Encuentros... Octavo Encuentro

  






“Encuentros espaciados, deben ser muy bien aprovechados.” 
Dochanlu.

 
Siwon POV
 
Claro que había visto la escena. Cualquiera que haya estado cerca la vio porque él tipo no dejaba de gritar.
 
—  ¡¿Qué? ¿Necesitas más?!
—  Tú…
—  Vámonos.
 
Ese hombre, es el mismo que estuvo por aquí merodeando en el centro comercial el otro día y lo recuerdo bien, porque sucedió algo parecido... Él chocando con alguien sin disculparse para nada.
 
Entonces, aparece de nuevo pero no viene solo esta vez, si no con Heechul, lo que me hace estar atento ahora.
—  ¿No sabes cómo decir lo siento?
—  ¿Perdón por qué? Solo compra otro par de zapatos con este dinero igual que ellos.
 
Estaba aguantando las ganas de golpear la cara del tipo, por haber hecho lo que hizo pero sobre todo, por hacer sufrir a Heechul y tratarlo de forma tan grosera.
 
Esta es la persona que tanto daño le ha hecho. No lo puedo soportar, Heechul no está sólo esta vez y no voy a dejar que nada malo le suceda. Aunque tampoco es como si pudiera hacer un escándalo, ya que a mí no me importaría perder mi empleo pero, Heechul no se merecía una escena así.
 
Por ningún motivo quiero afligir más a Heechul.
 
Así que, sin que ellos se den cuenta, me acerque hincándome ante Heechul y comience a limpiar su zapato con el puño de mi propia camisa. No tenía nada más al alcance de mis manos y aunque esto parece llamar la atención de ambos, el tipo dejó de hacer escándalo.
 
—  Supongo que, ahora que sabes de lo nuestro, nos dejarás en paz. – escuché a Heechul defendernos —  Porque después de haber hecho esta escena en público, tendrás que andarte con más cuidado.
—  Ustedes dos son tan patéticos. – y por fin se fue.
 
Quisiera estar feliz por lo que Heechul le ha dicho pero en realidad, continuo preocupado por él, no quiero que vuelva a estar triste por su culpa y tampoco verlo llorar de nuevo.
 
—  Siwon…
—  ¿Por qué no me llamaste? Dijiste que me llamarías. – le dije mirando aún su zapato. Puede estuviera siendo algo patético pero, no me sentí patético haciendo esto, cada quien elige sus luchas y yo estoy a punto de ganar la mía.
 
Estoy un poco triste, eso es todo. Heechul tiene mi número y no ha llamado, ya que por ese motivo no he tenido su número de vuelta. Además, habíamos quedado que cuando tuviera problemas o estuviera triste, me llamaría. Y no lo hizo.
 
Esa tarde que nos tomamos el café que me debía, me había dado la impresión que nos habíamos vuelto cercanos y estaba emocionado porque Heechul me llamara.
 
—  Entonces, puedo llamarte ahora para tomar algo juntos y que podamos hablar. - ¿Hablar? Levante la cabeza para mirarlo y enseguida vi sus ojos llorosos pero no de tristeza, más bien llenos de reconocimiento y algo más, creo que ese día logré que Kim Heechul me amara.
—  No puedo en este momento. – Heechul se miraba hermoso desde abajo donde estaba. No podía dejar de mirarlo, sin embargo, tenía que trabajar. — Tengo que vender todos esos accesorios.
 
Mi trabajo en el centro comercial ese día, consistía en vender cinturones a juego con carteras para caballero. Por supuesto que ya había vendido algunas, aún tenía que vender los accesorios que quedaban para terminar por completo y alcanzar la meta impuesta por mi empleador, para que me pudiera pagar.
 
Vi sonreír a Heechul dulcemente, al darse cuenta del problema que me no me dejaba estar a su lado.
 
—  Eso no será un problema. – me dijo y me tendió su tarjeta de crédito. — Los compraré todos.
—  ¿Qué?
—  Que voy ayudar a mi pequeño novio a salir de aquí. – y esa sola frase me hizo sonreír.
 
Desde ese día nos hicimos novios, hemos comenzado a salir conociéndonos más. Aunque también desde entonces, creo que mi novio ha tomado el control de la relación y un poco de mi vida, desconcertándome a veces y encantándome otras. Heechul es realmente sorprendente de todas formas, ya me acostumbré.
 
