Cascabelitos... Capítulo 3

Shindong POV

No sé cómo en medio de tanto fanservice y parejas que se han formado en el grupo, no me he vuelto gay. Aunque a veces me sorprende que algunos de mis compañeros se vean tan bien o sean hermosos, con su piel bien cuidada, ropa de moda; en fin, todo en ellos grita “soy bello véanme”, por no decir “cómeme”. Y van por ahí provocando al que se deje. ¡He visto cada caso!

Entonces es cuando ellos, sí, porque existen dos clases de ellos, “ellos” los que lucen bonitos y ellos a secas, los que posesivamente se apropian de los “ellos”.

Obviamente ninguno se compara con mi Nari, la única que me gusta, la más hermosa en el mundo y la que mejor me comprende; por algo llevamos ya muchos años juntos. Es por quien no he perdido la cabeza dentro de este grupo.

¿Cuándo fue que todos en Super Junior se volvieron gays? Eso nadie lo sabe, creo que ni ellos mismos, pero gracias al fanservice y la personalidad de cada uno, es que se formaron las parejas. Yo los entiendo, como he dicho antes, algunos de “ellos” son muy lindos. Cualquiera se confunde, menos yo claro.

Creo que están disfrutando el tiempo antes de que los super shows comiencen, pues seguramente estaremos muy cansados entre tanto viaje. Como es algo que nos gusta hacer, nadie se queja, aun así se dificulta relacionarnos o hacer otra cosa que no sea dormir, comer y dar todo en los SS.

Nos han dado unos minutos de descanso, paramos a tomar agua para reiniciar con más ánimo el ensayo. Intento charlar con Hyukjae pero este tiene algo que decirle al coreógrafo sobre los tiempos, siempre está atento sobre esto. Así que me voy tras Henry, el pequeño siempre anda dando tumbos y haciendo travesuras, al menos hace más divertido el tiempo, sobre todo cuando intenta hacer alguna broma que yo le sugiero.

- ¡Hey, Henry! – está sentado en suelo con sus piernas estiradas y junto a él Zhou Mi -. ¿No vas a molestar a tus hyungs? – me siento a su lado golpeando su costado con mi codo -. Tengo unas ideas geniales que seguramente podríamos poner en práctica.
- Déjalo Hyung, no estoy de humor. - ¿Ha rechazado una de mis propuestas? No lo puedo creer. Al parecer está un poco desanimado, no le veo tan hiperactivo como siempre, quizás está enfermo.
- Aaaaw, mi bebe no está de humor.

Zhou Mi se ha acercado a Henry agarrando sus cachetes y acariciando su rostro tratando de animarlo, incluso lo abraza; no parece notar el mal humor de Henry. Que el pequeño maknae no responda con efusividad las atenciones de Zhou Mi, es demasiado raro. A sus mimos solo muestra pequeñas sonrisas cuando se le acerca y a sus preguntas, Henry le responde cortamente.

Ahora se han quedado callados.

- ¿Está bien Henry? – le pregunto directamente a Zhou Mi.
- Si hyung, solo está cansado, ya sabes los ensayos y todo eso. – le sonríe radiante a Henry -. Seguramente tengo algo que pueda animarlo, pero tendrá que ser hasta esta noche.
- ¿Esta noche? – pregunta Henry. Vaya, eso sí lo hizo reaccionar.
- Sí. – susurra Zhou Mi muy cerca del rostro de Henry -. Algo que tiene que ver con "Tiro al blanco".

¿"Tiro al blanco"? Creo que es algo que no debo saber, más bien, algo que no quiero saber. Me levanto rápidamente antes que mi mente capte algo más que pudiera explicar lo anterior, si bien mi mente ya está corrompida, ¿para que agregar algo más?

Mejor debería ir al baño, he tomado tanta agua y no quisiera tener que interrumpirlos si me dan ganas. Afortunadamente nuestra sala de ensayos tiene baño propio y un pequeño pasillo donde se encuentra la mesa de agua y refrigerios antes de salir. Muy privado para nuestro grupo, no sea cosa que las coreografías se cuelen o que se yo, mis compañeros suelen ser muy demostrativos cuando sienten que nadie los ve.

