Truth or Dare... Capítulo 5



   Es todo lo que recuerdo… luego desperté porque Heechul estaba gritando en el hotel.

Al ver el sonrojo de Siwon en su rostro al recordar su despertar en el hotel, Heechul quiso esconder su cabeza bajo los cojines del gran sillón donde se encontraban sentados, para que sus compañeros no notaran como los colores comenzaban a subir a su rostro. No entendía porque el menor los ponía en evidencia de esa forma. Está bien, quedaron en decirle a sus compañeros de grupo lo que había sucedido para que les ayudaran a entender que pasó y a soportar lo que se les venía encima durante un año, pero lo del hotel era algo que solo ellos dos debían saber.

¿Quería recordarlo realmente? De por sí ya sentía algunas cosas extrañas al estar con el menor, ¿Qué sucedería si recordara todo lo sucedido en ese cuarto de hotel?


   ¿Por qué gritaba Heechul hyung?

Heechul fue sacado de sus propios pensamientos ante la pregunta curiosa de Kyuhyun, porque de todo lo relatado, él se atrevía a preguntar precisamente por eso y antes que el nerviosismo del hecho delatara a Siwon, Heechul se adelantó.

   ¿Cómo no querías que gritara? – contrataco el mayor —. Desperté en una habitación desconocida, con un terrible dolor de cabeza por la resaca y cuerpo por haber dormido en el suelo, incluso mis zapatos estaban puestos, mis pies latían al igual que mi cabeza.
   Auch, eso debió doler mucho hyung. – se quejaba con un hermoso puchero Ryeowook.
   Entonces, eso es lo que sucedió, dices que los chocolates pudieron tener algo, ¿cierto? – Jungsoo interrumpió la pequeña charla con los brazos cruzados —. Heechul, ¿hay algo más que tú recuerdes? Sobre todo de los chocolates que tu fan te regaló.
   Cierto, conejo del mal, ven acá. – rápidamente Heechul se levantó de su sillón y fue hacía Sungmin, que enseguida huyo detrás de Kangin para protegerse.
   ¿Qué sucede, yo que hice? – gritaba Sungmin envalentonado detrás de Kangin, pues Heechul fue detenido por Siwon antes que llegara a su destino.

No era algo raro que Siwon contuviera a Heechul, la verdad es que era uno de los pocos que se atrevían acercársele cuando el mayor estaba furioso o triste, Jungsoo, Gunhee y el mismo Kangin, eran de los pocos que podían hacerlo. Pero en este momento, con todo lo sucedido, las miradas de todos estaban sobre ellos, mirando sus acciones con nuevos ojos.

Siwon se encontraba detrás de Heechul, sosteniéndolo de la cintura, deteniendo su avance. Como siempre el menor, tan acostumbrado a estas cosas con su hyung, que ya ni cuenta se daba que tan cerca podían estar. Su cuerpo pegado a la espalda de Heechul, con un mayor que ni siquiera lo notaba por estar concentrado en su objetivo, algo normal entre ellos ya no lo era tanto. De eso se dio cuenta Heechul, al sentir las miradas de todos sobre ellos y sus acciones, olvidándose por el momento de Sungmin y apartando las manos de Siwon a su alrededor tan rápidamente, que el movimiento brusco por poco hace caer al menor.

   Bien… — dijo algo incómodo Jungsoo —. ¿Qué te traes con Sungmin?
   Esos eran chocolates suyos. – Heechul volvió a sentarse con los brazos y piernas cruzados —. Los tome de su cuarto antes de ir a la fiesta.
   ¡¿Entraste a mi cuarto?! — bufaba molesto Sungmin —. ¿Por qué? Y además robaste hyung.
   Sungmin hyung, te dije que algún día lo haría. – se quejaba Kyuhyun.
   Por eso ponían cerrojo, ¿verdad?
   Calma, calma. – dijo Kangin poniendo orden —. Explícate Heechul.
   Bien, yo…

«En el departamento, ya todos se habían ido al lugar donde sería la fiesta, Heechul se encontraba solitario en este esperando a Jungsoo, ya que era el otro festejado, tenía que esperarlo para irse juntos al lugar. Realmente la sorpresa sería para Jungsoo, porque Heechul había organizado todo con patrocinio de Siwon, el menor no escatimo en gastos para festejar a sus dos hyung, pero sobre todo complaciendo los caprichos de Heechul.

