Truth or Dare... Capítulo 25

«Después de muchos besos, más una botella de champagne tirada en el suelo, de mucho persuadir a Heechul de tener otra ronda de sexo y que no aceptara, Siwon terminó cargándolo hasta botarlo sobre la cama, donde sació sus ganas de volver a tener el cuerpo de Heechul sometido debajo del suyo»

Ambos se sonrojaron ante el recuerdo.

—    No fue gracioso como me cargaste. – Heechul quiso aligerar el ambiente.

Siwon lo había cargado descuidadamente desde sus piernas y con un tambaleante Heechul ebrio, fue todo un milagro que no vomitara.

—    ¿Recuerdas que en un Super Show te cargue de esa manera, Rella?

—    Sí lo recuerdo. – Heechul se giró en sus brazos al decir esto — Solo que esa vez en el escenario funcionó de maravilla porque eras joven, fuerte y estabas sobrio. – se burló.

—    Tú también eras muy joven y ligero, tan hermoso con tu cabello largo. Estaban tan bonito, más para ser un chico.

—    ¿Qué no soy bonito ahora? – pregunto Heechul captando el tiempo de su comentario.

—    Claro que lo eres, y más que bonito. – le aseguró Siwon repasando sus rasgos de su rostro con la mirada — Si no, ¿tú crees que estaríamos en este lío si no lo fueras? Eres lindo, muy lindo.  

—    Sabes, me gusta cuando me dicen que no he dejado de ser lindo y que mi rostro no ha cambiado con los años pero, si eres tú quien lo dice, créeme Simba que adquiere un mejor significado. – dicho esto, Heechul depositó un corto beso en los labios de Siwon para después alejarse coqueto.

Cuando el coqueteo llega al entendimiento de Siwon, más que las palabras dichas por Heechul, se lanza a por él hasta acorralarlo a una pared. Se miraron a los ojos intensamente absorbiendo el momento, lo sucedido en el auto aún los mantuvo encendidos, después sus bocas fueron atraídas como imanes para otro beso demandante.

Comenzaron un beso más intenso, mucho más que los anteriores, con mordidas, lucha de lenguas, chupadas, jadeos y uno que otro gemido. Justo cuando Siwon acomodaba su pierna entre las de Heechul, logró sacarle un sonoro gemido en medio del beso, al sentir como ésta rozaba su erección ya dura. Heechul hasta tuvo que sostenerse rodeando el cuello de Siwon con sus brazos.

Las manos de Siwon comenzaron a recorrer el cuerpo de Heechul, y su boca comenzó a dirigirse a otros lugares, besando y chupando su cuello mientras Heechul gemía y trataba de tomar aire para calmar su agitación, y dejó que Siwon se hiciera cargo del demandante beso.

Sin embargo, cuando sintió las grandes manos de Siwon colarse detrás de su pantalón, detuvo inmediatamente sus movimientos y con las palmas de las manos intentó separar a Siwon, ya que éste lo tenía agarrado de la cintura.

—    ¿Qué sucede? – preguntó Siwon.

—    Necesito ir al baño.

—    No te creo. – y diciendo esto, Siwon pego de nuevo su cara en el cuello de Heechul, donde comenzó a repartir besos nuevamente.

—    Siwon... – gimió Heechul y echo su cabeza hacia atrás, para darle más espacio a Siwon. — En serio, necesito usar la ducha.

—    ¿La ducha? – y por la sorpresa, las manos de Siwon liberaron a Heechul.

Heechul aprovechó el momento para escapar hacia el baño, donde rápidamente abrió la puerta y se perdió dentro, dejando a Siwon algo cortado, emocionado y duro también. Tuvo que sentarse sobre la cama.

Siwon estaba por echarse en ella, cuando la puerta del baño se volvió abrir y la cabeza de Heechul sobre salía.