Justamente como lo está haciendo el SiChul ahora. Junto a la mesa de agua, Siwon tiene acorralado a Heechul entre la pared y su cuerpo. Por lo visto Heechul hyung no está de humor.

Durante el ensayo, Siwon estuvo tratando de acercarse, pero lo ha esquivado o lanzado miradas fulminantes que solo hacen que Siwon se aferre más a la idea de acercarse a él.

- Vamos Rella, “Gabriel Jr.” está muy triste, se siente olvidado y te extraña. - ¿Gabriel Jr. ? ¿Quién es ese? De pronto mi pregunta es respondida. Veo como Siwon acerca sus caderas hacia Heechul, este muerde su labio inferior y cierra sus ojos -. Deja de ser malo, tú también quieres.
- No Simba, no insistas, ya te dije que están castigados. ¡Los dos! – veo como Heechul hyung intenta apartarlo, pero es más que obvio que Siwon es más fuerte -. Nada de sexo, ni previos, ni arrumacos, ni siquiera pondré mis manos sobre “Gabriel Jr.” - señalando bajo la cintura de Siwon -. hasta que te ganes esos privilegios de vuelta.

Y por si me quedaba alguna duda, hyung se encarga de ampliarme el panorama de lo que veía, algo me decía que no podría ser otra cosa que sexo. ¿Pero “Gabriel Jr.”? Yo pensé que así se llamaba su auto.  Bien dicen que los autos son la extensión de la virilidad del hombre y este es todo un caso.

¡Porque no entienden! Una cosa es que los acepte tal como son y otra que los quiera ver o saber, no, no.

Al percatarse de mi presencia, Siwon se aleja de Heechul, da la media vuelta y regresa a la sala de ensayos. Dejando a un Heechul hablando solo todavía.

- ¿Se te perdió algo? O ¿qué? – me dice Heechul todo enfurruñado por haber sido dejado con la palabra en la boca.
- Yo, nada. Solo iba al baño.

Lo veo desaparecer en la sala de ensayos después de esto. Es raro ver a Siwon perdiendo los estribos de esta manera, el suele ser muy paciente y persistente con Heechul. Y luego está lo sucedido con Henry… ¿Qué habrá pasado aquí?

Siwon POV

Estoy cansado, no exactamente por los agotadores ensayos, sino por los continuos rechazos de Heechul y el castigo impuesto desde el día que le salte encima. He hecho de todo para que me disculpe pero nada ha sido suficiente. Lo amo, lo deseo, si se me sigue negando no sé qué voy hacer.

No puedo pasar ni un solo día más sin él. La frustración me está llegando a un punto límite, mi humor es de perros y en cambio él, se le ve tan sonriente, quizás un poco cansado como todos por los ensayos, pero al menos se ve mucho mejor que yo. O eso es lo que aparenta porque se la ha pasado evitándome.

Necesitamos hablar. Jalo de su brazo y lo separo del grupo en cuanto el ensayo termina.

- ¿Qué sucede Simba?
- Necesitamos hablar. – le digo sin rodeos -. Heenim, podemos ir a comer algo y después a donde tú quieras.
- Hoy no puedo, voy a salir con Dambi. – me dice mirando para todos lados, excepto a mí, por algún motivo no me mira a los ojos.
- ¡Oh, con Dambi! ¿Irán solos? – no puedo ocultar mis celos con la pregunta. ¡Rayos! Ni siquiera puedo pensar con claridad, ¿Por qué siento celos de su amiga?
- No, Kangin ira con nosotros. – me explica y por fin sus ojos se posan en los míos -. Dambi quiere animar a Kangin, con eso que Leeteuk no está, además son amigos.

Mientras habla no puedo dejar de mirar su boca, observar como su manzana de Adán se mueve en su garganta, como su pecho sube y baja dejando ver su clavícula, su resplandeciente piel por el sudor del ejercicio. Definitivamente estoy a punto de echármele encima, levantarlo entre mis brazos, estrellarlo en la pared, tomarlo como un animal salvaje y besar sus labios hasta dejarlo sin aliento.