Finalmente, Jungsoo consiguió el permiso para poder pasar su cumpleaños con su familia y amigos, pero este se tardó un poco, permitiéndole salir unos días antes del cumpleaños de Heechul. Cinco bellos días de permiso, por lo que vieron bien que se juntaran ambos cumpleaños, cosa que el líder del grupo ignoraba completamente.

Para esperar, Heechul es un poco desesperado y Jungsoo, sin razón aparente, porque le mantuvieron ignorante de la fiesta en todo momento; no encontró motivo para llegar puntual. Y esto a Heechul lo desesperó un poco y no solo eso, comenzó a sentir mucha hambre.

   No hay nada en la cocina, Wookie tiene que cocinar más. – comenzó a rebuscar en la despensa —. Una sopa instantánea, eso quizás ayude.— Pero no encontró ninguna, estaban escasas y supuso que por los preparativos de la fiesta, nadie se encargó de surtir la despensa.
   ¡Muero de hambre! – exageraba, más así era él —. Puede que Sungmin tenga algo, ese conejo siempre tiene reservas.

Por todos era bien conocido que Sungmin, el chico rosado de Super Junior, era afecto a las golosinas y a menudo se le encontraban bolsas de estas escondidas. No es que los comiera a diario, últimamente el rosado cuidaba lo que comía y su peso, una dieta rigurosa para el próximo comeback, por lo que Heechul confiaba que encontraría algo. Y no se equivocó, al hurgar en el cuarto encontró una caja repleta de chocolates, junto con algunas otras cosas. Cosas como regalos de fans del rosado.

   Esto calmará mi hambre. – Heechul tenía la caja de chocolates en sus manos, estaba por abrirla cuando…
   ¡¿Dónde están?! Vengo y no hay nadie, ¿Qué les pasa? – Jungsoo había llegado.
   ¡Ya voy!

Lo único que pudo hacer fue esconder la pequeña caja de chocolates en su mochila, la de cosas que traía ahí. Heechul termino saliendo del departamento con un no muy convencido Jungsoo. Para cuando llegaron al lugar donde se ofrecía la fiesta, ya todos los invitados se encontraban en el lugar y la fiesta esperando por ellos. A Jungsoo le emocionó la sorpresa, que todos sus amigos cercanos estuvieran a su lado y no solo de la SM, aunque la sorpresa más grande fue que Kang Sora estuviera ahí.

Heechul tampoco se lo pasó mal, bailo, bebió y convivió con todos, incluso con su más reciente amiga, Puff, con la cual grababa WGM. En verdad le gustaba su nueva amiga, tenía unas piernas de ensueño, mucho aegyo y además de ser muy paciente con él, también contaba con una perseverancia inquebrantable lo que hacía que lo soportará mejor. Pues a menudo Heechul se veía haciendo cosas que jamás hubiera imaginado hacer por persuasión de Puff.

A medida que fue avanzando la fiesta, Heechul se encontraba más divertido, más bebido y feliz. Porque no solo él lo estaba, por donde veía, sus amigos y compañeros lo estaban pasando muy bien. Sin inhibiciones, sin chicas, para esa hora, ya las pocas amigas que fueron invitadas se habían retirado, dejando a los chicos que se divirtieran a sus anchas.

