Te adivine... Capítulo 11



Heechul POV

Esperaba que al abrir los ojos, todo hubiera sido un mal sueño y que las cosas volvieran a la normalidad. Donde Siwon y yo no estábamos enojados, y me despertaba como todas las mañanas para consentirme como siempre antes de irnos a trabajar. Pero no fue así.

Al abrir los ojos lo primero que pude notar es que no estaba en la cama, ni siquiera en la casa pues no olía a café como todas las mañanas. Lo segundo que note, es que ya era algo tarde, Siwon no me había despertado y yo no programe el despertador para que lo hiciera. Aunque nunca he tenido que usar el despertador de mi celular, ya que Siwon siempre me despierta.


Ruedo sobre la cama hasta el lugar de Siwon, debajo de la sabana me hago bolita ocultando el rostro en su almohada, aspirando su aroma. Aun no puedo creer lo que dijo, que desconfié de mí a estas alturas. Me encojo sintiéndome solo como no me había sentido hace mucho, sin embargo esta vez se siente mucho peor porque se lo que es tener a Siwon a mi lado.

Algo extraño en todo esto, es que me siento mejor que los días anteriores y no tengo ningún síntoma. Eso en lugar de darme alegría, me hace enojar, porque Siwon no está. No puedo decirle que me siento mejor para que sonría y deje de preocuparse, que me abrace diciendo que está feliz por mí, después me llene de besos insistiendo que el mismo debe comprobar cuan bien me siento y al final terminemos haciendo el amor, loco y desenfrenado como nos gusta.

¡Tonto Siwon, lo que te perdiste!

      Así que te fuiste sin despertarme, Siwon. – me siento sobre la cama y arrojo su almohada lo más lejos que da mi brazo. Es increíble como paso de un estado de ánimo al otro, ni yo mismo me entiendo.

Sacudo mi cabello y me dispongo a salir de la cama para ir a trabajar. Después de una ducha, algo de ropa limpia y bonita, voy a la cocina y veo que todo esta tan limpio.

      Lo bueno, es que no tengo hambre. – me obligo a no abrir el refrigerador y mirar si Siwon dejo algo para mí, yendo directo a la salida.

Para este momento, ya se me ha hecho tarde, lo bueno es que como encargado de una de las marcas y jefe del proyecto, tengo algunas consideraciones que pienso utilizar en estos momentos.

Salgo de la casa rumbo a la oficina que queda muy cerca del centro de Seúl, y por el camino, muchas cafeterías quedan de paso. Mi apetito se abre de solo ver los anuncios, los aromas, así que en algún momento termino con un capuchino con crema batida, una dona rellena de queso con crema de cacahuate y una bolsa de papitas.

Mi apetito no disminuye, para cuando llego a la oficina, una dona rellena de queso con crema de cacahuate ya ha sido devorada y más de la mitad de mi capuchino bebido. Dejo mis cosas sobre el escritorio, solo para abrir la bolsa de papas y comenzar a comerlas como si fueran lo más delicioso del mundo.

      Dios, si esto es estar deprimido, voy a engordar y ¡va a ser tu culpa Siwon! – tomo mi celular. No tengo ni una llamada pérdida de Siwon –. Quiero hablarle pero…

Tomo asiento detrás de mi escritorio dejando caer mi cabeza de frente sobre este. No sé qué hacer. Muero por hablarle y a la vez estoy tan molesto por cómo se puso anoche, que no me haya despertado, que no hiciéramos el amor y no haya llamado aún.

      ¡Ni siquiera un mensaje, Choi Siwon! – termino por comer más papitas.

Ayer yo no pude hablarle pero lo intenté, y él, ni siquiera para saber si llegue al trabajo. Y ahora no se si quiero explicar lo que paso ayer. 

      Necesito hablar con alguien, un amigo. Un consejo. Soy nuevo en esto de las relaciones, y Siwon lo sabe, pero él no está aquí en estos momentos.