—    Cuando regrese, soy todo tuyo. -  y volvió a desaparecer dentro del baño, esperando que Siwon no perdiera el ánimo en el que se encontraba.

Heechul se metió en el baño cerrando la puerta detrás de él. Su corazón estaba agitado, su rostro se encontraba caliente y sus piernas temblaban pero no malamente, le había costado malditamente mucho separarse de Siwon y por eso su cuerpo le estaba pasando factura pues deseaba más.

Como pudo caminó hacia el lavabo del baño, ya que siendo baño de una hermosa suit, parecía otro gran cuarto. Cosa que no ayudaba mucho a sus temblorosas piernas. Además del bidé, una gran tina se encontraba en ese espacio, que más bien parecía un enorme jacuzzi y junto se encontraba la ducha. Se trataba de un baño bastante lujoso podría decir.

Si esta suit se parecía a la anterior donde habían estado, Heechul no recordaba para nada el cuarto de baño. A excepción del jacuzzi, ese sí que lo recordaba.

Cuando llego se sostuvo fuertemente mientras miraba su reflejo en el espejo, donde vio su cabello alborotado, sus hinchados labios y el rubor que cubría su rostro y cuello, estaba hecho un lío pero poco le importó. Siwon no estaba mucho mejor que eso, Heechul bien se había dado cuenta.

Heechul fue hacía la ducha, una caja de cristal enorme con controles de los diferentes chorros de agua que comenzó a mover, pues además de la regadera que utilizaría para bañarse, a Heechul le interesó un pequeño y solitario chorro a la altura justa donde se unían sus piernas. Le iba a ser de utilidad para lo que tenía pensado hacer.

Comenzó a desnudarse rápidamente, pues no había olvidado que Siwon se encontraba afuera esperando, tampoco quería tardar mucho, Heechul se encontraba bastante agitado y deseoso por lo que vendría.

Sin embargo esta vez estaba consiente, iban a tener sexo y por eso él necesitaba prepararse, para nada sería como la primera vez. Tomaría por su cuenta su propio cuidado. Había comido bastante con Siwon por lo que utilizó primero el bidé. Después de hacer sus necesidades se metió a la ducha.

Heechul mojó su cuerpo antes de checar las pequeñas botellas que había en el baño, todas ellas decían para que servían, entre shampoo y cremas para el cabello que no utilizaría pues no pensaba lavar su cabello con cualquier cosa; los jabones líquidos y otros que parecían para un lavado más íntimo le interesaron bastante. Todos ellos contaban con deliciosos aromas.

Tomó uno de ellos para comenzar en esa zona privada primero, con el chorro ya encendido, la posición que tomó Heechul fue bastante cómoda, permitiendo un fácil acceso a todo su trasero.

¡Qué loco!

Estaba preparando su trasero para tener sexo con Siwon.

Y comenzó a reír como buen tonto enamorado. Aunque no se había abierto totalmente a Siwon todavía, Heechul estaba consiente que ya se encontraba enamorado y que Siwon estaba haciendo lo mismo con él. Ambos estaban tomando sus precauciones y eso estaba bien, pues comenzaron demasiado rápido y aunque pareciera que todos esperaban que terminaran como aquello, no quería decir que debía funcionar mágicamente. Ellos debían hacerlo funcionar.

Heechul estaba a punto de terminar, cuando escuchó que la puerta del baño fue cerrada, solo para ver a un Siwon tan desnudo como él viniendo hacia la ducha.

—    ¿Qué sucede Siwon? – alcanzo a preguntar Heechul después de cerrar el pequeño chorro de agua que le estaba ayudando a prepararse.

Por algún motivo no quería que Siwon se diera cuenta, está bien que ellos eran hombres y se habían duchado juntos muchas veces pero, de eso a prepararse él mismo delante de Siwon, era otra cosa. Tal vez parecería muy emocionado por hacerlo.

—    Quiero ducharme también. – respondió Siwon al entrar en el mismo espacio que él — Podemos hacerlo juntos.