—  Sube.
—  ¿No tenías una reunión? – le pregunto un poco extrañado.
 
Hoy Heechul vino por mí a la universidad como siempre. La primera vez que lo hizo me extraño que viniera, llevábamos solamente una semana de novios. Mucho menos me esperaba que un enorme auto le lujo me cerrara el paso en la entrada de la universidad enfrente de todos, cuando Heechul no me había dicho que lo haría.
 
Ahora es muy normal que lo haga.
 
—  Sube al auto Siwon, anda. – me dice con su tono mandón, así que me subo inmediatamente. — Y ponte el cinturón de seguridad.
—  Sí. – ruedo los ojos y cruzo los brazos después de ponerme el cinturón.
 
Hoy está más mandón que de costumbre. A veces es un poco molesto que mi novio sea mayor, porque eso le da el derecho a tratarme como niño.
 
Realmente molesto.
 
—  ¿Estás enojado Siwon? – sacudo mis hombros como respuesta. Heechul arranca el auto sin decir más.
 
Esta vez el paseo se me hace muy corto, tanto que cuando llegamos me sorprendí un poco. Cuando Heechul viene por mí, en el camino charlamos del día o lo que quiere que hagamos en los tiempos libres, y a veces me he dado cuenta que toma rutas alternativas más largas con tal de alargar el momento.
 
Y es que entre semana no tenemos mucho tiempo para vernos, solo de vez en cuando, si logramos coincidir. Por eso el que venga por mí es como ese momento en el que podemos estar juntos y vernos a diario.
 
—  Ya llegamos. ¿Sigues molesto? – Heechul me pregunta en cuanto aparca su auto.
—  No estoy molesto. – le respondo sin mirarlo, ya que ahora lo que tengo es pena, por haber desperdiciado el tiempo que tenía para pasar con él, cuando él solo ha sido amable conmigo.
 
Heechul termina por quitarse el cinturón de seguridad para poder girar su cuerpo hacia mí.
 
—  ¿No quieres saber por qué pase a recogerte hoy? – eso sí que pica mi curiosidad.
—  Me dijiste que no podrías venir en toda la semana por tú trabajo.
—  Es cierto, y no te mentí.
—  No entiendo. – me le quedo mirando claramente desconcertado.
—  Es porque te extraño mucho Siwon. – Heechul comienza a decir — Extraño a mi novio. En la oficina solo estoy pensando en cómo iras a casa, si llegarás bien, preocupándome tanto. Y por eso venir por ti, es la única forma de poder tranquilizarme.
—  Aah, ahora me siento mal por haberme molestado. – susurro, cosa que al parecer Heechul no escucha porque él continua hablando.
—  ¿Y qué tal si alguien le coquetea a mi novio en el autobús o en el metro? Si se atrevieran, – y al decir esto, frunce el ceño —, tengo que impedirlo.
 
Finalmente, eso nos hace reír a los dos, porque no pensé que tuviera esos sentimientos de celos hacía mí, lo cual es algo nuevo en nuestra relación.
 
—  También soy celoso. – le digo.
—  Soy demasiado perfecto, ¿cierto?
—  Lo eres. – respondo sonriendo.
—  Entonces, ya no estás enojado. – Heechul me pregunta con una hermosa sonrisa. No me había dado cuenta que hoy está más guapo que de costumbre.
—  No lo estoy, y gracias por recogerme.
—  Ya te dije que esto no lo hago por ti, lo hago más por mí y mi tranquilidad. – y la calma con que lo dice, como si fuera de lo más normal todo lo que hace por mí.
 
Venir por mí, recogerme y traerme a casa todos los días, debe ser algo cansando también para Heechul ya que tiene muchas ocupaciones, pero siempre lo hace con una bella sonrisa en su rostro. Ahora sé que este poco tiempo que pasamos juntos a diario y los pequeños momentos compartidos, también es su felicidad.
 
Tengo a un hombre muy guapo, maravilloso y genial a mi lado. El mejor en muchas formas, así que lo atesoraré y aprovecharemos bien estos pequeños encuentros.
 
Continuará...

Comentarios

  1. Ya son novios 😍💕 Me encanta, el destino les ama y jugó a su favor

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  2. Ya son novios pero HeeChul tiene que estar feliz de tener a Siwon a su lado, es el novio perfecto..

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