?

-No, no lo he visto pero…

-Pero hablaron por teléfono ayer- dijo mi madre interrumpiéndome, mi padre soltó una pequeña risa- Lo siento mi cielo, te escuché por accidente mientras charlaban, es sólo que me emociona que al menos ya no pelean- confesó, reí un poco ante su comentario.

En ese momento escuché mi celular sonar, me puse de pie para contestar y alcancé a escuchar a mi madre gritar “Si es Heechul mándale mis saludos” Esa mujer era única. El número en la pantalla no lo conocía, aun así respondí.

-Hola Siwon, soy Sungmin, el amigo de Heechul- dijo la alegre voz al otro lado de la línea- ¿Me recuerdas?- preguntó.

-Claro que me acuerdo de ti Sungmin, ¿Cómo estás?

-Bastante bien, oye Siwon, disculpa si te interrumpo, le pedí tu número a Hee para poder invitarte a mi fiesta de cumpleaños, tuve que posponerla un par de meses pero por fin podré hacerla, y me gustaría que vinieras- aquella invitación me sorprendió- Les dije ya a ZhouMi, a Kyuhyun y a Hyuk, sólo me faltabas tú, ¡Por favor di que sí vendrás!- rogó con un tierno tono, podía jurar que estaba haciendo pucheros.

-Cla… Claro Sungmin, iré a tu fiesta- dije soltando una pequeña risa, al otro lado de la línea el chico sonaba feliz.

-Es el martes, y es fiesta de disfraces, igual te mandaré una invitación, ¡Nos vemos Siwonnie!- dijo de manera alegre para después despedirse.

Regresé al comedor aun con el celular en la mano, una fiesta de disfraces, aquello me tomaba de bajada, nunca había sido un hombre fiestero, y tampoco tenía experiencia con los disfraces, iba a tener que pedirle ayuda de HyukJae… ¡Sungmin había dicho que Kyuhyun iba a ir! ¿Cuándo se habían hecho amigos esos dos? Al menos eso me demostraba que Kyu no tenía ninguna predilección por el tal Yesung. Tal vez y una fiesta me caería bien.




-¿Todo bien Siwon?- preguntó mi padre, yo asentí.

-Me llamó Sungmin, es amigo de Heechul, me invitó a su fiesta de cumpleaños el martes- dije sonriendo un poco, aquello parecía haber puesto de buenas a mis padres, tratando de no tomarle importancia a sus reacciones continué desayunando.

Sentía mi cabeza hecha un revoltijo, eso no podía negarlo, tenía muchas ganas de ver a Kyuhyun, quizá si lo llamaba y le proponía que saliéramos el sábado… Tenía toda la mañana pensando en eso, pero por alguna razón sentía que debía hacer algo especial para verlo, aun me sentía culpable por lo que vio en la fiesta de compromiso. Un toquido a mi puerta me sacó de mis pensamientos, y justo cuando iba decir algo, la puerta se abrió.

-Que lento eres para contestar- no entendía que hacía Heechul en mi casa, más importante aún que hacía en mi cuarto, me levanté de la cama rápidamente aunque sin saber que decir- Lindo lugar- dijo mirando de arriba para abajo- Y antes de que preguntes, tu mamá me dejó subir, es una mujer encantadora, me agrada bastante- dijo con una sonrisa.

-De acuerdo, y esta visita es debido a…- dije mientras él seguía inspeccionando, extrañamente estaba sorprendido en lugar de enojado como debería estarlo.

-Minnie me dijo que te invitó a la fiesta de disfraces, y HyukJae me dijo que seguramente no tienes nada para la fiesta, y como mi prometido no puede ir usando cualquier cosa vamos a ir de compras- sonreía, en verdad parecía gustarle la idea, suspiré, en parte tenía razón, yo no tenía nada para la dichosa fiesta.

-Está bien, sólo me cambio de ropa y nos vamos, ¿Si?- dije, el asintió. Abrí mi armario para sacar algo de ropa, Heechul continuaba paseando por mi habitación, decidí no decir nada, era mejor idea.

-¿Pintas?- preguntó, me giré para verlo, estaba cerca de mis cuadernos de dibujo y de mis acuarelas y lápices, parecía sorprendido, como nunca lo había visto.