Para cuando tuvieron que irse, Heechul recuerda muy bien cómo es que salió de ahí e incluso el viaje en el auto del menor, cuando le pidió que lo llevara al río Han. No deseaba que la noche terminara, además que tenía buenos recuerdos de ese lugar, abrió la mochila y de ella saco un paquete de chocolates envueltos en papel dorado. Comió dos y sus sentidos se agudizaron, Siwon comenzó a reír y pronto esa patineta que venía guardada en la cajuela del Audi desde que Sungmin se cayó de una, fue sacada. Al cuarto y quinto chocolate, Heechul se le unía al menor entre risas y charlas sin sentido, y tan osado se sentía que se subió a la dichosa patineta, casi tirando al suelo al menor cuando se la quitó.

   Hyung, no hagas eso, te vas a caer. – entre risas Siwon le decía.
   Deja, yo puedo, el Gran Kim Heechul no va a caer de una simple patineta.

En ningún momento, Siwon quito sus manos de alrededor del mayor, evitando de esa forma que se diera contra el suelo, pues en el primer momento que Heechul se ladeaba a punto de caer, los brazos del menor lo recibieron protectores. Heechul recordaba la mirada de Siwon después de que levantara la mirada suya aun resguardado en su pecho y rodeado por sus brazos, de ahí, no recordaba nada más. Es como si se hubiera perdido en esa mirada.»

Pero esto último, Heechul no lo dijo.

Sin embargo no recordaba cómo fue que llegaron al hotel, porque llegaron ahí, ¿cómo lo hicieron? Si pudieron  manejar, porque el viaje no lo recordaba. Y además no tenía claro como decidieron ir ahí y que motivo los impulsó, Heechul se sentía perdido en eso.

   No recuerdo nada más, ni lo que sucedió ahí después de eso, mis recuerdos son vagos.
   Yo estoy igual, — afirmaba Siwon —. Son recuerdos aislados, trato de juntarlos pero no sale nada coherente. No recordaba lo de la patineta. – dijo Siwon sonriéndole a Heechul. Sus gestos no pasaban inadvertidos por los demás, lo que sea que sucedió entre ellos, había cambiado algo ahí —. Seguramente la olvidamos ahí mismo porque ya no la tengo en el Audi.
   La patineta es lo de menos. – se quejó Kangin —. Sungmin-ah, ¿Qué diablos tienen esos chocolates?
   Yo… — Sungmin se veía renuente a hablar.
   Hyung, creo que tienes que decirles. – Kyuhyun intervino, sosteniendo la mirada del rosado.
   Habla conejo. – lo apuraba Heechul.
   Esos chocolates nos son dados por una fan loca.
   Ehhh… — ante la cara de interrogación de todos, Kyuhyun continuó.
   Una noche, Sungmin hyung salía de su obra musical hace tres años, esta fan se acercó y le regalo una caja de dulces junto con  otros regalos que sus fan le obsequiaron al salir. Desafortunadamente, eran los favoritos de hyung, así que llegando al departamento, justamente a nuestro cuarto no pudo resistirse aprobar uno. Yo estaba presente y pude ver como hyung enloqueció, se reía por cualquier cosa, peor que cuando esta bebido.
   Al comienzo a Kyu le causo gracia, pero después se preocupó y eso que fue solo un dulce.
   Después de eso... – Kyuhyun siguió con su relato —. Estuvimos más atentos, pasaron unos meses y no volvieron aparecer esos dulces, pero al olvidarlo, la chica volvió atacar. Esta vez conmigo, con chocolates y yo los comí, no todos, pero dos fueron suficientes.
   Esa chica continúo y para entonces ya la teníamos identificada, comenzamos a rechazar sus regalos y ella se dio cuenta. – Sungmin terminaba de explicar —. Ahora lo hace muy de vez en cuando, si acaso una o dos veces por año, según ella, el KyuMin necesita un empujoncito para ser real. Pero últimamente sus regalos se han vuelto más constantes debido a que Kyuhyun y yo no hemos hecho fanservice.
   Sus fans están locas. – reclamaba Heechul.
   No tanto como las siwonest, Heechul hyung. – la mirada que el maknae le dio a Heechul, le causo escalofríos, pues se había olvidado de ese pequeño detalle.
   Eso no está a discusión aquí, — Hyukjae que se había mantenido callado, quiso poner orden —. Sungmin, ¿Cómo es que no nos enteraste de esto? Y sobre todo, ¿Por qué no has tirado ya esos dulces? ¿Cómo los distingues entre todos?
   Es una obsesiva, siempre son los mismos dulces o los mismos chocolates, es su firma. – explicaba Sungmin —. Kyuhyun y yo lo hemos comprobado, y los tengo en una caja porque no he podido tirarlos, muy apenas estoy aquí para dormir, no he podido sacarlos a la basura.
   Mañana lo hago yo hyung, ¿siguen estando en el mismo lugar? – Sungmin asintió.
   ¿Qué dijo el CEO de esto?
   No nos creyó, por supuesto. Tenemos que cumplir un contrato, donde nos comprometemos a estar juntos por un año, para salvar a la SM de todo lo que provocamos. – Heechul comenzó a explicar —. ¿Por qué nuestras ELF no son normales? Les gustó tanto esto, que no dudaron en sacarle provecho.
   Al menos no les va a costar mucho aparentar. – se burlaba Kyuhyun —. Ustedes son especialmente cercanos, no me van a dejar mentir sobre esto.
   Pues yo… — Donghae interrumpió tímidamente —. Es verdad, cuando los vemos juntos, son diferentes el uno con el otro, no se tratan como nos tratan a los demás.
   Y ahora todos creen que esto sucedería tarde o temprano, ¿cierto?

