The space between us… RPG 35



Kyuhyun POV

Mi mente trabajaba a mil por hora, desde que me enteré que Siwon y Heechul habían regresado de su luna de miel mi alma estaba intranquila, si bien había conseguido un poco de paz, en gran parte gracias a la presencia de Yesung, mi tranquilidad era una montaña rusa, a pesar de eso él significaba algo de tranquilidad en mi caótica vida.

Sin embargo ahora dejaría de colgarle una que otra maravilla, pues lo que acababa de escuchar mientras Yesung hablaba por teléfono me había dejado molesto, molesto y dolido; Yesung se había quedado conmigo no porque de verdad quisiera, ahora todo tenía sentido, se había quedado conmigo desde el día de aquella fatídica boda únicamente por su odioso primo, la razón era el estúpido principito de Kim Heechul, la sangre me hervía en las venas, ese tonto niñito mimado que me había arrancado lo mejor que me había pasado en la vida, aunque el idiota se Siwon tenía también bastante culpa, mira que dejarse caer por él.

Los dos me dan asco.


En cuanto Yesung sale de la oficina estoy listo para enfrentarlo, desearía tener algo de alcohol para hacer esto más sencillo, pero no, no más licores para Cho Kyuhyun, y en cuanto suelto mis primeras palabras me doy cuenta que esto va a terminar de una manera nada agradable, tengo un plan en mente, un plan bastante loco, lo suficiente para cobrarle a Kim Heechul su estúpida intromisión a mi vida.

- Él dijo que te vio, no lo alucinó ¿Por qué no me lo dijiste? – su reclamo se siente extraño, aquello parece, sólo parece, haberle afectado

- Ya no tiene caso, pues tú le crees a él y no a mí– le contesto muy seguro de mis palabras, necesito más líquido, necesito que se calle la boca de una buena vez- Pero para que puedas tranquilizar a tu alucinado primo, no, no los estaba siguiendo, ese día fue una coincidencia. La cual me ha dado una idea.

- No vayas a beber– no sé en qué momento se acercó tanto, pero ese acto de arrancarme el vaso de las manos me hace enojar, ¡¿Quién se cree este para darme órdenes?!

- ¡Tú no me mandas, Yesung!- le grito, él cambia su semblante, se suaviza.

- Es por tu bien, no estoy siendo malicioso o mandón. Por favor– aquellas palabras, aquel tono de voz, esa mirada preocupada, ¡Carajo! Mi mente estaba echa un nudo y Yesung me sale con estas cosas, sería más sencillo lo que quiero hacer, si él no se comportara de esa manera.

- No tienes que preocuparte más, no voy a beber, es solo jugo de manzana – le digo mientras me alejo de él- No puedo hacerlo más.

- ¿Qué dijiste Kyuhyun?- pregunta sin acercarse a mí, es momento del primer paso.

- No puedo ingerir alcohol, así que estate tranquilo que voy a andar bastante sobrio- dije girándome hacia él, su rostro me daba a entender que no comprendía lo que le decía- Yo, yo…- las palabras parecen estancarse en mi garganta, quieren salir, deben salir, no es un secreto que pueda ocultar por mucho tiempo- Estoy esperando- digo al fin.

Veo como mil y un reacciones y sentimientos pasan por el rostro de Yesung tras mi confesión, se acerca con paso lento, cauteloso, como si temía que de un momento a otro yo fuera a salir huyendo.

- ¿Qué acabas de decir Kyu?

- Mi doctor estaba preocupado cuando le conté hace unos días que había estado bebiendo mucho, me mando a hacer unos análisis y hoy me dieron los resultados- dije mostrándole las hojas algo arrugadas, él las tomo y las comenzó a leer con mucha atención- Salió algo que no esperábamos, él sólo quería asegurarse de que el alcohol no hubiera afectado a mi hígado.

Sabía que había un dato en el que seguramente Yesung se estaría concentrando: La fecha, el tiempo era el mismo que había pasado desde la boda de Siwon y Heechul, exactamente el mismo día en que me había acostado por primera vez con Yesung, realmente era poco tiempo, pero este tipo de cosas suelen ser muy claras en los estudios de sangre.