-Y también toco el piano- le dije sonriendo de lado, el giró su mueca de sorpresa hacia mí- Eso me sirve para relajarme y liberar un poco el estrés- admití, él simplemente hojeó uno de mis cuadernos, no podía verle el rostro, su melena me lo impedía- Heechul… ¿Podrías salir de mi habitación un momento? Tengo que cambiarme.
-Claro, claro- parecía que había interrumpido sus pensamientos- No vayas a tardar- dijo antes de salir, reí, vaya que era cambiante.

Una vez en el auto me atacó con varias preguntas, todas giraban alrededor de mis “habilidades secretas” como él había bautizado a mi gusto por el piano y por pintar, le contesté sin rechistar, su curiosidad era divertida y tenía que admitir que me entretenía. Parecía querer saber todo sobre eso, y después de hacerme jurarle que algún día le tocaría una canción en piano comenzó a hablar sobre la fiesta de Sungmin y sus ideas para disfraces.

-Aunque aún no estoy muy seguro que regalarle a Min, estaba pensando en envolver a tu amigo el cara de mono en papel colorido y ponerle un moño de listón- dijo, yo solté una carcajada- ¿Y a ti que te picó?

-Nada, nada, lo siento, es sólo que nadie le había dicho así a HyukJae desde la preparatoria- dije aun riendo, a Heechul también parecía causarle gracia aquello- Eres bastante observador, nunca me imaginé que Hyuk sería el tipo ideal de alguien- dije mientras paseábamos por el centro comercial buscando la tienda de disfraces.

-Digamos que Sungmin tiene gustos muy particulares- dijo mientras se encogía de hombros- Es ahí- dijo de pronto señalando una tienda. En cuanto llegamos Heechul se metió de lleno a la búsqueda de los disfraces perfectos, parecía un niño pequeño la mañana de navidad.

Mientras estábamos ahí y me hacía probarme disfraz tras disfraz, me platicó un poco de cómo había conocido a Min  y de lo mucho que lo apreciaba, aquello me agradó, y de alguna manera el estar con Heechul sin pelear ya no era tan incómodo.

Una vez que tuvimos listo mi disfraz salimos de la tienda, Heechul me aseguró que ya tenía el suyo preparado, no tenía razones para creer lo contrario, paseamos un rato en silencio por el centro comercial, no era un silencio incómodo, era algo tranquilo, parecía que no había nada que decirnos y eso estaba bien, mirábamos las tiendas hasta que Heechul propuso ir a comer algo.

-No pensé que tú estarías bien comiendo pizza en el centro comercial- le dije conteniendo mi risa, él sentado frente a mi rodó los ojos sonriendo ligeramente.

-Tengo mis gustos culposo, ¿Contento?- dijo riendo arrojándome una servilleta, reí también- Aunque debo decirte que con la pinta que tienes has fallado Siwon, por lo general cuando las parejas salen hay rosas o chocolates de por medio y tú…- dijo con una mirada de inocencia que no le creí- Tienes que aplicarte más.

-Lo tendré en cuenta- le dije dedicándole un guiño de ojo, el resopló antes de reír, si bien Heechul y yo no éramos la pareja perfecta, ni lo seriamos, tal vez podríamos quedar como amigos.

Después de comer y platicar un rato, Heechul fue al baño, pensaba que, viendo su reacción cuando estuvo en mi cuarto, podría darle algo, como una ofrenda de paz. Le pedí un bolígrafo a uno de los meseros y comencé a garabatear en una servilleta, tenía poco tiempo así que no haría nada muy elaborado, cuando Heechul regresó dejé de lado el bolígrafo.

-¿Y tú por qué tan sonriente?- me cuestionó cuando se sentó de nuevo, sin decirle nada extendí hacia él la servilleta, en ella había dibujado una rosa, Heechul se quedó mirándola unos segundos.

-Prometo que la próxima será de verdad- dije mientras me encogía de hombros. Hee hizo un par de muecas que no pude interpretar, pero al final me dio las gracias en un tono bajo para después irnos de a pizzeria.


Heechul POV

Termino de arreglarme para la fiesta de cumpleaños de Sungmin. Ha sido buena idea que sea de disfraces, hace mucho que no hago algo divertido como esto y tampoco me había comprado uno tan lindo como este.