Siwon ya se encontraba de pie, algo rígido en su postura, con ambas manos posadas en su cintura y un rostro que lucía bastante serio para ser él. Heechul lo sabía, el menor estaba conteniendo su enojo.

   Eso solo que… — Jungsoo trato de explicar diplomáticamente, pero lo sucedido no dejaba mucho para dudar —. Inconscientemente hicieron lo que no harían consientes. Así estuvieran drogados, sino hubiera nada entre ustedes estoy seguro que nada de esto habría pasado; lo que sucedió fue porque algo hay y lo externaron al no tener inhibiciones.
   Estas diciendo que, en el fondo, ¡¿me quiero casar con Siwon?! – escandalosamente preguntaba Heechul —. Sí que estas mal Park Jungsoo.
   Calma Heechul. – dijo Siwon seriamente. Que los honoríficos se hayan perdido entre ellos tampoco pasó desapercibido por los demás —. Es obvio que no creen que fue un error, algo que no debía suceder y que ahora debemos pagar por ello, ya sea con su ayuda o sin ella.
   No es eso Siwon, nosotros los ayudaremos. – dijo Hyukjae en apoyo —. Si al menos recordaran.
   Ese es el problema y lo que no entienden, no recordamos. – Siwon se veía muy frustrado —. Lo que nos enredó en este lio es precisamente eso. No sé porque se los décimos, no entienden.

El menor terminó por salir de la habitación dejando a todos perplejos. Heechul si lo entendía, pues seguramente después de la visita que le había hecho a su padre, su día habría ido de mal a peor. La tensión se le notaba en el cuerpo a Siwon cuando cruzó la puerta, y Heechul se sintió mal por no haber podido hacer más por él en este momento. Después de todo era su dongsaeng, su compañero de grupo y su amigo. Si, por eso es que se sentía muy mal por verlo de esa forma, también por eso es que estaba sintiendo su frustración, ¿verdad? Al menos es lo que se decía.

   Discúlpenlo, tuvo un mal día. – Heechul disculpó al menor para después retirarse a su habitación. Era raro que lo hiciera, nunca justificaba a los demás y los que estaban presentes se sorprendieron un poco mientras lo miraban abandonar la habitación.
   Bien, creo que podrán seguir hablando en otro momento. – Jungsoo habló —. Yo tengo que regresar mañana al servicio pero, se queda Hyukjae y quiero que me mantengan informado. Super Junior es una familia, como tal nos protegemos y ayudamos.
   Claro que lo haremos hyung. – Donghae dijo convencido.
   Yo creo que aún no nos han dicho toda la verdad. – saltó diciendo Kangin algo molesto —. Y ahora nos vienen a decir que es mentira lo que ha sucedido, lo que ellos mismos subieron a las redes sociales. No puedo entender eso, no les creo nada.
   Como sea Kangin, nos toca ayudar a Siwon y Heechul, no sé hasta donde tenga repercusiones esto que han hecho y como SM piensa mantenerlos protegidos. Si nos han dicho la verdad o no, nos toca estar de su lado, así que ya deja esa molestia, y tú también Shindong. – el mayor de los mencionados aunque no había dicho una sola palabra, se notaba en su cara lo desacuerdo que estaba con lo sucedido.