- Un bebé- soltó de repente, había nervios y emoción en su voz- Es bastante sorprendente, en verdad- al decir aquello me miró, y en ese momento estuve a punto de mandar a la mierda mi plan, todo por esos ojos llenos de alegría- Creo que tardaré un poco en asimilar la noticia pero…-

- Es de Siwon- solté de golpe, sin darle tiempo a que siguiera hablando, su mueca se descompuso, yo tomé aire con mucha fuerza.

- Anda Kyuhyun, parece que traes ganas de decir tonterías- dijo él con una risa nerviosa.

- No estoy diciendo tonterías Yesung, si estoy esperando el único responsable es Siwon- dije serio, decidido de mis palabras, no tenía idea de donde había sacado el valor para decir aquello, pero ya estaba, no había vuelta atrás.

- Kyuhyun por Dios, las fechas hablan por sí solas, ¿Cómo quieres que te crea eso?- Yesung parecía a punto de volverse loco, yo solté una risa.

- Tú no tenías idea de dónde estaba yo el día de la boda, ¿O sí?- dije, el negó ligeramente con la cabeza- ¡No tenías idea Yesung! ¿Qué te parece tan difícil de creer? El amor de mi vida se casaba ese día, ¡Lo perdía definitivamente ese maldito día! ¿Qué podía perder yo al ofrecérmele? ¿Qué de extraño tiene que haya decidido usar mi última carta?- lo que dijera tenía que sonar convincente, tenía que sonar creíble, tenía que sonar real- Pero como soy un idiota ni siquiera pensé en las consecuencias y mira- dije apuntando las hojas de papel.

Yesung se quedó en silencio por unos minutos, no tenía ni idea de que esperar, cualquier cosa podía pasar.

- No te creo- dijo muy serio- No te creo Kyuhyun, no puedo creerte, ese bebé no puede ser de Siwon.

- ¿En verdad quieres hacer esto tan difícil?- pregunté, comenzaba a sentirme nervioso- Has lo que quieras Yesung, cree lo que quieras.

- Yo creo que el padre de ese bebé soy yo, aunque te hayas metido con Siwon el día de su boda, tengo la mitad de las probabilidades de que sea mío- sentenció, yo lo miré de mal modo, el punto era que saliera enojado, molesto, que se alejara, no que, al parecer, se quisiera aferrar más- Además ¿Piensas decirle? ¿Tienes pensado darle esta noticia así de la nada?

- Claro que voy a decirle, tiene todo el derecho de saberlo- sentencié decidido.

Yesung me miró detenidamente, la mezcla de sentimientos en él era demasiado, pero parecía firme de cierta manera, esto iba a ser más complicado de lo que yo había pensado.

- Está bien, dale la noticia a Siwon, si crees que él es el padre de bebé que estás esperando, yo no soy nadie para detenerte- dijo mientras se acercaba a mí- Pero tú al igual que yo sabes que la posibilidad de que ese bebé sea mío es alta- al decir aquello ya se encontraba a pocos centímetros de mí, yo desvié la mirada- Lo sabes.

- No te hagas muchas ilusiones Yesung- dije aun sin poder verlo a la cara, no contaba con el hecho de que él estuviera tan seguro de su paternidad.

Dicho aquello Yesung se alejó en dirección a la habitación de huéspedes, no iba a poder pedirle que se fuera de la casa, yo había pensado que él se iría por su propia decisión, pero ahora no estaba tan seguro de que eso pudiera suceder.

Caminé hacia mi habitación pensando en eso, al parecer los planes nunca me iban a salir como yo deseaba, jamás sucederían al pie de la letra, pero no me iba a detener por eso, ya había dado el primer paso.

- Lo siguiente será ir a visitar a tu papá- dije mientras me ponía la mano sobre el vientre, me dejé caer sobre la cama- Llegaste en buen momento, tú me vas a ayudar a darle una lección al idiota ese de Kim Heechul, y a cambio vas a tener a un increíble papá.

Suspiré, seguramente Yesung sería un padre igual de extraordinario, pero eso no iba a poder ser, tal vez si Yesung y yo hubiéramos llegado antes a la vida del otro esta historia sería diferente, y él sería en estos momentos un hombre feliz tras enterarse de que será padre, sin embargo ya había tomado mi decisión.

Siwon iba a ser el padre de mi hijo.




Continuara...

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