Heechul asintió.

—    Po-de-mos.

¿Podían hacerlo? En el pasado lo hicieron mucho, el compartir ducha era cosa de ahorrar tiempo para que todos los miembros del grupo pudieran usarla, así que Heechul no solo se había bañado con Siwon, lo había hecho con la mayoría de sus compañeros. Por eso esto tenía que ser normal, pero no lo era.

La pregunta real habría sido otra para ese momento, ¿Podían hacerlo sin llegar a más?

Entonces, Heechul le dio la espalda a Siwon en cuanto este se metió bajo el agua que caía de la regadera, pues también le había dado la espalda, por eso quiso darle un poco de privacidad. Aunque eso no le quito el gusto de darle un buen vistazo al trasero de Siwon antes de darle la espalda y comenzar a tallar su cuerpo con uno de los jabones líquidos, parecía haber escogido el de olor a fresas.

Y mientras se duchaban, fue cuando Heechul se dio cuenta que la ducha no era tan enorme como pensó, aunque fácilmente daba cabida a los dos sin chocarse y con suficiente espacio como para moverse.

—    ¿Qué estabas haciendo antes Heechul? – pregunto Siwon a sus espaldas, pero antes que pudiera contestar, sintió las manos de éste recorrer su jabonosa espalda, haciéndolo estremecer — Porque si es lo que me estoy imaginando, podría haberte ayudado con eso.

—    Yo… quería hacerlo por mi cuenta.

Estaba claro que Siwon no lo dejaría pensar claro, pues ya estaba torturándolo con sus manos, barriendo su pecho de arriba hacia abajo. Heechul se vio en la necesidad de pegar su cuerpo al pecho de Siwon, y lo hizo, sintiendo como el cuerpo del menor encajaba perfectamente con el suyo. Incluso las partes importantes se encontraban en el lugar donde debían encajar.

—    Creo que ya no podemos ser tímidos si los dos estamos deseando que esto pase. – susurró Siwon a su oído.

—    Tienes razón. – yo también puedo hacer esto, pensó Heechul. — Ya me he duchado, déjame ayudarte, Simba.

Y ante una petición como esa, Siwon no se podía negar. Cuando Heechul le llamaba Simba, se sentía tan íntimo y cariñoso, que solo podía dejarse hacer.

Oh sí, Heechul hizo lo mejor que pudo en esas circunstancias, pues con las manos jabonosas sobre el cuerpo de Siwon, recordó las muchas veces que se ayudaron en esas duchas compartidas con sus compañeros de grupo, a dejar sus espaldas limpias con los pequeños estropajos o manos jabonosas. Aunque esta vez, la ayuda causó algo más en Siwon, pues también comenzó a reaccionar su cuerpo.

Esas manos delgadas de dedos ágiles, a veces parecían multiplicarse en su piel y otras veces se movían como si estuvieran tocando una suave melodía en un piano, haciendo estragos con Siwon.

A pesar de estar bajo el chorro de agua, la piel de Siwon comenzó a sentirse cálida y su parte baja entre las piernas también estaba reaccionando. Sentir las suaves caricias de Heechul sobre su piel, nunca se sintieron mejor. Sin prisas, bajando lentamente hasta que los movimientos se detuvieron abruptamente, lo que hizo que Siwon se girara hacia Heechul.

Siwon se quedó observando el rostro de Heechul, pudo notar que Heechul se encontraba igual de sonrojado y con sus labios entreabiertos como si intentara regular su respiración. Después fijo sus ojos en los expresivos y grandes ojos de Heechul, siempre terminaba hipnotizado por esos ojos alucinantes.

Acariciando con sus dedos uno de los hombros desnudos de Heechul, Siwon pudo observar como la blanca piel cubierta de pequeñas gotas de agua se erizaba bajo su toque, provocando que algo más se encendiera en su interior. Y entonces los ojos de Siwon adquirieron un seductor brillo especial.