Seguramente Shindong esperaba que sus últimos días con el grupo fueran de lo más tranquilos, quitándole la presión del comeback claro. Jungsoo sabía que mientras estuviera confinado en el servicio estos pocos días no estaría tranquilo, hasta saber todas las consecuencias y que por supuesto, sus compañeros estuvieran bien con ello.

   Siwon y Heechul no nos hablaron sobre esto, entiendo, pero no por eso los vamos a dejar solos... – a Ryeowook se le veía muy preocupado.
   Solo denles tiempo, sobre todo a Siwon, se nota que no está muy bien con todo esto. – les advertía Jungsoo.

Donghae se mantenía abrazado a la espalda de Hyukjae, preocupado como estaba, estar pegado a su persona especial lo tranquilizaba. Había podido charlar un poco con Heechul, con Siwon no lo había hecho y verlo reaccionar de la forma en que lo hizo, solo aumentaba su preocupación. Necesitaba dejarles claro que los apoyaría, Hyukjae y él podrían entenderlos muy bien; y sobre todo, Donghae estaba seguro que los ayudaría a descubrir aquello que veía entre ellos dos.

******

Desde que Donghae le había dicho que un buen baño de tina relajaba los músculos ayudándole a sentir menos dolor en aquella parte baja suya, Heechul se había hecho asiduo a estos baños y que ahora en lugar de tener el pie hinchado metido en la tina o una cubeta, estuviera el con el cuerpo sumergido en tibia agua y esencias, se debía a eso. Heechul no había podido negarse a hundir su cuerpo en esa deliciosa agua para relajar sus músculos y de paso deshinchar su pie que se torció un poco, aunque eso le evito una caída más fea.

Últimamente le pasaban accidentes extraños cuando se encontraba con una multitud, como lo sucedido hoy al salir del edificio de la MBC. Iba con Kangin y Ryeowook, este último acompañándoles, mientras Kangin y él iban a ver lo de sus respectivas grabaciones de los programas que tenían con la MBC, y Heechul a ultimar detalles para el último programa War of Words.

Después de la firma del contrato en el que se obligaba a ser la pareja de Siwon durante un año, su participación en War of Words había sido acortado, para su buena fortuna, We Got Married había sido terminado de grabar ya hacia un tiempo, y ahora mantenía una agradable amistad con Puff, pero grabarían el último programa de WoW porque ya estaba metido en demasiados escándalos, como para venir a hablar de otra cosa más, y en ese programa, se sentía que no podía mentir. Había puesto en la cuerda floja sus amistades con Sulli y Taeyeon, y se había ganado el odio de muchas fans, y antes que otra cosa pudiera salir mal con respecto a su “relación” con Siwon, decidió retirarse. Decidió es una cosa, porque la empresa lo sugirió, a decir verdad.

Afortunadamente cuando sus compañeros de War of Words se enteraron, no le reclamaron nada. Puff había también aparecido repetidas veces en Corea para verlo, quizá si hubiera tenido oportunidad de salir con ella, ese día charlaron mucho y a Heechul le pareció cada vez más seguro que Puff era el tipo de chica del que podría gustar siempre. Sin embargo ahora no le estaba permitido nada de eso, pues se debía a un contrato, al menos que le dijera la verdad y ver qué pasaba.