- Vamos Rella, “Gabriel Jr.” está muy triste, se siente olvidado y te extraña. – acerco mis caderas a su cuerpo para demostrarle lo despierto que me tiene, lo veo morder su labio inferior, cerrar los ojos y suspirar -. Deja de ser malo, tú también quieres.
- No Simba, no insistas, ya te dije que están castigados. ¡Los dos! – intenta separarse de mí pero no lo dejo -. Nada de sexo, ni previos, ni arrumacos, ni siquiera pondré mis manos sobre “Gabriel Jr.”, hasta que te los ganes de vuelta.

Continua diciéndome mientras yo sigo pensando en hacer, lo que tenía pensado hacerle sin su permiso; pero es cuando me doy cuenta que alguien más está a nuestro lado. Shindong ha llegado en el momento justo para aclarar mi mente, corto la charla y me alejo por completo sin despedirme, dejando a un desconcertado Heechul atrás. Seguramente más tarde pagare mi atrevimiento, pero por el momento, necesito empujar mis necesidades al fondo y aclarar mis pensamientos.

Al terminar los ensayos decidí ir hacía “Twosome Coffee”, hace mucho que no voy a darme una vuelta por el lugar y en estos momentos, visitarlo sería una buena forma de distraerme y ocupar mis pensamientos en algo productivo.

Sin contratiempos llego a la cafetería directamente a donde se encuentran las máquinas de café. Saludo a todos detrás de la barra, se muestran sonrientes y un poco sorprendidos por no haber avisado que iría. Me sirvo un café, una de mis especialidades, había olvidado lo mucho que me gusta hacer café. Es algo tranquilizante la concentración que requiero para que este a la perfección, que el sabor y el aroma sea agradable, me hacen olvidar lo demás por un momento.

Cierro los ojos y respiro por encima de la taza, mis sentidos se tranquilizan, mi cuerpo se relaja. En realidad fue buena idea ir a “Twosome”.

Uno de los chicos que atienden las mesas se me acerca, me dice que Henry se encuentra en la cafetería, lo cual es raro, me lo habría dicho. “Quizás podemos ir juntos un día” me había dicho, pero con nuestras ocupaciones, ese día nunca fue.

Voy de camino hacia donde me dijeron que está sentado, con mi taza de café en una mano y en la otra unos panecillos de los que me gustan. Henry se encuentra en una de las mesas más apartadas de la entrada y por lo mismo, menos concurrida. Está un poco distraído mirando hacia afuera por la ventana, no se ha dado cuenta que he llegado, lo que se me hace raro, pues Henry suele ser muy curioso.

Me acerco a la mesa, estoy justo a su lado de pie y no se ha dado cuenta todavía que estoy ahí. Esto es muy raro.

- Henry. – le llamo sacándolo de sus pensamientos, se sobre salta un poco antes de voltear a verme.
- Hyung… - me dice, como si no supiera que decir -. Lo siento, estaba distraído, no te vi llegar.
- Si, ya me di cuenta. – Le digo dejando mi café y los panecillos sobre la mesa, antes de jalar la silla para sentarme en ella -. ¿Por qué no me avisaste que vendrías? Te hubiera acompañado.
- Lo siento hyung. Es solo que no tenía planeado venir, solo deseaba tomar algo y hacer tiempo. De último momento, Zhou Mi tuvo reunión por el proyecto de radio idol colors, realmente no deseaba llegar al departamento. – esto último lo dijo como si el aire hubiera escapado de su cuerpo junto con su energía.
- Entiendo. – le digo cruzando los brazos en mi pecho -. Yo pensé lo mismo y vine hacia acá.

Henry volvió su cara mirando hacia afuera, quizás pensando en sus cosas y yo aunque lo miraba fijamente, mis pensamientos estaban muy lejos, sobre Heenim. El silencio se hizo un poco incómodo para mí y comencé a tamborilear la mesa con mis dedos, claramente ninguno de los dos estábamos de humor, hacía tiempo que no platicaba con Henry, por lo que no sabía que sucedía con él.