¿Habría notado esto la primera vez que estuvieron juntos? Eso explicaba muchas cosas para Heechul, lo que no se explicaba, ¿cómo lo pudo haber olvidado? ¿Siwon lo había mirado de esa forma? Ahora que lo pensaba mejor, no, seguía sin recordar. Sin embargo, esta vez recordaría cada detalle y esperaba que su mente pudiera registrar todo lo que sus ojos estaban viendo.

Y entonces sucedió, la ducha se vio interrumpida cuando la mano de Siwon subió más arriba del hombro de Heechul hasta tomarlo por la nuca para después atraer su rostro, donde sus bocas se encontraron y entonces comenzaron a besarse. Sus corazones latiendo acompasados.

Besarse bajo la ducha era casi como hacerlo bajo la lluvia, quizás igual de romántico si lo imaginabas pero, en realidad estaba siendo mucho mejor, porque ambos se encontraban desnudos y sus pieles rozándose era algo alucinante de sentir.

Siwon terminó apresando a Heechul entre los azulejos y su cuerpo, dándole batalla a su boca hasta dejarlo sin respiración. Mientras Heechul, luchaba por permanecer de pie, pues el agua y el jabón hicieron los azulejos bastante resbaladizos. La mano de Siwon sujetando su nuca lo atrajo más queriendo profundizar aún más el beso.

Siwon quería más, lo necesitaba, Heechul podía darse cuenta de eso porque a su cuerpo le pasaba lo mismo. Sus caricias se volvían más osadas conforme el beso se profundizaba y se alargaba, calentando su cuerpo bajo el flujo de agua.  

Finalmente las piernas de Heechul flaquearon, estremeciéndose ante el temor de caer o por el beso, Heechul ya no estaba seguro en esos momentos. Si no fuera porque Siwon lo había sujetado, habría caído sobre los fríos y duros azulejos.  Heechul también se sostuvo como pudo de Siwon, rodeándole con los brazos alrededor de su cuello, enredando sus propios dedos.

El beso terminó pero la agitación de sus respiraciones tardó un poco más en regularizarse, continuaron con sus manos aferradas al cuerpo del otro sosteniéndose mutuamente, permaneciendo abrazados un poco más bajo la ducha.

Enredando sus dedos en los cabellos mojados de Siwon, Heechul no pudo evitar jalar su cabeza hasta unir sus frentes disfrutando de la cercanía, porque sencillamente ese no sería el lugar donde ellos podrían llegar a más.

—    Gracias. – Heechul dijo ordenando a sus pies sostenerlo sin poder evitar mirar hacia el lugar en donde estuvo a punto de caer.

—    Vamos. – Siwon no lo dejó que pensara mucho en lo sucedido.

Tomando de los hombros a Heechul, lo echo hacia delante de él haciéndolo caminar a través del baño, guiando su cuerpo fuera hacia la recamará, donde la cama sería la mejor opción.

A veces a Siwon se le olvidaba lo mal que estaba la pierna del mayor y esto no sucedía por desconsiderado, sino porque Heechul siempre estaba muy activo con su agenda y participando en los proyectos del grupo. Rara vez podía escuchar a Heechul quejarse de su pierna, al menos que se tratara de un ensayo, nunca lo veía quejarse de dolor.

Por eso a muchos, esto les daba la idea errónea, lo que no sabían es que detrás de la bella sonrisa de Heechul, él soportaba este dolor a veces. Siwon se lamentó el haber olvidado esto al calor del deseo. Heechul era algo más que pasión para él, deseaba cuidar de él y del amor que entre ellos estaba naciendo.

Sin aviso, Heechul empujo a Siwon, haciéndolo caer de espaldas sobre la suave cama, sacándolo de sus pensamientos. Heechul obviamente se dio cuenta que la mente de Siwon saliendo del baño no estaba ahí, por lo que no se le ocurrió mejor manera de hacerlo reaccionar.