Pero no puedo hablar con Gunhee, ya que fue él quien me ha metido en este lío, el muy idiota. Jungmo es otro y me encuentro molesto con ambos, por no pensar en las consecuencias de lo que hacían. Aunque hayan sido buenas noticias las que me dieron. Es probable que Jungmo entienda pronto lo que hizo, pensara mejor las cosas de ahora en más con su reciente compromiso y próxima boda.

Quizás por un tiempo no pueda hablar con ellos sin querer matarlos.

Después de mucho pensar y porque lo vi pasar por el pasillo sin nada que hacer, nada raro en él; decido que Yesung es con quien debo hablar. Además de ser mi jefe inmediato, tiene una larga relación con su ahora esposo y futuro appa de su hijo, él debe entender más de estas cosas que nadie.

      Yesung, podemos hablar. – le digo cuando me lo encuentro casualmente en uno de los pasillos. Ok, más bien lo anduve persiguiendo por todo el lugar hasta que decidí hablarle.
      Claro. – me dice sin moverse.
      En mi oficina, ahora.
      Muy bien, – escucho decir antes de girarse y caminar junto a mí–. No tengo mucho que hacer por el momento.
      ¿Cuándo ha sido eso? – digo de broma y ambos comenzamos a reír.

Ya instalados en mi oficina, fui directo y le conté todo lo que sucedió, desde que caí en los engaños de Gunhee hasta como no pude avisar a Siwon y después haber llegado tarde a casa en malas condiciones.

Yesung me ha escuchado por completo sin omitir una palabra, creo que lo tome por sorpresa al comenzar a contarle mi vida personal, seguramente habrá creído que íbamos hablar de trabajo y como tampoco le explique de que trataba.

Me como unas papitas ante el incómodo silencio. Yesung aún no dice nada, esta recargado en reposa brazos mientras acaricia con sus dedos su barbilla mirando hacia la nada.

      ¿Dices que se enojó muchísimo? – por fin rompe el silencio.
      Sí, incluso puedo decir que nunca lo había visto de esa forma. – dejo la bolsa de papitas a un lado.
      Ya veo. – se acomoda en la silla y esta vez me mira directamente a la cara –. Él es muy tranquilo, según lo que me has contado.
      ¿Tú como hubieras reaccionado? ¿Ves bien su reacción?
      Si por mí fuera, tú jamás volverías a salir de casa solo, ni al trabajo, ni a la esquina y menos con esos amigos tuyos. – frunzo el ceño ante su respuesta exagerada.
      Eso no es lo que quería oír.
      Lo sé, pero soy yo y no tú Siwon. – me dice serio dejándose de bromas –. Si tú mismo le das la razón al decir que entiendes que haya reaccionado de esa forma cuando llegaste a casa. Si las fachas que llevabas te delataba como que habías hecho algo malo, a parte que no le llamaste dejando que pensara miles de cosas, te dejaste el celular a propósito, – quiero protestar que es mentira pero Yesung no me deja –. Te estoy diciendo lo que yo vería sin conocer tu versión, sé que no lo hiciste apropósito pero Siwon no lo sabe. Ponte en su lugar.
      Dios, es verdad.
      Y luego no le diste una buena explicación cuando te lo pidió. Con esas evidencias en tu contra, cualquiera pensaría mal.

Termino hundiéndome en el sillón después de escuchar esto último. En que estaba pensando que no insistí en hablar o porque no le he hablado para empezar, estoy esperando que Siwon lo haga cuando quien cometió la falta sin querer, fui yo.

En seguida abro la caja de las donas y tomo una, le ofrezco una a Yesung que la toma.

      ¿Qué es esto?
      Donash rellenash de quessho con cremash de cacahuashte y eshas son papitash. – le digo balbuceando mientras mastico y saboreo la mía. Por alguna razón la deja a un lado y se me queda mirando.
      ¿Y ya fuiste al doctor? Que hayas vomitado todo en el camino de regreso no es normal.
      No me digas, tu esposo también se mareaba en el coche. – ruedo los ojos ante su insistencia en eso.
      No, él no. – me dice ahora con una sonrisa burlona.
      Te odio. – le digo.