Estaba pensando que en lugar de revolcarme en mi propia miseria, tal vez la mejor forma de invertir mí tiempo sería en ocuparme de escuchar a Henry y sus problemas. Eso estaba por hacer, cuando me vi interrumpido por él.

- Hyung… Es posible, ¿Qué pueda enfermar por falta de sexo? – lo dijo tan abiertamente, sin sonrojarse o avergonzarse siquiera, que hizo que por poco tirara el café de la mesa. Y al parecer no era el único que lo escuchó, pues una mujer sentada en la mesa detrás de Henry también se rio, su espalda se agitaba por la risa.
- Henry, esas preguntas tuyas, no se dice tan abiertamente. – me queje, no avergonzado, pero si sacado de balance.
- Si no lo hago, ¿cómo sabré la respuesta entonces? – me pregunta de nuevo desencajado y al verlo de esta forma, respondo su pregunta.
- No Henry, no puedes enfermar por eso. – lo veo suspirar y recostarse en la mesa -. Entonces, ¿tienen problemas?
- No, en realidad creo que el del problema soy yo, el insatisfecho e inseguro. Y todo porque hace mucho que Zhou Mi no me deja retozar en la cama, siempre está cansado o durmiendo. – de nuevo la mujer detrás de Henry pareció agitarse, menos mal que me pareció que era extranjera, porque si seguía escuchando nuestra platica, haría que la cambiaran de lugar. - Y yo, lo necesito, necesito de su dulce cuerpo. No sé si me entiendas hyung, está visto que ustedes no tienen ese tipo de problemas.
- Te equivocas. – dije sin pensar. Pues mi atención estaba centrada en la mujer vestida de negro detrás de él.
- ¡¿Cómo?! – Henry aun no me creía, así que solo asentí con mi cabeza, que más daba aceptar lo que pasaba -. Si ustedes tienen esos problemas, ¡¿Qué sucederá con nosotros los normales?!

Sus palabras me hicieron reír y mucho, realmente hablar con Henry sobre esto, estaba resultando entretenido. Además de darme cuenta que no soy el único que tiene estos problemas, los dos lo estamos pasando mal… por falta de sexo.

- Cuéntame… - le dije.

Henry POV

- “Hace una semana que Heechul no me toca”.

Ok, Siwon hyung no me lo dijo con esas dramáticas palabras, pero en esencia, así era. Después de contarle mis problemas en la cama y sobre lo sucedido los últimos días con Mimi, saber que lo mal que lo he pasado puede sucederle a alguien como Siwon, me alivia un poco.

- Pero no podemos dejar que las cosas sigan de esta forma, si lo hacemos, ellos podrían llegar a sernos infiel. – le digo.
- No, eso no. – Siwon se cruza de brazos, recarga su cuerpo en el respaldo de la silla y niega varias veces con la cabeza.
- Pues por lo que he leído, es muy posible que suceda.
- ¿Tú crees? – me pregunta aún dudoso -. No, no creo. Heechul jamás me seria infiel, el me ama.
- Zhou Mi también me ama, estoy completamente convencido. Pero existe la posibilidad de que suceda, que busquen experimentar en otros lados, por la rutina que se ha creado en nuestras relaciones.
- ¿Qué rutina? Estamos hablando de sexo Henry. – Siwon se acerca a mí sobre la mesa, sosteniéndose sobre sus codos.
- Yo también hyung. Existe la rutina en la cama, ellos pudieron haberse aburrido de eso. – me acerco yo también, esto que voy a decirle es muy importante -. La parte sexual tiene mucho que ver en la relación de pareja.
- Pero soy yo quien siempre lo satisface, no Henry, no. En ese caso, eso que dices se aplicaría a nosotros, que somos los insatisfechos, los que no recibimos atención. La última vez que Heechul y yo… ¡por Dios, el sí terminó! – esto último lo dice casi gritando.