Heechul caminó hacia él y salto sobre la cama hasta colocarse a horcajadas sobre el cuerpo de Siwon; se había sentido tímido en el baño pero la habitación, la cama, las luces leves, un Siwon desparramado y desnudo sobre la cama, ambos duros, Heechul no pensaba perder la oportunidad. Además estaba seguro que esa dureza entre sus piernas no iba bajar fácilmente hasta que se tuvieran.

De pronto sintió como Siwon lo tomo por los hombros con sus fuertes manos, hasta inclinarlo a su pecho, solo para alcanzar su boca de nuevo. Heechul jadeó durante el beso, al sentir como sus miembros se rozaban entre sí, haciendo la fricción dulcemente delirante, aumentando la efusividad de su beso.

Cuando se separaron, Siwon estaba expectante cuando la mano de Heechul se deslizó suavemente hacia abajo y alcanzó a tomar la punta de sus miembros juntándolos en una caricia firme. Siwon exhalo conteniéndose, aferrándose con fuerza a las sabanas, sorprendido de igual manera al sentir como se endurecía más, sacándole un pequeño gruñido.

Heechul dejó entonces de masturbarlos ya que no deseaba que Siwon acabara de esa forma. Entonces de nuevo se inclinó sobre Siwon y con su boca fue depositando besos húmedos por toda la piel de su cuello, en sus labios pudo sentir el latir de su yugular. También beso su manzana de Adán, al sentir como Siwon tragaba, seguramente excitado por lo que le estaba haciendo.

Bajo su cuerpo un poco más y con él los besos se trasladaron a su pecho, Siwon tenía una suave y ardiente piel al tacto de su boca. Fue depositando besos muy lentamente hasta llegar a sus pezones. Primero uno y luego el otro, de esa forma hasta que tuvo que utilizar los dedos con el pezón que su boca dejaba libre.

La boca traviesa de Heechul paso de los besos a tomar uno de los endurecidos pezones de Siwon entre sus dientes, haciendo que este soltara un sonoro gemido. Obviamente no lo estaba lastimando, Heechul jamás haría eso al menos que Siwon lo quisiera, fue solo un leve apretón con sus dientes lo que desató el calor.

Siwon no iba a poder soportar más, extrañamente su espalda se arqueaba buscando el toque de la boca de Heechul, en lugar de alejarse. Heechul siguió torturándolo con sus caricias un poco más hasta que ya no pudo soportarlo, Siwon necesitaba… necesitaba a Heechul.

Las manos de Siwon se colocaron sobre las estrechas caderas de Heechul, impulsó su cuerpo haciéndolos rodar, dejando debajo suyo a Heechul ahora. Siwon no pudo dejar de notar que la blanca piel del mayor en algunas partes había adquirido un leve color rosado, cosa que le llamó la atención y tampoco pudo dejar de notar lo bien que se veía con los cabellos desparramados sobre las sabanas y su boca hinchada por sus besos.

Estaba seguro que ningún otro chico o chica le atraía tanto como Heechul en estos momentos. Por ahora todo lo que Siwon deseaba hacer era tenerlo, quizás en otro momento se daría tiempo de explorar el cuerpo de Heechul, como lo había hecho él con el suyo.

En otro momento, se dijo, sin poder evitar sentir un nudo formarse en su estómago.

Cuidadosamente se colocó entre sus piernas y rozó con su miembro erecto la entrada ya preparada de Heechul, que al momento lo detuvo.

—    Espera, necesitamos lubricante. – eso detuvo a Siwon.

—    ¿Dónde?

—    Traje uno del baño. – y Siwon no se había dado cuenta.

Cubrió con el lubricante su miembro por completo. Siwon contuvo la respiración cuando introdujo la cabeza de su pene en Heechul, intentando no empujarse por completo. Estaba tan estrecho todavía, que lo único que se antojaba era estar enterrado por completo en su cuerpo, pero sabe que debía esperar si no lo lastimaría.