Rápidamente alejo ese pensamiento de su mente, no arriesgaría a su grupo ni a nadie más. Por algún motivo, deseaba a la chica a su lado, le era difícil desapegarse de ella. Había sido su esposa virtual, eso contaba como conexión, más que una simple amistad. Si tan solo eso lo hubiera pensado hace una semana, ¿se le habría declarado?

Hace una semana que lo del hotel seguía olvidado en su cabeza, hace una semana que el mundo se enteró de esas fotos subidas a sus redes sociales, una semana que ese contrato que tenía con SM y Siwon fue concretado y era también la misma semana que tenía de no ver al menor, en estado normal. Siwon estaba demasiado irritable, molesto y hasta un poco grosero. Se había molestado con Donghae que solo deseaba hablar con él, Heechul sabía bien cuan insistente este podría ser pero, no era suficiente para molestarse con él; sobre todo cuando Donghae solo deseaba ayudar.

Se le veía algo descuidado, cansado y hasta su barba daba cuenta de su estado de ánimo. No es que a Heechul le molestara, siempre ha dicho que la barba en el hombre está bien y que le gusta porque él no puede tenerla. Y estaba claro que en Siwon se veía estupendamente bien. A menudo estos pensamientos saltaban a su mente últimamente.

Por su bien, Heechul dejó de pensar en eso.

Pero necesitaba hablar con el menor, muchas veces había querido llamarle, porque no habían coincidido en alguna actividad; el celular se quedaba en su mano y nunca marcaba. Raro que tuviera ese tipo de indecisión, aunque un poco de culpa también tenía el menor que desde la charla con el grupo, se alejó despreocupadamente e incluso desinteresándose de él. Heechul no sabía si realmente eso le molestaba, lo que si es que se sentía algo abandonado por ese dongsaeng molesto que siempre andaba rondándolo y cubriéndolo de afecto.

Heechul levanto su pie lastimado por encima del agua, ya no se notaba tan hinchado y no dolía tanto, realmente estos baños de agua tibia eran milagrosos. Quizás necesitaría vendaje por uno o dos días, pero si podría caminar normalmente sin dolerse mucho, ya era ganancia para él.

En eso estaba cuando la puerta del baño se cerró, alguien había entrado al baño y de todas las personas que esperaba, no pensó que fuera precisamente él.

   Heechul, me dijeron que estabas… — Siwon dejo de hablar, quedando de pie a un lado de la tina, algo cortado.
   ¿Qué sucede? – rápidamente Heechul dejo caer su pierna en el agua, no calculo y de nuevo su pie fue golpeado por el fondo de la tina —. Aaah… auch auch… — se quejaba.
   ¿Te hiciste daño? – Siwon acorto la distancia que los separaba rápidamente. — Fue tu pie de nuevo ¿verdad? déjame ver.

Para esto, Siwon ya se encontraba sentado en la tina donde estaban sus pies y aunque Heechul tenía el agua, la espuma y sus boxers puestos cubriéndose, no dejaba de sentirse expuesto ante el menor.

En este departamento todos se bañaban con bóxer, después de que el EunHae pusiera de moda tomar fotos a los miembros mientras se duchaban, todos tomaban sus precauciones ahora. Heechul le tendió el pie, las manos de Siwon lo sostuvieron delicadamente mientras lo revisaba.

   Solo esta hinchado.
   Ahora eres médico. – se burlaba Heechul.
   No, pero me ha pasado algunas veces, más ahora que he tenido que practicar en bicicleta. – un incómodo silencio le siguió después que Siwon soltara cuidadosamente el pie del mayor —. ¿Cómo te hiciste eso?
   Yo no me lo hice. – negaba fervientemente Heechul —. Al salir de la MBC las fans se juntaron, una de ellas al parecer traía unas botas demasiado grandes o tenía un pie más largo que el otro. – intentó explicarse, pero al ver en la cara de Siwon que no entendía —. tropecé con su zapato. No caí porque metí el otro pie para sostenerme, pero termine torciéndomelo.
   ¿Un accidente?
   Mmm, sí. – de verdad quería creerlo, aun después de la risa burlona que la chica le había dado.