Estoy agradecido porque me haya escuchado y darme otra visión de lo sucedido, pero lo odio por meter en mi cabeza la idea de un embarazo y por disfrutar el hacerme sufrir cuando evidentemente está bromeando.

De nuevo descarto esa idea de mi mente.

      Pero no todos los embarazos son iguales y mucho menos los embarazados, al menos eso es lo que dice el doctor. – esto último si me deja pensando un poco.
      No pude ir a la cita por lo mismo. – le digo intentando cambiar de tema
      Pues por ahí deberías de empezar para disculparte. Saca una nueva cita, que sea pronto y díselo a Siwon, que vea que estas realmente comprometido con eso. Y después, te disculpas y le explicas.
      Cierto, la cita. Voy hacerlo. – rápido tomo el teléfono–. Tienes razón, como no se me ha ocurrido.
      Y toma tu dona. – me dice dejándola de regreso en la caja–. Deberías dejar de comer o te va a dar sueño.

Termina diciendo antes de irse y dejarme muy sorprendido colgado en el teléfono, ni siquiera presto atención a la secretaria que me habla al otro lado de la línea.

Intento descartar la idea de un embarazo de mi mente camino a casa. He comprado algunas cosas para hacer la cena y esperar que Siwon llegue, le he mandado varios mensajes, “Necesitamos hablar” y “Te espero” es básicamente lo que dicen todos, pero ninguno ha sido respondido.

      Si no contesta, tendré que esperar que llegue a casa para la cena. 

Estoy un poco triste porque Siwon no ha contestado mis mensajes, ni siquiera los ha leído, y no contesta las llamadas. Sé que vamos a poder hablar en la cena pero, realmente quería que viniera un poco más temprano, quiero verlo y hablar con él, arreglar las cosas de una vez. Lo quiero pues, no me gusta estar así, como estamos ahora, tan distanciados.

Después de una ducha y haberme cambiado la ropa de trabajo por algo más cómodo. Últimamente mis pantalones se sienten muy ajustados y me cortan la respiración, seguramente tendré que ponerme a dieta pronto.

      Me va a dar tiempo para preparar algo sencillo para la cena, antes que Siwon llegue, como lo tengo planeado.

No es la gran cosa lo que voy a cocinar, ya que no soy muy bueno en la cocina como Siwon lo ha podido comprobar. Por eso desde que vine a vivir con él, Siwon decidió que él se encargaría de cocina y yo de limpiar la cocina cuando terminara de usarla.

Con un poco de ayuda, logro hacer un pollo agridulce, pues todos los condimentos vienen en una pequeña bolsa que venden en el súper.

Dice: Solo agregue el sobre al pollo semi cocido y cubra con una tapa. Deje cocinar durante quince minutos más. Y listo.

El arroz fue otra cosa fácil de hacer, pues la arrocera hace todo. En lo que si batalle un poco es en saltear las verduras comenzando por picarlas, me rebane un dedo con las zanahorias y ni hablar de las papas, no sabía que se ponían negras tan rápido, por eso quedaron descartadas. Y cuando por fin creía que las verduras estaban en su punto, se me ha ocurrido poner un poco de la salsa agridulce del sobre y han quedado un poco extrañas, solo las zanahorias se han salvado un poco.

Saben deliciosas las zanahorias dulces. Dios, creo que podría comerlas todos los días, le diré a Siwon que las incluya en la comida, en cuanto nos reconciliemos claro.

Con todo listo antes de las siete, decido hacerme un poco de mí malteada con proteínas, esa que se me antoja tomar siempre que puedo. La verdad es que me encanta el sabor del chocolate con el huevo y ni idea porque, a Siwon todavía le repugna un poco cuando le pido que me la haga. Pero me he dado cuenta que cuando la tomo, mi estómago se asienta un poco y se siente mejor.

Con mí malteada lista, me voy a la cama para estar un poco más cómodo mientras espero que Siwon llegue, repasando mentalmente todas las cosas que tenía que hacer y que ya están hechas. Como el sacar de nuevo una cita médica, necesito saber que está mal conmigo, quiero saber para sacar de mi cabeza todas las tonterías que Yesung ha dicho.