Poco a poco y con cuidado fue avanzando, echando sus caderas hacia adelante, entrando lentamente hasta sentirse profundamente enterrado y presionado en sus paredes. Tan cálido, estrecho, le costó bastante a Siwon poder controlarse.

Después de un tiempo prudente, Siwon ya no se contuvo más y comenzó a balancear sus caderas. Esta vez no estaban siendo llevados por el alcohol, puro deseo y pasión, casi tanto como dos corazones latiendo como uno solo, permitiéndoles disfrutar al máximo su unión.  Sus caderas se movieron juntas y al mismo ritmo que Siwon marcaba con sus embestidas.

Heechul también lo estaba disfrutando, sintiendo el goce de estar consciente y concentrado en sus propias sensaciones. De un momento a otro enredó  sus piernas a las caderas de Siwon, cambiando el ángulo de las embestidas, sintiendo como esta nueva posición le generaba más placer que antes.

Las embestidas se hicieron cada vez más fuertes y rápidas, Siwon puede sentir que pronto terminaría. Con la respiración agitada, el calor en su vientre comenzaba a concentrarse, acercándolo con cada embestida al clímax.

Siwon endureció sus brazos, intentando como puede no caer sobre Heechul, que se encontraba igual que él.

Sus ojos se encontraron en medio de su unión, los dedos de Heechul se enredaron en los brazos de Siwon, ayudándolo a soportarse, cuando llegaron juntos.  No gritaron sus nombres, pero sus ojos no dejaron de observarse en ningún momento, grabando en su memoria lo que sus almas desnudaban en aquella mirada.

Siwon terminó dentro de Heechul  mientras este lo hacía entre sus cuerpos, hasta que las embestidas se detuvieron y Siwon tuvo que separarse.

Más lento de lo que pensaba, Heechul desenredo sus entumecidas piernas del cuerpo de Siwon, dejándolo salir de su cuerpo. Estaban cansados, por lo que Siwon se dejó caer de espaldas a su lado sobre la cama, sudados y con las respiraciones entre cortadas.

Esta vez no la iban a olvidar. Iban a poder recordar cada detalle de sus cuerpos uniéndose, como se dejaron llevar por la pasión y el placer, y lo maravilloso que se había sentido compartir el momento con él otro, al volverse uno solo.

Heechul rodó sobre su costado, sintiendo al momento como algo se escapaba de su interior y mentalmente se reclamó por no haberse acordado del condón. Aunque Siwon y él estaban libres de enfermedades, como sea era un descuido. Iba a tener que hablar más tarde sobre eso con Siwon.

—    Necesito… descansar un momento. – dijo Siwon con voz agitada todavía.

—    Yo también. -  pero Heechul lo observaba, no podía dejar de hacerlo.

Siwon se encontraba boca arriba con un brazo cubriendo sus ojos.

—    Me estás viendo, puedo sentir tus ojos.

—    ¡No voy a dormir!

—    Entonces descansa un poco.

—    Mis ojos no te están viendo.

Heechul pudo ver como la boca de Siwon se extendía en una bonita sonrisa.

—    Cierra tus ojos entonces, puedo sentirlos mirarme. – Siwon permanecía con los ojos cerrados. — Son tan grandes que difícilmente pasan desapercibidos así no los vea.

—    ¡Que no te estoy viendo! – dijo Heechul que sonreía tontamente mientras giraba su cuerpo hacia el otro lado.

Siwon abrió sus ojos notando la desnuda espalda de Heechul, entonces se acercó a él y se acurruco sobre su espalda abrazando al mayor. Esperaba que esto no le incomodara, sin embargo sucedió lo contrario porque Heechul acomodo su cuerpo y pronto se quedó quieto dentro de su abrazo.

Y entonces sus respiraciones se fueron acompasando lentamente.

Continuará…