Siwon seguía viéndose preocupado, por eso Heechul decidió que no le diría nada sobre lo que le estaba pensando sobre el accidente, lo guardaría para sí mismo y sería más cuidadoso en adelante.

   ¿Tú cómo has estado? – por fin Heechul se atrevió a preguntarle.
   Lo siento Heechul, si me fui de esa forma aquel día y también por haberme alejado. Lo necesitaba. – Heechul solo asintió —. Yo fui a buscarte ayer a la MBC para hablar contigo, pero estabas con Puff y no quise molestar. Lo estaban pasando bien. – Siwon dijo aquello en un forzado murmullo.
   ¿En serio? ¿Por qué no te acercaste? – a Heechul le agradó la idea que el menor haya pensado en un acercamiento antes que él.
   Lo hice ahora ¿no?
   Estuviste muy insoportable por lo que se.
   Lo estuve y lo siento tanto, me disculpare con todos, en especial con Donghae.
   Me parece bien. Sabes cómo es de sentimental pinocho.
   Sooman habló conmigo. – comenzó a decir Siwon ante la cara de sorpresa de Heechul —. Tenemos que elegir el departamento en el que viviremos, quieren que vayamos a verlo y de paso dejarnos ver por…
   Ya sé, ni me lo digas. Esta semana no hemos estado muy productivos para los medios que digamos. – dijo Heechul con algo de fastidio —. No espere que fuera tan pronto.
   Igual prefiero estar instalado antes de que tenga que irme a grabar la película, por eso no puse objeción, pero aún podemos discutirlo.
   Bien, déjame terminar aquí y vestirme, ¿vamos a hablar? – Heechul preguntó a Siwon al verlo levantarse para salir del baño.
   Sí, tenemos que ponernos de acuerdo sobre las próximas salidas que haremos juntos, creo que todo esto nos ha puestos raros. Somos amigos, compañeros Heechul, podemos hacer esto. – podía verse sinceridad en el menor.
   Estoy de acuerdo. – Heechul sonreía —. Te extrañe Simba.
   Yo también. – Siwon tomo su mano y el gesto no le disgustó a Heechul —. Por cierto… — Siwon se llevó la mano libre hacia el bolsillo de su pantalón, donde extrajo el par de anillos que Heechul le había dado aquella vez que hablaron con el CEO y con Sooman.
   Creo que debemos llevarlos puestos. – Siwon deslizo el anillo de Heechul en su dedo para después ponerse el suyo.
   Cierto, debemos hacer el teatro completo. — Vio asentir a Siwon y después lo vio salir del baño, Heechul se quedó solo mirando el anillo que de nuevo adornaba su dedo.
   Pensé que no te volvería a ver. – y ahí se encontraba, hablando con el anillo —. Bien, quizás esta vez sí podamos ver lo que hay en los dichosos vídeos.

Y se dispuso a salir de la tina para vestirse y encontrarse con el menor en la sala. Esta vez tenían mucho de qué hablar.


Continuará...

Comentarios

  1. Waaaa Leeteuk dijo lo que pensé. El SiChul estando sin el control de sus sentidos hizo lo que no eran capaces de hacer conscientemente.
    Y que bueno que ya casi inician su vida viviendo juntos?!!!

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  2. Su vida marital se iniciará muy pronto solo hay que elegir su nidito de amor 😍 😍 😍 😍 😍 😍 😍 😍 😍
    LeeTeuk fue muy directo y les dijo lo que pensaba, además es verdad conscientemente nunca lo hubieran echo, pero inconscientemente llegaron muy lejos..

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  3. inicio complicado para el sichul, hasta ellos mismos estan renuentes a lo que esta pasando.... saboas palabras las del lider cuando les dijo que se hizo presente lo inconciente

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  4. Esta historia me super emociona!!!
    Me gusta mucho y me da mucha, mucha curiosidad.
    Ahora solo falta ver como este par se da cuenta de lo enamorados que en realidad están el uno de otro.

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