¿Tan mal me sienta la idea de tener un bebé de Siwon? No, claro que no. Un bebé con sus ojos y cabellos negros, su nariz y estatura. Sonrió al pensar en esto. Sin embargo a como estamos en estos momentos, algo me dice que aun debemos hablar un poco más.

Un gran bostezo me invade hasta sacar lágrimas de mis ojos. No lo puedo creer, de todo lo que me dijo Yesung, jamás pensé que tuviera razón en eso, que dejara de comer. Pronto, al terminar de tomar la malteada, un sueño pesado me toma por sorpresa, sin poder sostener mis ojos abiertos por más tiempo.

      Solo un poco. – me digo, intentando no cerrar los ojos en vano.

Finalmente me dejo caer bien dormido sobre la cama. No me doy cuenta cuanto tiempo pasa hasta que despierto. Un poco desorientado por cierto. Despertar en medio de la cama sin haberla desecho y con las luces encendidas, no es algo que acostumbre para dormir. Pero lo que más me desconcierta, es no tener a Siwon durmiendo a mi lado.

Trato de levantarme rápidamente de la cama pero eso hace que me sienta un poco mareado, lo que me hace sentar nuevamente. Mientras el malestar se pasa, intento convencerme a mí mismo que no es demasiado tarde, que quizás solo dormí una siesta, pero mi cuerpo relajado me dice todo lo contrario.

El celular me lo deje en la cocina seguramente y el reloj despertador que tenemos en el cuarto esta algo lejos de la cama, se me dificulta ver los números desde esta distancia.

A Siwon se le ocurrió ponerlo tan lejos. Sonrío al recordar el porqué. Cuando comenzamos a dormir juntos aun siendo amigos, cuando el despertador sonaba, yo solía tirarlo al suelo para que se silenciara o lo golpeaba, cualquier cosa con tal de callarlo. Así estuviera del lado de Siwon, era capaz de pasar por encima de él, solo para derribar el despertador. Entonces, cansado de tener que reponer cada tanto el despertador, tuvo la gran idea de ponerlo lejos de mi alcance, lo que le da tiempo a Siwon de levantarse y silenciarlo de la manera correcta sin tener que aporrearlo.

Intento de nuevo levantarme de la cama algo más despabilado. Miro el despertador y son las 5:02 de la madrugada, demasiado temprano como para que ya se haya ido a trabajar.

Extrañado, comienzo a buscar a Siwon, voy al baño pero no está, entonces me voy a la sala, donde se le haya ocurrido dormir en el sofá solo para castigarme va a tener que oírme. Llego a la sala y tampoco está ahí, cosa que comienza a preocuparme, si Siwon sigue enojado conmigo, él no me castigaría de esta forma, sabe que odio que me deje solo cuando estamos molestos.

Voy a la cocina con la esperanza de que este ahí, cocinando algo o tan solo comiendo lo que cocine ayer para él.

      Sí, seguramente se ha levantado antes que yo de la cama y  debió tener hambre…

Y mis esperanzas mueren al darme cuenta que todo está justo como lo he dejado ayer. El lavadero lleno de los trastes que utilice, al menos la encimera está limpia pues se me ocurrió levantar mi desastre y encima de esta mi celular. La cena que anoche era recién hecha, aún está en las cacerolas tapadas y sin tocar.

Todo esta tan silencioso. La casa se siente desolada, yo me siento de esa forma y algo comienza apretar mi pecho. Término sentándome en una silla del comedor, esperando a que de alguna manera, Siwon salga de alguna parte de la casa o aparezca de alguna u otra forma.

Las horas pasan y el sol comienza aclarar a través de las ventanas, iluminando todos los rincones de la cocina. Me siento tan tonto aquí esperando. Y si Siwon solo decidió no venir porque estamos enojados. No sería la primera vez que lo hiciera y me quedara esperando.