Observo la servilleta en donde Siwon dibujó una rosa para mí, es increíble cómo han cambiado las cosas entre nosotros, aunque los planes de boda siguen en pie. Su comportamiento de la última vez, en la fiesta de compromiso, me ha metido la espinita que esto no ha sido del todo su idea y que sus padres tienen mucho que ver como en mi caso.

Suspiro al tomar el pequeño dibujo y guardarlo en mi caja de accesorios, tiene llave por lo que estará seguro. Si lo dejo por ahí seguramente mi madre daría con la servilleta y comenzaría acosarme con preguntas, más porque Siwon puso su nombre a un lado de la rosa. Su firma.

Fue extraño entrar a su cuarto, su madre fue tan insistente que no pude negarme hacerlo y descubrir que tenía un pasatiempo al que adoro. Tocar piano siempre se me dio naturalmente, pero mis padres nunca fomentaron ese talento en mí, ellos estaban más preocupados que aprendiera otras cosas. Por eso lo poco que toco ha sido aprendido por mí mismo, obvio no lo hago bien, no sé si me atreva algún día a confesárselo a Siwon.

¿Y por qué me preocupa que sepa algo tan íntimo de mi vida?  Sacudo mi cabeza para sacarme esos pensamientos, no me llevaran a ningún lado, Siwon y yo solo hacemos la actuación.

- Creo que esta tregua está afectando mi percepción del matrimonio. – me digo al espejo para convencerme.

Pero cuando veo a Siwon de pie al final de las escaleras en casa con una sonrisa en sus labios, se siente tan real todo esto, que es difícil no perder el sentido. Al llegar al final de la escalera, Siwon toma mi mano y deposita un beso en ella, como ha venido haciendo últimamente. Ya no me niego, estamos en tregua, aunque el leve cosquilleo sigue ahí y va en aumento.

- Nuestros trajes hacen juego. – me dice -. Es por eso que no querías que viera el tuyo, ¿verdad? A diferencia mía, a ti te sienta perfecto.

Sonrió al saber que se ha dado cuenta. Al elegir mi traje, recordé nuestra charla en el bar, los vaqueros, sombreros, pistolas, todo lo werstern. El traje que compramos ese día para Siwon es de un vaquero, no un forajido, sino más del tipo sheriff. Con sombrero vaquero y fundas pistoleras, el pañuelo en el cuello con todo y botas.

El mío es tipo el que usan los jovencitos en apuros, los que casi siempre son asaltados en sus diligencias y salvados por el sheriff. Mi traje es blanco a cuadros, la chaqueta tiene tonos grises y es a cuadros también, pero lo más lindo es el detalle del sombrerito. Zapatos negros de charol, acorde a la época o eso creo, solo sé que me encantaron.

Lo mejor de todo es que parece que a él no le ha disgustado la idea de ir a juego.

- Si buscas un cumplido… - comienzo a decirle sonriendo.
- ¿Yo? Nunca, solo decía. – Siwon también le divierte la situación, me ofrece su brazo para ir a su auto.
- También te ves bien. – finalmente se lo digo, causando que me mire curioso.

Salimos de mi casa, justo bajando la escalinata de la entrada, se encuentra su auto estacionado. Siwon me acompaña hasta mi lado, abre la puerta y lo observo tomar algo del sillón. No me doy cuenta de lo que es hasta que ya la pone frente a mi rostro.

- Te dije que la próxima vez iba a ser real. – Siwon dice algo cortado. No sé por qué me da la impresión que él no ha hecho esto muy seguido.
- Es una rosa roja.
- ¿Te gusta? – su tono es algo preocupado.
- Son mis favoritas. – respondo hundiendo mi nariz en ella.

El camino hacia la fiesta fue silencioso más no incómodo. A decir verdad, si me fue un poco incómodo, no sabía dónde poner la rosa, ya que cada tanto deseaba ponerla en mi nariz. Lamentablemente lo hice varias veces, todas las veces Siwon se dio cuenta, me lo hizo saber por la sonrisita que ponía y eso me puso colorado de vergüenza.

La verdad es que si me han regalado flores, pero siempre las más caras u olorosas, nada que ver con mis gustos. Y que Siwon en un detalle tan sencillo haya dado en el clavo, me ha sacado un poco de mi equilibrio, no sé qué sentir o pensar. Sé que solo es un detalle, que está siendo caballeroso conmigo como debe serlo un prometido, sin embargo la molestia que se ha tomado, ¿Dónde empieza la actuación y termina la realidad?