La risa de alguien detrás a mis espaldas, hace que disimuladamente mire hacia atrás, es una mujer y al parecer está en sus propios asuntos, no prestando atención a nada más. Al comprobar que la mujer no nos está escuchando, vuelvo la cara hacia Siwon.

- Yo no podría engañar a Zhou Mi, - le digo -, lo amo y no podría, sinceramente no puedo ver a nadie más si no es él.
- Yo tampoco. – lo veo suspirar -. Heechul es mi vida, él único que me pone a mil. Por eso me siento tan frustrado ahora que no tiene tiempo para mí.
- Entonces… - suspiro también, dejándome caer sobre mis brazos en la mesa -. Estamos como al comienzo. No sé qué hacer.
- Si esto sigue así…
- ¡Ay, ya! Déjense de lamentaciones. – escuchamos una voz a mi espalda.

La mujer que hace unos momentos miré, no sé cuándo exactamente llegó, se levanta de su silla. Y vaya que no es cualquier mujer, así de pie puedo notar ese pequeño vestido negro ajustado a su cuerpo, el cual marcar bien sus pronunciadas curvas. Cuando se gira hacia nosotros, sus ojos parecen casi gatunos y aunque pudieran considerarse algo fríos, en el fondo de ellos existe un gran misterio y algo llameante que no se describir.

- ¿Quién eres tú? – Siwon le pregunta en seguida que la ve acercarse a nuestra mesa -. Estas aquí desde que comenzamos hablar. – se levanta de su silla algo enfadado -. Si eres un periodista, si llegas a publicar algo de esto… - la amenaza. No es la primera vez que sucede algo como esto, afortunadamente Siwon tiene el poder de solucionarlo, el poder y el dinero. La mujer se cruza de brazos delante de él.
- Vaya reacción, si hace unos momentos los dos lloriqueaban como nenas enamoradas. – la chica no lo dice en burla, pero si algo molesta -. He escuchado lo suficiente y solo porque han dicho lo mucho que aman a sus parejas, es que los voy a ayudar. Pasaré esta insolencia por alto. – se escucha muy segura.
- ¿Tú quién eres? – me ha dado curiosidad.
- Alguien quien les ayudará.
- ¿Eres una sexóloga? ¿Nos darás terapias de pareja? – pregunte, creo que solo de esa forma podría ayudarnos.
- No, nada de eso. Lo mío es algo mágico. – la mujer dijo, agitando sus manos suavemente. El leve movimiento me embeleso, pude ver que todos sus movimientos eran casi como una danza; en ese momento supe que esa mujer no era alguien normal, por algo ese destello en sus ojos.
- Yo no creo en magia, fantasmas o esas cosas, no está dentro…
- Oye, oye… - la mujer interrumpió a Siwon y sin pedir permiso, se sentó en la silla libre -. Ser gay tampoco es natural, sin embargo existen personas con esos gustos, debes de dejar de ver con tus ojos y procesarlo con tu mente chico, hay cosas que no puedes ver sin embargo existen. – le dijo la mujer a Siwon -. Debo decirles, que me he acercado a ustedes y prometido ayudarles, porque han demostrado amar a sus parejas. De eso van a necesitar mucho, porque esto más que una ayuda, podría decirse que es una prueba. Ustedes probaran que tan pacientes y complacientes pueden ser con sus parejas, para recibir una hermosa y sexual recompensa.
- ¡¿Cómo?! – oh si, ahora estoy más curioso.
- Su amor por ellos se pondrá a prueba, porque “ellos” se someterán a sus deseos, pero a su vez, “ellos” tendrán el control.
- ¿Cuál es tu nombre? – le pregunte, pues quería saber el nombre de la persona que me estaba ofreciendo esa posibilidad bastante loca.
- Vanadis.
- ¿Eres una especie de bruja? – la seguí cuestionando.
- No, pero si una sacerdotisa… - sus palabras comenzaron a endulzarse y en su tono de voz, existía algo que me invitaba a prestarle atención. Era casi hipnotizante -. ¿Conocen la leyenda de la Diosa Freyja? – Siwon y yo negamos con la cabeza solamente, no teníamos ni idea con que nos estábamos metiendo.

Continuara...