Dejo la cocina y me muevo a la sala, donde término sentado en el sillón con uno de los cojines sobre mis piernas mientras mordisqueo uno de mis dedos intentando mantenerme tranquilo, alejando mis pensamientos de la idea de verme abandonado por Siwon. Para este momento ya son las 8:30, pronto tendré que irme a trabajar y Siwon sigue sin aparecer.

No ha llamado ni mandado mensaje lo que me pone peor. Ya no sé si estoy preocupado o molesto, pensando en que si no ha llegado es porque seguramente ha vuelto a quedarse en casa de ese amigo suyo, Jungsoo.

      ¡Siwon, prometiste que dormirías en la misma cama conmigo y que hablaríamos como personas civilizadas! ¡Lo prometiste! ¡Mentiroso!… –grito, para finalmente darme por vencido.

Rápidamente tomo una ducha y me cambio, dispuesto hacer mi vida diaria e ir al trabajo. Nada gano con quedarme en casa, además si lo hago, siento que terminare loco de solo pensar. Necesito ocuparme para alejar esos pensamientos.

Viendo mi reflejo en el espejo, parece que no puse atención a mi ropa, pues algunos de los pantalones que quise ponerme me quedaron apretados y otros de plano no cerraban. “Deben ser los nervios” me repito. Logre entrar en unos a rayas de manta con cintas para poderlo ajustar, una playera blanca y mi gabardina negra. En completa facha.

Mi cabello tampoco ha querido cooperar, por lo que termino amarrándolo en una coleta baja, no quiero batallar más. Además que quiero salir de casa antes que a Siwon se le ocurra aparecer.

Estoy por tomar mi bolso cuando el timbre de la puerta suena. En seguida descarto que sea Siwon, porque él trae llaves, lo que sí es algo  temprano como para recibir visitas.

      Solo espero que no sea Gunhee. –digo con fastidio antes de abrir–. ¿Tú?
      Me recuerdas.
      Si, eres Jungsoo. –nos hemos visto pocas veces pero sobre todo, como olvidar al mejor amigo de mi pareja.
      Necesito que vengas conmigo. –me dice serio. Ahora que lo veo bien, tiene sus ojos hinchados y ojeras, como si no hubiera dormido bien.
      ¿Por qué tendría que ir contigo? –más allá de su espalda en el coche aparcado frente a la casa, alguien lo espera.
      Siwon sufrió un accidente ayer en la construcción, está hospitalizado.
      ¿Qué? No, él no pudo haber sufrido un accidente, yo lo habría sabido.
      Ayer fue todo un caos que no pude avisarte, él estaba muy mal que pensamos… Dios, no quise apartarme de su lado, lo siento. –me dice y comienza a llorar.

Siento como si todo ocurriera en cámara lenta, desde que Jungsoo dijo esas palabras delante de mi puerta, caí en un estado de sopor, de incredulidad. Hace unas horas yo estaba pensando lo peor de Siwon, ¿Cómo pude pensar siquiera un poco mal de él?

No sé cómo es que no me he puesto a llorar. Simplemente no puedo, estoy en shock y me siento tan culpable. Incluso Jungsoo tiene que guiarme a su coche al ver que no me muevo y me ayuda a subirme para después subir el mismo a mi lado.

Durante el trayecto al hospital Jungsoo me cuenta como había sido el accidente tomando mi mano en todo momento. Un gesto que le agradezco en mi interior.

      Todos dicen que Siwon estaba algo distraído durante el día, lo que explica que no viera como la grúa movía una viga cuando ya se había dado el aviso de la maniobra que harían. – me explica–. Intentaron avisarle pero fue demasiado tarde. La viga termino empujándolo al vacío.
      Siwon va a… –Jungsoo niega rápidamente.
      Él esta grave, por eso te necesitamos. Sé que no están casados pero al ser su pareja, las decisiones caen sobre ti. En cuanto lleguemos el doctor podrá explicarte.
      Lo que mi patito intenta decir, –la persona que va manejando comienza hablar–. No te quiere mal informar. Siwon está delicado pero vivo, se encuentra en terapia intensiva. El doctor podrá decirte las cosas mejor que nadie. Y por cierto, mi nombre es Kangin.
      Gracias amor. –la mirada que Jungsoo le manda a Kangin, lleva algo más que agradecimiento.