Llegamos a la casa de Sungmin donde es la fiesta y esta parece que ya está en su punto, hay mucha gente y la música suena por todo el lugar. Luces, meseros circulando con bandejas de bebidas y botanas, gente bailando y muchos disfraces. Somos recibidos por un sonriente Sungmin.

- Pensé que no vendrían, tardaron mucho. – un puchero cruza su linda cara.
- Lo siento, fue mi culpa.
- Lo sabía, Siwon no es el impuntual en esta relación, tampoco necesita mucho arreglo. – le dice coqueto.
- Calla, mal amigo. – la situación parece divertir a Siwon -. Mira que me esmere en tu regalo. Feliz cumpleaños. – y le doy un abrazo. Siwon hace lo mismo después de darle su obsequio.
- Voy a buscar a mis amigos. – me dice -. ¿No me necesitas? De cualquier forma puedes buscarme con ellos cuando lo desees.
- Claro. – es normal que quiera estar con sus amigos y divertirse -. Yo haré lo mismo, ve. Después paso a saludarlos.
- Hyukjae está por allá. – le señala Sungmin, nos alejamos de la entrada hasta ver como Siwon ha llegado a su destino -. Llegaron juntos, vienen disfrazados como pareja y ahora él… ¿Qué sucede?
- Que vamos a divertirnos. – le digo jalando su mano para ir a bailar, entonces me doy cuenta que traigo la rosa en la mano, sino hago algo morirá -. Espera, primero iré a poner esto en agua, me la llevare al final de la fiesta.
- ¿Una rosa? No me digas que Siwon te la ha regalado.
- Está bien, no te lo diré. – le digo alejándome antes que comience a interrogarme.
- Me contaras todo, ¡al final de la noche lo harás Kim Heechul! – grita para que lo escuche, afortunadamente la música esta tan alta que dudo que alguien más lo haya escuchado.

Luego de rodear la casa, logro dar por una de las terrazas que dan al jardín, pero antes de entrar, noto que hay dos personas charlando en ese lugar. Mi primo y ese amigo de Siwon que tiende a intimidarme con su mirada, no sé porque me provoca estar a la defensiva. No quiero ser chismoso, su charla se escucha desde lejos, la música de este lado es imperceptible.

- El disfraz es de mi película favorita. – escucho decir a Kyuhyun, viene vestido de joven lord, ataviado con una hermosa vestimenta de esa época.
- Eso tiene sentido, el mío fue elegido por mi madre, quiere darle sentido a mis clases fallidas de esgrima. – el comentario de Yesung hace reír al joven, se ve amable de esta forma.
- Muy pocos lo saben, pero las películas de época me agradan. Solo mis amigos y mi… - Kyuhyun se interrumpe.
- Y tú novio, es imposible que alguien tan lindo como tú no lo tenga. - Mi educación me dice que no debo seguir escuchando, así que hago ruido y me aparezco en la terraza.
- Buenas noches. – saludo.
- Heenim. – Yesung viene y me abraza -. Llegas tarde, ¿vienes con tu prometido? – asiento como respuesta, no puedo dejar de mirar a Kyuhyun, su mirada me inquieta -. Entonces, ¿Qué haces aquí? La fiesta es por allá. – me señala, por lo visto quiere que me vaya.
- Ya lo sé. – respondo rodando los ojos -. Vine a poner mi rosa en agua, Siwon me la ha regalado y... – no quise decirlo alto, seguramente Kyuhyun ha escuchado, ojala no haya resultado muy entusiasta mi comentario -. Me voy.

De regreso a la fiesta, Sungmin baila en la pista con alguno de sus invitados, me llama para que me les una. Les hago una seña de que iré a beber algo, estoy sediento, lo que aprovecho para ir a saludar a Hyukjae, sabiendo que Siwon está con él.

- ¿Dónde andabas? – Hyukjae me pregunta al verme -. Estaba preguntándole a Siwon por ti.
- Oh, yo fui a… - me corto, no me voy a poner en evidencia -. Estaba con mi primo, al parecer a Yesung le interesa uno de sus amigos.

Por la cara que Siwon puso, supe enseguida que le causó molestia mi comentario, no fue mi atención hacerlo. Esta vez lo hice de manera inocente para salir de mi apuro.


Continuara...

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