En poco tiempo llegamos al hospital. Bajo del auto y no me detengo hasta entrar, ni siquiera espero por Jungsoo que le daba instrucciones a su novio. Hubiera sido de más ayuda que lo esperara, de esa manera me habría ahorrado preguntar a las enfermeras en admisión, minutos valiosos que he perdido ahí.

Corro por los pasillos hasta el área de terapia intensiva que me han dicho que se encuentra Siwon. De igual forma me dijeron que no podré entrar hasta que el doctor haya hablado conmigo y que él me dirá cuando podré hacerlo, pero que al menos podré ver a Siwon desde fuera del cuarto de terapia a través de los cristales.

Con la preocupación, olvido el nombre del doctor, me lo han dicho pero no he puesto atención. Seguramente Jungsoo sabrá que doctor lo atiende y por esto, logro sentirme un poco peor, un pésimo novio que ni siquiera en momentos como este puede retener ese tipo de información.

Las lágrimas ya comenzaban a invadir mis ojos cuanto más me acercaba a terapia intensiva. El área es restringida, no así a las personas autorizadas y yo soy una de ellas, gracias a que Jungsoo dijo mi nombre y que soy la pareja de Siwon.

No necesito ponerme el atuendo especial, pues solo lo veré a través de los cristales, lo que hace más rápido mi acceso hasta donde se encuentra Siwon. Y lo que veo termina por derrumbarme. Cuando me acerco a la ventana de cristal por donde puedo verlo, Siwon está conectado a muchos aparatos y entre ellos un respirador, otro que mide sus latidos, así como algunos otros que no se para que sirven.

La pierna de Siwon se encuentra levemente levantada y enyesada, su cabeza se encuentra vendada y su carita hinchada. Lo que más me impacta, es el tono pálido que tiene su rostro y labios mientras sus ojos se encuentran cerrados.

No puedo verlo sin dejar de sentirme culpable, pensar que Siwon estaba distraído en su trabajo después de la discusión que tuvimos, de esa noche en la que no quise hablar y lágrimas comienzan a rodar por mis mejillas.

Quiero entrar a verlo, estar con él. Esta tan frío aquí. No quiero que se sienta solo.

      Siwon, perdóname… –rápidamente lleno una de mis manos a la boca, intento contenerme, todo está siendo demasiado para mí mientras me sostengo con mis manos de la ventana llorando por la injusticia.


Siwon no merece esto si todo es mi culpa.


CONTINUARÁ...

Comentarios

  1. Tanto tiempo ha pasado desde el último cap pobre siwon y hee no todo es tu culpa

    ResponderEliminar
  2. OmG!!! Que terrible lo que ha pasado con Siwi. Espero mejore pronto.

    Grqcias por actualizar esta historia ^_^

    ResponderEliminar
  3. Esta delicado y espero que pronto se recupere, y al menos Jungsoo le aviso si no seguiría pensando mal de Siwon, y Heechul no debe culparse debe ser fuerte para cuidar de el gracias por el cap bye.

    ResponderEliminar
  4. Siwon tiene una condición delicada pero espero se recupere pronto y puedan arreglar sus diferencias con HeeChul, ya que tiene todos los síntomas del embarazo.

    ResponderEliminar
  5. Siwon debe estar bien peque puedo apostar que Hee esta esperando un pequeño bebé. Pero es que no es todo culpa de Hee, que vale debió hablar cuando Siwon lo pidió, pero Siwon tampoco debería desconfiar de esa manera y vamos Hee cambio mucho y a pesar de todo debería entender que incluso un cambio al 100% no es del todo posible. Pero Hee lo estaba intentando y fue engañado. Ambos tuvieron culpa, pero Siwon no debió explotar así, ahora pone en peligro su vida y la de su hijo porque Hee esta muy alterado. Por favor no nos dejes así mucho tiempo. Gracias por la publicación, esperare con ansias el siguiente capítulo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario